Canción tendida al viento de los días que vendrán

Canción que se desgrana en músculos danzantes

Canto a Lima por su aniversario y su gracia

A esta gran ciudad en la que resalta

El color admirable de los trópicos

Y donde brilla el sol que calienta sus playas

Eres una urbe franca, viva e inquieta

Donde aun el misticismo te viste de morado

Tus múltiples distritos se inundan de aguardiente

Y del rasgar sonoro de la guitarra Peruana



En la ilusión te agrandas como un hada

Y embadurnas los ojos del provinciano

Hacia el cielo y el mar te alargas como una esperanza

Y eres un puente en arco afianzado al mañana

Aunque en tus vías de asfalto los autos

Te han vuelto vocinglera y no te dejan soñar

Te has pegado a mi pecho, ciudad de ojos ardientes

Y paladeo las dos silabas de tu dulce nombre.