De Perú a México llegó un extraño ser
Que su aspecto era de nada buen ver
Y cuyas reales intenciones eran peores
Que cualquier cuento de horrores.

“Soy la abogada del pueblo”, decía
Y a los marginados a su show traía
Pa´ ganar rating en la tele decadente
Que no sintoniza la gente inteligente

Laura era soberbia y se creía muy lista
Y engreída insultó a su nueva panelista
Quien no era sino la calaca dispuesta
A llevarse de aquí a esa mujer funesta

Al final Televisa el show ya canceló
Pues sin su conductora se quedó
Y México, al menos, al fin descansó
De la fea extranjera que su suelo pisó