Ayer sentí un fulgor recorriendo el aire
Como precipitando algo de calidez
y es que estas configurando palpitos nuevos
frescura de piel cremosa, con aroma tentador
de propósito exquiso, y cándida aura amatista
Redundante agonía has de craquelar en mi vida
y el crepúsculo eterno fragua en las sombras ayer...
Renaciste como amapola, que cruza el racconto cauta,
que ingenua se enreda en mis sabanas...
Ya no tiemblo al sentir tu seductor en mi refugio
Que Benvenuto Cellini no descolore esta velada de Equinoccio,
para crear el cúmulo que cohesiona este loto carente de morbo,
que enseña a cada beso, el flujo de nuestros pasados...
Haces grata mi estancia en tus labios carmesí,
como pecando de no saber que extiendes lentamente tus alas.
Ya nada falta en mi zaguán, y como refugiarme en trovas,
si esas medialunas menguantes de eclipses me cubren poco a poco...
Estar ahora en tu regazo, me estrecha los ventrículos
como descorazonando una primavera cero de la nevera,
emigrando como cardenal en tus ojos, más estas hoy en mi taza de café.
Empiezo ampuloso rozando lentamente tus pómulos,
mientras aquellos zafiros me entregan Los Alpes escandinavos,
que no hacen más que acrecentar esta noche de bitácora paro sentimental.
¿Qué mas podemos hacer hoy en este nuevo nidito hecho diván?,
si me robe a la niña que explosionó en velas, su vientre de hiervas...
Déjame sentir tu respiro hoy, mientras rozamos la seda y el cuché,
como siguiendo el concierto de gemidos piel a piel...
Hoy el péndulo atemoriza la infidelidad con una sonrisa
Y pliega tus sueños al camino de lo verosímil que tanto tardó.
Cuanto recopilé en mi mente tu angelical sensibilidad,
mas que decepciones, hoy se calcinan con tu mirar...
Rendido y nuevo, suspiro que enarbolemos juntos la bandera del cariño.
Que no tengo miedo al que pasará, y cada beso es nota de arpa,
que no se enreda en el letargo, sino que empantana en aromas de coral
Séllame en tus rincones, tu almohada y en tu lápiz labial,
mientras yo busco en una pileta el plasmar tus crines,
Jamás encontrare mejor excusa para pender de tu hilo.
Si en tus manos duerme hoy mi calma,
Espero mientras cansinamente, recojo una golondrina de tu vientre...
*A quienes inspiran desde hace tiempo, las noches que aun anhelo encontrar
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