Desde el comienzo del alba
hasta la vorágine del día.
Desde el glorioso atardecer
hasta la magnitud de la noche
quiero nombrarte una vez más.
Hacer lo perenne definitivo
en el caleidoscopio del vivir
y sentir que es un sueño
que se prolonga inmenso.
Sólo para que acudas
cuando lo haga.
Para que entonces te quedes
cuando escuches el sonido.
Texto agregado el 27-08-2014, y leído por 165
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Lectores Opinan
27-08-2014
"Para que entonces te quedes
cuando escuches el sonido" Bello. Damayanti