2 kg azúcar
2 l. leche entera
¼ kg jamón york
1 lechuga
1 Kg naranjas de zumo
1 Kg café mezcla molido
1 dog chow (tu cena)
1 marlboro
La norma, la única norma a respetar, es el respeto. Fácil, claro y sencillo. A través de la sinceridad se respeta. Se muestran opiniones comunes o, en la mayor parte de los casos, opuestas. Es fácil, se llega a un acuerdo y en el peor de los casos, cuando no hay más remedio, se ponen distancias.
Independientemente del cariño, de la pasión o del “amor”, en primera instancia debe estar el respeto.
Entrar y verte babeando no por una ni por dos, por muchísimas, como un puto perro en celo me demuestra no sólo lo que quieres sino también lo que eres. Si tanto te gustan las putas creo que a partir de ahora me vas a amar con locura.
Por lo tanto, si te comportas así debes ser tratado como tal. Es decir, de la forma que realmente eres.
Pues bien, gracias a algunas de tus amistades voy a poder enseñarte el respeto de la forma más palpable. Así que, por favor, cuando vuelvas del supermercado quédate en la puerta pensando a ver a cuál o a cuáles de ellos me estoy tirando en tu sillón. Esto se llama sinceridad. Ahora sólo depende de ti asumir las consecuencias.
No olvides el tabaco, ya sabes lo que me gusta fumar después de follar.
Te quiere mucho pero joder la vida, Menchu. |