Hoy es una leyenda… el 5 de mayo de 1921, Mademoiselle Coco Chanel creó su propia fragancia: “Un perfume de mujer con olor a mujer”. Un desafío de las convenciones de perfumes que utilizó las flores y esencias más audaces de la época: el ylang-ylang de las islas Comoras y la Rosa de Mayo y el Jazmín, ambos cultivados en Grasse en el Sur de Francia. Todas ellas, más la mezcla de 80 ingredientes, dieron luz al elixir No. 5 de Chanel.
En ese momento, No. 5, se convirtió en un código, ícono y número de identificación de sofisticación, rebeldía y elegancia. Desde su creación, la composición No. 5 inventó un nuevo vocabulario olfativo que inspiró e identificó a personalidades top, desde Marilyn Monroe hasta Andy Warhol, quien utilizó la botella para crear arte pop art.
Su diseño minimalista es, a la vez, un símbolo de modernidad que siempre ha estado asociado a creadores revolucionarios y trendsetters. En 1966, Richard Avedon dirigió el primer comercial de N°5, Ridley Scott o Luc Besson también ofrecieron sus inspiraciones. Fotógrafos como Helmut Newton, Irving Penn and Patrick Demarchelier realizaron las campañas, personificadas por míticas belleza como Suzy Parker, Catherine Deneuve, Carole Bouquet, Nicole Kidman y Audrey Tautou.
Es por eso que No. 5 ha sabido consagrarse en la cima de las fragancias femeninas, gracias a una audaz simplicidad que ha sido retratada a través de los años. Más allá de ser el número de la suerte de la enigmática diseñadora francesa, Coco Chanel, No. 5 es una revolución dentro de una botella.
Y es así, como hace 93 años, que el 5 de mayo se celebra el espíritu de ser una mujer No. 5. En honor al aniversario, una de las interpretaciones de la majestuosa fragancia, el No. 5 Eau Premiere, ha decidido hoy cambiar su imagen y vestirse de gala con la elegante botella de cristal en este día icónico para el mundo de la moda. |