Cuando he dejado mi aldea interior fue muy difícil volver al estado puro,


ya todo estaba desecho por la huida masiva de algunos que eran mis hermanos de ideas,

El viejo zapatero, llamado gentilmente de José que remendaba los zapatos de los hombres de la pala y el azadón ,

El maestro de la pequeña escuela,
de dos sala de clases.

Que nos enseño las primeras letras.....

Hoy es el camino excesivo de temer....

llamados desde las grandes ciudades,

los jóvenes van y regresan con, modismos, en Ingles, ropas de colores, y teléfonos móviles, en sus apretadas orejas de hombres de la tierra, que un día fueron,
son sordos a las palabras de la vieja Maria ...

Que les dicen: !no te valla a pasar más corriente en tu oreja niño:¡

Desde El rancho de lata_Taller_

Juan_Poeta