Primera:
Qué es la duración de un ser humano, en comparación con
la longevidad de la tierra y el infinito?
Simplemente nada... Nuestro paso es efímero y solamente una minúscula proporción de los seres de la tierra, saben o conocen algo de nuestra existencia...
Pero lo triste de todo es que no nos damos cuenta que nuestra existencia es algo temporal, quizás hasta ufano. Muchos creen que van a vivir eternamente o que van a seguir materializando su existencia hasta la eternidad o el infinito.
Queremos amasar, tener, poseer, y a lo mejor nos olvidamos de algo tan fácil como ser felices con el día a día, con el segundo a segundo...
El valor que le demos a las cosas no está en las partículas que las componen, sino en la intensidad con la que influyen en nuestras vidas, en nuestras mente, en definitiva, en nuestro ser.
Y debemos buscar los momentos inolvidables, aceptar las cosas inexplicables e incomparables... o de otra forma... nuestra vida carecería de sentido... pues lo material... con el tiempo se difumina
Segunda.
Mujer, sentarme a tu lado, sin hacer absolutamente nada, sin pedir absolutamente nada, únicamente viendo tu presencia, sintiéndote respirar, es absolutamente todo para mí,
pues aunque la vida me ha podido ofrecer tantas veces decidirme por otras opciones, he aprendido, aunque tarde, que debo escoger, no aquella que la vida me ofrece en un instante, o que la gente quiere para mí, y sí la que me hace sentirme yo mismo y ser feliz con esa situación.
Y por ello, escogí, hasta que la hermana Muerte no me gane su última partida, la de estar a tu lado, mirarte y no hacer absolutamente nada más.
En alguna parte leí que el amor es aquello que dura el tiempo justo para que sea inolvidable
Tercera.
Todo el mundo pasa su particular encuentro con sus miedos y dragones. También yo y la experiencia aunque lastimera me ha servido para comprender muchas cosas:
La vida me puso un estúpido desafío, o me lo busqué yo por querer sacar agua, de donde solamente había tierra árida. Luché y perdí, pelee y besé con estrépito el suelo y todo por no darme cuenta que en una buena reflexión, se encuentra la respuesta para todo, incluso para lo que creemos o vemos imposible, o algo que no nos merecemos.
Me conformé con estar con los ogros y dragones antes de arriesgarme a plantarles cara, no dándome cuenta que todos esos días de abatimiento ya nunca volverán, pudiendo haber hecho tantas y tantas cosas interesantes...
Quise usar la razón, cuando en muchos momentos las cosas depende de la voluntad, de esa fuerza que sale de tu interior, única herramienta para vencer cualquier afrenta.
Y estás derrotado no cuanto te vencen, sino cuando no te empeñas en luchar, pierdes el control cuando no estás convencido de que tu actuación con decisión, te equivoques o no, es tu único desafío y tu única arma para ganar.
La vida es hermosa siempre que sea tu vida, no la que te marquen las opiniones, las situaciones o los comentarios que hagan los demás de ella. Nunca dejes que nadie arruine tu vida. Después no va a perder el tiempo en intentar arreglártela.
Quise ser racional y los ogros me comieron al olvidar que mi vida se compone de sueños e ilusiones, y que sin ellos, mi vida no tiene sentido.
Jamás volveré a amargarme de mi propio fracaso, ni se lo cargaré a nadie, ni a ninguna situación, ni a otro, deberé aceptar lo que me toque o siempre me seguiré justificando como un crío.
En este tiempo me olvidé de que la causa de mi presente, en aquel momento era, lo ocurrido en una situación pasada, como el rumbo de mi futuro lo marcará solamente lo que haga en el momento presente.
Jamás volveré a olvidar que cualquier momento es bueno para comenzar , sea la situación que sea, pero que sobre todo, no hay ninguno que sea tan terrible como para tirar la toalla. |