Mi corazón me mira desde el fondo de mi abismo
asustado y contrahecho
puro y deshecho
dulce y poderoso
me guiña el ojo coqueto
agradecido de experiencia.
Entre la intensidad y la moderación
elige el fuego cálido
me tiende la mano
y me abraza
en pura promesa de respaldo.
Mi corazón ama los amores largos
hijos, amigas, hermanos, madre
compañero a la altura de su donaire.
Mi corazón es esclavo de estupideces
pero se quita una a una las cadenas
elaborando penas y encantos
huye del espanto y no del dolor ajeno.
A veces valeroso, a veces cobarde
de tarde en tarde se constituye en algún aporte
para que otros encuentren su Norte.
Mi corazón a veces me traiciona
bloqueado y testarudo
se transforma en un escudo
y no me deja intimar.
O me hace tonta, me hace débil
servil o dependiente y pierde su dignidad.
Texto agregado el 07-02-2015, y leído por 200
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Esto que escribiste -y que nos pasa a todos- me recordó una frase creo que de Quevedo, quien dijo: El corazón tiene razones que la razón no entiende. +++++ crazymouse