Unión sentimental nos dice nuestra respiración
Invierno en sudor... hasta una fricción templada
Envejecer a tu vera dónde nos guarda fraternidad
Hasta un dibujo firmado con destello dorado
Y cien años tras gemidos sensuales
Que nuestro placer ha poseído entre caricias de azúcar.

La misión encantada es saborear tus senos sensibles
Estar ante un mar apetecible para bendecir
Nuestros sofocantes labios que funden la escarcha
Hasta pronunciar el aire mágico de tu alma
Y cien años tras manías genitales
Que nuestro placer ha poseído entre regalos eróticos.