Sin que el destino hable y la fuerza de un amor a destiempo languidezca. Sin que seamos disidentes ni náufragos arrojados por la borda de los deseos. Sin que nada nos una ni nos separe, te he intuido tanto tiempo cerca de mis versos que he decidido convertirte en uno de ellos ahora.
Hombre de palabras cercanas y piel inaccesible, sin aroma a perfume definido ni a deseo. Te he presentido tantas veces en mis paisajes, que puedo dibujar la huella de tus pies entre la arena de mis playas.
Sin esfuerzo logro imaginar tus manos, pero tus ojos... ¡No sé cómo serán tus ojos!
Texto agregado el 24-08-2015, y leído por 113
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Lectores Opinan
24-08-2015
Los pies dejan huellas del pasado, y en tus playas se sienten más, los ojos son el presente, de verlos hoy, de verle ahora. ivancamella