Somos espíritu, alma y cuerpo, al morir se produce una división: el cuerpo queda en tierra de donde fue tomado, el espíritu va a Jehova Dios quien lo sopló y el alma?
Dice la biblia: "el alma que pecare ésa morirá", se ha de suponer que las que no pecaren vivirán.
Aparentemente el alma es un almacén de las experiencias del espíritu y del cuerpo, y éstas van formando nuestro ser de modo que podemos a llegar a ser espiritual o carnal.
Jehova Dios dice: "Dios es espíritu y quines les adoren es necesario que lo hagan en espíritu y en verdad "
Nuestro destino final va a depender de nuestra inclinación, si fuimos espirituales y tratamos de adorar al creador aceptando sus reglas de juego, estaremos siempre con Él, pero si fuimos carnales y rechazamos sus reglas, estaremos para siempre lejos de Él.