Permanecí callado en medio del bosque,
Deseando que la sabiduría de aquellos viejos arboles
Llenaran mi espíritu.
Tal vez aquel arbusto de laurel
Encierre dentro de sí a la mismísima Dafne,
O quizá detrás de ese viejo roble
Se halle escondida una dríada.
Mágico bosque de mi infancia
Inmensos eucaliptos y plantas de retama
Vuelvan a mí como en otros tiempos
Y reconfórtenme con sus mágicos efluvios.
De pie en medio del bosque
Mi espíritu se va llenando
De la energía que emana por doquier
Y poco a poco de mis manos van surgiendo ramas
Y me convierto en un inmenso árbol
Que acoge a incontables jilgueros que cantan con dulzura
Y bajo su apacible sombra corre un arroyo cantarín,
Mis pies van siendo tapizados por incontables hojas de color sepia.
En silencio espero la noche
Mientras el sol se va ocultando entre mis ramas.
Texto agregado el 14-08-2014, y leído por 189
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Lectores Opinan
15-08-2014
Esto se llama elevación del espíritu y tú lo cristalizas en bellas letras. Te felicito, qué hermoso texto, Un abrazo. SOFIAMA
15-08-2014
Bello, muy bello, y ademas tiene la hermosa plenitud de tu niñez. girouette-
14-08-2014
Muy hermoso y tierno escrito y maravilloso paisaje. lapizqueescribe