Que le da a los pelotudos la potestad de dominar al mundo, la idiotalizacion y su novia, la globalización nos están dejando en evidencia del bajo nivel humano que poseemos. Nos envenenamos de marcas, nos odiamos y nos amamos esponsorizados, hacemos el amor con condones Amor, nos adornamos con nuestras prendas tribales, nike , puma , adidas, tomamos nuestros brebajes mágicos que nos potencian a grandes guerreros y aventureros, con un trago de red bull, tenemos alas. Yo le tengo miedo a los vivos corporativos, a los de la meca de la industria, a los genios de publicidad, a los de las charlas ted, a los que nos están haciendo mierda, el criterio de las ventas, de liderar el mercado. No toma en cuenta la escueta educación de nuestros pueblos de la parte más vulnerable de estos, a los que se hacen de tribus, los que se adornan con nike puma y adidas, los que revientan a un viejo para quitarle su jubilación, para comprar la pilcha de moda. Trato, hablando de mi, de nunca estar triste, de no tener por bandera, la pena, la lástima, soy un producto bruto de las circunstancias y la necesidad, y a veces haciendo tanta fuerza me entristezco y se me pianta un lagrimón, yo le digo bronca, pero es angustia, es tristeza. Me duele saber que nos estamos perdiendo, de que se nos esta yendo la identidad de ser y pertenecer. Extraño a mi generación X, los años donde el sacrificio de los viejos era el ejemplo de nosotros los hijos, los que hoy respetamos y llevamos algún valor encima, no se si en verdad todo tiempo pasado fue mejor, pero al menos rememorando en mi tiempo no cabe duda que el confort de mi recuerdo es inmensamente entrañable.