Me preguntaba si una persona sin corazón podía hacer algo en el campo de la literatura o lo que es lo mismo, si la sensibilidad espiritual que se requiere para ponerse a escribir es compatible con un inmoral haciendo textos. En definitiva, si podía hacer literatura un malvado.
No sé si será posible pero pienso que sería bastante ilustrativo. La literatura hecha por malvados abriría un capítulo bastante interesante. Creo que hasta hoy lo escrito es fruto de, en el fondo, gente buena, con lo que tenemos también, en consecuencia, historias edificantes y de buenos sentimientos.
Es ahí, en tal ámbito, donde me postulo. De los que no han estado en la cárcel, soy, modestamente, de los peores. Es más, pienso que muchos reos son angelitos.
Son los seres grises como uno los que llevamos en nuestra falta de ética la deriva de los malos sentimientos. Sin un código de honor que nos guíe- del que no carecen muchos asesinos- nos volvemos seres oportunistas y, si no dañinos, sí indiferentes (lo que llevado a un extremo…pero qué digo…le estoy haciendo los deberes a alguien peor que uno). Sólo se me ocurre un ser peor que los grises nuestros, la de los hipócritas con dinero, pues, a la postre, un hipócrita pobre qué mal hace. Es más, cabría plantearse también si un pobre puede ser hipócrita.
Pero a lo que iba, de ahora en adelante, voy a iniciar una serie, la colaboración mía literaria- ya vislumbrada por Sade y otros malos que han sido- al fin experimental de los malos en el ámbito literario.
Sin malas palabras pero ausentes de ética o con carencia, me propongo iniciar un camino escasamente transitado que acabe con nuestra civilización o la haga, paradójicamente, mejor, o, al menos, diferente.