No te mentí cuando dije que te clonaba. Pero lo más asombroso es que no me mentí ni un instante mientras te besaba.

A veces me sorprendo vagando en galaxias que aun no fueron descubiertas, disfrutando de colores nuevos y seres de otros planetas. Pero esta vez me sorprendí sensato! me sorprendí conocedor de mi cuerpo y de mis actos.

Ya se cuáles son mis deseos y mis fantasías. Se que podría crear al novio perfecto con una pieza del alma de cada uno de esa lista cada vez más larga. Pero mi historia interminable se acaba.

Sin darme cuenta he madurado y he comprendido que todo lo bueno se acaba, antes o después. Todo tiene principio y fin. Y ya no es algo que me delata, si digo que persigo al amor observando los reflejos de mis pasiones pasadas.

Pero el pasado tan sólo es un reflejo de lo que fui, no es más cierto que el día que ahora se acaba o el que comienza a escribirse con cada una de estas palabras... lo cierto es que hoy me detengo a observar la profundidad de mi mirada, tan oscura a veces que me cuesta hallar en ellas luz; y sin luz, ni pasado, ni futuro, ni presente, tienen importancia.

Por ello dibujo mi punto y a parte, mi punto y seguido. Un punto donde me concentro en la luz, donde ofrezco todo y cuanto soy sin esperar la misma respuesta, donde entregar es la única vía y compartir la única meta.

No temas, no me duele saberte tan lejos cuando ayer te supe tan cerca. Somos seres de luz, caminando entre sombras pasajeras.