Dime, si vinieras a mí
Suave, etérea, frágil
Como bruma de madrugada.
Dime, si me besaras
Sutilmente
Como rocío de la mañana.
Dime pues
Si fueras cálida, tierna
Como sol de primavera.
Entonces echarías a andar
Este viejo corazón
Y lo pondrías a llenar de poesía
Plazas y avenidas
Texto agregado el 11-12-2015, y leído por 129
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