Me mudaré a tu cuerpo en el esplendor del rocío Seré roca de cristal. Vestiré de fiesta sus confines Con mis dedos de agua Renovaré el fuego nuevo. Dibujaré el sol en el declive de tus ojos con el barro de mi nombre En ellos esculpiré pájaros de estaño. Me perderé en la topografía de tu trzo con la gramática de un poema Estamparé sepia en cada rincón. Apagaré la hoguera de tu boca con el espejismo de la aurora. Naceré en tu lengua lunar. Me ceñiré a tu bosque como un caporal en el trigal Somos aves emplumadas para volar. Partiré de las sombras, en la mañana... me mudaré a tu cuerpo.
Texto agregado el 07-09-2004, y leído por 437 visitantes. (2 votos)