A veces se torna gris como el invierno en la sierra Y tiene hambre de madrugadas en vela Otras veces, es animal solitario hundido en sus infantiles traumas Y la soledad es para él una mujer fecunda pues a su abrigo crea y re-crea sus guitarras y secretos que oculta A veces se abisma en la carretera absorto en la velocidad-adrenalina que su pensar aniquila Su cuerpo muere y resucita con los ciclos de la luna pasando de la oscuridad a la luz como montaña-rusa sin prisa La muerte besa su mejilla como una dulce amante que coquetea y le rodea sin el orgasmo final Ah¡ Y la palabra, se esconde y el silencio le atrapa y a su corazón encarcela y a invernar le manda
Texto agregado el 09-04-2015, y leído por 99 visitantes. (4 votos)