La soledad es muy hermosa... cuando se tiene alguien a quien decírselo.
Gustavo Adolfo Bécquer


¿Detrás de que bruma desapareció tu presencia?,
el ruido de qué rayo acalló tu tal vez,
no puedo imaginar el fin de tus palabras
agonizando airosas encima de un papel.

Hay silencio de letras detrás de mi ilusión…
no hay ausencia más cruel que la no pensada,
ni palpitar más ansioso que cuando huye la fe,
ni alma más molesta gritando quebrantada.

Dónde te busco mi amor,
cómo pinto mis mañanas
sin el matiz de tu voz,
cómo piso las veredas
sin la sombra de tu ser.
Dónde guardo tantas flores
que se secan sin remedio,
si no tengo ni un poema
que me declare tu ardor.
Vuelve vida…
Aquí te espero
atesoro tu lugar,
en mi pecho, en mis manos,
en la piel que me sostiene,
en los latidos inertes del doliente corazón…