No serás otra alucinación
que navega
en estas noches grises.
Puedes creer que le vi de refilón.
Ni sé si eres un ser vivo
como un vegetal de jardín
o alguna luciérnaga perdida
en busca de primaveras.
El invierno no se parece
hay luces que confunden,
hay murmullos que transitan
y vientos que enloquecen.
Las aves se precipitan
a comer semillas de girasol,
aunque no parezca verdad
un mirlo se aventuro
y prendido de sus alas voló
de rama en rama.
Y su canto se escuchó
diferente y desolado.
Como un cometa dejó caerse
a tiempo sobre un hoja,
una ráfaga atravesó
su debilidad, llevándolo
al confín de las estrellas.
MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI
Texto agregado el 13-12-2015, y leído por 311
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