“La voz cruje, vomita serpientes
Y en los ojos, llamas queman horizontes”
Vuelve la muerte gris de espanto.
Vuelve sobre sus pasos,
a pedir perdón,
a cerrar los ojos,
a soltar los silencios del fondo del sepulcro.
Vuelve arrancando los alaridos
que arrastró en la agonía,
a la pluma del poeta,
a la memoria del amor, del dolor,
al corazón de otoño,
a los abrazos primaveras.
Vuelve al molino y a la ventana.
Vuelve a los pájaros distraídos,
al zumbido del viento,
a los secretos del arroyo,
al murmuro de los búhos.
Vuelve a la vida,
a la sonrisa de los niños,
a la mirada del hombre herido,
a la melancolía de su mujer enamorada.
Vuelve,
vida-piedra
monte-esperanza
vuelve camino por andar.
|