La vejez. Esa página freak la odie. Con que derecho explotan el antes y después de personajes que en su juventud fueron muy populares, ya sea en el mundo de la música o del cine. Rostros como el de Brigitte Bardot, Jack Nicholson, Farrah Fawcett, más recientes estaban Mickey Rourke -que más de algún suspiro dediqué en su tiempo de gloria- y nombraré finalmente a Sharon Stone. ¡Que indignación me da!, ¡que se creen! estos busca impacto, con exponer la vida de las personas, que la mayoría de ellos ya están retirados, incluso otros fallecieron, como el caso de Farrah y ni eso respetan, en su afán de destruir imágenes y bellos recuerdos de quienes acompañaron buenos años de nuestras vidas con su trabajo para distraernos, reflexionar o soñar, según haya sido el contenido del film protagonizado por ellos. Mas ira me invadió, son injustos, verdaderamente injustos con el proceso natural que todos tenemos del deterioro físico, que muchas veces (en otras no y es al revés) se adelanta al intelectual y no lo respetan, lo tratan como si de una monstruosidad se tratara. Es aberrante no respetar el cómo lucen las arrugas, la piel caída, labios y ojos agrietados, sin mencionar el resto del cuerpo, normalmente bastante más abultado y desarmado. Luego, volví a recorrer las fotos y descubrí algo tan bello y tranquilizador, había rostros que seguían increíblemente hermosos, al menos para mí y uno que destacaba, era el de Brigitte Bardot, analicé detenidamente sus facciones, quedando con la impresión –no puedo asegurarlo- que sigue natural, que no ha sido sometida a cirugías de rejuvenecimiento, además el 2014 cumplió 80 años. Luego leí su última entrevista y claro, yo sabía solamente su pasión y entrega a la defensa de los animales y la admiraba por eso, pero descubrí también que tiene un lado B y es que paralelamente a esa defensa de indefensos atacó y persiguió a los homosexuales, no lo imaginé de ella y me decepcionó. Pero no era el único rostro que lucía por su belleza independiente de su edad, también estaba Sharon Stone, aquí mi indignación iba in crescendo, como ser tan desatinados y desalmados de incluir a esta mujer en plenitud y vigencia, como una anciana, tiene apenas 57 años, sigue bellísima, también tengo la impresión que natural, sin cirugías y ¿qué pretenden entonces?. Otra actriz que cayó en las manos de estos verdugos, fue la estupenda Jamie Lee Curtis, 57 años, regia y digna de figura, rostro, espíritu e intelecto, son unos ¡desgraciados!, tratarla de que se nota el deterioro, deteriorados del alma están ellos. Solo me queda de consuelo decir, que suerte tengo de no ser nadie conocida ni expuesta a cámaras y opiniones y seguir feliz en un pacto con mi espejo, de que no me grite ¡vieja!, pero sí que suavemente me vaya indicando el sutil maquillaje que armoniosamente acompañe la nueva cartografía. Tengo pendiente leer el libro “La Vejez” de la gran Simone de Beauvoir, ella antes de los 40 años, manifestaba abiertamente su terror a envejecer. |