Qué chuchas es calibri, me pregunto.
Cuerpo, me responde esta máquina roñosa
que transcribe mis pensamientos,
mientras mis dedos automáticos
pasean, saltan y juegan sobre las letras
que estoy segura me miran sonrientes
cuando el enojo, hermano de la tristeza
asoma en la mañana eterna.
Quiero castigarte, que te duela el alma.
Otra vez voy de salida
legado eterno de mi madre, seguro.
Maletas hechas, maletas deshechas
maletas robadas, recuerdos perdidos…
Que te duela el alma, quiero castigarte.
Calibri, weón, calibri, eso te faltó,
pero me importa un bledo.
Siempre quise ser camionera
no llegar a ninguna parte
llenarme de paisajes.
Mañana, mañana,
en la cabina de un camión grande
llevaré lo que construí
la casa que soñé…
De ahora en adelante,
Me nombraré CALIBRI
Porque soy chora
Porque nunca me quedo
Y me saco los zapatos
Y me atrevo.
Quiero castigarte, que se te parta el alma.
Atrás quedará la lluvia
Los bailes en la calle
Las risas de los niños
La marcha dolorosa, que reclama derechos.
No dormiré en tu cama
te borraré de mis recuerdos.
Más allá del sol, estoy segura
me espera otro universo.
No se te olvide, me llamo Calibri.
FATAMORGANA
Patricia Lara Arriagada
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