YO,DON JERONIMO



Amanece, amanece en la Córdoba de la Nueva Andalucía, luces rosadas van apareciendo a mi espalda y comiénzase a delinear las fachadas que me
rodean.
Pregúntome que demontres hago, trepado en este poyo de mármol y sucio de excrementos de palomas. Vive Dios! ¿Es que después de tantos trabajos, caminos andados y ciudades fundadas, sólo merezco que dichas aves me defequen?
Bien, héme aquí, dando espaldas a la Iglesia Mayor y ocupando lugar que por derecho propio fueran seminario y museo de dicha iglesia.
De frente estoy a dos esperpentos que creo se llaman Colegio de Escribanos y “El Ruedo. A Dios gracias mis ojos se solazan con la Iglesia deSanta Catalina, recuérdame ella los viejos tiempos….
Tengo por base el mentado catafalco marmóreo y por detrás fuentes, que para mí son de dudoso gusto y estilo y de las cuales, en vez de manar agua, rezuman orines y basuras varias. Plazoleta del Fundador! Mi nombre es usado para viles comederos como el Solar del Fundador, entre otros. Qué sabrán aquestos seres de mi solar!
Plazoleta del Fundador! A este lugar todos los seis de julio ( fecha en que fundé Córdoba) vienen instituciones, con sus autoridades, que me colocan flores y dicen palabras de agradecimiento, cantan loas y empedran el infierno de buenas intenciones, luego todo se pudre (flores e intenciones), y allí quedan, hasta que Dios quiere.
Creo que nadie recuerda, cuando pasa, cuántas fatigas y pesares nos costara llegar a orillas del Suquía; allí plantamos picota y rollo, y fundamos aqueste poblado que terminó en ciudad. La picota era el símbolo de la justicia y de ella se colgaba a quienes faltaban la ley en forma grave. Por lo que escucho, eso ya no se hace, no por falta de merecimientos de más de uno; pero si se aplicase, necesitaríanse muchas de ellas, pues una sola no daría abasto .
Arribado que hubimos a la orilla del Suquía, con mis seguidores fundamos Córdoba de la Nueva Andalucía, como ya dije. No pasó por mis mientes que luego la trasladarían a lo que hoy dan en llamar “centro” Reconozco que el sitio no fue muy feliz,y que cada vez que el río se salía de madre se llevaba casa, pobladores y picota incluida ,cosa que siguió sucediendo, hasta no ha muchos años.


Rememoro desde mi pedestal que dí por Patrona a Nuestra Señora de la Peña de Francia, devoción harto antigua en España, cuya imagen mi dama portaba siempre consigo. A ella también la cambiaron poniendo a San Jerónimo como patrón, dicen que en honor mío. En la callejuela que hay entre la Iglesia Mayor y el Cabildo hay un azulejo que recuerda la advocación, más los imberbes guías que muestran la ciudad antigua no tienen idea de qué se trata.
Cuando poso los ojos sobre la plazoleta de mis pecados, aparte de la mugre antedicha, veo gentes de variados pelajes; algunos juegan al ajedrez, viejo juego a fe mía!, otros venden fruslerías , y muchos, de pie, esperan algo que nunca arriba…..¿Qué será?
Lamento no tener vista más lejana, las altas casa lo impiden, pero me gustaría departir con mis compañeros que descansan en la Iglesia de San Francisco. Cuando cumplimos cuatrocientos años de nuestra gesta, hiciéronles un monumento, bien merecido lo tenían!,del cual robaban periódicamente la espada, por lo cual los padres sólo la colocan cuando hay fiesta. A él también lo visitan las palomas. La historia recuerda a las cabezas, más no a aquéllos que pusieron su esfuerzo para seguir avante.
A veces me miro con mi casco, jubón acuchillado, greguescos y botas altas e imagino qué ideas habrá en las testas de los jovenzuelos desharrapados que por aquí pasan . Me pregunto:¿Tendrían el valor de ir hacia lugares lejanos y desconocidos sin saber si habrá regreso? ¿Conocerán a fondo la historia para separar la paja del trigo?
Este malhadado pedestal me pone meditabundo y añorante, volveré pues mis ojos a mi izquierda, donde la ciudad fue doctoral: con su Universidad, el Colegio de las Huérfanas y el Real Colegio Convictorio de Monserrat, cuna de hombres cultos y mujeres valerosas.
El sol se va poniendo, es hora de holgar, las palomas siguen fastidiando….. miro hacia el frente y mi último recuerdo antes de que oscurezca va hacia ese lugar que creo llaman Cañada,gracias al cual el Suquía no volvió a salirse de madre… Voto a Cristo!, Descubro que han puesto al frente del mentado lugar , dentro de una jaula, una mala copia de mi persona con un gran papel en la mano y que para mayor escarnio! Ya le han robado la espada.

Abro mis ojos al nuevo día… algún maldito pelafustán ha mancillado nuevamente mi persona pintándome de color rosa con lentes y un pañuelito, como si marica fuese.
Oh! Córdoba! ¿Debí fundarte?