Cuando me leen, cuando me leo, la gente comenta que ando triste, que mis letras son depresivas, pero... ¡¡que terapia mas hermosa son las letras para mi complejo corazón lleno de decepciones y sueños de burdel!!

Ando confundida, con el corazón en la mano, lo acaricio, lo admiro, tan roto, tan arrugado y sigue latiendo como si fuera el de un niño...

Esta alma bella, cansada de parir soledades quiere aventurarse de nuevo, a consolar a ese loco corazón, a embriagar con besos a este cuerpo enfermo.

Que desventura tan placentera son las caricias prohibidas, los saltos hirvientes de deseo en otros cuerpos.

A veces no sé a dónde caminar, pero camino... he llorado mucho, lo sé... pero si dejo de intentar nada valdrá la pena y esos brazos que me alientan que me esperan sin conocerme, tendrán entonces la desventura que nunca he querido ser.

Prefiero fracasar, golpearme, ser una coja enamorada, prefiero amar, amar intensamente como amo, aunque luego de unas letras me este desentrañando en la desdicha de no ser correspondida.

Pero que más da!!... el amor que decidí experimentar se ha vuelto extremo, le gusta sentirse pleno.