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Inicio / Cuenteros Locales / jefferson940 / LA LEGIÓN DEL MAL (PARTE1)

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Escena 1:
En la plaza de mercado del Reino Draenor, todo transcurre tranquilamente como en cada tarde, Helena, una mujer joven y hermosa del reino, lleva consigo una canasta para realizar sus compras como de costumbre, de repente, se escuchan fuertes estruendos, es la caballería real que entra al reino a toda prisa, y los gritos de los caballeros que con euforia se dirigen a los aldeanos.

-¡Apartad todos, quitad del camino!

La caballería galopa rápida y bruscamente provocando algunos destrozos y creando histeria y descontrol entre los habitantes del reino. Los aldeanos corren muy a prisa hacia sus casas buscando refugio, todas las tiendas cierran inmediatamente sin importar los destrozos que la caballería haya causado en su mercado, Helena mira con asombro todo lo que ocurre y deja caer su canasta al suelo por la parálisis en su cuerpo que dura solo unos segundos, luego corre desesperada para llegar a su casa.

Escena 2:
Al acercarse a su casa, Helena ve a su esposo Erendor, un hombre alto, fornido, de armadura de la más alta categoría, quien la está esperando frente a su casa mientras carga a su pequeña hija María, la niña abraza a su papá buscando refugio porque se siente con miedo ya que el pueblo se encuentra en un estado de alarma y desespero, ella sostiene en su mano un pequeño oso de peluche viejo y desgastado.

Helena se apura a abrazar a su esposo y a su hija, las lágrimas en sus ojos y su expresión de angustia no le dan valor para hablar, simplemente mira a su esposo y los abraza nuevamente con más fuerza. Erendor responde a su abrazo, entrega la niña a su mamá y sin dejar de abrazarles les dice:

-Lo que hemos temido está sucediendo.
-¿Es necesario que vayas? – Pregunta Helena.
-Es mi deber, soy el capitán de la caballería y no puedo enviar las tropas solas.
-Papi, ¿qué pasa?, no te vayas, tengo miedo.

Erendor sostiene la mano de su hija que carga el oso desgastado, y mirando sus ojos intenta calmarla:

-Mamá va a cuidarte princesa mía, yo debo irme para que todos podamos estar a salvo y juntos otra vez, ¿vas a portarte bien y a cuidar también a mamá?
-Si papi, te quiero

Erendor da un beso a su esposa mientras la sujeta fuertemente. Un caballero se acerca montado en su gran caballo blanco.

- Capitán, debemos irnos ya, la caballería está lista para seguir sus órdenes.
-Preparémonos todos, traiga mi caballo y partiremos ahora mismo… Helena, cuídate mucho, pónganse a salvo si algo extraño ocurre, yo estaré aquí cuanto antes.
El caballero regresa con un enorme caballo Negro de armadura elegante, similar a la de Erendor.

-Lince, mi fiel compañero, ¿estás listo para esta gran batalla? Nuestro apoyo al Reino de Isindor nos fortalecerá e impediremos que este mal continúe y se extienda.
-Cuídate mucho esposo mío –Se despide Helena y María con un último beso

Erendor monta sobre su caballo Lince y da la orden a toda la caballería quienes lo siguen de camino a la salida del Reino Draenor. Helena y su hija María observan a los caballeros alejarse rápidamente, la tarde va finalizando y el cielo empieza a oscurecer.

Escena 3:
La caballería avanza a su máximo ritmo, cruzan bosques y senderos mientras llega la noche.

-Solo espero que lleguemos a tiempo – piensa Erendor –Todos dependen de nuestro apoyo.

Escena 4:
Al finalizar la mañana siguiente, Erendor y su caballería llegan al Reino de Isindor, el reino cercano. Sus calles están desoladas pero cubiertas de sangre, con el rastro de una feroz batalla terminada que ha dejado en el ambiente un silencio aterrador, las casas están en ruinas, consumidas por el fuego. La caballería cruza todo el reino observando todo el crudo escenario hasta llegar al castillo del rey, todos quedan perplejos al ver al rey de Isindor colgado en la horca como un vulgar juzgado, y a su alrededor los cuerpos sin vida de los aldeanos y guerreros caídos que no pudieron defender su reino.

-Hemos llegado muy tarde –Se lamenta Erendor.
-Capitán, no pudimos reforzar su defensa, debemos ocuparnos ahora de otras cosas.
-Es cierto, debemos marcharnos ya, si la Legión del Mal no están aquí, pueden estar en camino hacia nuestras tierras, venga, marchémonos ya.

Escena 5:
Erendor y su caballería abandonan el Reino de Isindor para regresar a su reino nuevamente, la noche cae acompañada de una tormenta que pareciera crear un obstáculo para el regreso de la caballería.

-Helena, aguanta un poco… ya llegaremos –Piensa Erendor

El recorrido les toma toda la noche hasta que por fin, después de salir del bosque divisan a los lejos unas luces en su reino.

-Capitán, hay fuego… nuestro reino esta bajo ataque.
-¡Esos malditos! Apurad el paso, continuad a toda marcha.

Escena 6:
La caballería ingresa al pueblo, la lluvia no cesa pero aún así las casas se encuentran en llamas. La caballería pasa atravesando todo el pueblo con el mayor dolor posible en sus corazones al ver destruido su hogar, Erendor baja de su caballo y corre a su casa que se encuentra también cobijada por las llamas, cae de rodillas frente a su casa y encuentra en el suelo el oso desgastado de su hija, lo toma en sus manos y llora la pérdida de su familia. Después de un rato, uno de sus soldados se acerca y le dice:

-Capitán, lo siento mucho… debe venir y ver esto… es la legión.

Escena 7:
Erendor se levanta del suelo, su expresión cambia por odio cuando escucho a su soldado mencionar a la legión, sigue el camino directo hasta el castillo del rey, frente al castillo ve a Morgan un hombre grande, fornido y desaliñado, cuya presencia provoca temor, lo acompaña su Legión del Mal, guerreros rebeldes y toscos, la mayoría en sus caballos negros, todos cargando sus armas y creando una barrera que bloquea el frente del castillo. La caballería sigue a Erendor hasta encontrarse ambos bandos frente a frente, Erendor saca su espada y da unos pasos hacia sus enemigos, a la izquierda de Morgan se encuentra Tanatos, su hermano y arquero más experimentado, quien saca una flecha, la monta en su arco y apunta a Erendor, Morgan levanta su mano deteniendo la acción.

-Tranquilo hermano, no arruines el espectáculo antes de comenzarlo

Tanatos baja su arco y muestra en su rostro una sonrisa burlesca mientras sigue mirando fijamente a Erendor.
Morgan tiene sujeto en su mano una cuerda la cual Jala, y del otro extremo sale el rey de Draenor atado de manos, quien es arrastrado por la fuerza brusca de Morgan lo que le hace caer de rodillas arrastrándose en el barro, su semblante es de un ser frágil, herido por los golpes y con su interior desecho, el rey no puede siquiera levantar su mirada hacia lo que queda de su pueblo, se queda arrodillado en medio de ambos bandos, Erendor y toda la caballería se muestran repudiados por el acto presenciado, Erendor avanza unos cuantos pasos más pero Tanatos lo detiene lanzando una flecha en su hombro izquierdo, sus caballeros lo sujetan para que no caiga al suelo, se retire la fecha de su hombro y se reincorpore.

-Caballeros siempre fieles a un rey que no puede proteger a sus familias ni a sí mismo, ¿Valor o estupidez? –Cuestiona Morgan a los caballeros que con furia lo observan.
-¿Con qué derecho te has creído dueño del destino de otros?, ¡sois solo unos cobardes! –Reclama Erendor
–Por tu armadura veo que eres el capitán de todos estos soldados, pero igualmente no significas nada para nosotros, acabemos con esto de una vez, ¡Guerreros!, aniquilad a cada soldado de este reino.

Con la orden de Morgan, Tanatos clava una flecha en la espalda del rey desatando la furia de toda la caballería, quienes se lanzan contra la Legión del Mal en una batalla a sangrienta a muerte, Erendor pelea como un digno líder junto a su tropa, pero con dificultad por su hombro herido, Morgan y su hermano observan la batalla sin desmontar sus caballos, dejando todo el enfrentamiento a sus guerreros, estos dos se retiran sin participar, solo arrastrando en el barro el cuerpo sin vida del rey de Draenor. Erendor observa el retiro de sus líderes enemigos y decide atravesar el campo de batalla para ir por ellos, pero un guerrero enemigo salta lanzándose en contra de Erendor con intención de detenerlo a toda costa, pero este lo recibe con su espada matándolo, sin embargo, el peso del guerrero lo tumba al suelo y su cabeza choca contra una roca dejándolo inconsciente y con el cuerpo del guerrero enemigo encima suyo.

Escena 8:
La batalla sangrienta continuó durante toda la noche, a la mañana siguiente el reino estaba desolado y en total silencio, los rayos de luz despertaron a Erendor quien se encontraba aún algo aturdido por el golpe recibido en su cabeza, retiro el cuerpo del guerrero que tenia encima y se levantó, la batalla había terminado ya y vio que muchos guerreros enemigos cayeron bajo sus espadas, pero toda su tropa estaba totalmente acabada, la escena representa una nueva pérdida que nadie podría soportar, cae de rodillas y grita con todas su fuerzas para desahogar el dolor de su alma.

Los enemigos se habían marchado ya, el reino se termino de consumir en las llamas durante la noche y solo quedaban los cuerpos de los caídos en la batalla contra la Legión del Mal, rato después, Erendor se levanta y recorre el campo de batalla, recoge el oso mojado, sucio y desgastado, el único recuerdo de su hija, y lo guarda consigo, deja atrás su pesada armadura y se cubre con una vieja y sucia capa, caminando sale y se aleja del Reino de Draenor sin mirar atrás.

Escena 9:
3 años después…
Erendor ha merodeado de un reino a otro desde la caída del Draenor, cruzando bosques, senderos solitarios, visitando los reinos destruidos por le Legión del Mal, dejando atrás su historia como capitán de una respetuosa caballería.

Su recorrido lo lleva al Reino de Bradford, a pie atraviesa este reino que parece no haber sido atacado por la Legión del Mal pero ve que tiene muy pocos habitantes y sé que comportan de una manera extraña, sigue su camino por la aparente tranquila plaza y detrás de él escucha que se acerca una caballería, al darse vuelta ve que la Legión del Mal por entran al reino lentamente como una caravana en un desfile, Tanatos va al frente de todos, Erendor que siempre llevaba consigo su espada, la empuña y se dispone a sacarla para atacar a la legión pero un anciano aldeano se acerca a él y le sujeta la mano, Erendor lo mira sin cambiar su expresión de odio por la legión, pero el anciano le sujeta firmemente la mano y le dice:

-Se ve que no aprecias tu vida.
-¿Cómo osas entrometerte en mi camino anciano?
-Estoy salvando tu vida, o es que ¿realmente deseas suicidarte atacando tu solo a todo un ejército de salvajes?
-De qué hablas viejo loco, déjame.
-Piénsalo bien, mira a tu alrededor, hay mejores maneras de hacerlo, contrólate por ahora.

Erendor calmo sus ansias de venganza reflexionando un segundo en las palabras del anciano, en la caravana ve ingresar a Morgan en su gran caballo negro, algo que le sorprendió fue que también lo acompañaba una delgada y hermosa mujer en estado de embarazo que cabalgaba con porte elegante y engreído.

-Anciano, ¿quién es ella?
-Hitaka, la prometida de Morgan, en 2 días celebraran su unión.
-¿Por qué este pueblo no está destruido por esos malditos?
-Nuestro rey fue un hombre muy sabio… él cedió su reino para no entrar en una batalla a muerte que seguro hubiésemos perdido, pero al mismo tiempo pago con su vida, Morgan y su legión son salvajes por naturaleza que solo matan y destruyen todo a su paso, pero el poder de poseer tierras y un pueblo que cumplan sus caprichos parece que les ha gustado aún más, incluso esa mujer ocupa un lugar importante para él, son cambios que les ha creado puntos débiles que debemos aprovechar.
-No creo que tu rey haya sido sabio esclavizando para siempre a su pueblo y muriendo sin luchar.
-Jaja, veo que hablas con honor y sentido de pertenencia, pero la fuerza bruta no siempre es el mejor camino ni la mejor opción, ya veo que no eres solo un mendigo… nuestro rey nos dio tiempo para vivir y luchar, pero a su tiempo y según la oportunidad, Morgan cree que el pueblo es todo lo que ve pero se equivoca, sígueme.

Escena 10:
Erendor sigue al anciano quien lo lleva hasta un establo, el anciano verifica que nadie los esté observando, corre una pila de heno de una esquina del establo y abre una pequeña puerta de madera que se ocultaba en el suelo con el heno.

-¿Hacia dónde lleva este camino? – Pregunta Erendor con mucha curiosidad – ¿Es seguro?
-Tranquilo, si quisiera hacerte daño mejor te hubiera dejado pelear solo contra toda la Legión del Mal

Erendor y el anciano ingresan por la puerta a un extenso túnel, llevan consigo una pequeña antorcha, el camino es tan estrecho que solo hay paso para uno a la vez, durante un rato cruzan el largo y estrecho túnel hasta llegar al otro extremo, la salida los lleva a un bosque lleno de aldeanos, casas rusticas, talleres de armas y otros.

Escena 11:
-Anciano, ¿Qué es este campamento? –Pregunta Erendor con total asombro
-Mi nombre es Arthur, el antiguo consejero del rey, ya deja de llamarme anciano. Te dije que nuestro rey fue un hombre sabio, desde que se escuchó la noticia de la Legión del Mal y sus actos despreciables, nuestro rey ordenó preparar este y otros túneles secretos que llegan a este lugar para mantener su pueblo a salvo, el rededor está bien cubierto y nadie podrá encontrarnos acá a menos que ingrese por los túneles o le abramos las puertas secretas de estos bosques, también permanece vigilado todo el tiempo para prevenir merodeadores indeseados.
-¿Pero qué hay de los que están en el reino sirviendo a esos cretinos?
-Todos saben cuál es el proceder para el bien del pueblo entero, nuestro rey siempre supo que no podíamos enfrentar a la Legión cara a cara, debíamos crear el momento oportuno y te aseguro que será muy pronto. Ven voy a presentarte a toda esta gente y buscaremos un lugar para ti.

Escena 12:
Arthur presenta a Erendor y este cuenta su historia a todos los soldados, aldeanos que se juntan en un circulo alrededor del anciano y su acompañante.

-Wow, ¿fuiste un capitán de una caballería y sobreviviste a la legión? ¡Impresionante! –Dice uno de los soldados allí presentes.
-Tal vez estés más capacitado que nosotros para enfrentar a estos bribones –Dice Arthur mientras apoya su mano en el hombro de Erendor –Nuestro pueblo es pequeño y relativamente nuevo, nuestras tropas no tuvieron mucho entrenamiento ni experiencia en batallas como las que tú nos cuentas.
-Yo estaría honrado en poder ayudarles a destruir a todos estos barbaros, ya es hora de ponerles fin a todos sus atropellos –Responde Erendor con fuerza en su voz.
-Pues yo no creo que debamos depositar todos nuestros esfuerzos y sacrificios en un extraño recién llegado –Exclama Robert, líder de los soldados del Reino de Bradford, imponiendo su robusta presencia en medio de todas las personas reunidas.
-No le hagas caso –dice Arthur a Erendor -Él es muy celoso con el mando de su gente, por algo es su líder. Pueblo aquí reunido, todos debemos prepararnos para el ataque sorpresa que haremos durante la celebración de Morgan y su prometida, ya definiremos el papel de Erendor en nuestros planes, ahora, cada uno ocúpese de sus labores que solo tenemos 2 días. –cerrando Arthur la reunión con estas palabras

Todas las personas pasaron el resto del día preparando sus armas, y los de alto rango organizando sus estrategias de ataque junto a Erendor que con su experiencia aporto a un plan mejor preparado.

Escena 13:
Pasaron los 2 días y la celebración se aproximaba, Arthur reunió a toda la gente de su campamento secreto para mencionar el plan que debían llevar a cabo.

-Gente de Bradford, hoy es nuestra mayor oportunidad para cambiar la historia, hoy debemos dar todo por el todo, no habrá marcha atrás y nuestras vidas estarán en juego. Erendor nos ha guiado en una mejor toma de decisiones para realizar el ataque, el mismo se los dirá en este momento.
-Hola a todos, como ya sabemos, la celebración se llevará a cabo hoy en la noche, las mesas formaran una “U” y en el centro de esta formación de mesas se ubicará Morgan y su prometida, las demás mesas estarán ocupadas por sus guerreros más cercanos y más fieles, eso es seguro, estarán a nuestra merced porque sus guerreros se confiaran y estarán en los alrededores, los aldeanos se ocuparan de mantener sus copas llenas de vino, debemos asegurarnos de crear en ellos la mayor debilidad posible.
Nuestra gente estará armada y simulara prestar servicio a la Legión como de costumbre, los demás estaremos listos en las salidas de los túneles para atacar en el momento justo.
-¿Cuándo será ese momento? –Pregunto un aldeano del grupo.
-En el momento en el que brinden, todos sus guerreros estarán centrados solo en la pareja, y dejaran sus espadas a un lado, justo en ese momento atacaremos e iniciaremos una nueva historia para bien nuestro.
-¡Sí, lo haremos! –¡Sí, por Bradford! –el pueblo apoya el plan narrado por Erendor con total euforia


Escena 14:
Llegó así la noche y en la plaza frente al castillo del rey se realizaba la celebración, las mesas estaban justo como se había indicado, Hitaka acompañaba a Morgan y todo marchaba como se había previsto, los guerreros de la Legión habían bajado la guardia y se habían entregado al festejo ya que no prevén ninguna amenaza en los aldeanos sirvientes, solo un grupo de guerreros se ubicaba detrás de Morgan para su protección personal y sus demás guerreros se encuentran en los alrededores cercanos guiados por Tanatos para no permitir el ingreso indeseado de enemigos al reino, Erendor y los demás esperan desde los establos y otras casas donde se encuentran los túneles.

Escena 15:
Morgan se pone de pie, da la mano a Hitaka quien también se levanta, alza su copa llena de vino y lo siguen todos sus invitados especiales de las demás mesas.

-Hoy me he unido a esta hermosa mujer quien trae en su vientre un nuevo miembro para nuestra legión, ¡mi primogénito! Nuestra legión crecerá y conquistaremos todo lo conocido por el hombre, ¡todo será nuestro!
-Salud -Felicitaciones –Brindan con él sus secuaces.

Empiezan todos los invitados a levantar sus copas y se disponen a beber el vino, todos los aldeanos que estaban alrededor de las mesas y detrás de estos invitados dejan a un lado las bandejas de copas y todo lo relacionado al servicio de la fiesta, sacan sus armas, e inmediatamente se apuran en atacar a todos los invitados y al grupo de guerreros que protegían a Morgan apuñalándolos en su momento más vulnerable, este se queda asombrado por el ataque inesperado que esta presenciando, saca su espada y rápidamente mata a los aldeanos detrás de él protegiendo a hitaka del ataque, los demás aldeanos salen armados de sus escondites e inician la batalla contra los guerreros de la legión que ya están asistiendo el llamado de a su líder.

Erendor por otro lado no ha sacado su espada, lleva en cambio un arco y flecha en sus manos, camina hasta ponerse en frente de Morgan y apunta una flecha hacia él, Morgan lo observa y lo reconoce de inmediato.

-¿Soldado?, ¿eres tú el soldado de aquella noche en que destruimos Draenor?
-Pagaras por todo lo que has hecho –Responde Erendor.
-Hazlo ya Erendor, ¡mátalo! –Grita Robert con todas sus fuerzas a Erendor mientras batalla con la legión.

Morgan se aparta por un segundo a su amada, lanza la mesa hacia el frente y se dispone a caminar hacia Erendor.

-Te devolveré todo lo que me hiciste, maldito demonio –Grita Erendor con odio a su rival.

Erendor dispara su arco sin posibilidad de fallar, clavando la flecha profundamente en medio del pecho descubierto de Hitaka, ella cae al suelo mientras Morgan dirige su mirada hacia ella.

-Nooo –Grita Morgan sujetando a su amada mientras esta lo mira fijamente mientras agoniza.

Con su último aliento Hitaka acaricia el rostro de Morgan y muere, este se levanta con la expresión de la mayor furia que se pudiera encontrar en un ser humano, y con su espada en mano se dirige hacía Erendor, este deja a un lado el arco y flecha y juntos batallan con sus espadas pero Morgan guiado por su furia es demasiado fuerte e incontrolable.
El ataque sorpresa ha causado mucho daño y bajas a las tropas de la Legión, muchos guerreros de ellos inician la huida abandonando a su líder.
La pelea entre Morgan y Erendor continua fuertemente, Morgan de un golpe hace que Erendor suelte su espada y este responde con otro golpe, Morgan deja a un lado su arma e inician una pelea física que entre un golpe y otro, van destruyéndose entre ellos.
En medio de la batalla, aparece Tanatos en su caballo quien llega hasta Morgan.

-Hermano, debemos irnos, los nuestros están siendo masacrados y están huyendo, dame la mano y vámonos.
-Volveré por ti soldado –Dice Morgan mientras gira su mirada hacia Erendor.

Escena 16:
Morgan sube al caballo de Tanatos y emprenden huida inmediatamente, Erendor, Robert y algunos otros aldeanos se apresuran a subir en sus caballos y perseguir a la legión que se encuentra en su peor situación.
En la huida Morgan y su hermano toman un camino distinto, Erendor y Robert no dudan en ir detrás de él, cabalgan a toda prisa atravesando el oscuro bosque, Tanatos cambia de lugar con su hermano mientras siguen cabalgando, prepara su arco y flechas y con estas alcanza a herir al caballo de Robert quien cae fuertemente y se lastima con todo obstáculo en su camino durante la caída y quedando así inconsciente, Erendor sabe que debe auxiliar pronto a su compañero, así que contra sus deseos abandona la persecución y retorna para ayudar a Robert y regresar con él al reino nuevamente.

Escena 17:
Al regresar, el pueblo se encuentra en euforia, terminando la celebración que inicio Morgan, pero por el motivo de la caída de su legión. La gente recibe a Robert y se encargan de cuidarlo y sanar sus heridas.

-Lo has hecho bien Erendor –Dice el anciano abrazándolo con una mano.
-Se han escapado… los dejamos ir anciano, esto no ha terminado aún –Responde seriamente Erendor retirando la mano del anciano que lo abrazaba y se marcha entre la multitud.

Escena 18:
Al día siguiente, el sol de la mañana alumbra el reino donde su gente se siente feliz y tranquila. Erendor aparece en la plaza tomando las riendas de un caballo, Arthur lo ve, se acerca a él y le pregunta:

-¿Ya nos abandonas? ¿Te vas a ir así no más?
-No puedo quedarme aquí sabiendo que la legión y el maldito de Morgan aún siguen rondado por ahí.
-Seguro que debemos seguir buscándolos, pero ahora tenemos un momento de paz y alegría que nuestro pueblo necesitaba desde hace mucho tiempo, ven y celebra con nosotros.
-Lo siento pero no puedo quedarme, tomaré este caballo prestado si no hay inconveniente, yo debo continuar mi camino ahora que ellos están más vulnerables. Manténganse siempre alertas, no sabemos cuándo vendrán pero si sabemos que lo harán, gracias por todo anciano.
-Arthur, me llamo Arthur, ten cuidado Erendor, eres un excelente soldado pero tal vez te falte la experiencia y sabiduría de un pobre anciano como yo.
Erendor sube a su caballo y se marcha del Reino de Bradford siguiendo el camino por donde persiguió a Morgan la noche anterior.

(CONTINUARA)

Texto agregado el 02-08-2015, y leído por 45 visitantes. (0 votos)


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