El gallo que adelantaba
Firmat 8 de Enero de 2015
Tuvimos un gallo que adelantaba, eran las dos o tres de la madrugada y comenzaba a cantar que daba miedo.
Lo peor es que despertaba s los gallos vecinos, que respondían a su canto, produciendo un bochinche infernal, nadie podía dormir.
Intentamos varias formas de ponerlo en horario, pero todas fracasaron.
Llego el momento que los reclamos de los vecinos eran tantos, que mi viejo tomo la decisión de sacrificarlo, justo el que era incapaz de lastimar a ningún bicho viviente.
Coincidió con que eran épocas de mishiadura y había poco para poner en la olla. Mi vieja que estaba a punto de dar a luz le dio las instrucciones, antes de internarse .
Hacele tomar alguna bebida fuerte así se ablanda la carne, luego le estiras el cogote y le haces un corte para que se desangre y lo tienes de las patas hasta que muera.
Esa noche el gallo, como presintiendo su final, adelanto más que nunca , dio un concierto descomunal, los demás gallos parecían que aplaudían a rabiar. Los vecinos nos puteaban desde los cuatro puntos cardinales.
A eso de las diez de la matina, mi viejo desocupo la mesada,le abrió el pico y le hizo tragar una copa de coñac, le pareció poco y lo invito con otra vuelta, lo dejo un rato en el piso mientras afilaba un cuchillo, el gallo caminaba tambaleándose, tenía un pedo bárbaro.
Luego, y olvidándose de las instrucciones de mi madre lo levanto y de una sola vez le corto el pescuezo, quedándose con la cabeza en las manos, mientras el animal, cayendo al suelo, emprendía una veloz carrera,, daba terror verlo desplazarse por el patio mientras salpicaba sangre por todas partes,corrio hasta que se quedó sin nafta y luego cayo como fulminado. No recuerdo si llegamos a comerlo, solo sé que desde ese día mi viejo jamás volvió a matar a un animal, y que mi hermana le agarro pánico a las gallinas, algo que hasta el día de hoy le perdura.
Eso si , todos los vecinos agradecidos
Agustín Alberto Secreto
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