Prefiero pensar que es el final
que todo va a terminar con una mirada
y un hasta nunca,
prefiero creer que fue solo un mal sueño
de esos en que despiertas pegado en la almohada
con un grito de terror en la garganta...

Ha amanecido otra vez en este oscuro lugar
mi alma está muerta y mis ojos inyectados en sangre,
me han visto deambular sin esperanza
dando vueltas en círculos,
y aunque yo finja con una sonrisa calculada
pierdo el control y se me quiebra la máscara
mostrando al ser decadente que se encuentra detrás.

Poco importa lo que piensen de mí
porque al caer la noche con su manto cruel
sentiré en el pecho un profundo deseo de odiarte
y odiarme al mismo tiempo.