Dulce espera
espera que veo llegar,
llegar apresurada,
cual ráfaga de viento,
suave,
deliciosa,
cadenciosa
lenta como si algo no te dejara andar,
como si tu paso fuese lento entre tanto musitar.
Espera para esperar,
decencia para actuar,
soborno para disfrutar,
disfrutar cada respiro en libertad,
libertad que me da tu ausencia,
ausencia remota cual lagrima a punto de salir después de tu traición,
después de tu expresión desfachatada.
Dulce espera,
que invoca tu presencia,
presencia lejana,
lejana en inmensidad,
del deseo,
del desaliento,
de la expresión inefable de tu estar. |