Humillada 1 de 2.

Diana quedó huérfana de madre y padre. Un exnovio de su madre la crío a ella y a su hermana Ely. Alan no tenía corazón para dejarlas solas. Alan era un plomero que no tenía mucho trabajo y llevaba poco dinero a la casa.
Diana tiene 30 años, Ely 20 y Alan tiene 55 años. Diana hacia la limpieza en la casa de una señora pero ella murió y el trabajo se terminó. Buscó trabajo por todos lados pero no encontraba nada, pero entre todas las casas en las que buscó solo encontró trabajo en la casa de Laura. Un lugar donde recibió las peores humillaciones. Laura la recibió con desprecio, la veía como si fuera una basura. Le dijo que le pagaría un mísero sueldo y que no tendría prestaciones ni días de descanso.
Laura es una mujer madura divorciada de un hombre que se casó con una mujer mucho menor que Laura. Ella y su exesposo tuvieron un hijo, Andrés que hoy tiene 23 años, estudiante de la carrera de medicina. Se la pasa estudiando en su cuarto o en la universidad.
Para Diana era difícil el poder aceptar a diario el ritual humillante de que Laura tenia, la mirara de arriba a abajo, le oliera el pelo, las axilas y le revisara las uñas. Diana sola no podía limpiar la casa completa en un solo día. Laura buscaba el más mínimo detalle de mugre para reclamarle a Diana, pero no podía evitar el pensar que era una joven trabajadora. Ely quería estudiar la carrera de psicología, pero la economía en casa no estaba apta para pagar una carrera universitaria. Teniendo 6 meses trabajando en casa de Laura, Diana tuvo un accidente que la obligó a ir al doctor para que le enyesaran el brazo. Laura le dijo que no era su problema que Diana fuera una tonta y no se fijara por donde caminaba y que la quería diario en la casa. Para Diana era difícil el limpiar toda la casa sola, le pidió a Ely que fuera con ella a ayudarle para limpiar la casa.
Laura dijo que no pagaría un sueldo doble, si Ely estaba dispuesta a limpiar toda la casa para ayudarle a su hermana. Ely cuando llegó a la casa de Laura quedó impactada del palacio en el que vivía aquella amargada y grosera mujer. Pero había algo, Ely conoció a Andrés, con él se involucró meses después. Teniendo 3 meses en la casa Ely ya estaba metida en la cama de Andrés.
El aprovechaba cualquier oportunidad para estar con ella sin que Laura y Diana se dieran cuenta. Ely no soportaba las humillaciones por parte de Laura pero no le quedaba más que aguantarse las ganas de romperle la cara. A pesar de que Andrés sabía de las humillaciones de su madre y el trataba de tranquilizar a su madre cada vez que tenía un ataque de histeria.
“eres una maldita gata asquerosa, mírate en un espejo eres una pobre mujer que no aspira a nada. Y tu hermana, no puedo creer que existan personas como ustedes.” “esto no está limpio. Te largas a tu casa hasta que las ventanas estén bien limpias. ” Era la vajilla, los cuchillos, los vasos, las camisas de Andrés, el piso. Era cualquier cosa que Laura buscaba para insultarlas a pesar de saber que ellas hacían las cosas bien.
Pero todo estaba por terminar.
Continuara…