En toda su composición social, el humano ha logrado lo que ninguna especie, conocida por el mismo. Solo su especie y su naturaleza han podido sucumbir ante un claro comportamiento metamorfo, ya que adapta los medios de sus objetivos a su particular conveniencia, no importándole o pasando por alto las enormes consecuencias. Y no solo eso, ha logrado también, al separar su esencia con el medio ambiente, al revelar su egoísta naturaleza propia y: catalogar, diferenciar y corromper su propia especie en grados sociales y civiles, sin mencionar los locales. Este comportamiento demuestra su colosal diferencia ante todos los seres vivos.

Otro hecho inapelable de su diferencia es lo poco sustentable que es para su propia existencia. Uno de sus “Grandes dotes evolutivos” es el que no contribuye a la conservación de su propia cuna, lugar que le aporto las condiciones aptas para su existencia.

Debe de ser su naturaleza a la que se le debe de agradecer la desaparición de mucho territorio natural de otras especies y por lo tanto es responsable por la eliminación de las mismas. Pero ¿No es así como funciona la naturaleza universal de los seres vivos? ¿No es verdad que la supervivencia es consecuencia de la fortaleza que demuestran las especias mas avanzadas? Si esto es correcto, entonces el conflicto es una condición final natural para el cambio radical. Y toda clase de conflicto será de alguna manera justificado por la naturaleza universal.

O es una realidad creada para justificar los propios intereses a los que lleva la curiosidad del humano. Curiosidad que le ha transformado en lo que ahora se le conoce.

Si esto es de alguna manera posible lo que le hombre siempre busca con su progreso es conocer mas, pero el precio por hacerlo debe de ser proporcional, el daño que debería de pagar por saber, lo repele y dirige a otro objetivo y consecuentemente justifica que el mal es para un bien colectivo.

Con este comportamiento, el mismo humano pretende ser supernatural a no aceptar por completo las consecuencias de su actuar y transformar.

No hay que limitarnos a pensar que esta es la verdadera naturaleza del comportamiento humano porqué como se dijo anteriormente “El humano ha logrado hacer lo que ninguna otra” y esto es catalogarse a si misa, dividirse y compararse.

La historia del hombre ha demostrado que el no solo se reconoce como especie superior sino que también tiene la creencia de alguna forma de vida superior más allá de su comprensión. Así mismo la historia del hombre es enormemente cuestionable, ya que muchos de sus registros no pueden ser comprobados por documentación fehaciente que nos lleve a la total aceptación y comprensión de los verdaderos motivos de muchos hechos históricos, para ello, solo cabe la demostración como arma definitiva contra el escepticismo. Lo cual, en consecuencia, ha terminado por enseñar la complejidad de la naturaleza humana o solo su incomprensión misma. Dividiendo a la especie humano en una interminable lista de diferencias tanto ideológicas como físicas y biológicas.

Finalmente el humano escoge su bando y le defiende hasta ser eliminado o convencido por otro bando. El humano es complejo por no decir que es errante, y esta verdad talvez nos diga que en su complejidad el humano no podrá progresar.
Las preguntas que el humano debe de hacerse para poder reconocer su naturaleza.
¿Cómo sustenta el hombre su propia existencia? Y ¿Cómo siempre la justifica?
¿De donde nace el preguntarse todo fenómeno? Y ¿Hasta donde le ha llevado todo esto?
¿Cuál debería de ser su papel como miembro de un ecosistema consecuencia por fenómenos naturales anterior a su conciencia? Y ¿Qué papel representa en su actual posición?