Cada elemento que ustedes ven a su alrededor hace parte de un mundo que ha sido enseñado por tradición de una manera escalofriante. A lo largo de la historia, la humanidad ha intentado explorar el planeta para llegar hasta este momento en el que extrañamente seguimos siendo circuitos y no sistemas nerviosos. Han habido muchas excusas para justificar la reproducción; la existencia de un alma más allá de la muerte corporal, la reencarnación, el hecho de que simplemente somos electricidad y otras más. Si uno es completamente consciente de su humanidad, ha cumplido su objetivo dentro de su especie; es decir, ha podido trascender a todas los legados posibles que puede dejar un ser humano. Si yo me reconozco como ser humano, entiendo mi sufrimiento y el de los demás; y debido a esto me esfuerzo para que no haya.

Cuando uno es capaz de ser humano; uno se desconecta de las divinidades, divisa la imposibilidad de experimentar verdadera felicidad, se es incapaz de vivir para sobrevivir y se entiende que la ciencia no es más que una prolongación de la tortura que es la vida. Todos los momentos del ser humano son ciegos, la reproducción, la vida y la muerte, todo. Cuando la gente se reproduce generalmente no logra ver con lucidez que entregar la vida de esa manera es bastante siniestro y no es algo, para mí, muy confiable que digamos, (un revuelto de sangre y semen, producto del cual a los nueve meses sale un bebé). Casi todos piensan que uno goza la vida, y en realidad cada segundo de nuestras vidas sufrimos para no morir, y en consecuencia tenemos que suplir nuestro cuerpo porque tenemos miedo de morir, porque sabemos que duele y es que es algo trágico.

Adicionalmente, de una manera muy extraña, casi nadie se da cuenta de que la muerte casi siempre es un horror. Y muchas veces se encubre, también de una forma muy chocante. Los religiosos siempre acomodan las razones por las que alguien muere o no. Si alguien es religioso y lo matan, es porque se apartó de Dios o porque Dios lo llamó a su reino, o yo no sé qué más. Y si un religioso se salva de la muerte, es porque Dios lo protegió. En general, casi nadie ve que la muerte implica un sufrimiento extremo, y si yo lo entiendo, me doy cuenta de que sinceramente la muerte no es una sorpresa, como a veces quieren que piense; entonces por lo menos yo tengo una única causa (en cuanto a la humanidad), la cual extinguirla. Para colmo de males, el 99% de los adultos ponen una sola causa para sus existencias, la cual es el sexo; estos seres no alcanzan a percibir el grado de perversión, tortura, tristeza, amargura, soledad, egoísmo, egocentrismo, individualismo, ingratitud, codicia y avaricia; que es rozar un cuerpo sexualmente con otro. Estos seres primitivos, aquellos que están en las ciudades y quienes están en los pueblos también, poseen el mismo nivel de salvajismo, sin embargo, es más evidente en quienes viven en las ciudades.

Las personas que rozan sus cuerpos con otros para el sexo sin una mayor causa, están en la ficción, porque a pesar de tener un cerebro con una lógica, que les muestra que eso es aberrante, lo hacen porque son unos retrasados mentales. El mundo en el que nací, fue diseñado por máquinas (humanas); seres ciegos incapacitados para reconocer su sistema nervioso y su realidad; y en última instancia, todos quieren sentirse dichosos sin importar lo que creen. Cuando ponga en peligro su supervivencia, reflexionarán mejor su existencia.