Aunque quieras no podrás olvidarme
ni tampoco resignarte a perderme,
un hombre como yo no lo encuentras
en cualquier parte,
lamentablemente esa es la realidad
por muy dolorosa que sea.

Ya no nos hacen como antes
quedamos muy pocos en verdad machos
y cuando hablo de machos
hablo de una raza casi extinta
de seres viriles de pecho en pecho
dispuestos a todo por una mujer.

Dimensiona todo lo que estás
perdiendo,
mira este bello rostro
y este maravilloso cuerpo
por última vez
antes de irte a llorar por
las esquinas
por la absurda decisión
de abandonarme.