CARAS VEMOS. Admiraba tu recato, Tu decoro y discreción; Pero, en un loco arrebato, Me empujaste a un rincón. Al bajarme el pantalón Yo te contemplé asombrado, Pues no estaba preparado Para tanta iniciativa, Me resultaste más viva Y ya te habías trepado.
Texto agregado el 26-10-2014, y leído por 394 visitantes. (9 votos)