TRASNOCHE.

No ser es no concepto.
Ser es recordar, es emoción.
No ser es silencio, es vivir ahora.
Es color, es movimiento, es no juzgar, es no estar.
Ser es enamorarte, es mirar donde estás, es sentir, es suzurrarte, es oler el viento que provocas con tus movimientos.
No ser, es tener conciencia de que no soy eso que miras, de que no soy eso que tiene historias.
Ser es abrazarte en medio del quehacer y sentir tus ganas de safarte.
No ser es no tiempo, es no materia, es eso que huye de la razón.
Ser es estar a tu lado, tomar tu mano y caminar y escribir y leer y ver como el mundo se deshumaniza.
No ser es el espacio del cuerpo a las estrellas.
Ser es todo lo que me das, ser es verte dormir con la tele prendida.
No ser es lo que siempre he sido, no ser es lo que sobrevive al tiempo, es lo que no es diversidad, es lo que no es otros.
Y sabes bien que tu eres yo, eres mi dualidad; eres conciencia personalizada que ha vuelto para mostrar esa senda tan olvidada por esos condicionamientos impuestos.
Eres mi libertad.
Eres uno no dos.