Es tan fácil odiar a la lluvia, Porque inunda calles y hogares; Es muy fácil culpar a la lluvia, Del desastre en avenidas y ciudades. Es tan fácil culpar, Sin embargo no sabemos que la tierra clamaba Por ver a las nubes llorar. La tierra clamaba Por saborear un poco de la tristeza del cielo, Imagina que bebe agua de mar. Es la tierra quien anhelaba sentirse húmeda Empaparse de un par de tristes gotas; Añora que también es capaz de llorar.
Texto agregado el 18-03-2015, y leído por 107 visitantes. (2 votos)