Mi pluma yace tirada en el pretil
No se mueve, está dormida
Y las letras por ahora tienen vida
Son aire, son punta de buril.
Mientras lo sueños se agolpan
Se abruman, ya no salen
Sentimientos me arropan
Y no valen, ya no valen
Porque mi pluma estéril
Yace tirada en el pretil
Y mis dedos, rígidos, duros
Parecen punta de buril.

Se asoman a la ventana de mis ojos
Historias que conmueven, son historias
O son cuentos, o relatos, letras sueltas
Vienen y van y dan más vueltas
Vuelan, giran, ruedan, ¿o son norias?
Son palomas vagabundas, y mi pluma
No puede garabatearlas, yace lerda
No está muerta solo duerme
Esperando que la tome entre mis dedos
Para hacer de las frases una suma
Que en mis versos me permitan reflejarme.

Así, no me animo y sigo lento
El tic tac indetenible que embrutece
Sabiendo que las letras no son cuentos
Si a tiempo organizarlas no apeteces
Más el limbo infernal de la apatía
Que mantiene a mi pluma en el pretil
No me deja, y mi musa en su agonía
Se siente cada día más senil