Vuelves como un viento suave, tranquilo y fluido
delineado de sonrisas indelebles
es ahí cuando te me desempolvas huracán
elevando tus remolinos en ondas hiperbólicas
y aunque tú no quieras reconocerlo
tienes clavado en tu centro , espirales tormentas
me arrastras, juegas con mi peso
me meces a tu libre albedrio
y tus torbellinos susurran cada poro de mi piel
terminando cada punto en una explosión finita.


Encontré un interfaz en mi marcapaso, que no lo deja latir
hay un signo sin definir que el ciego no se la come
le faltan números a ese arcoíris que vimos con los ojos cerrados
y las estrellas bailarinas centellean contentas sus alas de plata
cuando el búho ululua la O muda.


Y estás aquí latiéndome en aceite hirviendo
y con los porqués haciéndome cosquillas las tripas
absorber tus burbujas fue mi ilusión
pero esta cadena metódica sigue jalándome los cabellos hacia el vacío
con una respuesta predispuesta a quedarse fija
es hora que sepas que solo conjugamos directrices en donde no queda ni la duda
y donde la teoría firmó su realidad.