MAL DE AMORES.



¿Cómo podría rebajarse un hombre
A perder su orgullo y su dignidad?
Yo arrojé por la borda hasta mi nombre,
Conociendo toda su iniquidad.


Era tarde para retroceder,
Ella me conquistó con sus hechizos,
Y yo,consciente de mi proceder,
Dejé que hiciera todo lo que quiso.


Bebí de sus labios mortal veneno,
Sus divinos ojos me hipnotizaban;
No distinguí lo malo de lo bueno
Y sus tentáculos más me asfixiaban.


Fue como un oasis en mi desierto,
Me sentía morir si no bebía;
Ella feliz gozaba al verme yerto,
Porque en mi propia cara se reía.


Nunca entendí aquello del "Mal de amores"
Hasta ese día que me abandonó;
Padecí de su ausencia los rigores,
Pero al final la herida me sanó.