Mañana agonizante
Las moscas copulan a mi lado
¿destilare aroma de cadáver,
O mi imagen encorvada
Se asemeja al estiércol?
La soledad de mis paredes no contesta
Y las cortinas se mecen indiferentes
Ante mi presencia

Un poco hastiado
Y un poco muerto
Un día de oportunidades
Que se incendia en los dedos
Un poco sucio, suciedad en el alma
Las horas del fresco aire
Consumen mi espíritu
Como la sal que el mar despide
Como el infierno en la tierra
Al corazón del hombre

¡Qué miserable este tiempo sin tiempo!
En donde el tedio patea
Y el amor se evapora
Desde el corazón
Hacia el cielo
Y uno se encuentra
más solo que nunca
recontando los fracasos
deseando huir de la carne
Y escaparse al desconsuelo desgraciado
a esa desesperanzada sombra que es Dios.