Cuando muere la tarde allá, por el ocaso
y tu nombre cual eco se diluye en el viento.
Es por que sobre tus ojos
se ha dormido la noche,
la luna se refleja en tu piel canela ,
opacando al brillo del anochecer.
Angeles noctàmbulos visitan el cuarto.
Astros destellantes que fluyen desde su núcleo
dejando huellas por estela .
desafiando con sus múltiples colores
a las silentes lucièrnagas que revolotean en tu cabecera.
Duerme mi niña! ...descansa amor mio! ,que yo cuidarè tu sueño
con mis manos cual peine de nàcar y èbano,
acariciare tus negros cabellos
y susurrare a tu oìdo melodìas de ensueños.
Están repicando sus campanas los relojes del tiempo,
mientras entre mis brazos acurrucas tu cuerpo
y vuelan confiados tus sentidos amados
sobre crepúsculos de ámbar aterciopelado.
Jazmin Kaus.
Texto agregado el 27-08-2015, y leído por 94
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