Vuelve a su lado
Reflexión escrita por el Profr. Uriel López Guillén
Con todo cariño para los matrimonios en crisis.
Hola Hermano:
Antes que nada, permíteme saludarte, deseando que estés muy bien, con la voluntad de Dios, que es fuente de vida inagotable.
Quizás puedas pensar que porqué te escribo esta pequeña carta, pero, en realidad, Dios pone a cada quien en una situación y hoy se me pidió que lo hiciera. ¿Qué quién soy? ¿Qué importa? Yo sólo quiero ayudar para que tu vida vuelva a los causes en donde quieren tus seres queridos que estés.
Sabes, tu familia que tanto te ama, está muy preocupada por el posible quebranto de tu matrimonio y si tus papás, están preocupados, ¿te imaginas el llanto que brota de los ojos de NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO? El sufre por algo malo que nos ocurre, porque él nos ama mucho y no desea que estemos solos.
¿Sabes que él instituyó el matrimonio y que lo hizo para que no estuviéramos solos? “No es bueno que el hombre este solo, por eso creo al hombre y a la mujer y los hizo una sola carne” desde entonces, “ya no son dos sino uno solo” y sí son uno solo con tu mujer, ¿por qué no permitirse el estar nuevamente juntos?
Tal vez dirás, ¿Pero si ella falló? ¿Yo no la perdono? Y tal vez, sí ella falló, pero ¿Tú no has fallado alguna vez? Y otra pregunta ¿No sientes gozo cuando Dios perdona tus errores? Porque, sabes, cada día lastimamos a nuestro señor con nuestras actitudes y él que es misericordioso, nos perdona de todo corazón, entonces ¿Por qué nosotros no perdonamos?, si lo hacemos, el corazón de Jesús se llena de regocijo y de gozo y sobre todo, nosotros descansamos, porque no es bueno cargar tanto resentimiento porque esto provoca mucho dolor y mucha tristeza.
Sé que en algunas ocasiones tu corazón a llorado y que has querido regresar, pero tu orgullo te o impide, deja atrás eso, busca la felicidad al lado de quien Dios te dio como compañera y si ha entrado otra tentación en tu vida, deséchala, no eches a perder tu vida, recuerda que ella ya es parte de ti porque al casarse, se hicieron una sola carne y tú no dañarías tu cuerpo o ¿Sí?
No sé si tengas hijos, pero, si los tienes, el problema es aún más fuerte, imagina el llanto de esos pequeños al no tener a su padre para que los cobije diariamente, el tener que crecer con una incertidumbre, sin la caricia y el beso y la cercanía del ser maravilloso al que llamamos PADRE.
Recapacita y vuelve al hogar, yo sé que tu mujer, te esperará con los brazos abiertos, pero si lo haces, hablen comuníquense y compréndanse y no hagas caso al que dirán, la gente envidia la felicidad y cuando la hay, intentan destruirla, NO SE LOS PERMITAS. Y Al regresar, olvida el pasado y construyen una nueva vida.
DIOS TE AMA Y ESPERA QUE VUELVAS AL LUGAR DE DONDE NO DEBISTE SALIR. ÉL DEJARÁ LAS NOVENTA Y NUEVE OVEJAS PARA REGRESAR POR LA OVEJA PERDIDA.
DIOS TE BENDIGA
Registrada en la Asociación de Autores y compositores de Michoacán. Audio Mp3
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