En tu mesa de sueños
guardados con celo
te dejé un poema
para que acompañe
tus mañanas frías
tus tardes sin sol
tus noches solitarias.
Será tu companía
con letras que pretenden
ser sendero y tu guía.
Es el poema
sutil y sincero
pues sólo refleja
lo bien que te quiero.
Por eso sus letras
son parte de mi alma.
Describen momentos
jamás olvidados.
Cuando lo leas
veré a tu sonrisa
crecer en un vuelo
que siempre ha estado
anidado en tu pelo.
Texto agregado el 17-06-2015, y leído por 172
visitantes. (5 votos)