LAMENTO LLANERO.



Bella llanera con tu porte altivo,
Opacas lo bello del morichal;
Después de que te conocí yo vivo
Triste, cabizbajo y durmiendo mal.


Mi yegüita consentida extraña
Las caricias y también mis cuidados;
Su melaza con picado de caña,
Y aquel diario paseo por los vados.


Grácil garza del llano, misteriosa,
Cuando tú caminas por los corrales,
Te veo cual inalcanzable diosa,
Vedada al deseo de los mortales.


Descendiente de casta de Rondón,
(Quien venció en Boyacá con sus lanceros)
El Señor Dios te regaló ese don,
De unos ojos que parecen luceros.


Cuando cabalgas eres amazona,
A galope tendido en la llanura;
Sueño con un día ser la persona,
A quien entregues toda tu hermosura.


Hoy cualquier ilusión se ha derrumbado,
La vi con él bajo la luna llena;
Y todo aquello que había soñado
Se desbarató, pues ella es ajena.