Justo cuando la vida parece perder el color, cuando el cansancio te agota, cuando las heridas se remueven y vuelven a sangrar, cuando has perdido la esperanza en tus ideales y la fe en quienes importaban, cuando pareciera que el mundo se derrumba poco a poco en medio de un cúmulo de sinsentidos, la realidad parece ser cada vez más oscura, y al cerrar los ojos sientes que ya no puedes más…

Un suave latido suena muy al fondo de tu corazón y entonces todo se vuelve magia, los colores aparecen y miles de mariposas cubren el cielo, los arbustos florecen y el aire juega con tu cabello, la magia inexplicablemente llega hasta ti para mostrarte que otro mundo es posible.

Amor? Amistad? … quizá no son necesarios, quizá es solo una feliz coincidencia, de esas que te hacen sonreír de repente sin ninguna explicación, de esas que así sin pensar te devuelven las ganas de luchar, de ir en busca de tus sueños, y más que nada, de volver a sonreír, de esas que no esperabas pero sabías que necesitabas.

Nunca sabes a ciencia cierta dónde hallarás la calma… nos ocupamos tanto de hallar respuestas, de sanar heridas, de alcanzar sueños, y en medio del afán olvidamos que lo mágico realmente es el camino, el recorrido, la experiencia… olvidamos que para volar nuevamente es necesario renovar las alas y dejarse ayudar del viento.

Gracias, es preciso decirlo, cuando has sido el suave viento que anunció el fin de una horrible tempestad, el murmullo después de tanto ruido, la nota sutil que recompuso mi armonía, la dulce calma que no lograba hallar… y no es que te tenga en mi vida, no es posesión sino admiración la que me hace volver a creer.

Agradecer tus sonrisas sin haberlas visto, pero con la certeza de sonreír gracias a ellas, tus palabras que no son distintas de otras que haya escuchado, pero que tienen la singularidad de un corazón sincero, un corazón que me recuerda al mío.

Bondad en tu alma, dulzura en tu esencia, sensibilidad en tu carácter, magia en tu corazón… eres de esos seres asombrosos que rara vez encuentras por ahí, de los que van por el mundo regalando felicidad sin saberlo, sin notarlo, sin siquiera imaginarlo, de esos maravillosos seres que tal vez no existen y en definitiva no sé si existes.

Real e imaginario, eres una mezcla de fantasía y realidad, mirarte y esperar que sonrías es como esperar el fruto de un árbol que acabas de sembrar, sabes que está allí y algún día lo hará, pero sabes que aún no es tiempo, nunca vi tal seriedad y sin embargo tanta ternura, nunca imaginé tanta diferencia entre leerte y mirarte, y siendo dama de letras habré de decir que creo en ellas.

Indescifrable, Indefinible, Incomparable!!! … eres como verse al espejo, y encontrar algo tan familiar y desconocido al mismo tiempo, como revisar la historia de tu vida y verla de repente protagonizada por alguien más, eres un recuerdo personificado de mi propia vida aunque nunca estuviste en ella.

Eres en definitiva, un instante, un momento, una fotografía de mis sueños, del mundo de colores en el que soy feliz, un respiro, un suave viento que ha pasado la página del libro de mi vida para empezar a escribir un nuevo episodio.

La respuesta a muchos interrogantes… aunque no sabes quién soy y tampoco sé quién eres, aunque aún no haya visto el profundo de tus ojos color marrón, aunque no te expliques cómo ni por qué, aunque solo es el exquisito sabor de una feliz coincidencia, le has regalado a mi vida una especial, profunda e inolvidable experiencia.