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I

Antes de poneros a leer cualquier cosa debo advertir que yo no soy más que un pedacito, y que mi intención es hablaros sobre lo que algunos llaman “Nada” y sobre lo que otros llaman “Propósito” o “Utilidad”. Debo advertir igualmente que si escribo sobre todas estas cosas se debe únicamente a que soy “Útil” pero la utilidad no consiste en escribir ni en hablar ni en enseñar sobre estas cosas, la utilidad no es notable, la utilidad es cosa que no se nota… es más creíble decir que la utilidad no sirve para nada, más creíble incluso que decir que la utilidad es increíble. La utilidad es increíble, tan poco creíble como la ficción, sin embargo la utilidad no es ficticia.

Comencemos hablando sobre Energía.
¿En qué pensamos cuando hablamos de Energía? Pensamos en la palabra “Energía”, quizás además en cosas eléctricas, en la luz artificial, en el motor del carro o en la nevera. Yo pienso más bien en agua de lluvia y en tierra fértil y en una semilla. La semilla tiene energía para crecer y el agua y la tierra la tienen para permitirlo… entonces ¿la energía es inherente al ser que crece o proviene de fuera? Cuando, por ejemplo, imaginamos a una burbuja de aire subir desde las profundidades del mar, proveniente de la boca de algún monstruo misterioso, y la vemos subir y subir ¿tiene esa burbuja de aire energía? ¿Es su energía la que permite su movimiento hacia arriba? En realidad en este caso la energía del movimiento ascendente de la burbuja se debe a una diferencia de densidades, la burbuja no tiene que hacer nada para subir y el mar tampoco para que ella suba y sin embargo hay energía… la burbuja es rápida.
Al igual que una burbuja rodeada de mayor densidad nos hallamos nosotros, para colmo nuestro tiempo individual es muy corto dentro de esa densidad. “De la nada venimos y a la nada vamos” y esa nada es y siempre ha sido un misterio. Sin embargo, si venimos de la nada, ¿somos como una computadora nacida en una fábrica y nuestra personalidad un software que la educación nos introduce y es nuestra materia únicamente carga genética? ¿Yo me siento así? Nunca estuve de acuerdo. Pero si venimos de la nada sólo nos formamos aquí y la educación y las experiencias son como la tierra y el agua, y la carga genética el potencial de la semilla que somos, la fuerza interna ¿Somos eso solamente? Nunca estuve de acuerdo. Nunca he estado de acuerdo ni con que la educación forma ni con que mi desacuerdo se debe a la combinación genética de mis dos padres en mí… alguito de eso puede haber… pero ese producto, el producto de la combinación genética sumado al de la educación y a las experiencias, a ese producto juro que nunca le he parado ni media bola. Para colmo luego uno se entera que ese producto tiene un nombre en filosofía: el ser óntico // el cual se distingue del ser ontológico.
Ahora bien, si de la nada venimos y a la nada vamos ¿Qué carrizo es el ser ontológico? Ya vimos que el ser óntico es un robot de mierda, una “Máquina Blanda” tal y como lo llamó William Burroughs; un ser programable, hipnotizable, un soldado de basura y un deshecho, una programación, una computadora sin imaginación ni propiedad. Pero entonces ¿Qué carrizos es el ser ontológico?
Esta pregunta solo puede ser respondida si nos preguntamos “¿Qué es la Nada?”
¿Nada? Noooo !
El único problema es que pensar así sólo lleva a nada. Pensar solo lleva a nada. Pensar sólo nos mantiene en un mismo sitio. Pensar solamente nos fija en un mismo sitio en el cual toda reflexión no pasa de ser algo similar a las vueltas que da un perro antes de acostarse. Vueltas y vueltas que llevan siempre a un mismo sitio, en el cual caemos extenuados, rendidos: ¡Nada!
Uffffff ¿Y sabes Qué? Que si desesperados de tantas vueltas extenuantes vamos a una biblioteca buscando alguna lumbrera, cruzando los dedos para hallar alguna luz en algún libro, el testimonio de alguien que haya resuelto el Enigma… quizás creamos que podremos conseguir algo… a lo sumo nos volveremos intelectuales que podremos describir distintos estilos de dar vueltas y más vueltas… interesados en distracciones, en entretenimientos; capaces, si llegamos a tener ese Don, de ser considerados interesantes entreteniendo en la distracción.
Pensar no es tampoco el problema.
Pensar sólo nos mantiene fijos… es el mecanismo mediante el cual nos mantenemos fijos, fijados… es un esfuerzo por mantenernos en donde solemos estar acostumbrados a estar (en donde decimos que “somos”). Es como un freno sobre una rueda que hace el intento de rodar… el freno toma de la energía de la rueda que quiere rodar y con esa energía crea nuestro modo de ser, nuestra personalidad… de noche el freno suelta la presión que hacemos que ejerza sobre la rueda que quiere rodar y la rueda entonces rueda, ahí, de noche, acostados en la cama, sin esa presión que nuestro pensamiento ejerce sobre la rueda… y entonces, sin la ayuda de nuestro pensamiento la rueda rueda. Y al día siguiente no recordamos un coño de madre.
¿Qué pasó?

Que la rueda que rueda no es tu modo de ser… y no sabes que la rueda que rueda es tu verdadero y ontológico modo de ser. Lo que Tú crees que es tu modo de ser es el freno sobre la rueda tomando la energía de su querer rodar y haciéndote tu personalidad para ti, para que estés contento, satisfecho en un mundito de mierda que con tus juicios haces de un tamaño apto para ti. Y ahí estás Tú, en el mundo, forzando a todos a caber en él, buscando admiración y reputación y respeto… y a la nada vas así, como un pobre güevón… Como un pobre güevón que jamás sirvió para nada !!
… Porque las sombras a la Sombra van.
(Fin de la Parte I, viene próximamente la Parte II)
II
Ahora bien ¿Qué coño pasa si aprendemos a soltar el freno? ¿Es fácil? ¡No! Soltar el freno es ir hacia lo desconocido. Es soltar el mundo y es soltar la personalidad. Es casi imposible – esto lo afirmo yo desde mi perspectiva y desde mi experiencia, otras personas lo harán facilito, a mí me cuesta sin embargo un poco, pero lo consigo – es casi imposible, repito, soltar el freno por completo. Porque tú no sabes lo que es, una vez que se suelta el freno, no desear responder a la pregunta “¿Quién, Dónde?” Ese “Quién” que surge cuando se suelta el freno no es ese Yo al que uno está acostumbrado, ya que tiene otros Usos. Ese “Dónde” que surge cuando se suelta el freno (recuérdese que el freno es el acto constante de Pensar, el cual ejerce una presión sobre la rueda que quiere rodar), no es el mundo conocido que dejamos momentos atrás, pasa a ser algo muy distinto, no solo se siente distinto, sino que también se lo ve distinto, pasa a ser otra cosa. Y no solo eso, el “mundo” que surge cuando se deja a la rueda rodar puede estar habitado. Y definitivamente tiene otra densidad. Cuando se suelta la rueda y se siente un cambio de densidad igualmente nosotros cambiamos de densidad… ese “uno mismo” con otra densidad es ese “¿Quién?” que no es fácil de responder y el “¿Dónde?” menos aún… sin embargo siempre hay una sensación de total familiaridad. Familiaridad que confunde al ser óntico y que el ser ontológico extraña y anhela. El ser ontológico puede con esos cambios cómodamente. Es la mente que se siente cómoda en los cambios, que conoce lo desconocido.
Lo desconocido está por tanto fuera y es más denso que todo aquello que el ser óntico conoce, más denso que todo aquello que el ser óntico se esfuerza constantemente en reducir. Pero volvamos a soltar el freno:

Si se suelta el freno, ¿lo que surge es un otro mundo? Hummm ¡Sí! ¿Es un otro mundo único? No. En realidad los mundos que surgen dependen de hacia dónde va la rueda cuando se suelta el freno. Uno puede volver a detener la rueda mediante pensamiento en otro mundo, quedarse allí un tiempo, estudiar sus propiedades, y desde allí puede volver a soltar el freno y pasar a otro mundo más distinto aún, y volver a ejercer el freno y quedarse allí un buen tiempo. En tales experiencias siempre hay algo que sirve de puente para cruzar a otra parte, a otro lugar, suele haber incluso seres que nos acompañan, seres que al transformarse nos lleva a otras densidades y a cuyo alrededor se forman otros mundos. Todos esos mundos se ligan, están vinculados entre sí (Entraré en más detalles en la parte III).

Lo interesante es lo siguiente: volvamos a la burbuja expelida por la boca de un monstruo bajo el mar, burbuja que va subiendo y subiendo a alta velocidad y parémosla, detengámosla: La burbuja que tiene poca densidad está rodeada de mucha densidad. Así somos nosotros sin que nos demos cuenta. Pasemos a nosotros: digamos que la densidad del mar es 100 y que nosotros estamos acostumbrados a estar cómodos en 10. Nuestro mundo, Todo nuestro mundo normal, perceptual, que nos cabe en poder ser es un 10 que tomamos de 100, otro mundo es otro 10 de 100, un tercer mundo es otro 10 de 100, y así tomamos pedazos y construimos mundos a partir de una densidad que nos sería insoportable resistir. Digamos que la práctica te puede llevar a tomar 20 de 100 o 30 de 100, quizás hasta otro 30 de 100. Pero el movimiento de la burbuja, cuando se suelta por completo el freno, consiste en ir hasta 100; su impulso, cuando se suelta el freno es ir hasta 100 y eso es lo que ocurre al morir. Morir es soltar el freno y no poder parar el rodar de la rueda.
100 es más denso que 10 y no es Nada, ni tampoco poca cosa… y esa Nada está siempre ahí.

(Continúa en la Parte III)

III

Ahora bien, volvamos a la pregunta “¿Qué es Energía?”, “¿Qué es La Energía?” La Energía es lo que hace que ocurran las cosas. Así de simple.

La Energía no es de aquí… “aquí” es una fracción que percibimos (Ojo: no es lo mismo que decir que es una fracción de lo que percibimos, la fracción que percibimos nos viene con sensación de totalidad). Y La Energía que hace que ocurran las cosas aquí no es de aquí. Así de simple.
En otras palabras: No podemos - en realidad no solemos - percibir la fuente de energía que hace que ocurran las cosas aquí. Así de simple.
En realidad, en este plano, los seres tienden a buscar energía unos de otros y no tienen todavía la capacidad de generar reciprocidad, feedback, no saben aún producir más, lo normal es que uno tome del otro, lo deje agotado, se aburra y después de un tiempo busque a otro más de quien tomar energía. A ese ritmo ya no habría quedado nada aquí. Y sin embargo la vida continúa y las cosas no son tan malas como habrían seguramente de ser caso de que La Energía sea de aquí. La Energía no es de aquí y hay “mundos” en donde eso se ve. Se ve seres de Energía dando energía para aquí, sin perder un ápice por lo que dan.
El mundo de todos los días se ve como lo siguiente: Hay gérmenes (en el sentido de raíz, de germen, de algo que germina) de energía encerrados en cápsulas, son exactamente como semillas con su cáscara. Eso es lo que vemos normalmente en las otras personas: sus cáscaras, sus cápsulas. Pero cuando alguien “nos hace sentir algo” se debe al germen encapsulado. Eso “que nos hace sentir” no se ve… es “subjetivo”, pero está ahí, bajo la cáscara, en alguna parte entre toda esa maraña de huesos y carne y sangre y órganos… en alguna parte… No la verás nunca, pero está ahí. Y eso que está ahí es un germen, encerrado en una cáscara. Bueno, cuando se suelta el freno es posible hallar un lugar en el cual se ve el germen humano. Es posible hacerlo y se ve el germen humano. Y el germen humano necesita energía, la Energía es su alimento, y crece mediante energía. Por esta razón la verdadera causa de todos los conflictos humanos, de parejas, de todo, de la ambición de poder, es Energía, búsqueda de energía… Nuestro verdadero mal no es más que mala educación: todavía estamos en una etapa en la cual consideramos más gustosa la energía que obtenemos si la obtenernos a costa de quien la obtenemos.
Ahora bien, repito que es posible ver el germen humano en las personas, es decir, es posible ver a una persona, soltar el freno y ver su germen; y cada experiencia es distinta, pero hay algo en común: son seres similares pero en diferentes grados de necesidad. Y se ve también algo inaudito: hay humanos en la necesidad de obtener, de recibir y otros, pocos, en la necesidad de dar, y esto no es un asunto de género ni de sexualidad, pero se manifiesta también en la sexualidad, en todo comportamiento; pero hay que decir que primeramente es algo que se puede ver con los ojos cuando se suelta un poquito el freno sobre la rueda que quiere rodar. Hay variantes de seres en distintas edades, y eso es la humanidad en general. Al igual que todo germen hay una etapa en la que necesita y a partir de un punto puede solo y a partir de un punto necesita dar, jugar, ensayar, con las manifestaciones de su ser, conociéndose ensayando sus distintos modos de nutrir.
Ahora bien, acostumbrándonos a percibir el germen viene la agradabilisisísima sorpresa – ya soltando el freno más – de que nos demos cuenta de que hay mundos de germen sin semilla. De que pasemos a mundos de germenes sin semillas… ya no son gérmenes ni semillas, son plantitas. Y las plantitas son bien bonitas. Y una plantita te puede mostrar todo un mundo de plantas (ya no de semillas y de gérmenes) y esa es una experiencia coñodemadremente fuerte. Ahora bien, lo curioso es que esas plantas son aquí las fuerzas de la naturaleza. Es decir: puedes estar en la naturaleza y capatas una fuerza de la naturaleza, soltando el freno surge una luz oscura, violácea a tu alrededor y de pronto llega un viento, se posa en un sitio y allí ves a una especie de ser humano, el cual te muestra su mundo a su alrededor (te puede llevar a ver otras plantas) pero también te muestra quien es aquí, en el plano de los gérmenes con cáscara, y puede ser cualquier fuerza de la naturaleza, la fuerza que hace caer las hojas de los árboles, la fuerza que hace abrirse a las flores, la que crea su perfume o la fuerza de los dientes sobre un cuello… y sin embargo esas fuerzas son inherentes a la misma naturaleza, pero el paso a otro plano no es realmente a brusco sino una transformación. Cuando se te presentan las fuerzas “impersonales” de este mundo con un aspecto de otro mundo bajo una forma mediante la cual puedes intercambiar energía con ellos e intercambias energía con ellos estás siendo Útil. Si pasas a ese o esos otros planos, si tienes la fuerza para hacerlo – y ellos te enseñarán si gustan de ti – y allí das y aprendes a “dialogar” (“dialogar” es puro intercambio energético con sentido, se pregunta con negro, se responde con blanco, negro y blanco son tipos de energía… es posible dialogar, es decir, realizar fructíferos intercambios) ese diálogo redunda en el plano de los gérmenes, nutre a lo que ocurre aquí, y eso es ser Útil.
¿Cuál es el sentido de ser útil? Bueno, esas plantas están muy interesadas en las semillas y quieren que el huerto perdure por un poco más pero ahora en una época de necesarios cambios bruscos. Y para uno – egoísticamente hablando - uno simplemente adquiere resistencia en estados de existencia increíbles – pero esto es un decir desde el olvido.
Ahora bien, los gérmenes cuando comienzan a moverse, a patear como fetos o embriones, a veces la mente, el ser óntico no puede con lo que pasa, tarde o temprano el ser óntico cae como una cáscara. No a todos les sucede en una vida, pero habrá tiempo para que a todos les suceda. Ir al plano en donde habitan fuentes de la energía que hace que las cosas aquí sucedan tiene, entre otras cosas, como objetivo, crear las condiciones para que aquí la ruta continúe con curvas cada vez más fuertes y peligrosas, pero menos mortales. El camino va solo, es lógico, nadie lo crea, pero se necesita – y aquí siempre se ha necesitado – la energía extra, de afuera, para que se prosiga sin que todo se vaya por el barranco; las curvas hacen que el sartén se caliente y plop, surgen las palomitas de maíz.

Listo, se podría decir más, pero no hay más que decir.
Oh, sí: sin embargo existe una filosofía que dice que cuando el maíz hace plop ya no tiene nada que hacer aquí. Yo digo que no, eso es opcional y hay palomitas que no están aquí que están comenzando a venir porque vienen curvas fuertes y la naturaleza de gérmen (que se manifiesta en simiosidad y vampirismo) de las semillas, aquí, por sí sola arrojaría todo el huerto a un barranco… y eso no se va a permitir. Lo que digo es que aparecerá gente que subrepticiamente poseerá energía inagotable… y andarán rueda libre.
… y ya hay unos cuantos, pero vienen más (y estarán colocados en los ángulos más cerrados de las curvas más difíciles).
(Quizás haya una Parte IV, a ver si puedo…)

IV
Sobre lo más difícil sobre lo que se puede hablar es sobre la Nada, precisamente porque la Nada está sobre Todo. Lo extraño del caso es que Todo es el conjunto en acción de todas las cosas.
El conjunto en acción de todas las cosas es Todo, y la Nada está sobre Todo.

Cualquier cosa que se halle en el Todo (Y Nada está fuera del Todo) se halla sujeta a esa acción de todas las cosas que conforman el Todo. Es un intercambio, es un ir y venir, matar y morir no dejándose matar o dejándose matar, todo dependiendo de la peculiaridad esencial de su cualquier cosa, de lo que necesite en el momento; es al mismo tiempo un traspaso, un cambio de cuerpos, un cambio de estados, una mezcla de completación en algo y de intensidad. Poco a poco – y tiempo y espacio hay para ello – se pasa por todos los estados, se metamorfosea en cualquier otra cosa. En una vida se es humano y se está en el Algo humano, en otra vida la condición óntica como humano es completamente distinta. A veces se vive inhalando y otras veces exhalando, en unas ganando a costa de otros en otras siendo constantemente quitado… y todo eso es como un ir aprendiendo a respirar… uno se va haciendo, poco a poco, en el Algo humano. Pero aquí en La Tierra hay otros Algos, seres que saben trabajar con las alas instintivamente; seres con cuerpos súper sensibles que se arrastran a falta de patas sintiendo placer y durmiendo en cunas de cientos, puro roce sin pudores, otros que cazan y otros que huyen. Está también el Algo de la lentitud de los árboles, tan pero tan lento que ni lo puedes recordar. Está también la fábrica de químicos de los insectos, Tan complejo y sofisticado que el Algo humano es un algo bruto si los comparamos y esa sofisticación no cabe en la forma de ser del Algo humano. Sí, está bien, jugamos con productos químicos pero no somos capaces de producirlos en nuestros cuerpos con la sofisticación de los insectos… en realidad hasta somos patéticos a la hora de querer inyectar todo nuestro veneno sobre otros. Así que ¡Vamos! No me vengan a decir que el Algo humano es superior a otros Algos que existen en La Tierra. ¡No sabes lo que es dormitar en cunas de miles como los gusanos teniendo piel súper sensible! ¡No sabes lo que es inyectar tu veneno sin torpezas, como debe ser!! ¡No sabes lo que es arrojarte desde un barranco y practicar al último instante un desliz logrando que las plumas de tu pecho apenas rocen las púas de un rosal! ¡No sabes lo que se siente quebrar un cuello de un solo certero mordizco y sentir la vida de la presa pasando a tu cérviz a través de los dientes! Simplemente no lo sabes… porque no cabe en el Algo humano – mientras lo trascurres – recordar.
Y, en caso de ser muy pero muy viejo y transitado, ya has pasado por mucho, por muchos Algos, recuerda que sobre ti quizás puedas reencarnar en ser planeta – espacio y tiempo hay para ello – Y permíteme decirte que el Algo planetario igualmente es bastante complejo. Y después seguramente estrella y después más y más y más… siempre hacia más fuerza, energía y complejidad. Y después un buen día habrás pasado por todas las cosas que hay en acción (y acción es lo que permite los traspasos) en el Todo ¿Y después qué? Permíteme decirte que ya no te necesitamos y puf, te desintegrarás…, desaparecerás del todo del Todo.
Cuando miras a la Nada lo que se ve son puntitos blancos y negros. Los puntitos blancos son como las cosas que se ven en el Todo (estrellas, galaxias, cuerpos, todas de poca duración) y las cosas que se ven en el Todo buscan obtener su propia experiencia y luego dejar rodar la rueda y alcanzar la serenidad del negro. Los puntitos negros son una fuerza que transitada permiten el cruce hacia otras orillas, hacia otras condiciones, hacia otras experiencias dentro del Todo, hacia distintas vivencias dentro de los Algos del Universo. El negro es serenidad y es potencialidad, energía potencial, el blanco es vivencia y experiencia sujeta a la muerte. El negro se alimenta de los aportes individuales dejados en la muerte por la experiencia del blanco. El negro crea blanco con el fin de enriquecerse… el blanco titila y muere devolviendo novedad al negro. Y eso es Todo. Pero cuando miras hacia la Nada descubres que hay seres que muestran su cara, sus pieles están constituidas de la misma constitución del Todo y están fuera del Todo. Pueden aparecer en el Todo bajo la forma de cualquier cosa y no sufren evolución, y pueden desaparecer por completo del Todo. Sus seres están compuestos del mecanismo del Todo, habiéndose éste ya superado, alcanzado su meta… y obtenido la capacidad de replicarse, de reproducirse, desde el huevo.
Y, si hoy estás sujeto a hallarte dentro de los límites de la forma de ser de un Algo y eres incapaz de recordar nada más, se debe simplemente a que el Universo están aún en proceso de hacerse, de romper el cascarón y de respirar hecho un Todo hecho de verdad dentro de los límites de la Nada… y si aún dudas de un objetivo para tu existencia comienza botándolo todo mientras te das cuenta que el objetivo de tu existencia no es para ti, Tú, ser in-mundus, sujeto a la caprichosa forma de ser de un Algo, de un Algo aún no cumplido en un planeta que ni siquiera ha muerto todavía ni aportado su Gracia ni su Desgracia a la negritud serena.

Mientras exista la vida hay algo que a la muerte aún le falta por cumplir.
V

Ahora se nos hace necesario hablar sobre El Monstruo Misterioso Que Habita En El Fondo Del Mar Y Que Suelta Burbujas. Digo que El Monstruo Misterioso Que Habita En El Fondo Del Mar Y Que Suelta Burbujas tiene ojos completamente negros y malignos y, si alguien me pregunta “¿Por qué El Monstruo Misterioso Que Habita En El Fondo Del Mar Y Que Suelta Burbujas tiene ojos completamente negros y malignos?” la explicación es realmente sencilla… pero no te la vas a creer:
Tiene ojos negros porque sus ojos son energía negra, de la misma constitución que el vacío interestelar del cual la luz brota; son de ese negro, de esa quietud de la cual la vida emanó como una explosión desde el otro lado. Son del mismo negro que el de los ríos negros que separan las orillas, del mismo negro que los baches de la muerte, son del negro del sueño sin retorno, el negro del olvido… el negro de los puentes ilusorios. Son malignos porque el mal asusta, y con cada susto una cosita se desprende de ti, una vida chiquitica que escapa de tu pecho y que cae en el olvido dentro de esos ojos completamente negros.
Puede ser que la cosa te guste o no, pero la verdad es que su mirada negra asusta, porque antes de aparecerse te tiene scaneado por completo y te conoce completico y quiere arrancar algo de ti. No es que sea ni malo ni bueno arrancar algo de alguien mediante un susto de muy veloz muerte, pero ¿entenderías acaso lo que quiere de ti?, no perderá su tiempo en preguntarte, lo toma y luego se va… y tú te sientes a salvo de no haber sido condenado, y después de media hora se te pasa el temblor hasta que desde bajo el fondo del mar, en el centro de la tierra, sientes que algo tiembla… y es que puso esa vida chiquitica arrancada de tu pecho allí.
Qué porqué hace esas cosas El Monstruo Misterioso Que Habita En El Fondo Del Mar Y Que Suelta Burbujas? ¿Lo entenderías acaso? No, seguramente no… y después de semanas posteriores al susto todo lo olvidas, como se olvida un mal sueño, una cosa que creíste que te sucedió, una de esas noches que tiene explicación y de la que luego te ríes pensando avergonzado en lo tonto que has sido, en lo niño que aún eres, en tus instantes de ingenuidad… Pero ignoras que esa fuerza que ha sido tomada de ti de la cual ignoras desde su existencia hasta su uso, tiene un uso que seres que no ves fuera de todo susto saben usar… y conocen la maceta apropiada en donde colocarla, a la espera, en una espera que irremediablemente te sobrepasará a ti en el tiempo… pequeña cosa de ti mismo, incomprensible por ahora tú para ti.

VI

Recuerdo la primera vez que en sueños me enfrenté a un brujo, tendría yo 16 años, algo así. Y ahora recuerdo que no recordé el sueño al despertar, pero el sueño siempre quedó en mí, en esa biblioteca de todos los sueños que uno ha tenido. Recuerdo que en el sueño un individuo hacia el cual yo sentí confianza y entera comodidad me mostró una cruz invertida y que en el sueño – que no es la mente usual – yo le respondí “Sí el mundo está así”… para mí esa cruz invertida no representaba ningún símbolo ni religioso ni antirreligioso, era más bien como esos medidores de aceite y el asta horizontal de la cruz tan baja significaba para mí que el mundo se hallaba para mí en un estado de insuficiencia energética. El señor, “brujo” , y yo nos entendimos perfectamente sin necesidad de darnos ninguna explicación. A continuación el señor, “brujo” (pero de verdad que era brujo) colocó la cruz en posición no invertida y ató lentamente a un murciélago sobre esa cruz, lo ató patas arriba, con la cabeza hacia abajo. Y yo me acerqué preocupado únicamente de que no le estaba haciendo daño al murciélago, el brujo me miró en el sueño y dijo “No le estoy haciendo ningún daño”. Esa imagen de verdad que no la entendía yo durante el sueño ¿Un murciélago atado patas arriba sobre una cruz? Sentí que era una trampa para asustar a tontos y miré al brujo como diciéndole “Estás perdiendo tu tiempo si crees que esas cosas me sorprenden” pero no podía irme de ahí, la conexión con el señor era buena, era de confianza total y era fuerte. El señor, el brujo pues, acercó esa cruz con el murciélago atado cabeza abajo a mi rostro, yo la tenía a unos 20 centímetros de mí nariz y a continuación la invirtió lentamente… la cruz volvió a ser la imagen de un estado de insuficiencia energética reinante en el mundo y el murciélago de pronto pasó a ser para mí una imagen que representaba a algún ser que absorbía la energía del mundo. Ahí sí que abrí los ojos y le dije al brujo “Sí, pero no es malo ¿Verdad?” y el brujo me respondió “No, no es malo” y el brujo a continuación se rió y me dijo “Yo lo llamo Bob”.
Como dije anteriormente, al despertar no recordé el sueño, pero quedó como libro inquieto en la biblioteca de los sueños por mí tenido… y temidos. También como dije, la mente en sueños no funciona igual que la mente que al despertar ve televisión o sigue una rutina o a la que lo importante es la última noticia.
No habría podido siquiera imaginar que algún día yo llegaría a conocer a Bob, que Bob se convertiría en mi vida adulta en una mascota similar a la guardada bajo las escaleras en la mansión de los Monsters. Que para ver a Bob y alimentarlo yo debería vestirme varias veces a la semana de luz negra y darle a beber de mis costillas… que ese monstruo me esperaría al final de un pasillo largo y oscuro de piso de baldosas negras y techo de madera con telarañas vivas con una suerte de ronroneo mezcla de agonía placentera, gemido y rugido y una mirada negra absolutamente maligna. Yo me siento en la silla que cruje sobre el piso que resuena y miro hacia al techo figurándome que los huevos de arañas son estrellas-caramelos hasta que vibro enteramente como si yo fuese el principito rodeado de estrellas y de caramelos. Toda esa energía me rodea y en mí la adentro hasta que de pronto sale como un chorro desde mi plexo solar y Bob abre su bocota… y cada vez que lo hago me consuelo pensando que es una guerra menos. Pienso una y otra vez en el brujo que en un sueño me vendió a Bob y me miro los zapatos.
VII

Al morir se nos suelta la rueda y no podemos frenarla; es ser tragado por toda la densidad de alrededor sin ser capaces de detener el procedimiento ¿Se fue?, ¿se fue quien murió? Dudo que se tenga la fuerza como para sobrevivir íntegro a una experiencia tan avasallante; y de todas formas no se puede hablar de integridad cuando en vida no supimos integrarnos. Vivos formamos una imagen de nosotros mismos, la consideramos y defendemos como “mi forma de ser”, “mi personalidad” y toda nuestra energía se nos va en defenderla y en tratar de obtener aquello que nos falta… y aquello que no falta siempre continuará faltando y por más que tratemos de llenarnos se nos va por el agujero y siempre descubrimos que hay algo más que nos falta… o nos aburrimos y nos damos por muertos (y nos dan por muertos) si nada nos falta. Ojo: pero siempre hay esperanza: Siempre puede haber algo más que nos puede faltar. De un coñazo la muerte se nos viene encima ¿y crees que así vas a poder resistirla? “Ay, se fue!” No, no se fue… lo que tú conociste de esa persona créeme que desapareció por completo. No servía para nada. Lo que tú y esa persona no conocían de sí mismo, esa otra cosa fuera de la necesidad y de la personalidad formada en la necesidad constante e imperante, esa fuerza latente que nunca tuvo ni quiso tener la oportunidad de alcanzar a ser es otro asunto, absolutamente desconocido.
Cuando se suelta el freno, es decir, cuando ocurre un cambio en la vibración debido a que detenemos el pensar constante y se comienza a pasar a otra frecuencia uno los puede ver y reconocer al ser del cual se produjo una persona (un mal intento), esa cosa latente que jamás alcanzó aquí posibilidad de ser existe como sombra y como ser que se nutre con energía, una sola vida, un solo intento aquí de sí mismo aquí, le resulta tan gustoso como una galletica y le enriquece solo un poco. Cuando se suelta el freno se ven y son seres capaces de tener mucha, pero mucha energía y buscan constantemente la transformación, primeramente quieren e intentan pasar por todas las formas humanas posibles, luego, aún dentro del Algo humano, del Molde humano, juegan con todas las posibles manifestaciones y transformaciones de energía humana, se hacen de blanco, de negro, irradian distintos colores y saben irradiar gamas inmensas de distintos estados anímicos. Lo que un humano vivo aprende mediante vivencia, sufrimiento o experiencia casi siempre forzosa, ellos lo logran mediante intención, si se hallan frente a una buena fuente de energía que les permita realizar tales cambios. Luego pasan al terantropismo (fusión con propiedades animales) y se transforman en nuevos seres, similar en propiedad a la gama humana pero más intensa, más versátil, más rica, poco a poco arraigándose más y ampliándose más en lo que son las propiedades habidas y generadas por La Tierra. Digamos que esa semilla humana, la cual a veces nace aquí con el fin de que la experiencia de una vida le alimente por la boca, lo que busca es copar las posibilidades del Molde humano y luego expandirse hacia otros moldes sumando en sí todas las distintas propiedades… cada vez se vuelve más Tierra.
¿Qué es la fuente que en ese plano permite que esos seres puedan ensayar cambios de formas con el fin de irse completando? Vamos, lo que cada vez se amplía y enriquece está avanzando hacia una dirección, hacia la ampliación de su existencia, hacia más, hacia su crecimiento hasta completarse enteramente en Tierra. Las fuentes vienen de la dirección opuesta. No “suben”, bajan; no “trascienden”, traen. Para ellos esa carga que se halla ensayando dentro del molde humano en ese plano es cosa digna de ayuda, y energéticamente les ayudan, les ayudan sobre todo a ir enriqueciéndose con las propiedades de otros moldes. Esas fuentes, por alguna razón, poseen en sí cada una, toda la carga de lo que es Tierra y saben dar de esa energía a los seres que se están formando aquí. Esto no tiene nada que ver con el plano humano de esta existencia orgánica, este, el nuestro de aquí, es un plano más abajo, es simplemente tratar de ser algo con el fin de alimentar a otro algo después de muertos con lo que fue la experiencia de nuestra vida… a esa parte latente en nosotros que jamás logramos llevarla a ser… y que se halla completa o al menos viva habitando otro plano siempre buscando crecer, sobrepasar al molde humano y luego al molde Tierra.
Muy de vez en cuando puede suceder que haya algún humano que logre traer un poquito de esa fuerza latente despierta viva aquí, pero cada vez es menos pero hubo épocas en la cuales las condiciones de energía de la Tierra eran distintas y lo hacíamos facilito y todos solíamos desaparecer, pasar completicos sin necesidad de morir. Pero ahora, un solo ser de esos tendría tanta energía que podría hacer con su sola voluntad lo que quisiera con el clima, sería un humano energéticamente del tamaño de un edificio o más grande aún, simplemente no cabría aquí… lo que sí puede haber, y habrán más, es humanos que administren esa su energía de allá aquí y siempre solamente lo necesario, lo requerido (lo cual es mucho)… pero más que mucho puede llegar a ser peligroso… y si lo intentas te las tendrás que ver con el Dragón. Pero es bueno que lo intentes. No le temas al Dragón (a lo sobrante peligroso se lo devora y sabe dónde escupirlo).
Menos peligroso es pasar hasta allá. Yendo y viniendo consigues la ropa adecuada y el color adecuado… simplemente saltas a ese tiempo “Antes” (antes de que las cosas ocurran como consecuencia aquí) y te comportas allí como los de allá (tu más entera libertad), aprendes allá para traer aquí, para hacer también aquí… y para que muy, muy, muy lentamente podamos pasar, pero solo lo necesario… para que al fin las experiencias de aquí alimenten mejor a los de allá (de eso se trata todo) ¿Venirse completo de allá para aquí? Uffff pero tendría que hacerse pero con muchísimo cuidado en tal caso siempre en ti estará cruzando por todo el medio uno de los ríos negros que separan las orillas, por más que vengas con toda tu consciencia no así será con toda tu energía… serás alguien que sepa morir estando viva cada vez que desees cruzar.

VIII
Las fuentes se presentan de la manera que más a ti te convengan.
Ese convenir no es un deseo necesariamente consciente, obedece más bien a una lógica, a una necesidad, me explico: imagina que una semillita sepa ue será un árbol, quizás tenga el deseo de convertirse en una secoya, en el árbol más grande de todos, pero quizás esa semillita sea es de una planta de maíz. Las fuentes se presentan de la manera que más le convenga a la planta de maíz. Pero ocurre algo insólito, a veces las fuentes se presentan como monstruos. Si a una semilla de maíz se le presenta una fuente con la forma de una planta de maíz linda, bella, grande, llena de mazorcas, la semilla de maíz sentirá que se trata de Dios. Pero, si a una semilla de maíz se le presenta una planta que sea una quimera, una mezcla en la realidad inexistente de todas las plantas, entonces estamos hablando de un monstruo, de un susto gigantesco para la semilla de maíz, de algo que lo sobrepasa y que definitivamente sobrepasa toda idea de Dios. Cuando la fuente se presenta con la forma del molde exacto en el que está inserta la semilla, es decir, con la forma de la entelequia de la semilla (“entelequia” es el máximo grado al que puede acceder la potencia de un ser) estamos hablando de una cosa, pero cuando se presenta con la forma de un molde del cual el molde al que uno pertenece es solo un pequeño aspecto estamos es hablando de una cosa monstruosa.
Las fuentes sobrepasan y sin embargo ayudan una barbaridad, y de la manera que más les gusta: asustando.
Fue Wittgenstein (un filósofo) quien dio una clave maravillosa para describir la relación con las fuentes y su comportamiento, en realidad una clave maravillosa para describir toda esta serie de increíbles fenómenos. Wittgenstein propuso un sencillísimo axioma: “La relación entre A y B no define a A ni a B, sino únicamente a la relación entre A y B”, la forma en la que las fuentes se presentan no definen a las fuentes. La forma de A en una relación entre A y B puede ser una forma completamente distinta a la forma de A en una relación entre A y C - (¡cuántos celos por esas vainas!) – Las fuentes se presentan según tú. Ahora bien, aquí ya entramos en profundidades:

Tú como individuo te miras todos los días en el espejo, te cuidas el cabello, la ropa, etc., es decir, te relames el cascarón; el cascarón de la semilla que contiene al germen lo cual es en realidad lo único que de ti nos interesa. Estás acostumbrado a que tienes una forma y a que todo lo que ves tiene una forma, los conejos son bonitos y las cucarachas son güácatela. Pero si pudieras ver con los ojos, quitándole el freno a la rueda momentáneamente con el fin de modificar la frecuencia de tu vibración y por tanto el cómo las cosas se te presentan y pudieras ver las formas de los estados anímicos y de las necesidades energéticas verías cosas muy distintas y te adueñarías de otra forma de lógica. Tú tienes una forma o eso creas y crees demasiado en lo que creas. Pero las fuentes no tienen forma, debido a que son seres provenientes de a donde tú irás al final de tu evolución, las fuentes no poseen forma porque no poseen necesidad, pero primeramente son un ser, luego son capaces de emitir energía si se lo proponen (poseen la facultad de desaparecer por completo porque pueden llevar a cero su energía, cosa que ningún ser en evolución es capaz de hacer) luego son capaces de obtener una forma según cómo desean hacer vibrar esa energía. Pero cuando se presentan te tienen muy en cuenta a ti y a tus límites y nunca se presentarán de manera que te puedan hacer daño más sí impactar. Dependiendo de ti se te presentarán como Dios o como Monstruo, dependiendo de lo que tú puedas asimilar. Al no tener formas la forma con la que se presentan depende de tu necesidad y capacidad de asimilación.
Cualquier ser en evolución necesita de energía y, como dije anteriormente aún no estamos en una etapa en la que nos demos cuenta que la reciprocidad produce más que el vampirismo energético. Preferimos quitar que recibir, además que quitando nos ahorramos las “Gracias”, y quitando nos procuramos mayor placer.
Si las relaciones entre las semillas en este plano germinal las dejásemos así, sin intervención de ninguna especie, ya hace tiempo que este conuco se habría acabado… el último de los asesinos, el victorioso, habría muerto de hambre y soledad.
No necesariamente sabes y recuerdas cuántas veces te has encontrado ante los efectos de una fuente, el que recuerdes o no es enteramente trivial, su efecto afecta no precisamente las áreas de tu consciencia, sino la raíz de tus pulsiones. En un sueño que olvidaste llenaron una zona en ti que en caso de no haberlo hecho te habría hecho un asesino, un ser de sed loca e insaciable y también te dieron tu susto para que te quedases quieto… o incentivaron tu curiosidad y deseo de satisfacción hacia otras perspectivas.
Como dije en el escrito anterior, normalmente no se presentan en este plano sino mucho más directamente en el plano que está en un grado más arriba o de mayor concentración de intensidad, aquel del cual aquí tú solamente sirves de alimento de experiencias y del que quizás alguna vez, una vez tomado bastante alimento poniéndote a encarnar una y otra vez aquí (precisamente para obtener más alimento) puedas pasar hasta aquí quizás un poco más cómodamente, menos “arrojado”, un poquito más consciente. Bueno, lo que decía: las fuentes cuando se presentan aquí, así sea mediante sueños aquí o en los instantes de susto profundo que prontísimamente tu mente trata de borrar te tienen enteramente scaneado y saben qué eres tú en ese plano inmediato superior, si estás en un punto de intensa transformación en ese plano te ayudan aquí para que no trates de llevarte la mayor cantidad de energía de aquí a lo loco, a lo desesperado, para que no te conviertas en esa clase de individuos que considera a los otros seres humanos como pilas de energía que se puede obtener a costa de sus cuerpos y vidas. Esos son los casos extremos en los cuales las fuentes se presentan aquí: para evitar o el asesinato, por un lado; el aburrimiento extremo, por el otro.
Los casos de aburrimiento extremo resultan sumamente interesantes, no se trata de seres del otro plano (que hayan nacido aquí) que precisan de mucha energía para completar transformaciones, sino de seres acostumbrados a intensos intercambios de energía y, que al nacer aquí, de pronto les resulta que “Non credo en el amore non disfruto tuti gente di corpo diminuto” y se dan cuenta que las intensidades que para ellos son normales en todo tipo de interacción en realidad resultan escandalosamente aberrantes para la mayoría de los habitantes de este plano, las fuentes igualmente se aparecen ante estos individuos, y permiten satisfacer la necesidad de esas intensidades mediante intercambio y usan toda esa cantidad de energía apabullante, bueno, para cosas realmente bellas. A todos los individuos que de alguna manera han llegado a un punto en el que no es mucha la diferencia entre su cuerpo-consciencia aquí y su cuerpo-consciencia de ese otro plano los acompañan siempre una o dos de tales fuentes y éstas los dirigen para hacerles llevar su intensidad energética hacia propósitos más provechosos.
Ahora bien, las fuentes no son pertenecientes a ese plano inmediato superior o más intenso del cual nuestras vidas aquí no sirven más que de alimento en el momento de morir nosotros aquí, las fuentes no son generadas en el molde Tierra, pero pueden acoplarse perfectamente al molde Tierra.
Yo conozco una fuente que se acopló desde afuera perfectamente al molde del sistema solar y cuando viene a visitar – le he dicho que no hace falta ya que toque la puerta – reduce en sí al mínimo los otros planetas, luego las formas y propiedades animales del molde Tierra y al final posee la energía de un ser humano normal, sólo que aparece de la nada y desaparece en la nada como le da la gana… y nadie puede notar la diferencia… y sin embargo es un monstruo, uno de los más terribles que se pueda imaginar.

IX

Cuando se suelta el freno ¿qué sucede? Sucede que todo cambia alrededor y ¿qué significa que todo cambia alrededor? Significa que te estás apropiando de otro espacio. En tu experiencia no te mueves, no te trasladas, pero todo alrededor comienza a modificarse hasta constituirse en un paisaje distinto, con distintas propiedades y lentamente tu constitución igualmente se encuentra modificada en distintas propiedades, es decir, eres otro ser pero te reconoces como tú mismo pero hallándose ante distintas referencias.
¿Significa eso que uno desaparece de aquí? ¿Y el cuerpo dónde está?... si de pronto te hallas en otro mundo y tu último recuerdo es que estabas acostado en una cama… o si de pronto estás despierto simplemente no pensando ni analizando y lentamente todo se transforma a tu alrededor hasta que aparece un ser y se modifica el paisaje ¿dónde queda el cuerpo?... El dónde estás “Realmente” no importa para nada, un cuerpo durmiendo es como una concha de cambur. Lo que realmente importa es que tu consciencia se está haciendo capaz de necesitar cada vez menos el cascarón, ya no lo necesitas para ser tú… y el fenómeno se va convirtiendo en ti en una nueva propiedad, una facultad. Simplemente ya no necesitas el cascarón para ser tú, lo cual significa que estás germinando, saliendo del cascarón.
Todo en la Tierra se vive por etapas, digamos que etapas cascáridas, el germen pasa por distintas semillas, por distintos moldes, crece en uno y muere, luego crece en otro y muere, luego pasa varias veces por otro y muere cada vez ¿qué es lo que nace y qué es lo que muere?... mejor aún ¿qué es lo que hay sin cascarón? El cascarón únicamente confiere un tanto de fuerza, pero se corre el peligro de conferirse mucha solidez, petrificarse en una sola forma. Llega un momento en el cual estando en cascarón es posible salirse del cascarón y aprender a prescindir tanto del cascarón como de cualquier tipo de cascarón… pero para eso se hace necesario aprender a ser capaz de modular la vibración de la energía que se posee y, para ello existen varios mundos porque para aprender a modular la energía que se posee se necesita hallarse en un estado de constante cambio: concentrar la energía hasta hacerla densa y pesada, pequeña e intensa, aligerarla, luego agrandarla y conferirle solidez, luego eterilizarse… ser viento y posar en una mata, habitarla como númen, etc. o simplemente pasar al plano en donde habitan otros seres con los mismos ensayos; igualmente es posible tomar la frecuencia de los sueños y cabalgarla como una mota de polvo, luego identificar a lo lejos otra frecuencia de sueño similar y hacer como los zamuros identificando y tomando corrientes ascendentes. Todo esto lo puedes hacer en esta misma Tierra, y por un tiempo no tendrás más remedio que sólo así hacerlo, pero es una Tierra más amplia en la cual caben muchos mundos y en el cual se vuelven casi infinitas las referencias… Y todo ello con el fin de aprender a modular la vibración de tu energía sabiendo perfectamente que cada tipo de vibración confiere una forma y unas propiedades determinadas.
¿Qué sucede cuando vas? Sucede que cambias de mundo modificando de vibración… se te ve como un globo aerostático subiendo por el aire hasta desaparecer dentro de una nube el alejamiento no afecta nada aquí ¿Qué sucede cuando traes? Ahí está lo interesante: sucede que no te alejas sino que modificas la vibración atómica de todo a tu alrededor, en otras palabras: modificas tu vibración sin desprenderte del cascarón, en otras palabras: yuxtapones mundos y los obligas a copular, a intercambiar elementos, juntas, saltas al tiempo Antes y te vienes de ahí así sin siquiera ponerte las medias para luego soltar aquí toda esa energía. Quienes buscan trascender no comprenden nada de nada ese comportamiento, para ellos eres como alguien rico que arroja dinero en un mundo en donde la idea es ahorrar para irse al viaje definitivo. Me dijo uno, durante su trayecto en el viaje definitivo que desde la costa del otro lado de la orilla de allá se ven algunos botes zarpar de allá para aquí.
- Pero se modulan – le informé yo – doblan la curvatura del espacio-tiempo – le informé yo – se sientan en el piso y abren sus faldotas llenas de garabatos formando un círculo de inmenso radio a su alrededor y uno ve los garabatos saltar hacia fuera, con vida propia, tomando formas apropiadas para un próximo nacer – le informé.

X
Falta hablar aún sobre muchas cosas, pero creo que las perentorias ahora son: La Tierra ¿Qué es, qué hace?; El cruce de los ríos negros; y el doblar del espacio-tiempo.
Cuando uso la expresión “Soltar el freno” hablo de algo muy específico, de una práctica, una práctica conocida en todos los tiempos, en unas culturas más que en otras, pero no estoy inventando nada nuevo. La práctica, repito, consiste en detener el pensamiento y permitir que se den cambios en la energía de uno. Si se quiere es “vaciarse”, como dirían en el Zen, o cambiar la vibración y frecuencia de manera tal que se pasa a otra frecuencia de la existencia, si se quiere es convertir lo que uno es en una suerte de lente que enfoca, que abre o cierra su diámetro y que juega a voluntad con las distancias entre los lentes. Soltar el freno significa que detenemos ese proceso constante de corroborar, analizar, y renombrar todo lo que percibimos en una posición fija con el fin de mantenerla así. Cuando se detiene ese proceso digamos que la rueda se suelta y rueda y al rodar se pasea por sitios muy diferentes. Tomar el volante y girarlo con mucho cuidado es una suerte de arte. Llegar a un sitio y pisar a penas un poco el freno para observar todo lo que ahí hay es también una suerte de arte y, si alguien dice que se trata de un viaje hacia la propia interioridad, un descenso al inconsciente se equivoca, lo que se mueve es el lente pero lo que se ve está afuera, resonando junto con aspectos internos que en una posición fija se dan por inexistentes.
Pasemos a los puntos a tratar:
Imagina que estás tú solo o sola en un desierto ¿Qué ves? ¿Ves lo que hay? O imagina que estás en un páramo, o en una montaña o echado en un bote en un lago o en el mar. Imagina que es de noche, que el sol está del otro lado ¿Qué ves? No sé si te das cuenta pero ves todo lo que hay, en realidad lo único que hay: Solamente estrellas ¿Dónde, en el cielo? No, en todas partes, porque estrellas es lo único que hay. Algunas, de hecho, muchas, tienen planetas, otras no o aún no. Y tú estás viendo todo eso desde uno de los planetas de una estrella. No te das cuenta pero estrellas es lo único que hay.
Cuando sabes que estrellas es lo único que hay y te sabes en un planeta de una estrella entonces ahí es que puedes empezar a hacer algo. Si piensas en Dios no estás haciendo un coño, si piensas que vendrá un platillo volador a rescatarte de un planeta que no te gusta, te equivocas rotundamente. Nada puedes hacer con esa clase de pensamientos, si te dices “Ay, qué pequeño soy !” estás haciendo uso de un ridículo romanticismo y permíteme aguarte la fiesta al decirte de que ni de eso eres capaz de sacar la más mínima ventaja porque al día siguiente serás el idiota de siempre, ¿o no?
Bueno pues, estás ahí solo o sola ante toda esa inmensidad. En primer lugar tienes que aprender a poner las cosas en orden si tu deseo consiste en ubicarte. Ve siempre en grados, de lo más pequeño a lo más grande, nunca saltes escalones. En primer lugar date cuenta que perteneces directamente a un molde, al molde humano ¿Correcto?, lo cual no significa que seas solamente humano, pero te guste o no perteneces, ahora, directamente al molde humano, lo cual no significa que sea tu dueño ni tu amo. Y entonces date cuenta que existen muchos otros moldes y date cuenta que esos muchos otros moldes todos provienen de la Tierra, escucha entonces cantar a los insectos y volar a los murciélagos y arrastrarse a las serpientes o mira el vuelo del búho posarse en una rama con un ratón en la boca al cual descuartizará. Permíteme decirte que, para ti, entre tú y las estrellas, entre tú y toda esa inmensidad primero está la Tierra. Y la mejor manera de conectarte con la Tierra consiste en que sueltes lentamente el freno mientras miras todo a tu alrededor, te vacíes y te llenes de ese sonido del cantar de los insectos hasta el punto en que comiences a vibrarlo en ti y pases a la dimensión de los insectos, a su vibrar, llénate de ese Om insectoide y reprodúcelo en tu vibrar, no la boca, haz que tu abdomen lo vibre. Luego toma esa vibración y modúlala hacia el molde de los murciélagos, conviértela en color alrededor de ti, la luna la nube la noche, la oscuridad, el saber dónde están las cosas a la distancia mediante el radar de tu frente y siente el cuero negro de tu capa y frena un poquito y quédate allí un buen rato sin preguntas ni estupideces. Si lo logras hacer relativamente fácil entonces sabrás que eres un transitado, que eres un viejo transitado o una vieja transitada. Puedes tratar de dormir un rato dentro de ti hasta que te desprendas y dejes un surco en una nube… intenta despertarte a ti mismo tocándote un pie, sólo por los efectos del susto, y cuando el susto te abra todas las posibilidades insértate hasta el centro de la Tierra y entonces estarás rodeado de la más intensa oscuridad. Ahí, así, habrás alcanzado el río negro y te juro que lo que verás no te gustará para nada.
Rostros pálidos de gas, rostros de muerte, cosas que se arrastran, calaveras, ojotes y bocotas abiertas como en agonía de sed. Y entonces ¡detente!, pisa un poco el freno y date cuenta de algo: se están nutriendo de ti, pero en ese nutrirse de ti, en ese tomar de ti te están moviendo por dentro. Siente miedo si quieres pero no desistas, permite que tomando de ti te muevan ¿Sabes lo que eres ahora? Eres como un bote siendo jalado hacia otra orilla. Y, cuando hayan tomado de ti lo suficiente, es decir, cuando te hayan jalado hacia más cerca de la otra orilla verás cómo de esos ojos huecos que absorben miedo de ti se va n formando lentamente brillos de inteligencia y rostros frescos. Permíteme decirte algo: ellos no son de aquí, para llegar hasta ellos debes cruzar tu propia muerte. Y cuando alcanzas su lado estás del otro lado del río negro. En ese momento tu vibración es enteramente diferente. Y, cuando vuelvas a mirar a las estrellas las verás titilar de manera inteligente, todo a tu alrededor, en el desierto, en la montaña, en el bote en el lago o en el mar estará lleno de gente. Gente que es energía que la Tierra se traga de las estrellas y que convierte en los habitantes del plano inmediato superior, más intenso; el plano del cual aquí tú no eres más que una esponja de experiencias, de alimento para uno de esos seres que no sé si querrás ver. Quédate allí un buen rato y si quieres puedes esperar a que tu ser allí se acerque y pose en ti, o no; o a que se aparezcan otros e intercambien energía contigo. Puedes esperar a que venga una y te diga “Yo soy viento” e inmediatamente haga soplar el viento. Y allí conviértete en un cargador. Deja que tomen y tomen y tomen hasta que aprendas a dar, a echarte cómodamente hacia atrás y dejar fluir cómodamente de tu abdomen. Hasta que ganen cada vez que se acerquen a ti y sepas con ellos activar... Y a que te alteren en lo que haga falta alterarte en un tiempo Antes.
En el centro de la Tierra hay una ruta hacia afuera cuya puerta es la muerte. Y en ese afuera permaneces aquí, doblando el espacio-tiempo.
XI

Botes vienen y no se sabe para qué - ¿Es la Tierra un puerto?
Si soltando el freno es posible vibrar frecuencias que no pertenecen al molde humano, si soltando el freno es posible intercambiar energía con seres de los cuales aquí somos sus fracciones y esponjas de alimento, si soltando el freno se desprende fácilmente la cáscara de la semilla y se hace posible mantener la consciencia sin la misma y trascurrir a través de mundos simplemente modificando la vibración, ¿es entonces la Tierra un puerto? Habiéndolo pasado por todo en la Tierra, habiendo pasado su curso ¿qué llama a lo lejos? Y, así como se hace difícil sobrevivir a la fuerza arrolladora de la muerte ¿se hace fácil, graduado en Tierra, sobrevivir a la fuerza arrolladora del sol?... bueno, planetas hay para terminar el curso de una sola de entre cientos de millones de estrellas y obtener resistencia suficiente. Pero a mí me han dicho que quienes a mí me han dicho descendieron, que no estaban en planes de ida… y que son más tercos que una mula.
Aunque no lo creas, mientras eres simplemente esponja de alimento, esponja de experiencias para alimentar a un ser de otra frecuencia que se arroja aquí para ello permaneciendo en formación allí, te juro que puedes vivir sin problemas hasta que la muerte te sorprenda. Pero cuando ese ser se ha arrojado demasiado hasta aquí y tomado forma y comienza a estirar su pie hasta aquí, créeme que hará lo posible para tomar lo que le falta; y cada vez se hacen más quienes están en esa posición. Algunos dicen que miran al sol con ojos de despedida, esos mismos dicen que el sol les responde “Te veré en la distancia” y que los primeros entrecierran los ojos tratando de entender… (Y es que saliendo del molde Tierra se salta al molde solar). Todo es un asunto de frecuencia, de la frecuencia que hayas alcanzado, esa misma frecuencia, esparcida por el Universo, similar a estados anímicos en distintas personas sincronizados en un momento dado, se convierte en el espacio de circulación. Si tienes una frecuencia similar del otro lado de la galaxia esa frecuencia la tienes a un paso sin importar la distancia… cuando se aprende a modificar la vibración toda esa frecuencia se convierte en un solo espacio para ti, en un solo mundo, aún si desde otra vibración se les percibe dispersos… y más o menos así se da el viaje a otros planetas, cada uno una frecuencia condensada, unida en un solo ser, aún si desde otra frecuencia se percibe todo disperso. Es como si todo el azul de un tono esparcido en todas partes se vuelve un solo mundo unido, un planeta, cuando se vibra en azul de ese tono. Y así como toda la tristeza del mundo repartida entre todos los tristes del mundo y del universo es también un solo planeta. Así se da el viaje vibracional a otros mundos fuera de este planeta y así son los mundos habitables.
¿Es la Tierra un puerto?
Bueno, baste con decir que, a medida que vuestras vidas continúen alimentando consciencias de la esfera inmediata superior, alimento que les lleváis en el momento de vuestra muerte, con cada vez más facilidad tales seres pasarán para aquí con la consciencia de que la Tierra es un puerto del cual es posible zarpar, cuando ello se intensifique las curvas que da la historia se harán cada vez más fuertes aunque menos mortales (matar no es efectivo y eso se aprende con dolor), porque no será la vanidad más la verdadera y central motivación. Y es por eso que la Tierra es también un puerto de llegada de verdaderos pesos pesados, tercos como ellos solos, imposibles de convencer de hacer aún las maletas cuando apenas que están comenzando a sacar de sus maletas el mantel y el altavoz.
Sin embargo existe un factor íntimamente ligado a la Tierra, porque es su período de expansión y de poder sobre la psique de otros seres – me refiero al molde insecto – sobre el cual se hará necesario hablar en la parte XII
(Y quien crea que no se hace necesario hablar sobre él que mire a su alrededor y que me diga si no conquistó el mundo).

XII
Se hace imprescindible hablar ahora sobre la dominancia del molde del insecto. No es hablar exactamente sobre el molde del insecto ya que con la expresión “Molde” nos referimos a una forma que encierra energía de un modo específico, limitando esa energía a un tipo de vibración específica, precisamente la vibración que da forma y especificidad al molde, y que se manifiesta a través de la existencia de seres que se hallan en esa forma (o conjunto de formas afines) y en ese modo (o conjunto de modos afines). Pero a fin de cuentas los moldes que se hallan sobre la Tierra son propiedades de la misma, aspectos de la misma así como el cabello, las uñas, los cinco dedos en una mano, etc. propiedad de los seres humanos… un enramaje del alteraciones vibracionales cuya consecuencia es variabilidad de formas.
La Tierra posee otra propiedad que resulta muy pero muy interesante: no solamente generó moldes a partir de sí misma (la Tierra es un Monstruo) sino que sus Eras se caracterizan por el predomino de uno de tales moldes sobre otros. De una manera u otra durante una Era de la Tierra un molde de alguna manera conforma a los demás moldes… conforma la Era.
Nuestros registros históricos están conformados a partir de cuando el molde de la serpiente se volvió predominante – se encuentra en todas las actas esparcidas por el mundo – y, nuestros registros “mitológicos” aún hablan del predomino, en la Era anterior al predomino del molde de la serpiente, del molde humano. Actualmente el molde cuyo predominio se encuentra en visible acción es el del insecto.
Volvamos al ejercicio anterior: Imagina que estás solo, de noche, en un desierto, o en una montaña, o en un bote en un lago o en el mar ¿Qué es todo lo que hay?: Estrellas - ¿Extrañas, no? – algunas con planetas y otras aún sin planetas y otras que ya los tuvieron alguna vez, pero estrellas es todo lo que hay. Pero te estás dando cuenta de esto sobre uno de los planetas de una de las estrellas. Si quieres ubicarte ve por partes, de lo más pequeño (comenzando por ti) hasta lo más grande y ponte a vibrar saliendo de tu molde y entrando en otros moldes vibracionalmente. Y luego mira todo a tu alrededor, mira la ciudad desde el desierto, míralo como si la ciudad hubiese sido brotada desde la Tierra, por ella misma, haz lo mismo desde la montaña y desde el bote, borra a los hombres del mapa de tu percepción, quédate únicamente con la Tierra y con sus moldes y dime luego quién es que ahora manda… y no hay duda de que el insecto es el que manda.
Si eres de quienes están soltando un pie de allá hasta acá no te será nada difícil recordar otras eras, a fin de cuentas las viviste con el fin de engordarte, de poder pasar desde allá hasta aquí. Y seguramente no recordarás que haya mandado siempre este ser de antenas y colmenas productor de químicos. Por tanto, te lo ruego, comienza a sentir curiosidad por él. Su efecto, el efecto de todo molde predominante, es el siguiente: se alza sobre todo, de manera imperceptible y atraviesa todo haciendo que todo lo reproduzca. De esa misma manera construimos muros y separamos parcelas reproduciendo sobre la Tierra la forma de la serpiente. Ahora la cosa cambió un poco, ahora reproducimos en todo al insecto.
Te lo ruego, que sientas curiosidad por las Eras y lo que ello significa, por lo siguiente: Sé que algunos vendrán furiosos, cuando se llega grandote y se ve un mundo de cucarachas rodando por todas partes no es fácil no molestarse ante tanta suciedad y, si se llega con fuerza, mira hermano, hermana, la energía que se emana en ese tan comprensible enojo es algo que hay que aprender a controlar, lo mejor es quedarte quieto y darte cuenta que la culpa no es de los hombres.
Ahora te voy a contar un cuento que pasó de verdad:

Los seres humanos no lo saben pero se alimentan de energía, tiene que ser así porque su mayor necesidad es germinar, y, como todos están en la misma necesidad se alimentan unos de otros. Si no fuera por nosotros ya esta vaina hace tiempo que se habría acabado y el último de los asesinos se habría muerto de sed y de soledad, incapaz de germinar, incapaz de arrojarse sobre otro… incapaz de culpar. Cuenta una leyenda que hace pocos miles de años el tipo considerado con mayor cantidad de energía en esa época, capaz incluso de mover cielo y Tierra con su sola voluntad fue usado como alimento, capturado y utilizado como alimento ¿Sabes tú lo que se requirió para convertirlo en alimento de conserva? La más grande artimaña de la que hacen uso los humanos: Culparlo. Lo culparon, se agolparon a su alrededor y listo. Y aunque no lo creas aún lo tienen guidado por muchas partes, como un pedazo de carne de parrilla, y, después de dos mil años aun se comen su carne y se beben su sangre ¿Entiendes lo delicado de todo el asunto?: Culpar aquí sirve. Y a los humanos les fascina lo de la culpa, basta con culpar y listo… culpar no significa que se sospeche nada de la persona, culpar aquí es más bien como señalar con el dedo hacia algo y gritar “¡¡COMIDA!!” y ves caer bombas y demás… y todos se babean en la orgía. Dos mil años comiéndose al tipo ese al que culparon una vez y muchos miles de años más gritando “¡¡COMIDA!!” y masacrando. Te lo digo por lo siguiente: si vienes, si logras hacer pasar esa pata tuya de allá hasta acá, no te va a gustar mucho lo que veas, y si necesitas de un extra solamente para tomar la ruta hacia el puerto de salida, te lo pido con humildad: haz uso de lo que quieras, pero paremos de una vez por todas con esta mierda de la culpa.
La predominancia actual del molde del insecto hacedor del rostro de una Era, de esta, obedece a una propiedad de la Tierra. Si quieres tomar puerto coloca esto en tu maleta, pero no seas como ellos, que sólo buscan comenzar a germinar, y no cargues contigo sangre haciendo uso de la culpa, que no te ayudará a ir a ninguna parte.

XIII

No hay puerto sin Mar Negro.
Podrás llenar tus Arcas con lo obtenido de otros con los procedimientos que tú más quieras, llenar los depósitos del cohete con la energía tomada de la mejor calidad, quizás hasta creas que las cacerías funcionaron, que atrapar la atención de alguien con contenido, con el fin de irla o irlo vaciando, inoculándole preocupaciones o bajos estados anímicos hasta tomar el control y hacer uso de su batería para tus fines, para un atisbo de otra realidad en donde te haces de la energía, de los ropajes del otro, quizás creas que funciona, porque todo eso se ve tan cerca ¿Verdad? Pero… paseándote por la ciudad en donde tienes hasta tres, cinco, puntos controlados, quedándote en una esquina de noche en donde tienes un punto controlado, un dormido con buen potencial, sentándote allí canalizando tu vibración hasta despertar lo dormido dentro de quien duerme en su habitación, colocándole una cadena antes de que coja vuelo, instándolo con tu dulce voz, viéndolo o viéndola hasta donde va y llenando tus arcas, los depósitos de gasolina de tu cohete…
Pero no hay puerto sin Mar Negro y yo veo doble cara.
Olvídate, sin la muerte no hay nada. Nadie ha llegado nunca a ninguna parte viva usando esos cohetes. Cógete a una ballena, tómale cómo es viajar bajo el mar, tómale la sensación de su cuerpo, acostúmbrate a él mientras tomas la energía de la ballena. Mientras tomas la energía de la ballena todo lo que la ballena hace es como si lo hicieras tú, nadar ilesa entre tiburones… Pero en el instante, chico, chica, que enciendas los cohetes y creas que le tomaste el pelo a alguien y seas ballena en el mar a la muerte no la engañas, chico, y serás tú, con tu propio cuerpo entre tiburones en esa profundidad. Y es que yo ya no sé ni cómo decirlo… nada más fácil que dejarlos hacer. Convertirme en un niño malo, como esos italianos de chores cortos que se escapan de la escuela para inflar sapos por la boca y reventarlos contra las paredes escuchando la explosión. Cada vez que te acercas chorros van de mí hacia ti y comienzo a verte con los cachetes gordos y comienzo a sonreír. Nadie cruza la negritud tomando. Pero te lo ruego, y sé que tienes cuatro puntos más en donde tomas al menos una vez por semana de cada lugar, te lo ruego que sigas tomando así. Pero es que he resultado ser una suerte de ingeniero técnico. Ignoro las técnicas de extracción, y el uso de esos muñecos que cargas contigo guindados de tu carro, sé que llenas tu tanque… pero es que he resultado ser una suerte de ingeniero técnico. Y te puedo decir dos cosas, explicarte que es lo que sin saberlo haces bien: Tomas y extraes, te sientas en un sitio y acostumbras a tus presas a acostumbrarse a tu presencia, sabes que los dormidos dormidos despiertan en sueños y a ti te gusta dominar, meterte en ellos como una mano en un guante y de allí tomar; pero ignoras que la extracción enciende negro alrededor, y que si bien tu sueño es atravesarlo y habitar los parajes que a través de otros ves, del otro lado otros rostros se asoman y comienzan a cruzar hasta acá. Te ven, abres puertas que tú mismo no eres capaz de resistir… y sin saber lo que haces permites el cruce de allá hasta acá, desde el otro lado de la muerte… la cual solo no eres capaz de atravezar.
Los tanques llenos, las arcas llenas, tus presas llenándolas sin saberlo como árboles de caucho con sus marcas ensangrentadas y tú sintiéndote como un millonario de viveza. En sus marcas, listos, ¡PUM! Desnudito, desnudado por la muerte te volviste plancton.
¿Te quisimos? Nos acostumbramos a ti, y te guardamos los mejores deseos. Bueno, sí, dolía un poquito al comienzo, lo confieso, era como ser vaciado, ordeñado, lograste hacer que tu sola cercanía nos colocase en posición de obediencia militar, pichones de cóndor en las garras de un halcón. Pero ahora, con el tiempo, y la sonrisa en nuestros labios, te lo agradecemos y con la risa te decimos “Pobre de ti”, de escalar las montañas más altas caíste al pozo más hondo. Pobre de ti, pero te guardamos los mejores deseos.
No hay puerto sin Mar Negro.


XIV
Jamás conoceremos las partes de algo hasta que ese algo se complete, por tanto, hasta que algo no se complete nunca sabremos a qué atenernos, ya que ignoramos cómo es en lo que estamos, cómo es su naturaleza. Pero ¿y si la cosa en la que estamos comienza a llenarse de atmósfera de emergencia y gravedad? Imposible saber qué hacer, todo queda al azar, todo queda al experimento, como ratones de laboratorio que no saben ni siquiera si son observados o no, y, en caso de serlo no se sabe si por la propia consciencia o por la mirada de un loco enfermo.
Cuando al planeta en el que giras alrededor de una estrella le quitas todo no tienes más remedio que mirar hacia arriba si deseas una siembra. Coges un pedazo de cielo negro y lo colocas en todo el centro y te ocupas de que el reflejo interno sea exacto al exterior. Dicen que es el mejor procedimiento para que las estrellas se siembren en un planeta y éste, según su naturaleza (que es parte de la naturaleza de la estrella alrededor de la cual rueda) irá generando a partir de allí sus daimones, sus diamantes, y sus demonios. Éstos habitarán allí mucho tiempo sobre una superficie esteril, pero habitarán allá vibrando, con el tiempo la materia comienza a reaccionar, a intentar sus primeros ensayos de imitación de frecuencia mediante la cristalización, y así el planeta se forma. Dicen que ya que no hay más remedio que sembrar estrellas es recomendable estudiar de cuántos tipos hay. Tipos hay de todo y solo todo son estrellas, pero éstas en lo general poseen etapas. Hay las inquietas, las que flotan en el espacio creciditas buscando ya preñarse, son las primeras en descender ya que al hallarse el cielo entero cristalizado de manera intensificada en el centro del planeta nada para ellas como la oportunidad de catalizar velozmente su necesidad… son las primeras en descender. Las hay madres, de esas que ya poseen planetas girando a su alrededor, y son como lechuzas que toman vuelo con el fin de llevar alimento a sus hijos, son las segundas en descender, toman de aquí para llevarlo a sus planetas y siempre rompen un pedacito de cristal el cual llevan hasta uno o dos de los planetas de su sistema en los cuales vida se podría dar. Las hay enteras, son esas estrellas que ya tuvieron planetas girando a su alrededor, planetas con vida que empezaron y acabaron, las que relegaron sus faldas cuando todo su sistema se cumplió y terminó de generar, son las satisfechas, las contentas y sabias, son las terceras en descender, descienden sin necesidad, como quien va de vacaciones y algunos dicen que desean enamorarse. Las hay que enamoradas dieron luz a una estrella, no ya a un sistema compuesto de estrella y planetas, sino que dieron a luz a una estrella – yo soy de esas, por cierto – son abuelas, son las cuartas en descender y no todas suelen descender. Debido a que son un sistema de dos estrellas el feedback en el interior de cada una de ellas (porque dentro de cada una son dos) a veces trae problemas de regulación, son las de quienes las terceras en descender se suelen enamorar. Pero no se tratan solo de poder, la estrella hija puede estar buscando preñarse para dar planetas, o puede ya poseer planetas girando felices a su alrededor, o puede que ya se haya replegado y esté satisfecha. Las quintas en descender son aquellas cuya estrella hija ya ha dado a luz a otra estrella, es muy raro que desciendan sobre planetas iniciales en todo caso seguramente no encarnan pero envían su energía en casos de emergencia, o quizás, no sé, hasta puedan encarnar, pero son estrellas que ya están en origen de formarse en costelación. Las sextas que no descienden son aquellas que ya formaron constelación (constelación de un mismo conjunto de naturaleza) y que están muy viejas y que desean ceder la alta silla a su estrella hija y finalmente desaparecer de dentro de la existencia de la galaxia, son estrellas graduación, dentro de la galaxia ya no pueden ser más y simplemente desaparecen en una otra dimensión absorbidas, traspasando la negritud. A veces pueden mostrarse, de la nada surgen como y donde desean en la galaxia sin estar sujetas a evolución, es muy raro verlas incluso, que se muestren, pueden incluso estar sin poseer energía o de pronto energía generar y de pronto volver a total y absolutamente desaparecer por completo de lo que conocemos como existencia.
Sembrado un planeta se suele esperar siete días a que comience a germinar, germina vibración, vientos, volcanes y se dan las condiciones. Durante este período todos están al mismo tiempo sin jerarquía ni orden ni ley, es la boda Tierra-Cielo… pero, ojo, cuando la materia comienza a obedecer a las vibraciones y éstas a ir lentamente apropiándose de la materia lentamente se va dando un orden, es un orden rotativo… y después no hay nada más que hacer que dejar al planeta.

XV

Imagino un rascacielos altísimo, un rascacielos con el poder de hacer emborrachar al cielo y que en lugar de estar dividido mediante pisos sube en forma de espiral, todo lleno de habitaciones separadas unas de otras por paredes negras, y a la vez lo imagino siendo un proceso embrionario. Ahora lo imagino habitado por pintores, los cuales exponen sus obras en la Planta Baja, paisajismos. Nada más que paisajismos pintados desde cada una de las ventanas por cada uno de los pintores, y cada una de las pinturas siendo cuidadas por el conserje.
Nadie sabe quién es el conserje. Pero es quien mantiene la armonía entre todas las discrepancias.

XVI
“Dos, decían que se llamaba Dos”. No, no era una estrella encarnada con planetas girando a su alrededor, no era una de las Aves ni mostraba tener Alas – eso decían, pero no era así – y garras a la vez con las cuales tomaba de aquí para llevar hasta allá. Ya sabes, las Aves, se agarran al centro de la Tierra con sus garras, despliegan sus alas y por dentro esa luz en la superficie de su ombligo haciendo zuuummmmmm en sonido vibrante y penetrando cada vez más hacia su propio centro como una máquina extraña haciendo zum y pasando sin moverse de aquí hasta su propio sistema solar, tomando así una buena dosis del cristal del centro de la Tierra. Y yo la miraba sonriendo sabiendo que era completa y absolutamente legal. Al terminar era ella quien sonreía, replegaba sus alas, se alisaba la capa negra, me ponía una mano sobre el hombro y yo la acompañaba a comprar pan, luego hasta la puerta de su casa y ella subía uno o dos pisos hasta su alcoba, no lo sé, nunca entré, en donde se arrojaba en su cama hasta quedarse dormida completamente emborrachada, salirse de su cuerpo y arreglar los detalles allá, en el sistema planetario a su alrededor. Y no es que yo diga que tomaba ventaja de mí, pero cuando por primera vez la vi la vi desde lejos, con su capa negra con capucha negra, desde unos quinientos metros de distancia y ese halo blanco a su alrededor, se movió inquieta, y no me pregunten cómo activó durante segundos, sí, desde la distancia, un halo blanco de misma frecuencia en mí, sus ojos se vieron negros con estrella y, cuando se acercó me dijo: “Dos, decían que se llamaba Dos. No, no era una estrella encarnada con planetas girando a su alrededor, no era una de las Aves ni mostraba tener Alas – eso decían, pero no era así – y garras a la vez con las cuales tomaba de aquí para llevar hasta allá. Ya sabes.” A lo cual le respondí “Sí, ya sé”.
Dos logra hacer lo siguiente: gira en sí dos que son él por dentro, es como si tomases dos protones gigantescos y los pusieses a girar unos cuantos grados, uno en relación al otro, como un dínamo, generando así un tipo de energía con propósitos muy específicos. Así de simple. Esa facultad de Dos permite no solo todo tipo de transformaciones sino también de regulaciones, es uan suerte de aparato ecualizador, puede pasar hasta grados subceros, generando energía negra, hasta grados muy por encima de cero, pero también sirve para abrir campos para que se puedan ejecutar funciones específicas requeridas. Las Aves saben que los Dos existen y logran hacer lo que nadie más, logran identificarlos mediante la producción en ellas de una suerte de irradiación de un tipo específico de radiación la cual apuntan a un objetivo y si éste responde, el Ave sabe que se trata de un Dos, le da la contraseña y a partir de entonces cuando el Ave requiere de sus servicios él Dos siempre se aparece por ahí ¿Simbiosis? No exactamente, o quizás sí, Dos queda encantado de poder dar alguna utilidad a sus servicios ello le apacigua un poco la furia y le calma el aburrimiento, le hace sentirse un poco como en casa, y el Ave, la Ave, definitivamente sí, indudablemente le sirven los servicios de Dos.
No hay que olvidar que Dos fue - y no importa dónde - una estrella cuyo sistema planetario ya ejerció su función, se replegó, se metamorfoseó al devolvérsele – y no importa cómo – toda la carga planetaria, luego se infló y dio a luz – exactamente igual que Adán a Eva – una otra estrella.
Entremos en los detalles: Un sistema binario de seres compuestos de una misma materia, por tanto un sistema binario de seres con unas mismas propiedades, facultades, la característica principal de ese sistema binario, la cual lo distingue de un sistema compuesto de dos estrellas cercanas de distinta materia, es que en ese (como en muchos otros de la misma característica) cada una de las estrellas, la estrella madre y la estrella hija (ha de entenderse el uso de género simplemente como un recurso expresivo ya que en realidad en el caso de las estrellas no hay macho ni hembra, no existe tal división, pero sirve más el recurso del uno del femenino por la facultad de creación, de formación exterior a partir de la expulsión de fuerzas generadas en el interior)… es que en ese sistema cada una de las estrellas son interiormente el sistema binario en sí y por eso se les llama Dos. Ahora bien ¿Son exactamente iguales? No, no lo son. Hace uso cada una de la misma materia y de la facultad de ser dos, pero cuando se trata de descender sobre planetas - y todo planeta posee la facultad de catalizar procesos - cada uno se alimenta o digamos que aprende, de distintas experiencias. No solo eso, depende de cada uno de tales sistemas, pero el radio, el diámetro de cada estrella en un sistema binario suele variar, suelen ser distintos los diámetros de ambas estrellas entre sí, lo cual trae como consecuencia que la que posee menos diámetro sea más veloz en su capacidad de asimilación. Y es más veloz por lo siguiente: el diámetro define igualmente el tiempo de vida de una misma materia y los procesos por los cuales tal materia ha de pasar (procesos generados por la naturaleza intrínseca de la tal materia en específico), por lo tanto el doble de diámetro implica el doble de tiempo de vida y por tanto la mitad de velocidad en el proceso, por tanto: se da un momento en el cual la estrella que posee mitad de diámetro estará más madura y poseerá más conocimiento en cuanto a los alcances de la propia materia que la estrella del doble de diámetro. Y cuando esto ocurre ambas estrellas, ambas Dos, suelen encontrarse de vez en cuando en los mismos planetas, tener encuentro, y separarse ¿Por qué? Porque la de menor diámetro hace uso de la energía de la de mayor diámetro la toma, la digiere, y la enriquece, y la de mayor diámetro da fuerza a la de menor diámetro. Dos juntas de una misma materia se vuelve un mismo propósito porque son un solo sistema. La grande da fuerza a la pequeña, la pequeña da aceleración, madurez, novedad en cuanto a la misma materia en la grande. Vuelvo y digo: las diferencias de radio en los sistemas binarios no obedecen a ninguna ley, varían entre sí. Pero es necesario recalcar que igualdad de diámetro no otorga mucha facultad, la diferencia sirve de mucho para un sistema binario porque se da diferencia de madures, el intercambio de conocimiento de la propia naturaleza de la materia que los conforma acelera el proceso del sistema. La estrella menor aporta el conocimiento, la mayor la fuerza, ambas son imparables, un sistema generador. Ambas, cada una de ellas, el sistema generador.
Dos, hay unos cuantos Dos, a veces un Dos se topa en el camino con un otro Dos… se dice que suelen cruzar la calle con un poquito de pena, para no encontrarse en la misma acera y evitar así una propagación de energía tan intensa que, en caso de no requerirse, se hace mejor evitarla… se despiden encantados a la distancia – el comportamiento de la energía de cada uno de esos distintos Dos ubica en el tiempo del planeta en donde tales encuentros se dan - … y a veces incluso emitiendo vapor, vapor que une formando nubes, nubes que hacen llover. Y es que ya no estamos en primavera.

XVII
Volveremos ahora pronto a hablar de Dos. Pero para poder comprender bien a naturaleza energética de Dos se hace necesario hablar un poco sobre la estructura del vacío, las propiedades y conformación del vacío, pero muy someramente, si alguien desea más detalles sobre el vacío bien puede bajarse una conferencia de Nassim Haramein.
Y ahora lo siguiente: Imagina que tú eres una persona ahí toda espiritualosa, pero no por asunto de uso del lenguaje ni de darle una forma a la represión de pulsiones ni por moda, imagina simplemente que eres una persona ahí toda espiritualosa porque eres sensible – que no es lo mismo que sentimental – a algunas energías que no todos pueden percibir o que al percibirla niegan automáticamente; imagina simplemente que tú las percibes y que las percibes como fenómenos normales, que, aun si no son fáciles de explicar, no por falta de explicación niegas. Lo ves como normal, se te aparece un muerto o sientes su toque o que está a tu lado o sientes un profundo sentimiento que te llega como desde afuera y simplemente le dices a la sensación “Hola ¿Cómo estás?”. Imagina que esa persona es alguien cercano a ti, un amigo cercano, por ejemplo, y sientes ese frío y temor a tu lado, un signo de interrogación de hielo que te vino a buscar para hacerte una sola pregunta, y tú simplemente le respondes “Lo siento Bob, moriste, estás muerto, no hay nada que yo pueda hacer por ti” y sientes el llanto, el miedo y la tristeza de Bob y a las sombras negras que se lo llevan. ¡Espera! Párate ahí: le acabas de decir a tu amigo Bob que él está muerto y él lloró porque está muerto ¿Está realmente muerto? ¿Bob está muerto? Fíjate en algo: Bob está… pero no está aquí. Quizás vino a ti porque él en el estado en el que está y tú estando aquí poseen una frecuencia en común, un tono común que permitió la conexión, un encuentro en la frontera. Él se aleja de una cosa y entra en otra muy distinta, hasta que finalmente desaparece del todo de aquí y tú no puedes asomarte hacia allá. Créeme que Bob desapareció del todo por completo, esa configuración llamada Bob. Esa configuración llamada Bob se cargó de una experiencia de vida que alimentará a algo que sentiste alguna vez pero que nunca conociste de Bob, probablemente ni él.
La pregunta es ¿Qué significa estar muerto?, no es estar muerto, es no estar aquí, es no compartir más un lugar común… y es entrar en otro lugar al que no se puede ir sin haber muerto. Implica que algo de nosotros es capaz de sobre vivir a un cambio de frecuencia aun si no alejamos de la anterior total y completamente. En el caso de la muerte solamente puedes estar aquí o ahí, pero no en ambos lugares a la vez o entrar y salir a menos que hayas ejecutado en ti, conscientemente, esos cambios de frecuencias.
Cuando hablamos de la muerte de un ser humano hablamos del cruce de un río negro relativamente angosto, quizás vuelva a cruzar de allá para acá cien veces más, quizás si cruza hacia un molde animal ese río será más ancho, si cruza fuera de la Tierra será todavía más ancho, en todo caso ocurre de manera inconsciente. Eso no significa que siempre sea, o deba ser, de manera inconsciente.
Ahora bien, si una persona recuerda o posee la habilidad de cruzar sin necesidad de morir ni de perder la consciencia ¿Significa eso que es superior o que se crea superior? Hum, si yo veo a un tipo musculoso, con un cuerpo muy bien trabajado ¿Significa que es superior… o significa que se ejercita? Preguntarle a alguien que cruza “¿Por qué tú sí y yo no?” es como preguntarle a un tipo muy musculoso “¿Por qué tú sí y yo no?” o a alguien versátil en el uso de un instrumento “¿Por qué tú sí y yo no?”
Dicen que los lamas budistas son capaces, antes de morir, de dar indicios sobre más o menos dónde y cuándo sus espíritus reencarnarán ¿Por qué ellos sí y yo no? Ahora bien, el molde humano puede hacer eso, como humanos ejercitados pueden planificarlo todo, viven ejercitándose, y si un monje budista dice “Vendré dentro de 500 años en tal sitio” ahí lo estarán esperando. Pero, y es mi advertencia a esos fiebrúos: si quieren salir de la Tierra, de verdad, ejercítense pasando a otros moldes de la Tierra más allá del humano, Drácula lo hacía, El Hombre-Lobo también, y, si creen que es juego se equivocan. La licantropía no es una práctica espiritual inferior o primitiva. Nadie sale de la Tierra sin haberse convertido primeramente en una Tierra pequeña en fractal. ¡Nadie! Y, si alguno pretende salir ahí estaremos uno de nosotros diciéndolo “Muéstrame las uñas” (y si las uñas no se convierten en ríos cargando hojas secas, pues no.) “Muéstrame los dientes” y si los dientes no son de fieras, pues no. “Muéstrame los ojos” y si los ojos no son inmensos negros, pues no… te devuelves hasta que de la Tierra hayas sido completamente. Y no es por dárselas de autoridad ni nada de eso o por estar celoso o por ser un aguafiestas, pero es que para poder resistir fuera de la Tierra tienes que poseer las habilidades energéticas de todo lo que ella puede enseñarte. Porque fuera de la Tierra, incluso en otros planetas del sistema solar, la vida no consiste en esta cosa rara de andar defendiendo una forma y alimentarla hasta que muera. Mira, allá afuera es donde la cosa está pelúa y hay planetas en donde todo consiste en transformación y tienes que estar dispuesto a perder una forma y pasar a la siguiente y luego a la siguiente y a la siguiente sin identificaciones de ningún tipo, como si cambiar de forma fuese simplemente un gesto tan sencillo como mover los brazos. Por eso es que le digo a los lamas: no saldrán tan fácilmente si no hacen más que explotar las potencialidades del molde humano… dejen de defender una sola forma… dejen de defender una sola forma… o al salirte, a las primeras de cambio moriras y PUF no tendrás medios para re-acordarte (¡) Cuando medites, mijo, llégate a tu centro, pana, anterior al parío, y ponte a ponerle a hacer ejercicios, oblígale a imitar a un hongo o a un sapo o a un insecto, hasta que el anterior al parío dentro de ti se vuelva hábil en transformaciones y mantenimiento en otras formas, hasta que toda la variedad se constituya en un ser proteico.
(Una vuelta muy larga), volvamos a Dos… volvamos a Dos en la parte XVIII

XVIII

Hemos dicho que Dos, que todos aquellos que son Dos son dos estrellas de una misma materia que conforman un solo sistema.
A veces una de las estrellas, luego de haber sido sistema solar, es decir, estrella con planetas, se repliega, se infla y da a luz a una otra estrella, ésta pasará por el mismo proceso de absorber energía de su estrella madre con el fin de preñarse, dar a luz a planetas, volverse a su vez madre que encarna en otros planetas (Ave) con el fin de buscar y obtener energía de planetas viejos para alimentar a los suyos y, luego que su sistema planetario haya cumplido su función, se repliega y se infla y da a luz a otra estrella que absorberá energía de las otras dos…. A este se le conoce como “Sistema generador de constelaciones” y se dice que las Pléyades, por ejemplo, cumplen con esta característica. Hay un momento en el cual la primera estrella ha alimentado a todo el sistema a través de la absorción energética de la segunda y la segunda estrella a todo el sistema a través de la tercera y así… de manera tal que las estrellas más viejas terminan siendo más o menos del mismo tamaño que las más jóvenes. Las necesidades energéticas de las más jóvenes terminan “matando” a las más viejas mediante extenuación. Las estrellas “muertas” cruzan entonces un río, en realidad pasan a una frecuencia total y completamente distinta a la de lo que conocemos como Universo. Recuérdese que cada estrella ha generado a partir de sí todo aquello que conocemos como Vida, muertas han realizado el curso completo de lo que conocemos como generación de vida. Y, en caso de que vuelvan como estrellas a volver a aparecer en este Universo serán estrellas de distinta cualidad… serán de distinta cualidad por una razón sencilla: han estado en una frecuencia (la frecuencia que conocemos con el nombre de “Universo”) han pasado a otra frecuencia, realizado el curso allí y vuelto para acá, para este Universo con una cualidad que anteriormente no tenían.
Dos son estrellas de esta nueva cualidad. Y hemos dicho que Dos, que todos aquellos que son Dos, son dos estrellas de una misma materia que conforman un solo sistema de Dos. Ahora bien, como dijimos anteriormente: una de las estrellas poseerá un radio menor a la otra, es decir: un tiempo de vida menor, es decir: una mayor velocidad en el trascurso de los procesos de esa misma materia. Hemos dicho que llegará un punto en el cual la estrella más pequeña estará haciendo usos de la evolución de la misma materia que conforma a las dos, quiero decir que llegará un punto en el cual la estrella más pequeña será más versátil, estará más madura y tendrá propiedades más evolucionadas que la estrella mayor – no olvidemos que ambas están compuestas por la misma materia, por la misma cualidad, solo que la más pequeña evoluciona más rápidamente, evoluciona esa materia a mayor velocidad – No olvidemos tampoco que ambas estrellas, cada una, posee en su interior a ambas. Cada una de las estrellas es el sistema de dos. Cada una, si encarna en un planeta, es Dos.
Ahora bien, a partir de aquí sucede algo: la estrella más pequeña gira en torno de la grande y se acerca más a esa frontera entre dos frecuencias, la frecuencia de este Universo y otra frecuencia, por la razón de que envejece más rápido y se acerca más velozmente a su propio fin. Mientras gira en ella se consolida la consagración de la misma materia de la que está compuesta la estrella más grande. Finalmente la estrella pequeña lanza un puntico de luz y pasa al otro lado, pasa a estar en otra frecuencia mientras intercambia información con la estrella más grande la cual aún no se ha consagrado (cumplido en sí todas las propiedades de su materia). La estrella grande pasa a ser un ser intrazonar. Todo su ser comienza a poseer la propiedad de moverse entre dos zonas, entre dos frecuencias invisibles una para la otra. Y la estrella pequeña pasa a ser un ser que puede estar tanto completamente aquí como completamente allá. Pero resulta algo que resulta muy interesante: las propiedades de ambas frecuencias son completamente distintas una de la otra. La estrella pequeña habiendo adquirido la cualidad de pasar a gusto de aquí para allá y de regresar para aquí hace uso a gusto de las propiedades de allá: la estrella pequeña puede pasar hasta aquí como lo que le de la gana porque ya no está sujeta a evolución. Puede de pronto aparecer incluso sin ninguna energía, mantenerse indetectable en este Universo, como puede de pronto aparecer con la misma masa y cualidad de la estrella mayor.
Nota: cuando en un piso evolutivo un ser ha pasado por todos los grados que llevan hacia su consagración, la consagración y el paso a otra frecuencia tiene por consecuencia que a su vuelta ese ser ya no necesita pasar de manera consecutiva por todos los grados, puede convertirse y aparecer como un ser compuesto de todas las características al mismo tiempo que anteriormente solo se vivieron de manera consecutiva ganando una con la pérdida de otra.
En fin: la estrella pequeña completa todas las etapas de la cualidad que caracterizaba a las dos a mayor velocidad que la estrella de mayor radio, completada pasa a ser a su vuelta un ser de una esfera superior mientras la de mayor radio aún se está completando. Sin embargo no es mucho – y a la vez es mucho (se entenderá) – lo que puede ser aquí… por lo siguiente: siendo un ser nuevo completo estará más a gusto en esa otra frecuencia en la cual cabe completa que en esta. En esta su característica como ser será la siguiente: No podrá aparecer completa (la presión de esta frecuencia no lo permite) sino siempre bajo la forma de una parte, de un grado, pero internamente con los atributos de la totalidad. Hagamos un ejemplo: no será un bebé que se vuelva niño que se vuelva adolescente que se vuelva adulto que se vuelva viejo. En la otra frecuencia es todas esas cosas a la vez, al mismo tiempo, un ser distinto que en un solo tiempo es lo que en la otra se es consecutivamente más nunca a la vez, cuando vuelve a esta frecuencia tendrá en sí la carga de todo el nuevo ser pero regulándose para estar bajo la forma de una de las partes, además de que posee en sí la muerte.
Lo que ocurre a la larga debido a las diferencias de radio del sistema binario de Dos es lo siguiente. En un momento ambos son Dos, pero después de que la estrella de menor radio se consagra el Dos que queda aquí, el de mayor radio, se vuelve un ser interzónico, posee en sí ambas frecuencias, la frontera pasa por su medio, el de menor radio se vuelve un ser que puede saltar entre una y otra frecuencia a voluntad desapareciendo por completo de cualquiera de las dos mientras el de mayor radio permanece en las dos hasta que finalmente pasa por completo a la otra frecuencia jalado por la que antes era la menor. Pasados ambos ambos son del mismo tamaño.
Si vuelven, porque han pasado por todas las etapas por las que se puede pasar dentro de una galaxia, sus pieles son el Universo.

XIX

Imagino ahora un árbol, un árbol rascacielos, cuya copa es tan alta que los frutos más altos fermentados emborrachan al cielo y cuya raíz es tan profunda como alto el tronco y las ramas, pero la raíz es el negativo de las mismas. Lo imagino habitado mas no ascendiendo y descendiendo en espiral sino por pisos, y cada piso separado del otro por techos y pisos negros. Sé que el habitante del piso 13 comparte espacio con el habitante del -13 y nadie se imagina el miedo que le tiene, el miedo que se tienen. El conserje dice que sin baile no hay 14, y en 14 habita la sombra de -14 dispuesta a acompañar por siempre. Habrá quien diga que la punta de la copa se une con la punta de la raíz. Pero no, no es así, claramente no es así. Porque dicen que la raíz está encallada en una coordenada específica, en un tiempo preciso que se modifica lentamente cada vez generando un presente distinto al anterior. Los negativos dicen que el presente se modifica debido al néctar que la raíz succiona de la copa – fenómeno que ocurre con más intensidad durante la luna nueva – los positivos dicen que la anulación del tiempo y la apertura al Todo, el “reabastecimiento del Ser”, se debe a que desde la raíz sube néctar hasta la copa – fenómeno que ocurre con más intensidad durante la luna llena.
Lo cierto es que todo el aparato no cesa de respirar, aumentando en intensidad, velocidad y profundidad la respiración a medida que se avanza hacia el final.

XX

Ahora bien pronto vamos a tener que hablar de los pisos. No todo el mundo habla de los pisos, existen prácticas que consisten en subir hasta el Pent-House pasando por alto los pisos, considerando a los pisos como distracciones del objetivo trascendente.
Antes se hace necesario volver a aclarar algo, “Soltar el freno” no es hacer que la mente se vaya, no es un alejamiento de la mente hacia mundos de fantasía. Hay que entender que el freno es la mente y soltar el freno consiste es en acallar la mente. Cuando la mente se acalla el cuerpo vibra, cuando el cuerpo vibra cambia de frecuencia, cuando cambia de frecuencia se ve. Ese ver, a diferencia del ver de las cáscaras, del ver las capas externas y no lo que se mueve y transforma bajo ellas, ese ver, repito, es primeramente vibratorio y luego visual. Uno se convierte como en una superficie oscilante que reacciona a otras vibraciones, tales vibraciones no necesariamente poseen un cuerpo orgánico; cuando tales vibraciones causan una interferencia o más bien una resonancia con las que parten de nosotros la percepción del ser que vibra pasa a ser visual y realmente se ve a un ser hecho de vibración y de energía, inteligente y con capacidad de comunicación; esa comunicación no son palabras, es como un lenguaje de señas y energía que afecta, es como si uno fuese una superficie oscilante (la superficie de un lago, por ejemplo, o un mantel sostenido en el aire) y ese ser que afectó la oscilación hasta el punto de hacerse visible tiene la capacidad de tomar el mantel en sus manos, y sacudirlo de manera tal que desde afuera se nos modifica nuestra propia frecuencia y pasamos a otros niveles. A veces incluso en haciendo eso nos pueden llevar a otros planetas ¿Cómo se sabe que no son trucos de la mente? Basta con saber que la mente, el pensar nos mantienen, en una sola vibración (el esfuerzo por renombrar constantemente un mundo conocido, de revisarlo una y otra vez con el objetivo de mantener su firmeza) pero cuando se ha cambiado de vibración se comprende que la percepción del mundo normal es una vibración se haya circunscrito a una frecuencia. Cuando se detiene la mente (no cuando ésta “se va”) las vibraciones del cuerpo se liberan las muchas, las varias, las posibles, y se oscila, se vibra en una frecuencia en donde hay consciencias sin cuerpo.
Cuando observamos esas consciencias sin cuerpo, sin cuerpo orgánico como uno, sino con un cuerpo de energía, como un cuerpo de energía como uno bajo el cuerpo orgánico (cuerpo de energía que es el que se libera y vibra cuando la mente se detiene) cuando ello sucede y tales seres se manifiestan… bueno, pueden pasar muchas cosas: la primera que sucede es que nos calibran, la segunda que nos muestren que son de un tiempo Antes, es decir, las acciones realizadas en esa frecuencia repercuten posteriormente en el mundo que llamamos habitual. Puede haber uno de esos seres señalando hacia un sitio y al minuto producirse aquí un sonido en ese sitio, el ladrido de un perro, un choque de carros, etc. Y tales seres no dejan de hacer eso hasta que no generen en quien los percibe una convicción: de que son reales. Luego te muestran que están compuestos de dos tipos de energía de las cuales la que conocemos como vida es solo una de ellas. Luego te muestran su capacidad de transformación en distinta clases de seres y de cómo las transformaciones se logran gracias a una donación de energía – en realidad, cuando muestran estas cosas realizan una simbiosis: muestran procesos tan interesantes que el interés en la mirada de quien los ve les da la energía para la ejecución de tales procesos – finalmente te muestran que no son seres distintos a nosotros, son seres que transmiten su vibración a la materia para que ésta mediante un proceso de evolución los alcance. Luego te muestran que están directamente vinculados a las estrellas, que no son habitantes interplanetarios ni nada por el estilo, sino las estrellas mismas, que así como con cada una de nuestras vidas alimentamos a uno de ellos hasta que finalmente mediante nuestra experiencia lo podamos alcanzar (y tiempo y procesos hay para ello), de la misma manera su relación para con las estrellas es similar, es como si uno de ellos te dijera “Yo, con la única vida que yo tengo aquí, de la cual tú procedes, y has procedido una y otra vez hasta que estás casi a punto de alcanzarme, Yo, repito, con toda esta única vida en la Tierra alimento la fusión estelar de una estrella. Y, si tienes la inteligencia como para hacer una pregunta permíteme anticipar la respuesta: Sí, esa misma estrella puede tener otro yo ahora en otro planeta, pero fíjate en algo: su forma y sus atributos no son iguales a los míos, por una razón sencilla: nuestra forma planetaria depende de las características del planeta moldeando la energía de la estrella, la forma de ese ser en otro planeta dependerá de los atributos y propiedades de ese otro planeta y sin embargo fíjate que somos la misma energía viviendo experiencias distintas. Tú me alimentas a mí hasta que me permitas saltar hasta allá y a la vez estás alimentando una de las fuerzas de la naturaleza, porque aquí, lo que ves en mí es una formación humana a tus ojos, pero si amplío mi frecuencia fíjate, soy una fuerza de la naturaleza que genera variedad o fíjate, cambio a frecuencia verde y poseo otra forma más de río y hoja o a frecuencia naranja y soy una burbuja que acelera procesos y en frecuencia morada y otorgo transformaciones evolutivas ¿Ves? Y, si a veces te concentras en una energía, por ejemplo, sientes la energía de un bosque, y de pronto se concentra una burbuja de energía frente a ti y ésta modifica su vibración hasta afinarse en una forma que permita la comunicación te estarás comunicando con un pedazo de estrella aquí lo cual es no solo forma humana… porque si te pones a ver bien, estrellas, en una galaxia, es todo lo que hay… y cada una de ellas es distinta de la otra…”
Y luego las noches se hacen largas porque son más detallistas que el que más… te hablan de los sembradores, de los regadores, de estrellas con cualidades planetarias especialísimas, a veces son dos o tres o hasta más rodeando una hoguera… y es tan impresionante que uno se vuelve todo - recuérdese que se trata es de vibraciones habiendo detenido la presión del freno de la mente, ¡cuando se rueda se rueda de verdad ! – todo fuego ardiente, iluminándolos alrededor, como extrayendo magma de la Tierra y enseñándoles su color… hasta que una burbuja blanca surca el cielo y se los lleva y me trae de vuelta aquí.
(En la parte XXI tocará hablar más de los pisos y de energía sexual (jeje, nada malo, nada malo) y de los procesos que pueden seguir los novatos para ejecutar todas estas cosas que aquí se describen)
XXI

Ha de comprenderse algo: que si alguien quiere tener acceso a su piso inmediato superior sin perder los pies de este debe ser capaz de sentirse completamente cómodo en zonas de alta intensidad. Normalmente, se está en un piso, se muere, se pasa al negativo, se vuelve, se trata de unirse al negativo, pasar del negativo al positivo y viceversa son necesidad de morir y, cuando el piso queda pequeño comienzan a aparecer indicios pequeños, a gotear, pues, indicios pequeños de la existencia del piso de arriba… y se muere.
Toda energía es libido, toda energía es energía líbida. Cada piso está caracterizado por poseer habitantes con una cierta capacidad (así como unos envases poseen más capacidad que otros), la energía de la libido tiende a activarse cuando el individuo se ve sobrepasado ante una energía que se le está impregnando, y cuando ello ocurre el impulso que predomina consiste en descargar ese exceso de energía mixta con el fin de volver al estado normal (Es como cuando un chico y una chica salen, todo el tiempo, aunque no se toquen, se están impregnando de la energía del otro - si se llevan bien – y toda esa miasma comienza a mezclarse en ambos aumentando la energía de ambos y ahí surge la pulsión… el mirarse los cuerpos, el imaginar, etc. no son más que indicios de que ya están envenenados, de que ya se picaron uno al otro, como insectos turulecos). Entre los brujos sucede otro fenómeno: la energía que se mezcla y que se mezcla en aumento es la mejor para realizar un cambio de vibración y pasar ambos a otras esferas. Si en lugar de satisfacer la pulsión, la pulsión sexual, como tontos, procuran es aumentarla, llevarla a aumento, se van pisando escalones que van llevando al piso inmediato superior. La intensidad entre dos personas puede aumentar perfectamente, aumenta sus vibraciones particulares, si están sintonizados su andar pasa a ser atravesando dimensiones, se van formando capas negras que, para traspasarlas, basta con aumentar aún más la líbido entre ambos. No es un proceso nada difícil, en realidad es fácil; basta con que a esa energía que corre entre uno y otro se le permita correr así y aumentarla; llevarla cada vez a mayor aumento, hasta que ambos se configuran en otro grado y toda esa carga de energía muy intensa se vuelve tan cómoda como el mismo aire. Ahí es cuando se sabe que se ha subido un piso junto a otra persona, pero ambos deben compartir el mismo propósito, y saberlo: ser brujos, porque, caso contrario, se generan confusiones. Se sabe que ambos subieron juntos un piso por dos razones: adaptación plena y cómoda a la intensidad – es como si alguien caminando en medio de la más sensual y sexual de las orgías de pronto se sienta completamente cómodo y a gusto, como si estuviera caminando por un campo lleno de hongos, simplemente siente la energía que se produce como si estuviera sintiendo aire fresco, pero esta energía ya no lo jala -, y porque ocurre un cambio de paisaje.
Ahora bien, con el fin de evitar confusiones hay que ponerse un tanto pedagogo: El uso positivo que se le puede hacer a la energía de la líbido es aumentarlo, hacer uso de algo es hacer uso positivo; por el contrario, el uso negativo que se le puede dar es el buscar normalizarse, bajar su nivel, “calmarse”. El no saber soportar la pulsión se debe a no poseer resistencia, es la manera de decirle a la pulsión “Hasta aquí”.
Todo esto pudiera parecer una suerte de negativa al sexo… veamos un poco más:
“Hasta aquí” no es más que realizar un acto procreativo al cual se le sabotea o se le interrumpe. Usualmente el sexo se utiliza como “Descarga” o como intercambio muy intenso de energías hasta luego alcanzar la calma.
“Desde aquí” suele abrir dos posibilidades: la manera de los brujos que busca incrementar ese intercambio de energía que se da mediante deseo hasta que éste se transforma en un puente hacia otro plano (se necesita una cantidad de disciplina impresionante… y, aunque no se crea: hay quienes la usan) y en ese otro plano los cuerpos se transforman llegando a niveles de placer y vibración intenso ambos seres sumergidos en un nuevo paisaje e el cual todas las cosas poseen ese grado de intensidad. O una otra manera que también es completamente funcional, preparatoria, efectiva y tiernamente sexual: ambos, durante el acto sexual, procuran aumentar la líbido… en lugar de satisfacerla - Debe entenderse que estamos hablando de seres que vibran, nosotros, los humanos, y de que hay prácticas que consisten en extender las frecuencias de la vibración, mediante el sexo se puede perfectamente… pero cualquiera mira horrorizado cómo ni de eso saben hacer uso: Todo a lo que tienden es a mantenerse siempre en el mismo sitio, en el mismo punto fijo y, cuando la libido les “ataca”, les “muerde”, pues, a satisfacerla lo antes posible para a los diez minutos continuar siendo los mismos imbéciles de siempre - ¿Cómo se aumenta la libido, durante el acto sexual, en lugar de satisfacerla? Para ello hay un excelente libro “El Tao del amor y del sexo” el cual enseña a extender el acto sexual al máximo en el tiempo mediante la no eyaculación del hombre, cuando éste en lugar de estar tratando como un energúmeno de descargar de una vez todo ese para él molesto queso, va pausadamente, se conecta con lo que siente la pareja tanto así que el placer de ella se vuelve el de él, muy lentamente va aumentando, etc. poco a poco ella cambia de vibración y por consecuencia él también y en tres, cuatro, cinco horas toda una serie de seres estuvieron haciendo el amor en un mismo lecho. Pero se recomienda algo: conoce a la persona antes bien, sus movimientos internos, todas esas cosas que se saben cuando dos personas se gustan y se quieren, se gustan, y dense un tiempo para ello, para que desde antes de tener sexo exista esa conexión que permite que ambos juntos vayan alterándose juntos vibracionalmente. Hay un momento en que se vuelven burbujas y puf, ahí ya lo son todo. Se juntan las palmas de las manos y allí la energía que corre es la misma… no distintas entre extraños.
Y esa energía que es la misma que corre entre los dos progresivamente se mantiene una, y ahí, y solo ahí, estamos hablando de posibles viajeros que, caminando en la calle surcan dimensiones y bañan todo alrededor.

XXII

Muy bien, hablemos ahora de los pisos y de la característica de los pisos.
Los llamo “Pisos” aunque también se puede decir que se trata es de una Espiral, por una razón sencilla; hay energía negra que los separa. La energía negra se comporta de la siguiente manera: comienza muy oscura y tenebrosa sensorialmente y las primeras luces que de ella surgen son de sed, de la oscuridad surge una suerte de gas luminiscente blanco, blanquecino, y las primeras imágenes que se conforman suelen ser un poco desagradables, calaveras, rostros con grandes huecos en los ojos, bocas abiertas completamente negras que succionan energía, etc. esa es la cualidad. Recuérdese que quien observa esto se halla en una frecuencia distinta de la habitual y es su cuerpo de energía el que reacciona ante esas conformaciones de energía que se dan. Por supuesto que cualquiera se puede asustar, es como tomar un bote, en donde el cuerpo de energía activado es el bote, y cruzar un río muy oscuro y lleno de brumas. Luego uno nota algo: que, si uno permite que tales figuras tenebrosas tomen de la energía de uno, absorban toda la energía que quieran absorber, poco a poco aparece brillo desde el fondo de esos agujeros negros de los ojos de muerte, la energía de uno pasa a ser totalmente diferente y de pronto uno se halla ante seres de una energía realmente poderosa y hermosa. Cuando se cruza energéticamente uno de estos ríos negros se ha muerto, se ha realizado un cambio en la energía muy profundo, una sintonización, se vive un hundimiento (el cruce) y luego un estado de profundo bienestar, definitivamente se ha dejado lo que conocemos como vida o este mundo atrás. Y la relación con tales seres son una cosas que nada tiene que ver con como hemos estado acostumbrados a que son las relaciones entre seres humanos. Se sabe y se siente que el contacto con tales seres no es contacto con seres que están aquí. Es realmente como despegar del cuerpo cruzar el espacio exterior y llegar a no se sabe donde… pero ese no se sabe dónde es extraño: da la impresión de que cada uno de esos seres son estrellas o como si éstas fuesen un reflejo de tales seres.
Hay dos maneras para realizar tales cruces y tales encuentros: o poseyendo la habilidad de abandonar el cuerpo durmiendo o, estando despierto, poseyendo la habilidad de cambiar totalmente el espacio alrededor – yo tiendo más a esto último. Esto último es más limitado que poseyendo la habilidad de salirse del cuerpo. Pero estando despierto ocurre lo siguiente: que uno puede ser llevado de lleno por cuestión de segundos, sentir todo ese impacto súper poderoso de energía, luego retornar y mantener un contacto sutil.
El contacto sutil se trata de lo siguiente: se trata nada más y nada menos de participar junto con seres de otras esferas aquí. Vamos: uno puede ir a la casa de ellos, estar en su terreno, súpero fuerte, poderoso, alegre, feliz y lleno de una inteligencia e integridad de la cual los humanos somos menos que hormigas. Pero otra cosa muy distinta es regresar, hallarse aquí y ver cómo aquí se manifiestan y – esto es algo que se descubre maravillosamente -, sus manifestaciones aquí son para aquí; están ligadas u ocupan fuerzas de aquí.
Daré un ejemplo: imagina que hay una sequía en algún sitio y alguien pasa a ese estado vibratorio en el cual se halla en esa misma frecuencia en la cual esos seres se manifiestan aquí para aquí. Surge uno de esos seres compuesto de energía blanca y negra (suelen manifestarse preponderantemente con esos colores aquí, pero cuando se los ve en sus casas son real e impresionantemente coloridos) y en su aparición (que puede ser un acercarse desde la distancia o un ir surgiendo desde otra dimensión) de una manera u otra pide o pretende que quien lo observa llene un vacío en la energía negra – lo puede manifestar de mil maneras: puede presentar un envase vacío y lleno de esa energía negra, como un ánfora; puede mostrar un escudo negro, como un paraguas, puede abrir sus ropas y mostrar un abdomen negro y succionador, etc. de mil maneras, pero la imagen que presenta calibra en el observador la energía precisa que la entidad requiere del observador – si quien los ve está acostumbrado a sus modos y sabe de qué se trata podrá estar hasta media hora llenando el ánfora. A veces incluso los ojos del ser se vuelven realmente aterrorizantes, con forma maligna, peor no es más que un requerimiento extra de energía de parte del observador, el observador debe estar totalmente dispuesto a ser usado y calibrado en todo ese juego de combinación de distintas energías presentadas en cambiantes formas con el fin de cumplir el requerimiento por el cual la entidad se le acercó. Realizado esto el observador verá cómo a los tres días finalmente cae la lluvia.
Ser calibrado hacia usos de la propia energía que uno ignoraba que puede ser calibrada – no solamente el tipo de energía pero también la intensidad exacta junto con la emoción exacta, la cual le da un toque a la energía, una afinación – al comienzo se puede sentir como una suerte de imposición, de que una fuerza externa venga y haga un uso de la esencia de uno mismo que uno mismo ignoraba, etc. pero luego, eso, que primeramente se realizaba debido al dominio que se le cede a una fuerza externa es algo que se va descubriendo en uno mismo y que luego uno mismo puede realizar – es como ser un pedazo de plastilina vibrando en una frecuencia en la cual puede ser moldeada por seres de esa frecuencia, pero luego la plastilina puede por su cuenta realizar por sí misma las transformaciones que fueron realizadas sobre ella. Y todas las transformaciones que realizan sobre los “observadores” son requerimientos. Uno no tiene por qué saber de qué se trata. Es precisamente ese afinamiento, esa calibración realizada por una fuerza externa, la que permite ser sustraído de aquí y llevado a sus casas. Pero no siempre se trata de necesidad, pero cuando se trata de necesidad te buscan. No es exactamente que quien observa y realiza estas prácticas sea imprescindible y requerido… pero si el deseo de uno es aprender el de ellos es enseñar. Otras veces, por cuestiones de la vida puede que sea uno, quien requiera de energía, vienen y te cargan. Es amistad.
Si alguien cree que se trata de mundos paradisíacos, de paraísos artificiales, de mundos de evasión, No… se trata de otra cosa: se trata de que es la energía interna la materia de la cual se está hecho y no es tan fácil darle uso ni saber cómo darle uso…, pero existen seres compuestos de energía interna y saben darle uso, no tienen la cáscara ya, su ser no está dentro del caparazón de la semilla, su forma externa, exterior es pura energía, al cual saben darle perfecto uso… si se acercan a unos cuantos aquí se debe únicamente a que esos cuantos se interesan en darle uso… al final, aunque no se sepa, eso es todo lo que se es.
Sus formas aquí son sutiles, en realidad uno es el que amerita activarlos para poner toda la maquinaria a funcionar, te ven y dicen “Ok, bueno, a Trabajar” – se trata de un tiempo Antes, de un tiempo que crea futuro – se alcanza la frecuencia en la cual se está en estado de completa igualdad (aquí) y se intercambia, y se puede pasar así meses y años – se accede a esa frecuencia no es que se está en esa frecuencia todo el tiempo, se aprende a subir y a bajar el estado – pero aunque sea una vez dejan de ser tan sutiles, te miran a los ojos dos o tres o más al mismo tiempo, se encienden de colores y por segundos te llevan para allá y te da cuenta que allá no es aquí, que aquí uno solo de esos seres sería más grande que un rascacielos y que cada uno de ellos posee la energía de una galaxia o la de una estrella, se llega incluso a dudar de que sean de este mismo Universo. Aquí, en la Tierra son la forma que la Tierra hace con el brillo que captura de cada uno de ellos. Dirás “¡Son un hada, son un gnomo, son un duende!” y yo te respondo que sí y que son también un puente… que solo ellos pueden cruzar.
Pero aquí, aquí en la Tierra el trabajo con ellos siempre es negro, ánforas por llenar… lo cual implica versatilizar (a veces incluso volatilizar) la energía que se tiene por dentro… porque lo que sirve no es solamente el uso que se le da a lo que se tiene sino también el uso que mediante trabajo se puede obtener.
(En la parte XXIII hablaré de trascendencia y descenso)

XXIII

Las primeras veces, cuando se logran cambios en la vibración y el atestiguamiento de otras frecuencias, hay dos tipos distintos de reacciones que se sienten como un latido fuerte en el corazón: algunos desean ascender y otros desean descender. Éstos últimos suelen sentir “Yo me quedo hasta el final” (y suelen ser quienes se sienten más viejos).
Hay algo impreso desde antes que dice quiénes vinieron y quienes van. Quiénes tienen una cama en el fondo del Tártaro y quiénes están tan ligeros como un diente de león.

XXIV

¿Qué significa “sentirse viejo”?... cuando alguien pierde su mirada, luego mira todo a su alrededor, sonríe, se ríe, vuelve a perder su mirada como en alguna lejanía del pasado, suelta una lágrima como en tributo hacia el pasado y un temblor para el futuro, luego mira todo a su alrededor, sonríe, se ríe, alza las cejas, siente una sacudida eléctrica en todo su cuerpo… y finalmente exclama “¡¡Me siento viejo!!”?
¿Qué significa eso?
Cuando se trata de recuerdos nada como alguien que estuvo. Pudiste haber vivido en Holanda hace quinientos años, por ejemplo, cuando zarpaban y llegaban buques mercantes; toda esa fiebre de unas tierras ricas recién descubiertas, pleno barroco, cambio del mundo. Pudiste haber estado ahí y algunas sensaciones en algunos momentos te invaden. Pero, te lo juro, si te hallas ante la presencia de alguien que estuvo ahí en esa misma época, lo sepas o no, se da un intercambio de cargas magnéticas que ayudan a avivar los recuerdos, sensaciones extrañas en común que bien pudieran convertirse en recuerdos completos… y quinientos años no es nada.
Mil años, tres mil años, no es gran cosa. Cuando se trata de recuerdos del pasado muchas veces no se llega más atrás. Y es que no nos damos cuenta aún, pero el mundo cambia, y es un cambio que no es realizado por los hombres. Digamos que la energía del mundo no es siempre la misma, se dan cambios graduales, muy lentos, de verdad muy lentos, que modifican completamente lo que significa ser en un mundo, en un planeta, cambios originados por el mismo.
Si uno se pone a ver de verdad esta es una Era insecto, de todos los moldes existentes es este último el que nos dirige, del que adoptamos su sistema para producirlo en grande en el mundo. Es una vibración que emana de la Tierra a la cual todos obedecemos: comunicación mediante antenas, sistemas jerárquicos, viviendas-colmenas, producción de productos químicos… y, si hablamos de formas podemos simplemente no parar: metro (subterráneo)-lombrices, helicópteros- libélulas, carros-cucarachas, tractores-escarabajos, motos-hormigas, si te paras a ver todo lo que trascurre en un día por una autopista con una enciclopedia de entomología en la mano, verás fácilmente quién “nos venció” y, si te pones a ver los armamentos de guerra te vas a divertir o vas a llorar. Insisto: es una vibración proveniente de la Tierra a la que todos obedecemos. Existe una coordenada en la cual es posible conectarse con esa frecuencia, se entienden muchas cosas cuando se está ahí, y es de terror. Luego a veces se da que varios chamanes les interesa conectarse con esa frecuencia – dos veces lo he visto – y aparece una explosión ambarina gigantesca, poderosísima, y lo ven. Y se dan cuenta que ese ser es invencible, que es el dueño del turno de esta época – como lo fue la serpiente en la anterior (y eso está en todos los registros) –, pero también se dan cuenta que cumple una función y llegan a comprenderla; de alguna manera muchos insectos en la naturaleza poseen como función liberar a la energía de la materia, son seres que realizan profundas transformaciones en la materia.
Uno puede dar un paso hacia atrás y recordar cómo fue el paso de la Era del ser humano a la Era de la serpiente, el parcelamiento de la Tierra, la aparición del signo sobre la piedra (quitándonos así la piedra y convirtiéndola en lectura únicamente… recuerda), la construcción de muros de miles de piedras como escamas serpenteando en el paisaje. Nos fue más fácil realizar tales registros porque veníamos más directamente de nosotros mismos, lo escribimos, lo esculturizamos en todas partes y los registros esparcidos por todo el planeta están. Pero, para el ser humano de antes significó un volverse más pequeño, un no poder expandirse, estirar los brazos en entera libertad. Sin embargo tales cambios que se dan en un planeta atrae nuevas estrellas, mas jóvenes, que en la época anterior no podrían hacer estado por no haber desarrollado aún los atributos necesarios para poder haber estado en la Era anterior. Humanidades vienen y humanidades van, algunas se quedan cruzando Eras y otras retornan.
Pero cómo fue la Era en la que la vibración humana es la que regía y partía de la Tierra… allí están los registros mitológicos, abundan por todas partes también, mas no son suficiente.
Imagina un sistema. Imagina más bien una noción de sistema. Imagina una noción de UN sistema, e imagina que abres los ojos y es realidad. Un sistema natural del cual no solo eres (Eras) parte integrante, sino también activante ¿Recuerdas?
Significa que el bosque por el cual te paseas lo llevas por dentro y por fuera, que la rama la sientes dentro y fuera de ti y desde adentro, tocándola desde adentro puedes enriquecerla por fuera. Significa que las nubes pueden ser amontonadas, cargadas, enriquecida como con vitaminas la estructura molecular de cada molécula de agua y puesta a nevar y a enriquecer la tierra, significa que primero tocas por dentro – porque todo ese sistema está dentro de ti – y enriqueces por fuera. Significa que todo lo que ves lo sientes como parte integrante de ti. También ocurre que estás conectada, conectado, con otra esfera de la cual todo lo que ves aquí es una escala en fractal menor, y de allí (que puede ser allí o dentro de ti en una escala fractal intensa, concentrada dentro de ti como un diamante pulsante interno) transmites la energía para aquí ¿La piedra? Si era ligera por dentro se hacía ligera por fuera. Todo era un solo sistema del cual eras la parte actuante-activante ¿Hacía falta construir? No, el signo sobre la piedra apareció luego, mucho después, para quitarnos la piedra y convertirla en lectura ¿Nos molestó? No, pero entendimos que se dio un cambio y muchos se fueron y otros quedamos y los nuevos a-traídos aprendieron a leer.
Recuerdos hay de ello, de esa Era de la cual algunos saben no olvidar, nos comunicábamos a través del viento y todo era tan natural. Pero para que recuerdes bien mira las flechas: de una esfera de más arriba (imagina una cadena de adn planetaria-estelar) que se carga por dentro te cargas por dentro para aquí. La nube es nube-hija y tú estás conectada con la nube-madre, el árbol es árbol-hijo y tú estás conectada con el árbol-padre, tomas la energía del padre (que gustosamente la da), de la madre (que gustosamente la da) y nutres a los hijos – ahí era cuando nos volvíamos más eléctricos (Antes, en un ciclo anterior, en pleno apogeo de la Era Primavera, lo éramos todo el tiempo, pero dudo que estábamos aún en cuerpo orgánico) -, todo dentro de un sistema, de un solo sistema natural en el cual se siente tan bien y, aunque no parezca: tan humildemente activante, no cabía ninguna soberbia, las cosas eran así, fueron así durante miles de años aquí (y aquí es un chiquito aquí) y éramos así, aquí… a un tercio hacia las afueras de la galaxia en donde se encuentran las pequeñas estrellas que aun han de crecer.
… y se dice que, una vez que anduviste en bicicleta, no se olvida jamás.
La gran mayoría se fue, creo que algunos van a retornar… yo jamás me fui, y por eso es que me siento viejo… pero juro que me quedo hasta el final !

XXV

Nada se logra sin humildad.
Si alguien desea que todo prospere a su alrededor, que todo se enriquezca y se embellezca, debe ser ante todo humilde. Debe, independientemente de su tamaño, volverse la más pequeña de todas las cosas, caminar entre ellas embelesado y con el corazón lleno de cariño y admiración. No sentirse la más pequeña de todas las cosas sino sentir lo gigantesco y bello de todo a su alrededor. Mecánicamente el fenómeno se compara a una suerte de autoexprimirse de una esponja, el humilde se encoje cada vez más, se empequeñece de manera correspondiente a cómo su admiración por todo lo que le rodea aumenta. Es un movimiento íntimo, tan íntimo como el latido de un corazón, y hacia adentro, sin darse cuenta está jalando de una cuerda que aumenta su brillo externo, él o ella misma no lo ve, solo ve que todo a su alrededor se engrandece. Un grandificador.
Los hubo algunos en el mundo, y, aún en el lodo se pueden ver sus huellas. Las cuentas, cuando tienes cincuenta huellas contadas ves como comienzan a empequeñecer mientras los árboles a la vera del camino son más fuertes, más grades, más frondosos, sigues el rastro y éste desaparece en el agujero de un hormiguero, huellas tan pequeñas como las de las hormigas y tú no sabes cómo es que el bosque se convirtió ahí en jungla.
Aún hoy en día buscan la causa genética de los pigmeos… y ellos mismos ignoran lo que hacen con sus cantos.
Dicen que lo que se desprende con cariño vuela fuera del cuerpo como palomas haciendo piruetas en el aire hasta acoplarse al cuerpo externo que el primero había sentido primero por dentro, partículas u ondas que nutren y enriquecen.
Y dicen que no hay otra manera que la expresada anteriormente para poder sobrevivir en Júpiter, para habitarlo y amarlo.
Dicen que los seres de la esfera inmediatamente superior a la humana, más intensa, ese nosotros mismos del cual somos fracciones, esponjas de alimento, esos que procuran saltar hasta aquí hasta que cada uno de nosotros alcance la vibración con la que marcan y dirigen nuestros destinos; esos, esos mismos que son también las fuerzas naturales de la Tierra, esos… dicen que aquí en la Tierra no hacen más que prepararse para ir hasta Júpiter, si aquí son todopoderosos e inmensos allá en Júpiter son pequeños. Dicen que en Júpiter son testigos constantes de un cielo denso, con una densidad entre el aire y el agua, que sus cielos son solitarios y sin estrellas, densidades que se mueven como remolinos apareándose y que de vez en cuando aparecen en el cielo unos seres inmensos entre nubes y animales, parecidos a ballenas y esqueletos. En Júpiter todos los movimientos suenan. Y esos seres que aquí somos nosotros en futuro sin muerte allá son alimento de esa suerte de ballenas. Dicen que cuando una de tales ballenas se aproxima en sus ojos está la mirada de todos los animales que fueron asesinados por milenia aquí en la Tierra… una suerte de paz sin compasión.
XXVI

Ahora bien, toca hablar un poco sobre qué son las entidades, sobre prácticas y sobre planetas y se hará en partes.
¿Cuál es la diferencia entre los seres humanos y las entidades? Es simplemente un asunto de percepción, sin la cáscara de la semilla no hay realmente mucha diferencia. Pero hay una diferencia enorme entre lo que se percibe si se ve solamente la cáscara de la semilla a que si se ve lo que germina. La cáscara es el cuerpo sólido, los brazos, las manos, el rostro, los rasgos, el cuerpo; pero lo que germina es una entidad – y hay maneras, trucos, prácticas para percibirla, en los seres humanos. Entre esa entidad que está viva, como ser humano, bajo la cáscara (precisamente ese algo que te distingue de tu futuro cadáver) y las otras entidades que, aún no poseyendo cáscara, pueden ser percibidas no hay mucha diferencia. Pero, entre todas las entidades hay una única diferencia que es niveles de versatilidad y la falta de versatilidad produce búsqueda de energía con el fin de hallar mayor versatilidad.
Un Demonio que se pasea por los páramos no es más que una entidad que amerita energía, puede ser una entidad absolutamente hermosa, pero está requiriendo de fuerza. A la distancia distingue a un caminante solitario. La entidad sabe que ese tipo camina absorbiéndose sin darse cuenta en la energía del paisaje ¿Qué hace entonces la entidad?: concentra su energía para que el caminante pueda comenzar a sospechar de algo raro en el ambiente, le emana, al caminante, una serie de sensaciones, miedo, por ejemplo, le pone una mano sobre el hombro, por ejemplo, y ese miedo va modificando lentamente la coordenada del caminante hasta un punto de encuentro. El caminante, mareado por el cambio y agotado se echa en el pasto o se sienta sobre una piedra y descansa. De pronto ve frente a él una numinosidad donde un arbusto y va viendo poco a poco (a medida que se mueve su coordenada) una forma que se forma, ve una mujer, por ejemplo (la entidad modula su vibración) y de pronto la ve con patas de cabra, una cola que termina en flecha y unos ojos de pura maldad y de pronto ¡PUM!, el objetivo de la entidad se cumple: ese bajón en la boca del estómago del caminante acompañado con ese temblor es para la entidad una emanación de energía muy fuerte que la entidad toma, y con esa energía tomada la usa para modular con aun más facilidad su vibración. El caminante huye despavorido y cuenta a todo el mundo que vio al Diablo, y se persigna pálido y va a la Iglesia del pueblito y listo, se confiesa y promete portarse bien por el resto de sus días. Pero viene otro caminante y la entidad feliz de esa inyección de energía que el susto del caminante le aportó ve a otro caminante, un tipo más joven y ve que el tipo es un poco más empático, le modifica con su energía la coordenada, hace que se siente en una piedra, esta vez cerca de un río y lo lleva hasta un estado de ensoñación y allí se muestra como una mujer hermosa, que ríe, que se arroja desnuda al río y se baña en él y ese segundo caminante comienza a sentir una sensación erótica, cabeceando se queda dormido y la entidad se lo coje, el sueño se vuelve completamente vívido y las sensaciones externas también. En ese momento la entidad puede obtener del caminante la energía que desee o que necesite de él simplemente modificando la forma con la que se presenta modificando su vibración; puede convertirse en un ser al que el caminante será capaz de construirle un templo o presentarse como el ser que le de el susto más poderoso de su vida. Hay un objetivo que la entidad desea alcanzar, y cuánto menos energía le falte para alcanzarlo más agradables serán los encuentros que produzca, podrá aparecer como un hada que cause simpatía y a la que sea un placer del otro mundo ver y con la que se creen relaciones de mutua ayuda y simpatía - si alguien cree que nadie cree en estas cosas se equivoca, nunca ha dejado de ser parte de la humanidad – la entidad se alimenta entonces, se retroalimenta, de energías agradables, ensaya sus propios usos ya sin emergencia en cosas más placenteras, como ayudar etc. y, si logra dar a entender cuál es su objetivo probablemente reciba ayuda o la sepa obtener jugando con las sensaciones que causa en el observador sus cambios de forma – estas formas se aceleran, los cambios de las formas, se aceleran, cuando está a punto de alcanzar el objetivo. El objetivo es un verdadero placer verlo: la entidad se consolida como esfera con todas las propiedades y finalmente desaparece cruzando hacia no se sabe bien qué. Imagina simplemente una esfera que busca tocarse en todos sus puntos, eso es una entidad, para ello sabrá obtener la energía para tocarse en todos sus puntos, cada punto es una forma y una función energética distinta a la anterior. Así que, por favor, no me hablen de ángeles y de demonios, todos esos seres se hallan en una misma esfera.
Cuando una persona comprende esto, de que cada una de las entidades procura en sus contactos tocar todos los puntos de su esfera y uno la ayuda otorgándole la energía que ella amerita, sintiendo miedo si es lo que la entidad requiere o sintiendo placer si es lo que requiere o embelesándose maravillado si es la energía que requiere… y la energía que requiere te la calibra en ti mediante la forma que usa, sabe que sus formas producen reacciones y la entidad calibra la reacción, pues, es una cosa hermosa, inteligencia veloz en acción, y se entiende que los humanos tienen el mismo peo, exactamente la misma necesidad pero no lo saben, simplemente demandan y torpemente a través de pulsiones de su inconsciente – una entidad es un ser ¿inconsciente?.
Ver al germen de un ser humano es lo más fácil de este mundo, basta con que sepas relajarte, bajar el caset del pensamiento al mínimo, ubicar a una persona que pueda estar ahí sin moverse por largos minutos, y no la mires de frente, mira hacia un lado de la persona colocando toda tu atención en la persona, después de un tiempo – es mucho más fácil si los cambios de frecuencia ya te son más fáciles – después de un tiempo algo sucederá en ti que va a comenzar a ver cosas en la persona, al comienzo sutilmente, luego la cosa va desarrollando más intensidad en la medida en que tu energía se deja guiar por las formas que ves en la persona… y hay un momento en el cual te vas a dar cuenta que los humanos rotan dentro de sí. En los humanos también se pueden ver muchas entidades diferentes. A veces se ve un ser pálido con la boca abierta y negra – lo cual significa que necesita energía – y una vez que la obtiene se cambia hacia otra cosa y a veces se ven seres realmente hermosos, y la forma de la cáscara es absolutamente independiente de ese fenómeno. Hacer eso en el metro es una maravilla, o en una conferencia, etc. A veces se ve que un ser hermosísimo brota, alimentado por la energía que así se le emana, y se da una energía de simpatía agradable entre el observador y la persona… es como si el inconsciente fuera un envase que a veces – lamentablemente muchísimas veces – amerita ser llenado y cuando se llena puf una luz aparece en el consciente, un suspiro, un relajamiento total, o un gesto de simpatía hacia el observador… a veces uno se da cuenta que de alguna manera lo sienten. Al principio se ven, cuando se comienza a hacer esto, otras personas, son personas que suelen estar en la misma frecuencia que la persona a la que se observa, luego se ve a la persona con ropas del pasado – es un ver-sentir de energía – distintos rostros y géneros (mujer, hombre, niño, niña, viejos) pero se siente que es la misma persona y luego se dan las fusiones con animales u otras fuerzas y luego pasan a ser seres hermosísimos que no son de aquí, casi todos distintos de entre otros, finalmente, aparece como una luz, como una estrella sobre la coronilla de la persona, y listo, misión cumplida, trabajo realizado.
Como dije, es sencillo, pero es el paso necesario para entrar en conexión con las mismas formas fuera de cáscara – ojo: cada quien tiene su estilo, este ha sido el mío entre otras cosas… pero este es el más simple para novatos e incrédulos.
Cuando uno se acostumbra, observando al germen de los humanos, a tanto las distintas formas como a las transformaciones así como a que la energía del observador varía, cambia, se modifica, durante la observación luego uno se lleva la sorpresa de ser visitado y ameritado por entidades… y se convierte en una cosa de verdadero gusto.
¿Cuándo una entidad logra tocar todos los puntos de su esfera y desaparece completada hacia dónde va? Se sabe y se sabe hasta en física, que el vacío posee más energía que la capa visible de las cosas, el vacío no posee menos energía que todas las cosas que se ven, sino más. La entidad cuando se enciende en su esfera pasa, a través del vacío a zonas de mayor energía. Y de ahí surgen también seres, de allá para acá, que no vienen a buscar nada, sino a alterarlo todo. Seres tan perfectos, tan inimaginablemente evolucionados que se puede decir que están fuera de la evolución, o que de allá para acá no necesitan obtener nada de aquí, seres que ni siquiera son energía sino alguna suerte de instancia anterior a la energía, ya que son seres capaces de producir energía o de permanecer sin ella, como si la energía fuese simplemente una materia con la cual trabajan. Las entidades son terrícolas, suelen serlo y son semillas para otros planetas (nosotros, con cáscara, por más que lo soñemos, no); pero estos otros no; es como si la Tierra fuera solo parte de ellos, y una parte bien pequeña, en realidad se sienten como si fuera el Universo parte de ellos, de la materia con la que juegan… ellos no necesitan de la energía de lo que hay, ellos mismos la pueden hacer brotar de sí ¿Poseen una forma específica? NO, pero pueden solidificarse en cualquier forma y llevarte a donde sea y conectarte con lo que desees. Son el observador y uno la entidad amada y observada.
Son los que siembran.

XXVII

Ahora bien ¿Entre los seres y las entidades qué diferencias hay? Recuérdese que las diferencias son solamente asunto de moldes, los cuales sirven para la obtención de experiencias precisas, bajo ciertas condiciones, la condición es el molde, el cual condiciona el o los tipos de experiencias posibles, pero fuera del molde solamente hay grados de evolución.
Hay otras entidades – que no son otras, como vemos – que, una vez habiendo utilizado energía de otros seres para acceder a todos los puntos o coordenadas posibles dentro de su esfera, para pasar por todas las posibilidades de su esfera… o molde, mueren o se completan, y pasan a otro molde en el cual poseen la misma esfera pero ya manejable por ellos. Pueden reproducir todas las formas y tipos de energía posible que caben en su esfera, su interés ya no es el ir encendiendo zonas una por una hasta completarse, sino que son capaces de visitar tantas veces como quieran tales puntos en sí mismas, aprenden a ajustarse en cualquier vibración, reproducir cualquier forma sin ameritar para ello energía externa, pueden incluso convertirse en la esfera completa, como una suerte de burbuja blanca, pueden volverse onda, es energía ya consciente de sus posibilidades.
Estas entidades adquieren la facultad de poder moverse por todo el Sistema Solar, en todo él; y en él cada planeta posee un conjunto de funciones que le dan su particularidad.

XXVIII
Sobre prácticas

¿Qué significa una práctica? No estoy hablando de dejarle pan y galletas y agua o leche a alguna deidad ni de colocar flores bajo la foto de nadie, ni de realizar un complejo ritual colocando las manos de una manera específica. Nada de eso. Para mí una práctica no es más que una técnica para modificar la frecuencia, la vibración de uno.
Todo esto viene a ser muy mío, muy a mi manera y simplemente tómese como alguien contando algo, haciendo un comentario sobre algo que le funciona – lo cual no significa ni que sea lo mejor ni lo peor, es simplemente lo que mejor le funciona.
Si comparo la manera en que yo hago la práctica con la manera en que otros la enseñan creo que puedo decir con propiedad que yo soy adepto a una práctica a la que sólo puedo llamar descentralizada (en la cual yo no soy el centro que se nutre de su poder), me explico:
Me coloco en una postura que no es la clásica de flor de loto y la columna derecha, sino que simplemente me tiro por ahí, boca arriba, la cabeza un poco alzada como los enfermos, sostenida por una almohada, las piernas con las rodillas hacia arriba pero no mucho, formando una triángulo con el suelo o colchón y las manos con los dedos entrelazados en cualquier lugar desde más abajo del ombligo hasta el pecho; o con las manos a los lados uniendo todos los dedos menos los meñiques y entonces simplemente dejo de pensar – pero ese “simplemente” cuesta meses de esfuerzo en un comienzo – Cuando se deja de pensar al rato ocurren cosas, la energía del cuerpo se activa – no me concentro en nada, ni en una luz ni en un sonido, en nada – y cuando la energía del cuerpo se activa comienza a moverse sola. Mi práctica consiste en dejarla moverse sola, por sí misma, es como estar en un carro y permitir que éste se autodirija hacia donde quiera. Cuando se hace esto se siente una inteligencia que sabe lo que está haciendo y sobre la cual la consciencia está inconsciente… así que simplemente se la deja hacer o ser… y uno – la consciencia de uno – simplemente la atestigua, la siente moverse. A veces el movimiento es concentración, toda la energía se concentra, se compacta, otras veces se expande fuera del cuerpo, como si fuese un sol o una sábana que se expande y se convierte en onda, otras veces se siente como un movimiento de placas, como placas que se mueven… y da la impresión de tratarse de un ser que se está conociendo a sí mismo, o despertando… y cuando uno lo deja ser y hacer realmente la consciencia no tiene ningún control, es como si se tratase de un ser con deseos propios, desperezándose o aliviándose luego de estar sometido a posiciones incómodas por la mente consciente, es como un ser que de pronto se vuelve libre. Uno (lo que uno cree que es uno) simplemente le permite moverse. Y la verdad es que uno se carga bastante y se fortalece. Esa postura permite que uno se quede dormido y puede darse el caso de que uno se quede dormido sin perder la consciencia.
Esa es una práctica con los ojos cerrados y da mucha elasticidad al cuerpo energético ya que es eso lo que éste busca obtener, elasticidad, maleabilidad.
Esa es una práctica con los ojos cerrados.
Con los ojos abiertos baste con saber reproducir los cambios en el cuerpo energético que se realizan con los cerrados. Los efectos son un oscurecimiento de la luz alrededor, y uno debe mantenerse así, posteriormente, después de un rato de la oscuridad comienzan a aparecer luces, esferas luminosas o sombras oscuras y, si uno se fija en ellas lo jalan a uno a un estado aún más profundo en el cual éstas van adquiriendo forma. Cuando adquieren una forma se comunican, y ya he hablado de lo que hacen (se transforman, etc. cambian su energía, etc.) pero todo lo realizan comunicándose no con uno, sino con ese ser que hay en uno (o que uno está en él) que pareciera tener independencia propia. Ahora bien, esos seres son 100% o conscientes o inconscientes es decir, son completos, uno también es completo y no lo sabe, la comunicación de esos seres es para con el ser completo en uno del cual uno no está consciente, pero la comunicación facilita a uno a hacerse cada vez más consciente, a que la consciencia se complete en consciencia completa de sí mismo.
Todo esto pareciera sugerir una suerte de descontrol, ya que la parte consciente de uno no tiene control sobre la totalidad de uno que es a la que la consciencia permite activarse, moverse, ser en este tipo de prácticas, la consciencia se pasa a mínimo y solamente atestigua como si la cosa no fuese consigo misma sino con un ser desconocido para uno mismo, para sí misma… pero el placer que se siente, al permitir esa “Liberación” es intenso. A veces los seres que se perciben, esas burbujas de luz que flotan posan y se convierten en hadas (por darle un nombre a seres humanoides de varios centímetros), se fijan es en uno (en la parte consciente que se limita a atestiguar), en un par de ojos que los observan poniéndose en mínimo y le lanzan a cuerpo de uno (la cual no es la totalidad de uno mismo *) una bola de energía al pecho o una mirada llena también de energía a lo que se conoce como el tercer ojo, se siente con fuerza, realmente se siente como un choque, un impacto eléctrico… ha de comprenderse que uno, para alcanzar tales percepciones debe jugar a no ser más que un pedazo de carne muerta. * ha de entenderse algo: ese ser completo en uno, consciente e inconsciente, vibra completo en una esfera a la que podríamos decir que es Vida Y Muerte, los seres que se perciben en esa frecuencia a la cual uno deja que el ser completo en uno le lleve son Vida Y Muerte (es por eso que también le llaman “hadas”, de Hades (reino de los muertos, solo que no son muertos, es más bien otra frecuencia con seres, pero ahí no está la gente que muere sino la gente de la cual los vivos nacen y esa es gente que no cambia (excepto energéticamente) que no necesita “reponerse”, es una frecuencia con leyes distintas de energía y transformación y cada uno de esos seres puede tener un rango de vida de miles y más miles de años, otros de desde el comienzo hasta el final de la Tierra). Tal práctica es guiada precisamente por esos seres, al comienzo juegan al miedo y a las transformaciones, luego comienzan los tiros, los disparos hacia uno de energía, luego por a poco te muestran cosas de ellos mismos y del lugar que habitan (un plano intermedio entre la humanidad y las estrellas dirigido por la Tierra) hasta que llega un momento en el cual uno posee en sí esa frecuencia, uno la alcanza desde adentro, la accede cada vez más fácilmente, la comprende cada vez más fácilmente, se es enseñado, y se comienza a actuar en ella. Sólo que tales seres son mucho más versátiles: son capaces de crearse a ellos mismos replicando su energía. Pueden, digamos, sacarse mil costillas de la cual forman mil seres de la misma materia. En realidad es asistir a un espectáculo dirigido por malabaristas de energía. También ahí hay niveles y seres que, siendo distintos, más parecidos a genios, cruzan sin necesidad de alterarse, todos esos niveles, no son humanoides, son de otra especie. A veces uno de tales seres lo está esperando a uno allí entre unas matas, uno lo ve sentado, de perfil, de pronto gira la cabeza y le lanza a uno un brillo de estrella con sus ojos y uno se queda rato y rato viéndolo en su aspecto tan curiosamente extraño, siempre fusión de humano con animal, pero siendo ser completo, y de pronto uno ve cómo saca de sí mismo buena parte de su energía e intenta volverse forma humana únicamente. Uno asume que es que espera encarnar, que se encuentra al acecho de algún coito en la ciudad para nacer, y uno se acostumbre y lo acostumbra a verse como humano, después de un rato hace un gesto de que el favor que uno le hace ha sido completado, realizado, y se vuelve como en copo de nieve y se va (y uno sabe que nacerá uno con poderes).
Otro de los ejercicios para ojos cerrados fue una sugerencia de uno de tales seres, me dijo “medita según los elementos” así que pensé en Aire, Tierra, Agua, Fuego y Éter. Aire lo transformé en “Viento” y me inspiré en una cosa que me enseñó Lila Vak en un sueño, un favor que me hizo. Se trata de sentir todo el cuerpo como si éste fuese no solamente transparente sino también completamente permeable y de sentir las energías de los alrededores como vientos que lo traspasan a uno (como si uno fuera una masa inexistente, sin volumen ni forma) Y en sentir – y esto fue lo que me enseñó Lila mediante un empujoncito – un movimiento constante en uno, un movimiento de deslizamiento constante hacia atrás, como si uno fuera solamente un movimiento constante y no una masa ni un volumen, uno se vuelve en esa meditación pura transformación traspasando estados sin apegarse a nada en lo absoluto – no la he practicado aún lo suficiente, pero es un perfecto mata-identidad – uno se vuelve puro vuelo, puro viento surcando dimensiones y manteniéndose en cambios. Tierra la volví semilla, es otra meditación: uno se siente como una semilla sembrada en una tierra oscurísima, densísima y negra como lo más negro que pueda existir y, como las semillas no hace nada, no ejecuta ninguna actividad, así, con los ojos cerrados y sintiéndolo todo alrededor completamente negro y denso, de esa negrura comienzan a aparecer chispas de energía que lo van nutriendo a uno, que lo van cargando a uno. Agua la convertí en una suerte de Bote, uno siente la energía de uno moviéndose como la superficie del agua, como una suerte de corcho flotando en ondas y también siendo esas ondas y ondulaciones por dentro… después de un rato se tocan tierras extrañas. Fuego y Éter aún no los he inventado… pero todo ello no tiene otro objetivo más que el de darle maleabilidad total y versatilidad a lo que es uno mismo como energía. Preparaciones para el desprendimiento, si se quiere.
En cuanto a las prácticas con los ojos abiertos es bueno sugerir lo siguiente: hay que saber quedarse viendo puntos fijos por largo tiempo y olvidarse el nombre de las cosas. Si ves árboles o una montaña olvida los árboles o la montaña y siente que es solamente un tapiz en la cual tratas de descubrir los diseños o los dibujos ocultos, cualquier forma que descubras así podrá estar recubierta de númen (númen es un brillo casi invisible de consciencia que rodea a veces a algunos objetos, tiene que ver con cosas jungnianas y de Grecia y de clásicos latinos), cualquier “dibujo” que te medio llame la atención debes fijarte en él con atención sin pensar en lo incongruente que es que lo veas en la montaña desde lejos o en unos árboles – no se puede ni se debe ser racional en estas cosas – basta con que un numen, un dibujito cobre vida debido al poder de tu atención para que parpadee y en vigilia pases a otra dimensión o yuxtapongas dos… luego lo que se te revele así, que viene a ser como una película filosófica activa, te mostrará de qué manera ambas dimensiones se relacionan. Si llegas a creer que se trata de proyecciones de tu imaginación es probable que desde esa dimensión te muestren una y otra vez que no, antecediendo sucesos inmediatos de los cuales no podrías estar consciente. Esta práctica es maravillosa para cargar zonas enteras del lugar en el que te encuentras físicamente de energía, incluso sirve para cargar el clima - ¿No te das cuenta que a veces hay un solo tipo de nubes en el aire y otros días hay como cinco tipos de nubes y aire fresco y todo lleno de actividad? ¿No te das cuenta que casi siempre los Domingos el estado de tiempo está más cargado que en los otros días debido a que la energía psíquica de la población está más liberada y relajada? Bueno, con esta práctica ayudas a cargar a los autores de tales cambios climáticos.
Hum, Sí, creo que básicamente es todo. Pero sigue un solo consejo: confía en tu imaginación y en tu intuición, son los mejores guías y, para todo lo que sea “Práctica” (Ejercicio de tu Ser, a fin de cuentas) olvídate de todo el resto y déjate guiar por ti misma y por los amigos de tu ser completo.

XXIX

Bueno, sigo, estas cosas requieren en mí de madrugada o de mañana temprana antes de salir el Sol, cuando todo está quieto y la gente durmiendo y son otros, o quizás los mismos, quienes se acercan y hacernos de estos dedos.
Quizás pueda parecer que esto de soltar el freno, de modificar la frecuencia a través de no pensar y permitir que las energías se muevan en el cuerpo y que el dial se mueva modificando así la percepción, pudiera ser un asunto solitario. No necesariamente lo es, pudiera serlo, pero no necesariamente lo es. En estos casos siempre se dan intercambios fuertes de energía, feedback de energía, y ese es el mejor motor que existe. Pero el caso es que siempre y cada vez que se modifica la frecuencia hay con quienes realizar tales intercambios. Mi experiencia personal comenzó de un día para otro, hace unos 20 años mediante fuertes sincronicidades. Escribo desde los 17, es más, fue una voz que me dijo “Escribe”, estaba yo en estado hipnagógico, que es ese estado de duermevela, entre dormido y despierto, como cuando despiertas pero te quedas una hora más medio sintiendo todo alrededor y recibiendo las impresiones interpretándolas desde una distancia, ese estado entre dos zonas, y desde antes de eso siempre sentí, desde los 9 años, más o menos, que en sueños siempre he tenido una suerte de compañías constantes. Si alguien me pregunta “¿Quién te dijo cuando tenías 17 años que escribieras?” Y yo, en lugar de ser esquivamente cordial respondiera con la verdad me vería obligado a responderle “Oh, alguien que conozco de toda la vida, pero no está aquí, se quedó, no quiso de esta vez venir”. Bueno, a los veinte me comenzó a pasar algo raro: solía escribir mucho en la terraza de la casa, era todo lo que escribía como un plan, toda una serie de información que comenzó a caerme de un solo golpe pero lleno de buena energía, escribí varias cosas, fue una época bien interesante, comienzos de los ‘90s y a lo que escribía lo quería llamar “La Invasión Invisible”, era una invasión de seres a través del inconsciente colectivo, pero como de seres íntegros, completos, como de seres mitológicos de la antigüedad, mi premisa era que el inconsciente es activo, y que desde el fondo se estaba urdiendo algo, que algo se estaba desarrollando, creando coincidencias, casualidades, como la parte hundida de los icebergs guiando, moviendo a la parte de arriba más pequeña e inconsciente; la premisa era precisamente que aquello a lo que llamamos “consciente” es realmente inconsciente y que el inconsciente (lo que erróneamente llamamos así) es realmente la parte consciente que, por alguna razón estaba despertando. Recuerdo que dibujaba yo a los seres humanos con agujeros en los pies, conectados con la Tierra, parte de ella y no seres autónomos de la misma. De pronto comenzaron a surgir tres personajes: Los llamaba “El viejo, el niño y la niña”, los sentía completamente. Ellos estaban al final, al fondo de un callejón oscuro, el callejón tenía puertas abiertas a los lados, puertas de casas y de tugurios en donde había cosas que se arrastraban y que causaban miedo. Y yo fui directamente hasta donde se hallaban esos tres personajes y me senté con ellos. Los tres eran un mecanismo, funcionaban como si fueran una masa de energía regulándose constantemente, una cosa muy poderosa, de muchísima energía, pero también de mucha sabiduría y de paz. Constantemente se devoraban entre sí. El viejo no hablaba, era pura mirada, el niño hablaba poco y yo me llevaba mejor con la niña. Constantemente se devoraban entre sí, la niña devoraba al niño, pero luego cuando lo botaba de nuevo el niño reía, otras el niño devoraba al viejo y a la niña y al sacarlos, al salir ellos de vuelta, era como que les gustaba y reían, recuerdo que me dijeron “Sólo cuando aprendas a reírte como nosotros podrás volverte a sentarte aquí” y recuerdo que el viejo apuntó su dedo hacia el callejón en donde dentro de las casa cosas siniestras se arrastraban, dándome a entender un “Ve”. Los tres estaban sentados en una mesa y sobre la mesa estaba la única iluminación, un bombillo, normal, de unos 60 Watts, ellos me decían que en ese bombillo estaba el Universo, y cada vez que me decían algo se devoraban entre sí, como si fuesen una misma y sola fuerza manifestándose a través de tres, pero cada uno de los tres con su propia personalidad. Noches y noches escribiendo diálogos enteros, a veces la niña me despertaba y yo iba al balcón impregnado de esa presencia. Y se dio algo: Había una planta en la terraza y cada vez que yo tenía una intuición ésta se movía, nunca fallaba, terminé haciéndole preguntas mentales a la planta y ésta siempre se movía cuando la respuesta era positiva. Una vez me quedé dormido y la planta se me apareció como una mujer rodeada de energía rosada, le pregunté “¿Eres el espíritu de la planta o un espíritu en la planta?” y me dijo “Soy una persona real y vivo en Nueva York” (para entonces yo iba a viajar para allá). De alguna manera escribir activa energías, uno está simplemente entrando en esas fuerzas activas del llamado inconsciente y, cuando realmente es eso lo que se está haciendo esa actividad se manifiesta alrededor… suele venir inicialmente mediante imágenes poderosas, lo cual no significa que sean ciertas, son más bien como acertijos, adivinanzas que la parte fuerte y desconocida de la mente envía a la parte débil de la mente con el fin de que ésta vaya andando asimilando, construyendo, deconstruyedo, rehaciendo, deshaciendo, reconstruyendo, no dejándose convencer, no pudiendo más no dejarse convencer… y finalmente suicidándose, acabándose, agotándose a la fuerza como pensamiento estéril y sin energía, como cosa inservible, como espacio que se ocupa de sí misma, dando vueltas sobre sí misma como una rueda de hámster en donde el hámster cree que rodando se hará de “personalidad”. Meses después de eso, ya en Nueva York, alguien que dormía a mi lado despertó como en un trance, con los ojos abiertos repetía un nombre una y otra vez, cuando salió de ese estado me dijo que en la habitación había un viejo y un niño y que el viejo apuntaba hacia una dirección, no sabía si hacia el niño o hacia mí. Por esos días pasó un cometa cerca de la tierra, después de eso los tres siguieron su curso no sé para donde.
Antes de ir a NY escribí un cuento, se trataba de un señor que vivía en una calle, era de noche y el señor leía el tiempo en los granitos de arena que se elevaban en los remolinos de viento frente a él “¿Ves esos dos granitos de arena que se acaban de tocar? Dentro de mil años se harán realidad, se harán un beso” Ahora bien, no se suponía que el señor me viera, yo era el narrador y no se suponía que él me pudiera ver, así que arreglé el asunto colocando al narrador como un fantasma que está ahí atestiguando lo que el señor hace y describiéndolo (una barba tipo chiva, sombrero así, tipo de presencia tal, etc.), pero el personaje no lo permitía, me veía fijamente y yo no podía más que conversar con él en el cuento. Ahora bien, cuando se escribe no siempre se está trabajando con conceptos, no siempre se es riguroso, en mi caso la historia, las imágenes surgen es en una pantalla mental y yo me limito de describir lo que allí sucede, es un alivio y un placer enorme para mí, cuando me vuelvo presencia en esa misma pantalla mental, porque mientras escribo toda las sensaciones que describo y siento de lo que veo me rodean, es como que paso a la pantalla mental después de que las imágenes se forman y las atmósferas que se forman vienen y me rodean a mí, es así; ahora bien yo en ese cuento no pude tener control sobre lo que sucedía en la pantalla mental, el personaje era demasiado fuerte, su mirada demasiado viva, el personaje y yo nos tomamos del brazo, y él dice “No caigas” ambos y quedamos en vernos. El cuanto se convirtió en lo siguiente: un señor lee lo que sucederá en el tiempo, de noche, solo en una calle, rodeado de una atmósfera solitaria pero bella y densa, se le aparece un fantasma que en realidad es un narrador que no se suponía que podría ser visto por el señor, el señor le muestra claramente que lo ve, ambos hacen el pacto de verse, y el fantasma sigue su curso haciendo una sola pregunta “¿Les hablé alguna vez de Don José?”. Meses después lo conocí, necesitaba un trabajo, y algo me dijo que el trabajo me llegaría, que no lo buscase, me llegó a través de un amigo, Edward Marshal, exbajista de la Muy Bestia Pop, me llamó y me dijo que me consiguió un trabajo y me dijo que en esa misma calle hay un viejo así y asá, que vive en la calle, que es burda de loco, que le dijo que un día ellos dos irían a pelear, que lee cartas del tarot y que se la pasa bebiendo, que se hace llamar Joseph The Wizard… y yo me dije Ok, es él, a prepararse para lo bueno. Al día siguiente yendo hacia el trabajo – que conseguí – el tipo salió desde detrás de la columna de un edificio de metal (para entonces único edificio totalmente de metal en NY, en la calle Prince de Soho) y señalando hacia un mantel lleno de cartas y de cigarros y de todo tipo de cosas parecía que quería ofrecerme el mundo, le respondí “No thanks Joseph”, la misma calle, la misma chiva, y en mí alegría y reto, salí de la tienda, el trabajo consistía en llevar ropa de la tienda a un mercado al aire libre a una sola cuadra de distancia, llevaba yo las cajas sobre un carrito rodante y dos astas sobre las que montar la ropa luego, el carrito y las varas de madera semejaban un caballero andante, de esos de la época medieval, la energía fue intensa al pasar a su lado, yo ya lo tenía reconocido y sé que él a mí. Vendí ropa, al salir fui a con él, estuve dos o más horas ahí, le dije que me enseñe, tomó un plástico e hizo una bolita con él y me dijo “Guárdala que te hará falta” y me mandó al infierno. Regresé al día siguiente, sin miedo ni nada, nos agarramos del brazo y me dijo con esa intensidad en la mirada “My friend, never fall”, unos días después le llevé el cuento, comencé a leerselo, pero a la segunda línea me lo arrancó de la mano, hizo una pelota y lo arrojó lejos y me dijo “Yes, it was me… and it was here”. Me quedé tres años con él, lo primero que hicimos fue arrojarnos a los Mayas… había como una deuda pendiente desde ahí, no una deuda pendiente, sino un trabajo que se interrumpió y que debíamos continuar. No era alguien bueno ni agradable sino algo mucho más, un mejor amigo de la antigüedad que, tanto como yo, necesitábamos ubicarnos, y él tenía sus armas y yo las mías, él su ejército y yo el mío, y todo se trataba sobre producir una suerte de Vals… ejércitos que extrañaban actividades que se podían activar en la mutua compañía.
Así que la energía que se produce cuando se cambia de frecuencias no siempre son asuntos solitarios, cuando es con otro más de lo que vinieron o de los que se quedaron es Trabajo y existe una ética del Trabajo – por ejemplo: la unión de dos intenciones genera un tercer resultado, inesperado, por ninguna de las dos intenciones (toma una intención roja y una amarilla (sólo por dar un simil) y el resultado no será ni rojo ni amarillo sino una cosa distinta (anaranjada) y hay que estar preparado de lo que resulte de la unión de dos intentos, de manera tal que se vuelve descubrimientos) – Pero la mayoría de las personas, muchísimas, realmente la mayoría, no somos viejos aburridos con memoria de miles de años, sino gente que está despertando que busca trascender, están ahorrando, como llenando una cuenta de banco y no sienten comodidad ni placer ni gusto en el intercambio, hay casi siempre una desconfianza, un temor a ser robado, una necesidad de volverse centro seguro o periferia asegurada (es para esos para quienes trabajamos)… explotaré un poco más luego, en otras partes el Trabajo de dos o de tres o más, pero siempre se trata es de viejos, de quienes no buscan ir sino que vinieron y por tanto son inagotables, al caer se limpian y ríen y vuelven a darle otra vez. Pero ocurre algo, y es necesario llamar la atención al respecto: no sé si tú sabes lo que es caminar de noche por la calle al lado de un loco y ponerse ambos a golpear todas las puertas hasta que desde los balcones se encienden las luces y todo se vuelve cuestión de tiempo. La compañía humana, la compañía de los locos, siempre serán los mejores momentos de la vida. Pero cuando esa gente a la que se le ha aturdido golpeando las puertas de sus casas bajan no suelen tener cuerpo, pero vibran con fuerza, con muchísima fuerza y, si en un comienzo el trabajo consistía en “¡¡Bang the whole damn fucking building down!!” (lo dije: vainas de los Mayas) luego el trabajo consiste en pura resonancia… y, cuando ese trabajo sea realizado los viejos descansan; no sé a dónde irá mi amigo, no cual es su sitio de descanso, el mío es en el fondo del Tártaro en el cual descanso una vez realizado todo el trabajo y del cual a veces salgo.
Bueno, algunas de las próximas lecciones se harán en torno al tema de las Funciones Conjuntas.
(La Función Conjunta se basa en el principio de que la unión de distintas fuerzas produce resultados óptimos mas no previsibles, implica un no-control y una no-expectativa. La mejor actitud implica una acto de disciplina de difícil ejecución que estriba en un total y completo domino de la curiosidad; si necesitamos un ejemplo el mejor que puedo dar es: varias personas construyen un avioncito de papel, cada una de tales personas coloca en la labor su conocimiento, su confianza en sí mismo o en sí misma y en los demás, y su propia energía y luego lo lanzan, pero apenas lo lanzan no miran ni cómo vuela, ni a dónde vuela ni dónde cae, sino por el contrario: se dan la media vuelta y sonríen sabiendo que alguna vez se enterarán.

XXX
A veces cuesta un poco entender cómo es que cuando alguien quiere saber quién es otra persona la respuesta no se manifieste en el silencio. Porque la respuesta puede manifestarse en el silencio. Si alguien me pregunta ¿Quién eres tú? ¿Qué quiere, un nombre? No, un nombre no dice nada ¿hay algo más que se pueda responder? Pero, si alguien quiere saber realmente quién eres tú, sabrá tocarte en el hombro, hacerte la pregunta y sentarse a tu lado, quedarse quieto o quieta y dejar los minutos trascurrir hasta que – en caso de darse en la calle, y lo mejor es que se dé en la calle – la vibración del preguntado comience a afectarlo todo alrededor, se una con la de quien preguntó y ambos comiencen a alterar el espacio-tiempo alrededor y ambos comiencen a modificar sus formas. De niños nunca se pregunta “¿Quién eres tú?” simplemente juegan y así saben, así se da la respuesta. Pero no todo el mundo sabe esta cosa de los cambios de frecuencia ni de las posibilidades maravillosas que esto da. Nos sintonizamos juntos, ambos sobre una misma alfombra voladora, y que ésta tome vuelo según el motor de la unión de los dos… hay sitios a donde las combinaciones lleva. Sentados juntos ambos se conectan primero uno con el otro, es un sentir y relajarse y tomar ese sentir como cosa con la cual se participa, luego esperar los cambios alrededor, ambas vibraciones se vuelven dos que se suman conectadas, comienzan a alterarlo todo alrededor y todo alrededor se vuelve símbolo y presencia. Cuando se le quitan los nombres a la cosas y todo se vuelve textura alrededor, los colores, las formas y los movimientos lo son todo. Puede estar es Inés a mi lado y ya sintonizados en una de poder y de seguridad total, ya habiendo desfilado sus colores frente a ambos – ella es cobre, su color es cobre – y los tres tipos en frente a lo lejos son cobre, son de los de ella, uno de ellos suelta a una niña que de pronto corre y se monta en una rueda e Inés dice “Así es como yo nací aquí”… bueno, ya sintonizados y en una de poder Inés saca uno de esos tentáculos de energía de su abdomen y lo dirige hacia unas ramas y allí comienza a sacudirse un viento, de pronto activa otros de esos tentáculos de su abdomen y lo dirige hacia al mío y yo me dejo y así que de pronto es de noche y no hay nadie alrededor, yo soy una luminosidad blanca y ella es cobre, abdómenes unidos ahora saliendo energía es de mí activándole su motor, todo negro alrededor, visión espacial de estrellas y planetas, yo puedo con mucho más así que le doy más y sus alas crecen, las garras también, porque me da la gana me agarro en verde y me vuelvo pequeñito como un duende y ella es un ave que posa sobre una rama, la rama al pie de cuyo árbol estoy duende. Y entonces ahora se trata es de observarlo todo alrededor, completa unión entre Inés y yo, un planeta de nubes cobre, hermoso, de altas montañas a la distancia, a lo lejos tres nativos, cascadas atrás hacia la izquierda. De vuelta aquí, hemisferio izquierdo, estrellas y planetas y duendes y aves en camisas de transeúntes, en calcomanías de bolsos y bolsas, en propaganda de camiones y comienza la llovizna. Quietos la energía de ambos conociéndose, mi pierna derecha estirada pegada a la izquierda de ella. Por momentos es mi energía la que jala de la de ella, luego quietud, luego es la de ella la que jala de la mía y luego quietud y así por un buen rato. De pronto a mi lado es estatua de cobre soltando un aura naranja, me relajo y la dejo ser y hacer, otorgándole suministros sin tomar dirección, simplemente dejar que de mí salga hacia ella y de pronto una suerte de repentino recuerdo, otro lugar común, una función en común, un traslado momentáneo y ella es estatua de cobre arrojando antenas naranjas mandando líneas hacia las estrellas sobre la superficie de un planeta solitario y ahora soy yo quien es ave quien ha estado allí más de una vez y de pronto la espalda de Inés comienza a vibrar en morado y violeta, colores de transformación y se acelera una unión ahí de la materia, biología, por decirlo así, por-venir, inyección hacia debajo de mi parte, y es que he sabido ser insecto desde siempre, su morado y su violeta también me afecta a mí y me vuelvo escarabajo de largo aguijón y simplemente inyecto energía estelar hacia dentro del planeta, siempre he sabido ser insecto y doy de mi abdomen hacia abajo con toda fuerza, pasa estrella fugaz y aceleración. De pronto Inés estatua inmensa de cobre se levanta y me doy cuenta que hacia abajo también inyectó. Yo estoy enamorado de la forma insecto, a la cual me encanta de vez en cuando visitar por todas las posibilidades y sensaciones de libertad que da, de un solo ramalazo vuelvo a Inés también insecto, largas patas negras llenas de espinas, cuerpos como de arañas alargadas y esas alas en transformación zumbeando prestas a volar bajo dos locas lunas, lunas alocadas porque nuestro tiempo es sumamente veloz, cinco mil años en un minuto y todo se acelera alrededor con esa sangre llena de vibración tan característica de cuando se es insecto.
- ¿Vamos a una de esas lunas?
- Dale, vamos a una de esas lunas.

XXXI
¿Qué significa Cargar Tiempo? ¿Qué significa que “ese tipo carga tiempo consigo”? Se puede interpretar de dos maneras distintas pero es un mismo efecto. Puedo hablar de cuatro personas que conocí que cargaban tiempo, a su debido tiempo, también debo decir Tiempo.
A veces tú los ves ahí, echados en la calle, sentados en la acera durante horas sin moverse de la misma manera que en las comiquitas a veces muestran a dos mexicanos con esos enormes sombreros recostados contra una pared haciendo cada uno un comentario cada media hora… pero hacen Tiempo. Sueltan el freno, se sintonizan uno con el otro. Aun sin moverse el movimiento interno es intenso. Existen tres grados posibles en el cual se puede estar: por debajo de esta dimensión; en el mismo nivel de esta dimensión (y entonces es cuando suele aparecer la sincronicidad para con el espacio circundante, la energía sincronizada entre ambos, acelerándose comienza a crear manifestaciones externas… si ambos están conectados con la dimensión verde, con el sentir de la dimensión verde, esa de los árboles, del viento, y de unos seres luminosos pequeños que existen en esa frecuencia, no es de extrañar que en el trascurso de diez minutos ven dos enanos reales caminando por la calle y que… y que…; y un nivel por encima de esta dimensión, que es cuando ya ambos se agarraron a otra… y que… y que las manifestaciones en esta dimensión respondan a la dimensión a la que se agarraron manifestándose de la manera que puede: dibujos en camisas, personas con ciertos rasgos, y esa energía de esa otra dimensión todo alrededor. Cada vez que ambos ven esos seres luminosos de esa otra frecuencia atentos ya a ellos, a quienes así observan en la calle siempre aparece una manifestación… al poco rato todo lo que sucede alrededor de ambos se convierte en lenguaje, esa otra dimensión va creando los sucesos y las estampas alrededor de ellos… la “realidad” se convierte en el vehículo de comunicación entre esas dos personas y esa otra dimensión. Por supuesto, ambos así generan aquí una energía tan distinta, tan de otra parte, que en algún momento alguien se acerca… pero para ambos sea quien sea que se acerca es vehículo de una comunicación directa, un mensajero inconsciente… y sorprende ver cómo funciona, casi siempre quien se acerca llega directamente a contar una historia, y ambos lo tratan con el respeto y la atención con la que se trata a un mensajero de otro mundo, y se habla de direcciones, el mensajero habla de otra dirección y luego se va, ambos entonces se enfocan en otra dirección y aparece una tipa vestida de naranja acompañada de luminosidades anaranjadas (distintas en función de las verdes, eléctricas) el viento, las nubes se cargan y la vibra, el vibrar consiste entonces es en llenar las nubes de relámpagos, ambos con eléctrica furia crean la tormenta y lluvia que ese día, de no haber sido por ellos, no habría ocurrido… Eso es Cargar Tiempo.
Ahora bien, cargar tiempo es una ampliación de diámetro de existencia que se da mediante estas prácticas con amigos… sucede cuando a uno de los dos de pronto se le abre la memoria y mira fijamente al otro a los ojos y le dice “Oye, ¿no hacíamos esto antes todo el tiempo?” y el otro viejo y sabio le responde a la media hora con un simple movimiento vertical de la cabeza. Así que el sorprendido le dice enarcando las cejas “Oye, esto antes era el Paraíso” (lo dice al ver que cuando el tiempo amaina tres guacamayas dan dos vueltas en círculo alrededor de los dos y al ver que otras aves dejan una estela arcoíris tras ellas en su vuelo. Y lo dice en serio “Oye, esto era de verdad el Paraíso antes!” y el otro a la media hora lo mira fijamente y le dice “Pues ya sabes de qué estamos hablando” Entonces se mira hacia arriba y se ve las agujas de los rascacielos como si fuese alambre de púas prohibidor, “cerrado el paso”… y ese “Ya sabes de qué estamos hablando” cuando se ve la gente parada ante un semáforo y los carros cruzando, la forma fiel de un hormiguero te hace en ese momento tener varios miles de años… una sensación de fantasma milenario en uno despertando en un oscuro sueño.
A partir de entonces se hace imposible vivir sin colores.
Y, si vivir en colores es hermoso y la nostalgia por un tiempo por encima de esta dimensión se vuelve muy fuerte y el testimonio por la caída indigna demasiado, pues, prepárate para encontrarte con un tipo que al comienzo no te va a caer nada simpático.
(Sigue en la parte XXXII)

XXXII

Lo llamaban “El General”, así, como si todo se tratase de un batallón de guerra. The Wizard lo llamaba “El General” y es el último tipo al que te habría gustado conseguir en este mundo en un callejón solitario, porque todo su aspecto y sobre todo su energía sentida desde lejos no podría ser superada ni por el mismísimo diablo. Y es que con el diablo todavía tú puedes pactar, pero con El General no.
Aunque tú no lo sepas antes de tú ser todo aquello mediante lo cual te defines eres una esfera de energía. Poca gente ha tenido la experiencia de saberse antes de nada una esfera de energía, sólo un miedo muy intenso o un placer muy intenso, solo mucha intensidad, pues, puede darle a uno esa certeza. Y John (así se llama El General) te la daba. Si lo ves de lejos en un callejón solitario, a dos cuadras de distancia, ya a esa distancia algo te advierte del peligro, una sensación total de peligro que te hará querer correr, una sensación de muerte. Y es que John posee la cualidad, la característica de poder reventarte como esfera que primeramente eres. Ya a la distancia toda la esfera de tu ser siente el peligro, de la misma manera que todo cachorro de cuanta especie exista siente que la sombra de un águila arriba es peligro. Algo en uno sabe y siente y le alerta a la parte consciente de uno de un peligro inminente. Si estás a dos metros de John la presión que puede causar sobre tu esfera completa es tan grande que sabes que si él le aplica una intensidad más te la revienta. Es el último ser con el cual te quisieras encontrar en este planeta.
Y era un policía.
Ahí donde y cuando cualquiera intentara inflarse con el fin de traer el Paraíso de vuelta aparecía John, completo, rojo, vuelto esfera completa bien dispuesto a reventarte la tuya si cometías una sola falta. Primero se acercaba sus ojos negros grandes de apariencia humana todavía, sus dos metros de estatura, su mirada de espiral que va hacia adentro, como la de esos discos que usan los hipnotizadores, luego se paraba frente a ti y se inflaba, todo rojo, todo esfera roja, y a continuación veías cómo sus entradas se convertían en dos cuernos como los del mismísimo Lucifer, en treinta segundos dejas de estar en el Paraíso creado con tu propia energía y pasas a una dimensión roja en la cual el General es el Señor, de una sola exhalación toda tu energía creadora se te va y ese ser con cuernos de Demonio se te acerca y te toca en la nuca y simplemente dejaste de estar aquí, te conviertes en un ser cuyo cuerpo tiembla ante esa energía tan intensa y extraña y si no te controlas te haces pipí encima. Durante el tiempo que John quiera te quedas allí en ese mundo rojo intenso al lado de ese ser que si no es un Demonio no es otro más que Lucifer, Señor de ese mundo. Cuando sales de allí, John te deja una multa, la cual solamente pagarás una vez que después de una ardua investigación te hayas ubicado… y no puedas, en tus nostalgias del Paraíso, volverte un ser peligroso.
Era policía.
Pero cuando el tiempo pasa y se agarra confianza y uno se hace amigo de esa gente y súper cómodo con sus presencias, y se los admira…. Uno se entera luego de cada vaina…
John era Policía, pero no era un policía de esos de uniforme, etc. pero era un policía de verdad, era una suerte de guardián de una ley, mantenía el orden. No era por control, ni por gusto de controlar, realmente mantenía un orden, su actividad pertenecía a otro ámbito de realidad, a otra esfera, pero la ejecutaba aquí, colocándole multas a infractores o reventando a mafias completas de Luz…, que las hay.
(Hay que darse cuenta que todo debe mantener un equilibrio, traer flores en Otoño amerita de un Policía que lo impida)
Tuvo un Maestro – a mí me gusta pensar que realmente lo tuvo -. Consiguió al mejor maestro del mundo en Vietnam y lamenta profundamente no haberle podido darle alguna vez las gracias… nunca le vio la cara… y eso fue lo que le salvó la vida. Me explico:

Esta historia es verídica: John fue soldado en Vietnam y en una oportunidad se encontraba alejado de su tropa en medio de la selva espesa, solo, y escuchó un “clic” que no era de su arma y sintió que desde un sitio a su derecha un soldado vietnamita le apuntaba con su arma. John supo por instinto que si hacía un solo movimiento, así sea el de girar la cabeza en dirección a de donde provino el clic, le volarían la cabeza. Así lo mantuvo el soldado vietnamita durante ocho horas, sin que John pudiera mover un solo dedo. Pero lo interesante es todo lo que le ocurrió a John durante esas ocho horas en las garras de tan oscuro y excelente maestro. Y es que era el terror, el terror y el sudor, porque, una vez inflado de terror, de tener la convicción instintiva de que si movía un solo dedo moriría, John se fue inflando, sentía la presión de estar en la mira del soldado vietnamita, sentía esa presión de muerte en todo su cuerpo, posteriormente en todo lo que él es como esfera, y esa presión iba en aumento mientras John sentí que el soldado estaba decidiendo de que a los diez segundos daría el tiro que acabaría con la vida de John, e inflado John era obligado a que mediante su ser como esfera se ejecutase una energía de “NO” – esa energía de “NO” es como unas ondas que emanan de la esfera inflada… a veces cuando una ve una película en donde el personaje está en peligro de muerte uno siente esa clase de impulsos – bueno, el soldado entonces bajaba la presión sobre John, luego la volvía a aumentar hasta que el plazo no fuera más de diez segundos antes del tiro de gracia y toda la esfera que era John volvía a reaccionar con más fuerza. Ocho horas en esa situación, en la locura de tener que confiar en su instinto plenamente por más loco que éste fuera. Un solo clic en medio de la selva bastó para que John ingresara en la más intensa de todas las escuelas que se pueda imaginar, cinco horas sudando sin poder librarse bastándole, quizás, voltear la cabeza hacia la derecha para confirmar en manos de qué estaba preso o no, y “¡¡PUM!!” esto es lo que su instinto le decía en una sola sacudida que ocurriría si volteaba tan solo un tantico la cabeza e inmediatamente la imagen mental de hallarse en la mira de un arma enemiga a punto de disparar, y esa insoportable presión que le exigía más ondas, y entonces otra vez las ondas emanadas, la revisión de toda su vida y la fuerza en la extenuación ¿Telepatía en algún momento? Claro que sí, esos dos se conocieron como nadie se ha conocido alguna vez, pero la impiedad de parte del gato en la situación y el aumento de la presión “Despídete de una vez maldito gringo” y finalmente la paz en John y la renuncia tanto a moverse como a continuar luchando por vivir…. Y entonces el soldado vietnamita en imagen mental y presión energética dándole a entender “Todavía no” y manteniéndolo así varias horas más y desde una distancia que un brinco por parte de John con el fin de matarlo no habría llegado ni a la cuarta parte de la distancia. Finalmente completamente conocido a sí mismo como esfera de energía y rendido a morir de un momento al otro John se da cuenta que desapareció la presión. Su Maestro decidió que valía más convertir en un ser útil a un soldado enemigo que matarlo. John se quedó un rato más buscando relajarse un poco de las presiones insoportables que tuvo como esfera que ejecutar inmediatamente sintió que si no se largaba de allí a los diez segundos el otro no le tendría compasión y se marchó enviándole una suerte de “Gracias” energético a su Maestro, al maestro que nunca conoció… ni corroboró si realmente alguna vez existió.
Clic.

XXXIII
Emma, así quedó el nombre de alguien de quien nunca supe su nombre. Quiero hablar de Emma antes de hablar de estilos de vida, pero antes de hablar de Emma debo cerrar, de alguna manera, el capítulo de The Wizard… cosa difícil porque volverá en tandas.
Pon que la Tierra de verdad tiene un tiempo, una edad, un modo para cada edad… y pon que de verdad de vez en cuando hay gente que de vez en cuando, aunque no necesariamente siempre, saltaron de una esfera de más intensidad para acá… lo cual no tiene realmente mucho de especial ni de qué extrañarse, ya que la vida humana no es más que alimento de los seres que habitan esa otra esfera, de vez en cuando algunos de tales seres se sienten llenos y, al no necesitar de momento utilizar un cuerpo humano para abastecerse de energía y de experiencia decide bajar, es decir: Saben. Por alguna razón de sensibilidad quienes saben se reconocen, conocen las contraseñas y, la necesidad de hacerse de información se vuelve vital. Para cualquier testigo de esos intentos de obtención de información la impresión que obtiene es que se trata de “Grupos” no, no se trata de grupos – existen grupos, pero son otra cosa – se trata de seres que, para objetivos muy definidos, se agrupan con el fin de obtener información o de activar campos, pero no hay un sectarismo, solamente una actividad y una funcionalidad común más no igual en unos y otros… digamos que cada cual posee tanto una carga como una cualidad distinta unos de otros y, es esa variedad en el sistema que generan lo que permite la mejor obtención de información. Ahora bien, cada vez que esos seres bajan son los mismos de las últimas veces, uno de ellos pudo estar aquí hace cinco mil años y, si vuelve a bajar completo, será exactamente el mismo de hace cinco mil años… pero “el mismo” no se refiere más que a una función, que a un estilo, que a un modo de funcionar, que a una energía y una función específica. Pero las condiciones no son siempre las mismas porque las condiciones de la Tierra cambian por la propia naturaleza de la misma – no como se cree que “por acción del hombre”, eso es paja – Una frase de William Burroughs: “Nacido uraniano bajo condiciones Nova”, exactamente. Por tanto, si hubo seres que en su tiempo crearon primavera, las condiciones en Otoño cambian. Al cambiar enriquece las funcionalidades de cada uno de esos seres, ensayan así nuevos modos, y por eso es que saltan para acá de vez en cuando.
Por eso…
Pon que la Tierra de verdad tiene un tiempo y que hay seres que son los mismos de siempre que vienen de vez en cuando. Ahora bien, hay una polaridad blanca, una fuerza de la cual brota energía que enriquece y nutre, una fuerza “positiva”; y hay una polaridad negra, una fuerza, una fuerza distinta, no solamente absortora de energía, aunque lo es, bien observada también da algo pero de un cariz distinto de la fuerza blanca, es una fuerza difícil de definir, es como un agujero negro, o el vacío, o la tierra en la cual brota la fuerza blanca y a la que retorna en su muerte, y sin embargo existen seres hermosísimos compuestos de esa fuerza. Bueno, los seres que saltan las poseen ambas. Digamos que en Primavera dos de ellos se vuelven fuerza blanca y generan un feedback tan fuerte que todo lo nutren, se activan de tal manera durante el comienzo de mundos. La fuerza negra es igualmente un aquí-y-allá simultáneo. En los Otoños de mundos el juego entre tales seres es muy sencillo: Uno de ellos se activa en blanco y el otro en negro, de esta manera no hay ruptura del equilibrio del planeta en el que están, pero ese blanco inyectado en negro se vuelve pre-primavera para otras partes. Por tanto, es cierto que la policía cobra multas a todos los infractores – viene de la parte XXXII – pero eso es lo que quieren, tales seres no se vuelven creadores, sino únicamente en pagadores constantes de multas. Siempre que uno de ellos se activa en blanco se le aparece a su lado o enfrente una puerta negra.
Ahora bien, resulta muy poco atractivo para muchos habitar un planeta en el cual no se pueda reconquistar la situación paradisíaca, para colmo de males la opción de un plan de evacuación, de “largarnos de esta mierda” y listo, presenta para muchos grandes dificultades. Sin embargo la opción del plan de evacuación resulta para algunos, equivocadamente, la única opción viable y algunos de ellos forman grupos y van a la cacería de gasolina humana para abastecer sus naves. No hago referencia a esos casos individuales de quienes han alterado su energía hasta el punto de que su frecuencia energética se halla lista para ser adoptada por un planeta que lo o la pueda albergar con gusto (esas prácticas también existen) me refiero es a gente que sale a la cacería de gente joven con potencial energético enorme y luego pretenden usarlos como gasolina, toman imágenes de sus sitios de procedencia y luego consideran que les falta una sola pieza para completar la nave. Los llamamos “Las mafias blancas”.
Ahora bien, en el cielo hay toda una familiaridad enorme… el cielo es una vaina enorme en experiencias, relaciones entre estrellas, casas comunes, amistades desde otros planetas, hay incluso quienes han estado desde el comienzo hasta el final de la vida de un mismo planeta… en fin: hay, de verdad, quienes se conocen de verdad. Bueno, esas mafias blancas toman a uno o a una grande, de larga historia, la trata como a la Cenicienta y la envía a la calle a buscar allegados con el fin de hacerse de piezas faltantes para su nave. Pero, en caso de la persona que se me apareció en una planta y que cuando le pregunté si era un espíritu en la planta o el espíritu de la planta y me respondió que era una persona y que vivía en Nueva York se trataba era de una excelente estratega atrapada en una de tales mafias y dispuesta a acabar con ella.
Cada vez que The Wizard y yo nos activábamos aparecía el espíritu de esa persona, blanca, cabello castaño corto y una energía muy particular, pero aparecía de verdad con fuerza y de manera exagerada, sabíamos ambos que se trataba de alguien real y de mucho poder enviándonos un mensaje. The Wizard averiguó mucho más que yo debido a tener toda una vida de experiencia y yo no sabía de la existencia de tales mafias y él sí… la presencia de esa chica usada como anzuelo y gasolina de una de tales mafias adquirió carácter de urgencia, de que algo iría a estallar, o de que era preciso hacerlo estallar.
Unos días antes de que estallara The Wizard y yo por separado – por separado en distancia – tuvimos una misma experiencia: Fue como un viento que llegó y nos llevó a un planeta. En ese planeta había una orden, la característica o exigencia de ese planeta. Apenas llegando a ese planeta nos invadió una urgencia pero de manera muy alegre: convertirnos en animales en relación de cazador y presa, en seres que uno mata al otro y los turnos variaban velozmente, en un momento yo era león y él gacela, al siguiente él lobo y yo conejo y así, con cada muerte del muerto éste sufría un cambio de forma que lo convertía en el próximo en tener el turno de matar, todo muy veloz, finalmente cada uno pasó por todos los moldes de ese planeta, todas las formas posibles en él – The Wizard posee una energía roja y la mía es morada, cada uno cargó con su energía todas las formas de ese planeta – y luego el planeta nos expulsó y envió a otro. En este otro planeta, mucho más grande y lleno de energía había otra urgencia. Era un prado y algunas montañas en el fondo y había un sonido de alarma que urgía a que cada persona – había muchas, muchas personas – tomase de los brazos a otra, que formasen dúos y se tomasen de los brazos, The Wizard y yo así hicimos e inmediatamente, como todos quienes estaban allí, nos alzamos como hélices hacia las nubes, con cada vuelta obteníamos más y más energía hasta que nos inflamos por completo, y así todo el mundo, inflados completos pasando por colores, y The Wizard me decía “Aguanta, no me sueltes por nada del mundo” pero en ese instante una energía negra como de sueño y de muerte me tomó y me llevó de ahí. En ese instante, en la casa donde yo estaba, físicamente, en este mundo, una copa de metal cayó de una mesa y sonó durísimo contra el suelo de madera. Inmediatamente salí a ver a The Wizard atravesando el Williamsburg Bridge y llegando hasta Soho, nos vimos a los ojos, y sé, fue real.
Después de eso la chica cuyo espíritu siempre se nos aparecía fue a verlo en persona, él la reconoció, la cargó de energía, ella se fue de ahí súper cargada de energía, habrá sentido que estaba no se sabe dónde, se acercó a dos tipos quizás pensado que era ángeles y ellos la llevaron a un squat y la violaron. Yo sentí todo eso y también no hice más que enviar muchísima energía. John también sintió todo eso y se pasó cerca del squat en donde estaba sucediendo la violación pero sin intervenir, a la chica la arrojaron a un contenedor de basura desmayada, pero dada por muerta. Lo último que la chica dijo fue algo en referencia a su familia, supe que “su familia” era uno de tales grupos de magia blanca con plan de evacuación (mafia blanca, en realidad). Sentimos a esa “Familia” fúrica, con la ayuda energética de John conseguí un trabajo en el café “Pick me up” justo frente a Tompkins Square Park. Hummm ¿la envías para buscar las piezas que te faltan para tu nave?... vengan a buscarme pues.
A las dos semanas la “Familia” llegó… y empezó la guerra.

XXXIV

No hay nada más delicioso que una guerra de brujos – con la palabra “Brujo” no me refiero a ninguna categoría de mago, ni a algo distinto de chamán ni nada de eso. Simplemente me refiero a gente móvil cuyo arte consiste en vibrar según la frecuencia de una otra dimensión, agarrarse a ella y desde allí afectar esta realidad. Hay quienes utilizan el término “Brujo” haciendo referencia a quienes manipulan la consciencia de otras personas mediante su energía, aquí utilizaré el término únicamente como la facultad de afectar la realidad haciendo uso de otra dimensión – Una guerra de brujos se da cuando existe la urgencia de resolver un dilema o de corregir un error. Nadie logra generar una guerra de brujos por cuenta propia, por mucho que lo planifique, hay un poder que mueve las piezas para que una guerra de brujos se dé y ese poder es impersonal.
La chica del accidente hasta donde sentí sobrevivió, nunca la vi, pero de una manera u otra participó de la guerra con su energía, de alguna manera su energía a veces funcionaba como guía. Recuerdo una tarde antes de que su “familia” apareciera que yo iba caminando por la Avenida A del East Village y vi a un tipo caminando en la otra acera, alto también, con energía naranja y en posición de recepción, era como un tipo-antena, con todas las antenas desplegadas buscando a algo o a alguien, como un detective discreto pero en pleno estado de atención. Y recuerdo que sentí la mano de la chica apuntando hacia él y señalándome que es él. Recuerdo que me alegré de que yo supe de él mientras él buscaba responsables por lo sucedido a la chica – no hubo tales responsables entre brujos, los violadores fueron squaters, pero la energía que la mandó a otra dimensión fue la de The Wizard, pero el tipo que la envió estaba en la caza de una pieza faltante para su nave – inmediatamente le puse un apodo al tipo de energía naranja, lo apodé “El Rey”, no me cayó bien. A veces hay grupos que se forman en la brujería, normalmente son dos personas de mucho poder que enseñan a un grupo de personas de menos poder a liberarse, aquí con el Rey se trataba de otra cosa: un desesperado de bastante energía que tomaba a gente joven de más poder que él y usaba la energía de esa gente con el fin de observar el Universo y creer que activando al grupo completo podría desaparecer de esta dimensión y pasar a ese otro espacio. Así que lo llamé también “The Leach” (Leach es sanguijuela en inglés).
The Wizard desapareció de escena, se fue, quedaron John (El General) y Field Marshal (Mariscal de Campo), uno que también era amigo de The Wizard, uno enorme y Brian, quien en realidad no era exactamente amigo de The Wizard pero que no se perdería la guerra por nada del mundo.
Después de haber visto al Rey me conseguí a John, él se me acercó con sus ojos llenos de locura, acercó su índice a mi corazón y tomó una llama de ahí y se la quedó viendo, le hice preguntas sobre cómo será su conducta en la guerra “¿Vas a respetar la vida?” y otras dos preguntas similares y a todas respondió que sí para mí eso era lo que me interesaba de él para él únicamente saber si yo tendría fuerza para sobrevivirla, yo coloqué mi mano derecha sobre mi pecho, hundí una energía ahí y me le mostré como un ser compuesto de energía negra, como un ser vivo en lo muerto dándole a entender que si sobreviví a The Wizard y a él es porque yo ya estoy en lo muerto, que mi truco consiste en colocar el centro de mi ser ahí, que desde ahí es que actúo y que esta guerra no me será difícil de soportar, de sobrevivirla y que desde ahí puedo activar muchas cosas. Habiéndonos entendido bien comenzó la guerra.
La “Familia” (tres tipos) se hallaban en un café vecino, entre en el café y me senté con ellos y les pregunté “¿Alguna novedad en el reino metafísico?” uno de ellos, el Rey, me hizo algo muy fuerte, con su energía trató de virar algo en mí 180 grados con mucha fuerza, solo pudo virarla hasta la mitad de eso, me levanté y me fui y al día siguiente seguí trabajando en el “Pick me up”, justo al lado.
Toda guerra entre brujos se trata de emanaciones, ondas, rayos, vaciado, y en tratar de virar a los otros 180 grados. Y todo eso activa cantidades enormes de energía que inmediatamente llaman la atención a otros brujos que no tienen nada que ver con la guerra pero que por nada del mundo se perderían la oportunidad de participar en ella, para eso hacen lo posible por hacerse sospechosos, por caer bajo sospecha, porque se los ataque… son capaces de agarrarse a otra dimensión y colocar una bomba en el café en donde se hallan los de un bando. A veces uno que desea participar se carga con mucha energía y se tropieza con otro brujo y le hunde algo en él y lo envía a una dimensión desconocida. Vi a uno de pronto tomar las barbas de otro y comenzar a jalársela como ordeñándosela mientras le miraba hipnotizante con los ojos y de pronto de la barba sacar cangrejos y arrojarlos al café en donde se hallaba la “familia”, la mafia, y hacerse así “sospechoso por agresión”, a sí mismo y al de la barba… hay que entender que si un Rey está en la búsqueda de una pieza faltante para su nave realmente reacciona con fuerza y locura cuando de la nada le surgen 40 piezas posibles, todas haciendo lo posible por llamar la atención del Rey y de provocarlo. Provocarlo significa volverlo agresivo y violento energéticamente, lo cual redunda en mayor actividad energética en todo alrededor… todo lo cual es información.
Toda la guerra se convirtió en manadas de perros oliéndose el culo unos a los otros… se perdió todo el respeto, pero se ganó tanto, es como si todos los jugadores de pronto se vieran atraídos en ver las cartas de los demás pero bajo el precio de soltar las propias y todas las cartas juntas formasen un sistema de energía impresionante.
Ahora bien, un plan de evacuación realizado mediante el ordenamiento psíquico de elementos no terrícolas tiene algo de ilegitimidad, el Rey era uno de estos personajes estilo Sísifo y Tántalo que plantea mediante una técnica tramposa burlar la Ley. Sin embargo, cuando se trata de un ser de mucha energía – y el Rey la tenía – en un planeta de poca energía para la constitución de un individuo como el Rey se vuelve comprensible que, viendo como caso perdido un retorno al Paraíso, sea capaz de hacer trampa y utilizar a seres más poderosos, esencialmente, que él con el fin de abastecerse de la energía suficiente para huir de aquí. Ahora bien, en todos estos asuntos de brujería la razón no importa para nada, tener la razón es una estupidez, ya que en la brujería se hace ineficaz convencer a nadie de nada. Una persona que tenga una convicción instintiva pero con poco poder de retórica si bien un individuo con buenos argumentos puede convencer a su consciencia (y por tanto manipularla) de que él o ella – la de la convicción instintiva – está equivocado o equivocada, esa sensación implantada de equivocación no altera para nada la verdad. La persona de la convicción instintiva está en lo cierto a pesar de que se le pueda convencer de estar en un error… porque su energía proviene de lo cierto – la energía siempre proviene de lo cierto - y su energía actuará desde lo cierto a pesar de que su mente haya sido trastocada por alguien más con poder de convicción. Ahora bien, quien tiene una desesperación o una necesidad extrema debido a la incongruencia entre su propia energía y la del planeta que está habitando utiliza su energía con el fin de convencer, su intención de convencer tiene como fin apropiarse de la energía del convencido o de la convencida. Pero en la brujería siempre se activan fuerzas externas que a la larga regulan el error. Una guerra de brujos tiene como finalidad regular los errores de los necesitados y de resolver dilemas. Nadie corrige el error ni nadie aporta la solución al dilema… es la actividad energética que se libera en una guerra de brujos la que aporta la solución, ésta de pronto surge… es como si se lanzasen ecuaciones al espacio y después de mucha actividad las soluciones caen desde el espacio… y caen no convenciendo, sino actuando energéticamente, de manera directa sobre quienes insisten en mantener el error.
Algunas personas pueden tener una convicción instintiva y ésta estar en lo cierto, para los convencidos de otra cosa la “opinión” de los primeros nada dice, en la duda toda opinión es relativa. Las personas que saben estar en lo cierto suelen callar y esperar, a veces aguantando bastante. Pero al final quienes están convencidos en su error se ven de pronto alterados por una fuerza que no proviene de nadie en particular… el error pierde fuerza y el objetivo final de quienes insistían en el error no se cumple… desde un principio no podía funcionar, pero hacía falta la activación de un proceso para que se diera el desenlace de finalmente darse cuenta.
Si hablamos de Sísifo podemos decir que Sísifo en toda su vida no fue más que un instrumento de la roca – como roca sienten a la Tierra quienes una vez su comportamiento energético les funcionó pero a la segunda venida no, como roca sienten a la Tierra quienes no se dan cuenta que las condiciones energéticas de posibilidades difieren con el tiempo. Y, si hablamos de Tántalo éste tardó mucho tiempo en darse cuenta que su deseo tiene el poder de activar fuerzas, pero que tales fuerzas activadas debido a su deseo no siempre tienen como objeto satisfacerlo a él.
También sucede que hay seres en la Tierra provenientes de planetas en pleno apogeo de sus fuerzas, a veces uno de ellos viene hasta acá, a un planeta en proceso de decadencia energética, en Otoño, con el fin de aprender un poquito que la cosa en los planetas no siempre son hacia más y más y más… a veces estos toman el tiempo por el que está pasando la Tierra como un error por corregir, pero en el momento de morir ellos aprenden la lección.
Otras veces el caso es de una estrella muy muy poderosa, joven y poderosa, tal es el caso de Zeus, que termina sometiendo a todos los más sabios que él, y éstos lo dejan reinar sabiendo que su mando le otorgará la experiencia necesaria para aprender a auto-regularse.
Lo cierto es que todos aquellos grupos cerrados que acumulaban energía mediante ordeño, después de la guerra fueron perdiendo poder y sus reyes fueron cayendo en decadencia… se activó con aún más fuerza alguna fuerza desconocida que de alguna manera genera energía sin necesidad de cuerpo.
Es esta fuerza que nos dice: “Dame tu energía a mí, y yo haré los cambios necesarios”… y en ese “Darle” alteramos nuestra vibración de tal manera que poco a poco la estamos conociendo.

XXXV

La Muerte y el Sueño se parecen, hacen parte de otro mundo.
En estar bien despiertos, fuertes y dispuestos a lo que sea se hallan las posibilidades de esto que llamamos vida, un paréntesis surgido de un bostezo de la Muerte.
No todo el mundo está consciente de la posibilidad de su propia muerte, ésta no nos ocurre e nosotros, mientras estamos vivos pareciera que le ocurre es a otros.
Pero a veces es posible conseguirse en la vida a una o dos personas que viven conscientes de su propia muerte, para ésos sus propias vidas es una posibilidad surgida de la nada, de pronto se dicen “¿Qué voy a hacer yo con esto?” y el más grande de sus temores consiste en el temor a desperdiciarse. De todas las posibilidades que se les ofrece nada les atrae, tarde o temprano se sienten completamente aislados del resto de la humanidad, con el tiempo se convencen de que ese aislamiento es completamente cierto, una barrera infranqueable entre ellos y todo el resto, de pronto lo asumen y no luchan ya contra ese sentimiento y es solo entonces cuando se concentran en realmente lo que quieren.
The Wizard de joven hizo varios planes y de pronto los arrojó todos a la basura y se fue a vivir solo a un parque inmenso, en este encontró una cueva y allí vivió por cinco años, por las tardes hurgaba por comida en los pipotes de basura y todo el parque era suyo durante la noche. Fue allí que descubrió que había un vínculo entre él y el clima, entre sus estados anímicos y el estado del tiempo, trató de llevar el control y se dio cuenta que podía calmar y crear tormentas. De pronto el diámetro de su percepción se abrió y se dio cuenta que esos cinco años alejado del resto de la humanidad lo cambió por completo, era como que ahora podía irradiarse; también podía estar una semana entera sin ingerir alimento… su cuerpo le pedía que él le escuchase y escuchando su cuerpo éste le mostraba increíbles posibilidades… y fue así cómo The Wizard se volvió eléctrico ¿La Muerte? ¿Qué importa la Muerte cuando se goza la vida?
Al año lo descubrieron y lo echaron del parque. The Wizard eléctrico halló un edificio completamente de metal en la calle Prince o Spring (no recuerdo cual de ambas) en Soho, posó su culo ahí, se irradió, y de un día para otro todos los dueños y empleados de las tiendas así como los habitantes de los edificios de la zona le cobraron simpatía y se puede decir que lo adoptaron… pero lo importante no era la zona llena de gente, más que todo de artistas afables, lo importante para él era ese edificio completamente hecho de hierro, que le servía de antena; ese primer día desplegó un bonito mantel, colocó sobre éste una mazo de cartas del tarot y se convirtió en un atractivo agradable. Era muy bueno leyendo las cartas, no cobraba tarifa fija sino “donaciones”, lo que pudieran darle. Allí, de día, de esos días que a veces hay sin turistas se subía la camisa hasta el pecho dejando al descubierto solo la barriga y se echaba hacia atrás llenándose la barriga con la energía del sol. De noche veía el tiempo, el futuro leyendo los signos en el presente, luego vibraba cuando nadie lo veía y cargaba el Tiempo con su energía. Si alguien lo hubiera visto y se hubiera dejado contagiar, mover, con la energía de su vibra no habría visto a un ser humano, habría visto a un ser muy diferente. De noche también soñaba, su sueño era una energía de pura vida saliendo de su cuerpo. Durante los inviernos más fuertes tomaba su dinero y se iba a Baltimore, un estado sureño. Lo conocí y aprendí de él, era el ser más feliz que he conocido en mi vida, amaba tanto la vida y su estilo de vida le había fortalecido tanto energéticamente que olvidó completamente a La Muerte y se concentró únicamente en darle más vida a La Vida… y sin embargo era Sabio.
Conocí a Brian una noche antes de verlo personalmente, estaba yo en casa, en la casa en donde allí vivía y de pronto sentí una energía fortísima, buenísima, era como un cometa que se transformaba en un ave gigantesca que surcaba el cielo, lo sentí, yo no sé lo que allá yo era, pero hablamos, nos comunicamos y el sentimiento era que no era la primera vez que lo hacíamos, nos conocíamos o de antes ¿Egipto? O de algún otro sitio en el espacio infinito. Al día siguiente yendo hasta la tienda en Prince o Spring (no recuerdo) estaba Brian junto a The Wizard, a la distancia se me quedó viendo con fuerza y lo vi convertirse en un ave, cuando me acerqué The Wizard me dice a mí de Brian o a Brian de mí “Este no viene por aquí muy a menudo”, vi a Brian y le dije “Fue bueno hablar contigo anoche”. Y bueno, la historia de y con Brian es larguísima, pero resumo ¿Tú sabes lo que es realmente un tipo con mal aspecto? Sucio, con una barba larga descuidada de la cual le guindaban los mocos, caminando por la calle con los pies metidos hacia dentro y cargando una guitarra rota, revisando comida en los pipotes de basura luego ofreciéndotela como si se tratase de manjares. Un ser humano del que cualquier persona diría “Repugnante”, pero caminando al lado de ese ser hay una conversa, una suerte de conversación entre dos energías y debajo, o más bien, por encima de toda esa fachada de lo más deprimente en lo que puede caer un ser humano socialmente hablando había una mirada que reía de inteligencia. Supuestamente y que pintaba, varias veces lo acompañé y ayudé a llevar sus cuadros de un depósito a otro, para mí era un brujo al que yo no entendía, siempre era agradable caminar a su lado y caminando a su lado sus piernas a veces daban la impresión de ser patas de ave llenas de plumas, yo me quedaba viendo la impresión y él se volteaba a verme y sonriendo decía “Oh, C’mon Carlos!”. Durante más de un año eso era él para mí, un mendigo que no pedía nada excepto ayuda para mover cosas de un sitio para otro, desaliñado y sucio como él solo y con una energía muy extraña pero inteligente y agradable, dormía en hoteluchos de mala muerte. Luego al comenzar la guerra él fue el mejor estratega de todos. Toda su impresión primera mantenida sin cambios durante ese más de un año no tenía otro objetivo más que el de que nuestras energías se conocieran realmente a fondo. Al comenzar la guerra la telepatía entre él y yo era perfecta, cada uno sabía qué hacer por separado, donde encontrarnos al azar, etc. como activar campos, etc. en realidad fue una preparativo inteligentísimo de su parte. En una oportunidad cambió su aspecto por completo, dejó por completo el desaliño y se convirtió en un individuo irreconocible, en otra persona. Sí, una vez más me pidió que le ayudara a cargar un cuadro, lo acompañé hasta uno de los mejores hoteles de Nueva York, allí lo trataron con un respeto total y guindaron allí el cuadro. Sus cuadros se venden a más de 70 mil dólares cada uno, resulta ser uno de los artistas más cotizados. Se inspira abandonándose completamente y viviendo como un perfecto loco durante meses seguidos, de ese modo toma toda la energía e inspiración para sus obras, las pinta en hoteluchos baratos y las vende a las mejores galerías.
Al segundo año fue que me di cuenta que estos dos tipos son los mejores administradores de sus vidas que he conocido en mi vida y las personas más felices que he conocido.
Brian también vibraba, era móvil y hacia sus pinturas basadas en esas frecuencias en las cuales por meses se quedaba, sus pinturas tenían esa energía de una suerte de otra cosa extraña, su pincelada.
Brian amaba la vida, no sé si tanto como The Wizard, pero la amaba, amaba estar él vivo en la vida y eso es lo que vibraban sus ojos, una mezcla de inteligencia y risa.
Y después vino Emma y Emma era La Muerte.
Yo no sé cómo decir que alguien es La Muerte… cuando uno ve seres de otras dimensiones, siempre, al comienzo, estos visten una máscara de muerte, como una calavera, ojos huecos, bocas grandes y abiertas que succionan energía… y uno se halla como en un bote cruzando uno de los ríos negros de la muerte y del olvido. Cuando tales entidades han tomado suficiente energía como para realizar el cambio de energía en quien las observa comienzan de pronto a aparecerles chispas de vida en sus ojos, uno está en el bote y entonces ellas comienzan a jalarlo a uno desde la otra orilla, finalmente uno pasa a otra dimensión y esas bocas negras abiertas succionadoras de energía se convierten en sonrisas y las calaveras en verdaderamente hermosísimos rostros. Primero conocí a Emma y pocos años después a estas entidades. Entre Emma y esas entidades no hay diferencia. Ella fue clave en la guerra, sabiendo que tenía el poder de volver de la muerte y que carga la energía de La Muerte con ella (cosa que ni Brian ni The Wizard tenían) ella supo concentrar toda la atención de quienes buscan “piezas para sus naves” (se trata de sectas) en ella, de resultarles irresistiblemente fácil para sus propósitos, se prestó a ello, se permitió ser raptada y tomada y vaciada completamente durante toda una semana; tan vaciada que la dieron por muerta – igualito que a la otra chica – desde el otro lado de la orilla (cosa que ningún otro brujo que he conocido tiene) se volvió a llenar de vida y, quienes la vaciaron, ignorantes del tipo de energía que ella tiene, fue como una maldición egipcia, todos sus planes de viajes a otros mundos mediante ordenamiento psíquico, se les hizo cenizas.
Con ella el asunto no trataba ni de poder ni de energía, era una cosa muy distinta, más calma y sabia. También caminábamos mucho juntos, nuestras energías juntas formaban una burbuja en medio de la guerra, y sabíamos pasar juntos y al mismo tiempo a otra dimensión caminando, pero no se trataba de entrar solamente en otra dimensión sino también de prestar atención a detalles en esa otra dimensión o dimensiones. Fue con ella con quién más aprendí sobre las entidades. En una oportunidad se aparecieron varias, las dos realidades estaban yuxtapuestas, veíamos a las entidades a través de las personas pero también identificábamos de qué estrella o grupos de estrellas provenía la dimensión que se yuxtaponía. Recuerdo que me preguntó – pero ella conociendo la respuesta – si a mí me parecía si esos seres que estábamos viendo están aquí, en la Tierra; y yo le respondí “No, esos no, esos no están aquí” En realidad éramos nosotros quienes estábamos en dos sitios distintos del espacio pero en nuestra percepción veíamos los dos espacios como yuxtapuestos. Otras veces eran viajes más atrás en el tiempo. Ella siempre le prestaba atención a las estrellas o grupos de estrellas responsables de ciertos tipos de actividades naturales o de cambios históricos – no hablaba de ello, simplemente al colocar ella su atención sobre ello yo sentía hacia dónde iba su mirada. Vamos, no era alguien con cartografías o lecturas sobre el tema, era simplemente su manera de hacerse de conocimiento durante los cambios dimensionales, su atención tenía el poder de dirigir la mía. Maestra silente.
Nunca supe si un nombre real era Emma, nunca supe nada de ella. La relación con ella – al igual que con The Wizard y con Brian – era pura actividad de energía, pero ella me mostró lo que hay más allá de la vida. Y eso siempre y eternamente se lo agradezco.

XXXVI

Yo no sé si alguien entiende algo de esto de lo que estoy diciendo. Tampoco sé si alguien más ha experimentado alguna vez esto hallarse en un callejón oscuro junto a alguien y que esa persona se pare frente a ti y se transforme en un ser de otro mundo, en un ser con patas de cabra y cuernos, por ejemplo, o en un pájaro con patas llenas de plumas y membranas en los ojos que pestañean oblicuamente sin mover los párpados, por ejemplo, con sombras y vientos como jugando a las escondidas entre los carros estacionados; o que se transforme en la máscara de la muerte, calavera de brillo de un millón estrellas muertas y te lance una tristeza tan profunda como el vacío interestelar…
No te creas.
De verdad, no te creas… nadie estará dispuesto a hacer esas cosas frente a ti si tú no estás dispuesto total y completamente con todo tu ser a descreerte. Porque todo en la vida, mi amor, se trata es de blandura y la manera más hermosa de ser blando es descreyéndose uno total y completamente.
Fíjate en algo, paremos una imagen completamente y pongámosla en cámara lenta: John, el General, está viniendo de frente a ti en una calle oscura, él ya te sintonizó desde dos cuadras de distancia haciendo uso de su radar, sabe que eres un tipo blando, un hombre amoroso; tú no lo ves todavía pero él está todo negro acompañado alrededor por un mar de sombras a quien él alimenta de manera eléctrica, la luna resuena con la vibración que parte de su frente; desde la distancia te ve a ti como algo que tú no te ves, una de sus sombras ya te preparó la atmósfera de un cierto tipo de miedo que se va incrustando por tu piel - ¿Tú sabes esos juegos de la mente?, ¿sabes que esos juegos de la mente a veces poseen realmente causas externas preparadas cuidadosamente para ti? ¿No lo sabes? Pues sigue - … en un momento un gato pega un maullido y se mete bajo un carro y al segundo siguiente John está a veinte metros de distancia de ti… un ser del cual emana todo tu miedo.
Cámara lenta: Te ablandó, desde la distancia te fue ablandando sin que tú te dieras ni cuenta, ese miedo que irracionalmente comenzaste a sentir es como bicarbonato de sodio en unos garbanzos puestos a remojar, los ablanda, te fue ablandando expandiendo su radio y haciéndotelo sentir; esa saliva que tragaste en tu garganta apretada, esa sensación de extraño peligro te la dio él antes de que tú siquiera lo veas aparecer. Ahora está frente a ti y te daré las explicaciones lo los resultados de la cámara lenta: Él no está habitando el mismo lugar que tú, está en uno más profundo que tú no ves, en el cual existen sombras negras, él puede resistir ese espacio como algo normal porque ese espacio ya es algo a lo que está habituado, tu consciencia jamás ha estado allí. Ese miedo irracional que sientes se debe a que desde la distancia El General te ha estado jalando hacia ese lugar y tu miedo no es tan irracional como te parece, realmente estás yendo hacia un sitio extraño, desconocido para ti, los pelos en tu nuca se alzan porque estás entrando, te han estado entrando en un terreno para el cual tu consciencia no está preparada. Ahora John está frente a ti y él desde la frecuencia en la que está te envía fuertes emanaciones a través de su abdomen a tu abdomen. Te voy a decir lo que realmente está haciendo: Te está empujando, y con mucha fuerza, al mismo terreno en el que él está… y tú no lo sabes, pero tú ya estás enganchado… imagina una manguera por la cual corre energía saliendo de un abdomen y entrando en el tuyo; si detienes la cámara esa es la foto que saldrá. Mientras no estás en su terreno aún, es decir, mientras él te está hundiendo hasta donde él está, él estará ante tus ojos rodeado de una cosa negra extraña que te mantiene paralizado. Si de pronto te hunde de un solo golpe verás al ser más terrible que podrás ver en tu vida… Pero lo que ignoras es que él no está buscando ser visto por ti, él está buscando es verte a ti en lo que tú eres en ese mismo terreno en el cual él está. Si tomamos nuevamente la cámara en la foto saldrá dos seres de otro mundo rodeados de una atmósfera negra. Tú con unos ojotes enormes viéndolo a él, un ser casi ciego de consciencia – porque te habrá sacado de tu consciencia - , y él colocando una chispita de luz en ti…. Luego perderás por completo la consciencia, lo más seguro es que salgas como borracho de ahí, que llegues a tu casa y te desmayes sobre tu cama, al día siguiente no podrás explicar nada lo que te pasó y recordarás las cosas a medias.
Abdomen penetra abdomen para conocer, para un viaje juntos a una misma coordenada.
Si en una experiencia de estas no deseas perder la consciencia y en lugar de ello ponernos a trabajar, hazme un solo favor: No te creas.

XXXVII

Si te digo que fue en un sueño miento.
No hace falta dormir cuando nadie habla, porque a solas a veces uno busca una presencia, la presencia de todas las cosas de ese momento. Pero en compañía silenciosa, compañía con quien se comparte esa presencia, yo no sé cómo decirte que ambos nos volvemos antena.
Sucedió en un bote, o, si lo quieres, en una alfombra voladora – solo los silenciosos que vibran saben de estas cosas – y al bote justo en la mitad de un río negro, justo cuando la niebla blanca de energía comenzó a tomar formas, justo allí, al bote se le abrió un hueco, por el que comenzó a brotar agua negra y a hundirnos en la total carencia de paisaje.
Ni qué es no dónde estamos… siempre silencio.
Y allí y así fue como me enteré que había pasado al Cuarto Cielo Maya.
El Cuarto Cielo Maya es sencillo pero difícil su camino de llegada, sucede de forma accidental, algo tiene que ver con el diálogo nocturno de la Luna con la Tierra. De pronto accedes a la más negra negritud y allí, completamente a solas algo se aparece. Pero el hundimiento para su acceso es tan hondo que se olvida todo sobre uno mismo, es como si a uno solo le quedasen en funcionamiento los órganos sensoriales pero sin memoria de ningún tipo. Y de pronto algo se aparece: en medio de la negritud, de una energía completamente negra y lectora, sensible, soñadora - y no se es más que sueño en su presencia – surge un ser frente a ti. Es un animal, es un animal cualquiera, sí, de esos mismos animales que abundan o abundaban aquí en la Tierra. Curiosamente se presenta con el mismo tamaño que tú y el mismo nivel de consciencia, pero su energía es enteramente su energía como animal. Entiende que puedes estar frente a un elefante de tu mismo tamaño con una energía que se puede comunicar y conectar con la tuya, o con una hormiga de tu mismo tamaño, o con un ratón o con un lobo o un gato o cualquier animal de cualquier especie. Y siempre, siempre se da un intercambio de energía entre ese animal con su energía de ser de una espacie y tu. Pero lo dije: el hundimiento es tan hondo para acceder al Cuarto Cielo Maya que tú mismo olvidas que eres humano; en realidad, si accedes al Cuarto Cielo Maya tú ya no eres humano, simplemente no sabes lo que eres. Intercambias energía con una variedad enorme de especies sin saber lo que tú eres, no hay imagen de tú mismo que puedas ver ni atestiguar… todo lo que tú eres es esa vibración que de ti emana ante lo que se encuentra enfrente… y la sonrisa o el pavor que te causa su respuesta a cambio… todo depende de ti y solo de ti… y ese “ti” es lo que más se acerca a lo que tú eres.
Nadie allí recuerda de dónde proviene, se está frente a toda una serie de seres con distintos atributos, uñas, garras, pezuñas, colas, pero la presencia de la conexión sale es de la barriga como espirales o burbujas de energía que se sienten. Diálogo, diálogo tan entendible que no amerita ni de señas.
Si acaso me preguntas si allí se está protegido de los colmillos, permíteme responderte solamente que allí hasta la muerte es completamente silenciosa. No, allí de nada se está protegido… allí todo es tan frágil… allí todo depende tanto de lo que tú eres… de lo que brota de ti vibrando, como sonrisa o risa o grito de pavor o lamento en agonía… de lo que brota de ti vibrando, allí nada es seguro.
Y es por esto que los Cielos de los Mayas no eran sitios de reposo definitivos, sino plataformas de paso.

XXXVIII

Existe una selva que se halla en una frecuencia de vibración intensa… y no hay otra forma de alcanzarla. Si a veces todo se oscurece y despierto te hundes en el sueño – así estés acostado en tu lecho con los ojos cerrados o sentado relajado bien atento – y ves la forma de uno de los habitantes del Cuarto Cielo Maya que viene a visitarte porque te agarró cariño porque se hicieron buenos amigos, porque pudieron entablar una simbiosis energética interesante y se detiene en chispas frente a ti otorgando en cada una posibilidades… como decía: si eso a veces te parece mucho aunque siempre agradable pero te parece mucho porque te vuela demasiado, tú no sabes lo que es cuando se despliega frente a ti toda la selva viva bajo el cielo.

XXXIX
Creo que me llevará varias tandas hablar sobre La Selva. En China, por ejemplo, existe un mito en donde las estrellas son consideradas semillas, simientes, cada una conteniendo en sí el germen de un elemento de un paisaje, dicen en China que alguna vez nacerá ese paisaje, como si de pronto y mediante un proceso el cielo entero se vaya a convertir en un campo, cada elemento del mismo surgiendo desde una estrella. Otras culturas poseían el mito de que las estrellas son agujeritos en el cielo, pues, si rasgas el velo allí estará el campo, La Selva.
Imposible hablar de la selva sin hablar de los colores, aún no sé si hablar de los colores antes o después o si de meterlo todo mezclado.
Uno podría conjeturar basándose en tales mitos que se trata de dos grados de fractalidad, La Selva siendo el fractal mayor y la vida en la Tierra, de hecho el Universo entendido y visto desde ésta el fractal menor… y es que a veces no se sabe si el futuro no es más que una capa envolvente que atrae hacia sí al más remoto pasado… nuestro presente.
Si queremos saber por qué llamamos “semillas” a las criaturas orgánicas la respuesta es simple: Ustedes no están constituidos a simple vista de la forma de vuestra energía, Ustedes son recipientes de energía, pero vuestra forma física no es la forma de vuestra energía sino la forma de los recipientes. Para decirlo de otra manera: vuestra energía no es vuestra materia, ésta última, en vosotros, no es más que recipiente de vuestra energía. Los griegos – sí, se que suena pesado este paseíto culturoso, pero vale la pena usarlo – llamaron physis al proceso mediante el cual los recipientes se llenan de energía y entelequia al resultado final, por decirlo de alguna manera. Pero ese resultado final no es tal. Ya ni sé en qué “cultura” se decía, se sabía, que un recipiente lleno se libera del mismo y que el contenido se mantiene vivo en una esfera de existencia – vamos: en otra frecuencia – cuya realidad está basada en transformaciones, en el enriquecimiento de esa posibilidad de ser energía “Dicen que se transformó en hada”, y de hecho, el cuerpo de las hadas es cuerpo de energía su energía es su materia y en su frecuencia todo está constituido de energía, no hay recipientes, son contenido.
No amerita mucho esfuerzo ver el contenido de los seres humanos, con lo que llaman “el tercer ojo puede verse”, basta con que veas a una persona no directamente sino hacia un lado de la misma y sin embargo colocando toda la atención sobre ella para que te vuelvas capaz de ver su contenido, notarás que la energía que transmites junto con tu mirada tiene la capacidad de enriquecerle el contenido y es fácil explicarlo: se vuelve tan maravilloso que terminas vibrándole como si se tratase de la más intensa y hermosa de las películas y es precisamente esa vibración maravillada la que le alimenta… Con las hadas sucede lo mismo: te buscan esperando que las bañes
(si deseas ver hadas vuélvete hábil alimentando con esta simple técnica los contenidos de la gente, catalizando physis en los seres humanos, y no es necesario que éstos se den cuenta de lo que estás haciendo. Las hadas vendrán luego, cuando tu habilidad les pueda ser útil)
Y creo que esto responde a por qué llamamos “semillas” a los seres humanos.
Pero si crees que con las hadas lo tienes todo te equivocas y éstas serán las primeras en enseñártelo: irás progresivamente notando que están rodeadas de una esfera, se vuelve casi imposible de controlar su felicidad cuando esa esfera toma la facultad de hacerse blanca y negra, si es blanca de pasar a negra, si es negra de pasar a blanca, de obtener ellas habilidad de cambiarla entre uno y otro color… oye, y cuando pase a negra la esfera de las hadas verás cómo les fascina licantropomorfosearse. Después de eso adquieren la facultad de generar de sí una o unas otra u otras esfera o esferas. Luego te sonríen y ensayan nuevas formas de qué hacer consigo mismas: se convierten como en cabellos largos de energía, posan en un árbol y se te muestran como gigantes con esa misma sonrisa, cuando la ves y comprendes su ensayo, se convierten en cabellos largos de energía y ensayan ser viento y se vuelve a ti, una enfrente y otra más pequeña a tu lado, luego se vuelven nuevamente como cabellos largos de energía y desaparecen convertidas en una esfera blanca de energía que deja un trazo físico en una nube.
De noche te buscan, te hunden el pecho con una mano y te llevan hasta Marte y comprendes lo siguiente: Marte es una plataforma en donde sus habitantes se hallan en la forma de cabellos largos de energía… son vientos esculpiendo rocas.
Bueno, cuesta mucho hablar sobre La Selva, y ni siquiera he hablado de los colores, pero valga esta breve introducción solo para dejar planteada la cuestión de que hay cuerpos de energía, cuerpos cuya materia es energía.
La Selva está compuesta por cuerpos de energía, no por recipientes… y llegar a describirla me va a resultar un poco complejo.
Ok, la siguiente parte será sobre los colores.

XL

Descubrí Los Colores anulando el tiempo.
Es fácil habituarse al Presente absoluto. Tuve la suerte de hallar alguien con quien podía estar sentado durante horas en una acera en silencio viendo coches y gente pasar hasta que surge desde adentro y desde afuera un flujo de energía que nos lanza a otras coordenadas hasta que todo lo que pasa alrededor se convierte en lenguaje simbólico… en esos momentos no hay pasado, no hay futuro, ni siquiera hay coches ni gente, estos últimos se convierten en algo parecido a cargas simbólicas que nosotros, sin hablarnos mas sí vibrando vamos interpretando.
Recuerdo que en una oportunidad de haber hecho eso varias veces – y eso se vive junto con un inusitado aumento de energía – estaba esta vez yo solo sentado en una acera, en una esquina viendo todo alrededor – debo decir primero que aun viendo coches y gente no me fijo en ellos, no me interesa el nombre de la tienda impresa en la bolsa de la señora de vestido blanco ni cuanto gastará ella por su corte de pelo ni si la corbata del señor es cara o barata y en cuanto a los coches juro que yo no sé nada de marcas, para mí nunca han sido esas cosas más que cuerpos, por tanto ver gente y coches pasar no es hacerme una idea de la gente – estaba esa vez yo solo y de pronto quise sentirlo todo de verdad, todo lo de alrededor – esa es la idea, no las partes sino todo y las partes se vuelven así en lenguaje del todo cuando se adquiere esa vibración – sigo: estaba esa vez yo solo sentado en una esquina viéndolo todo – y al decir todo no es solo coches y gente, sino también, por supuesto, los árboles, el cielo o las nubes, etc. – y entonces de pronto sentí con fuerza que realmente solamente existe espacio, terreno, y movimiento sobre le mismo. Y me di cuenta que realmente, en presente absoluto eso es todo lo que hay: espacio y movimientos sobre el mismo. Eso da un poder de abstracción increíble porque uno comienza a abstraerse en las facultades de los movimientos y uno se da cuenta que cada cuerpo tiene su propia velocidad. Una mosca, por ejemplo, tiene un cuerpo con una velocidad completamente distinta de la de un elefante, por ejemplo, que es más lento. Entonces en un mismo espacio uno aprende a ver cuerpos en movimiento cada uno a un tempo distinto del otro y de esta manera cada cuerpo adquiere digamos que su propia “gravedad”. Sentado en una esquina eso se ve y entonces en eso es en lo que uno se fija, uno se pone a percibir el movimiento en el espacio y después de un rato uno lo ve al detalle, la señora del vestido blanco, por ejemplo posee un tempo levemente distinto al señor de la corbata, uno se fija en ella y le ve un aura naranja e inmediatamente uno ve pasar un coche naranja y luego mira al otro lado y pasa una chica con un pantalón naranja en la otra acera un chico con la camina naranja. Y entonces en un suspiro exhabruptiano y un ligero temblor en todo el cuerpo uno se dice entre Eurekeniano y alarmado “¡¡Coño, Los Colores!!” “¡¡Llegaron Los Colores!!”
… a partir de allí lo único que importan son Los Colores. Uno trata de conocerlos, confieso que también de controlarlos, de dominarlos, de llevar control sobre ellos, de tener el poder de invocarlos o de hacerlos útil o de hacerse útil a ellos. Uno sabe que son energías que hasta cierto punto rigen o nutren los movimientos que se dan en el espacio, uno sienten que Los Colores tienen inteligencia. Entonces se llega uno hasta donde el amigo que es brujo y que lee cartas en la calle y con el cual se comparte la búsqueda de coordenadas y le propone jugar a Los Colores, éste lanza una carta y de alguna manera ésta da permiso para ello, él se quita el sweter que carga y muestra una camisa de colores rojo y negro y dice “Yo soy Rojo y Negro” y ríe macabro como si me asustasen los colores del Diablo y yo le digo que yo soy Morado y Blanco y que no veo la contradicción, lo veo a los ojos y le repito que no hay contradicción… y entonces empieza el juego…

XLI

Quizás el conflicto más antiguo existente en el Planeta Tierra y que aún se halla vigente sea ese que tiene que ver con los Insectos y el Reino Vegetal. Se trata a fin de cuentas de una pugna entre dos tipos distintos de inteligencia una de las cuales posee y usa armas contra la otra y ésta otra se supera constantemente solucionando sus dificultades. A muchas plantas desde el comienzo del mundo les costó mucho ensayar distintos modos de procreación y el intento de las flores fue el más difícil de todos. En un comienzo las flores eran burdas, rústicas si se quiere y los insectos se las comían. Pero las plantas continuaron intentando con las flores. A veces insectos de diversas especies arrasaban con miles de plantas y muchas plantas se vieron en peligro. Y, ante este peligro se activaron los colores. No estoy diciendo que aparecieron colores en las flores, esto es mentira, de ese ser el caso los insectos se las abrían comido más todavía atraídos precisamente por los colores de las flores. No, lo que hicieron las flores fue generar néctar, azúcar, para atraer a los insectos y emborracharlos y llenar sus estambres de polen con el fin de convertir a los insectos en sus servidores en lugar de en sus predadores.
¿Cómo ocurre eso debido a la participación de Los Colores?: Para mí, y esto es una apreciación muy personal, el color más inteligente, aquel que ve el conflicto y genera la chispa con el fin de solucionarlo es el Naranja, el Naranja es como el Rayo, absolutamente eléctrico, una electricidad que carga de inteligencia para la solución de conflictos. Cuando las plantas estaban siendo saboteadas una y otra vez por los Insectos en su intento por hallar nuevos modos de procreación fue el Naranja quien dio su chispa para una revolución, para una evolución acelerada hacia una excelente solución para una necesidad. El Naranja es esa fuerza. Se la ve en los prismas y, a pesar de que también viene a través del Sol (Ojo: TAMBIÉN) poca gente entiende que se trata de una energía. El Naranja es una dotación de inteligencia, de inteligencia dotada a través de una fuerza eléctrica, nutridora, sanadora, bellísima. Luego llegó el Morado, también es una energía y también se encuentra en el prisma cuando a través de un cristal se descompone a la luz solar en partes que el ojo no ve. El Morado ayudó a las flores a transformarse… si el Naranja da la solución y la fuerza y el intento por alcanzarla el Morado es la fuerza regente de la transmutación biológica, es la fuerza que transforma, de alguna manera nutre pero ablanda la forma existente y con mucho, pero mucho cariño altera esa forma y la “convence” hacia otra. Aquello que está nutrido de Morado siente un placer tan intenso y también un amor tan intenso mientras se trasmuta que de una florcita piche verde pasa a unas cosas hermosas coloridas y llenas de fragancia. Ese cambio en la materia lo realiza el Morado.
Ahora bien, pasemos a otra dimensión – ojo: los colores son multidimensionales – y pasemos mediante una foto, una foto Verde: Hay unas flores inmensas y llenas de colores, algunas son blancas con un largo estambre anaranjado, pero lo que importa es que al pie de ellas hay como una gente, como unos duendes productores de energía morada que se hallan fuera de una cueva formada por las raíces de un árbol. Casi todos son muy blancos y de cabello y ojos negros y tienen las orejas puntiagudas. Dicen que éstos en particular son la forma y formación que hizo la Tierra a partir de la energía que les llega de las Pléyades. Tocan una de las flores y ésta cambia de formas y colores – en esta dimensión de esta imagen estamos en un tiempo en el que un segundo son cien mil años en esta dimensión nuestra - El árbol es verde y también hay seres verdes que como esferas de energía vuelan en el viento. A la izquierda, arriba hay unas nubes espesas y de estas brotan rayos anaranjados, y a desde lo lejos se escucha el Plop de unos hongos naciendo en este planeta por Primera vez, de entre las nubes espesas se ve retirándose a un ser de grandes ojos negros almendrados, solo marca su retiro no su presencia. A la derecha de la imagen las nubes son más blancas y hay pedazos de cielo Azul, una de las energías más difíciles de definir, ya que su labor no es terrestre sino intermediaria, se interesan que lo de la Tierra se halle en armonía con lo todo desconocido por nosotros que se halla afuera. La tierra, la tierra en sí, el suelo, el sustrato que permite que se dé la continuidad de la imagen en el tiempo es Roja y la llamamos Ley. Dentro de la cueva formada por las raíces del árbol los seres esos hermosísimos de orejas puntiagudas, piel muy blanca y cabellos y ojos negros que son la formación que la Ley le dio a las Pléyades aquí en la Tierra, dentro de la cueva, repito, no son Morados y Blancos, sino Morados y Negros. El Morado siempre es una energía transformadora y la Ley dice – para que se dé la continuidad de la imagen – que hay transformación hacia la vida y transformación hacia la muerte… porque la tierra, el sustrato sobre el que se sostiene esta imagen es Roja y necesita recibir para continuar dando… porque si no recibe la tierra se seca y no produce más con la misma calidad.

Si uno se introduce por la cueva formada por las raíces se da cuenta que hay una escalerita que baja, que desciendo hacia un lugar cada vez más rojo y que allí también hay seres de orejas puntiagudas y de miradas muy penetrantes, algunas de estas miradas poseen pupilas como la de los gatos, hay un fuego caliente allí abajo y una energía como de orgía, de orgía-liberación, de saliva, de fragancia afrodisíaca, de sudor, de tetas, de culos brillando al fuego, de sudor y falos erectos. Dicen que mediante esa actividad que “sufre” todo lo que ha sido trasmutado hacia la muerte el Rojo en el centro del planeta Tierra se transforma en Negro y que cuando esto sucede no hay solidez en le Rojo sino espacio sideral, como si el centro de la Tierra fuese un puerto de salida y de venida.
Dicen que aquel individuo de nombre complicado que en la leyenda durmió durante no sé cuantos siglos durmió fue en ese prado.
Cada uno de esos colores posee y produce esferas de energía, cada uno de esos colores son una dimensión. Pero la Tierra es más que nada Verde y por consiguiente en ella se hallan esferas de energía de todas las dimensiones que genera la luz del Sol. Todas esas esferas de energía nutren la vida sobre la Tierra, de una manera u otra son las responsables de las alteraciones de la materia orgánica, alteran vibrando y un minuto de vibración en su tempo marcan aquí cien mil años.
Hay personas que producen energía de colores y éstos pueden ver y estar en los paisajes que también he visto y en los que también he estado.

XLII

No tendría por qué ser hace miles de años, pero fue hace miles de años que sucedió esto: era de noche y tenía una fogata encendida frente a mí, al pie de un árbol. Recuerdo que fue en África.
Sé que la imagen anterior no dice nada, se muestra como una foto, pero fue toda una noche. No fue en el jardín de mi casa, fue hace miles de años en África y apenas que en el mundo se estaba comenzando a construir murallas para impedir el paso a lo que fuera. Tienes al árbol enfrente, árbol enorme y frondoso, a veinte metros de su tronco todavía te cubrían sus ramas; y entre el árbol y tú un fuego; y aunque no lo creas no era para protegerte de los animales, era para estar a solas con el fuego en la noche… y el fuego lo ponía todo rojo, hasta la textura de las nubes.
No sé si sepas lo que es estar horas así, quieto, tendido y relajado, escuchando el crepitar y los sonidos de la noche fuera del círculo que alrededor del árbol habías dibujado con tu mente (ya comienzos del mandato de la serpiente), a esas horas sudas blanco y la tierra se traga tu sudor y el tronco comienza a llamarte la atención, las rugosidades de la madera comenzando a ser poseídas por juegos de luces y sombras que se vuelven presencia. Llega una lechuza y se posa en una de las ramas, lechuza de alas grandes, se rige como juez y se te queda viendo directamente a los ojos, luego vira la cabeza hacia su izquierda y se queda allí inmóvil como estatua… y sientes tus ondas ir de ti hacia ella, y más afuera los silencios de la noche. De pronto un viento que hace revolotear las hojas de un sector de ramas y miras hacia arriba y dos aberturas grandes entre las hojas forman dos ojos almendrados, no los estás alucinando, lo ves perfectamente, como ojos grandes almendrados es el espacio entre las hojas allá arriba un poquito hacia la derecha en un ángulo de unos sesenta grados y hacia allí va un sector desconocido de tus ondas, el sector de lo que espera. En cada uno de sendos espacios como ojos almendrados titila una estrella y las ondas se intensifican porque sientes una mirada inteligente y consciente que te observa, la lechuza se retira volando y te deja a solas con ella. Relajado sientes una presión fuerte en la frente y de pronto ves moverse entre las ramas una suerte de enorme mariposa blanca como Lila como de tenue titilar de mil estrellas, al principio la ves con el rabo del ojos, luego al voltearte desaparece pero la vuelves a ver del otro lado, luego ya no la ves más luego la ves nuevamente hasta que de pronto la ves ya de frente y un diseño extraño, formado en el tronco que fue tomando fuerza mientras te distraías con la mariposa revoloteante de brillo tenue de mil estrellas, estira un brazo negro fuera del tronco que contenía su diseño y deja caer una moneda.
Ian y yo estábamos ahí casi tirados en la calle al pie de una panadería. Nos encontrábamos por casualidad de vez en cuando. Él era anaranjado pero de manera innegable, es más, la primera vez que lo vi a dos cuadras de distancia era innegable su brillo anaranjado, me le acerqué y le dije “Tú eres el anaranjado, yo soy el morado”, justo en ese momento en la acera pasaron muchos niños y niñas, muchos, e Ian abrió los ojos y sin conocerme, a excepción hecha de la breve introducción que hice, me tomó por la camisa a la altura del hombro y me obligó a observar con atención todo lo que a nuestro alrededor en ese momento estaba pasando, así como diciéndome “¡Esto no es normal para nada!, presta atención porque esto marca algo”. Así que esa vez ahí casi tirados frente a la panadería, quizás el cuarto o quinto encuentro, observábamos juntos en silencio ese brillo tenue de mil estrellas que se hallaba revoloteando alrededor de un árbol. De vez en cuando uno de los brillo, esferitas de energía se desprendía de las alas y/o de las ramas del árbol y se dirigía hacia la izquierda de Ian y éste velozmente estiraba su brazo y lo cazaba en el aire, sin saber qué pensar de eso miro la mano de Ian y ésta tiene uñas largas y mugrientas, me mira directamente y sonríe de manera cínica. Ante la incomodidad me hundo un poco más hondo golpeando suavemente la espalda contra el cemento de la acera y esta vez le doy a entender que ahora soy yo quien le va a enseñar algo: pasa un muchacho, pasa justo por debajo del árbol y comienza a cruzar la calle, y de pronto el muchacho cobra ante nuestra vista un enorme aura verde, muevo la pierna haciendo que mi rodilla toque la de Ian, un golpecito para llamarle la atención sobre lo verdaderamente importante: ese aura verde grande y eléctrico que rodeaba al muchacho estaba siendo proyectado sobre el chico desde una de las esferas de energía que se hallaba en el árbol, Ian dirige hacia ese punto su mirada y juntos comprendemos lo inexplicable y justo en ese momento se sientan sobre el banco al pie del árbol tres enanos. Logramos activar la dimensión verde y decidimos permanecer en ella, viendo cómo ese árbol cargaba de aura verde a las personas en cuya cercanía caminaban, brillaban, algunos los veíamos poseyendo durante varios metros orejas puntiagudas y alargadas o narices de cierto tipo indescriptible o miradas negras y hermosas con pestañas como alas y quisimos permanecer por un buen rato allí así.
Sobre el árbol más arriba pequeñas nubes algodonadas bajo un cielo claro y azul cristalino. Nos hundimos más con el fin de lograr la combinación de dos Colores… debido a que esto constituía un gran esfuerzo Ian desdobló un poco mi camisa arremangada hasta un poco más debajo de la altura de mi codo, sin mediar palabra comprendí perfectamente: estaríamos más seguros si la gente que pasaba simplemente nos veía como heroinómanos – Vamos, esto es necesario aclararlo en un segundo: el cambio de frecuencia de uno o varios individuos produce en ellos una vibración intensa que, aunque no sea visible por la gente de alguna manera inconsciente les llama la atención, pero la razón puede más en la gente que la energía que ésta siente, si llamamos la atención de manera ciega, inconsciente a la gente debido a la inusitada energía ésta inmediatamente al creernos drogadictos continúa en su realidad sin prestarnos mayor atención… la razón los despista, los mantiene en su continuum, y de esta manera ambos proseguimos en nuestro intento sin atraer interrupciones o desagrados – Sentimos la conexión del Verde con el Azul, la sentimos hasta el punto de entenderla perfectamente: las nubes observan las necesidades de los árboles y los árboles a veces lloran un poco, quieren continuar. Ensayamos, hay un punto en el cual es posible lanzar una flecha en el vacío y hacerla penetrar en él, no recuerdo cual, uno hizo aparecer la diana en un punto preciso entre las nubes (me bastó con encender un átomo) y el otro lanzó la flecha, una flecha anaranjada y de pronto apareció el fuerte viento y a la media hora comenzó a llover, quisimos entrar en la panadería pero no nos dejaron entrar… de verdad, juro que de esta vez no necesitábamos pedir dinero a nadie.

XLIII
Sencilla síntesis e introducción a La Selva:
El ser humano cuando detiene el proceso del pensamiento deja de utilizar su energía en ello; al rato de detenido el pensamiento, en el silencio, su cuerpo aumenta el nivel de su energía y ésta aumenta su vibración. Lo que conocemos como el vacío, el aire, el espacio posee mayor cantidad de energía que los objetos visibles y consta de un espectro de frecuencias bastante amplio. Cuando se aumenta de vibración se hace posible vibrar en el nivel de tales frecuencias; y existe conciencia en tales frecuencias. Lo importante consiste en mediante la práctica convencerse que realmente eso que llamamos vacío o espacio posee frecuencias alcanzables cuando se aumenta de vibración.
Esa es la síntesis.
Ahora bien, el cambio de vibración se siente, es un asunto que se practica, que es posible practicar si uno se lo propone y la práctica posee un efecto similar al ejercicio físico: al comienzo no verás cambios, luego éstos comienzan a aparecer, lo que en un comienzo era difícil se vuelve cada vez más fácil de ejecutar y se va adquiriendo habilidad en la ejecución.

Por otra parte, debido a que son muchas las frecuencias a las que se hace posible acceder y debido a que las maneras en que se pueden vibrar son muchas, el campo al que se penetra cuando se aprende que hay muchas maneras distintas de vibrar es realmente amplio, es como pasar de dos dimensiones a tres, como la diferencia entre el plano y el volumen, es un cambio radical. Dudo que alguien pueda agotarlo.
Ahora bien, esas frecuencias son energía y lo que vibra en uno es el cuerpo de energía, es energía también, hay afectación; y tales frecuencias de energía no están deshabitadas, se hace posible el intercambio de energía, el diálogo-energía con seres de esas otras frecuencias, de manera tal que el cuerpo energético de uno se va formando en tales frecuencias, o digamos que la energía de uno aprende a vibrar de tal manera en esa frecuencia que se va conformando en un cuerpo, en un cuerpo apto para esa frecuencia, ese cuerpo es energía y consciencia. En tales frecuencias esos seres que las habitan ensayan constantemente cambios en sus vibraciones y por tanto cambio en sus formas, a fin de cuentas son energía, esferas de energía haciéndose conscientes de sus facultades como energía… existen frecuencias en donde incluso sus habitantes son como Nadas capaces de generar energía, son como una suerte de inteligencia capaces de producir energía… por supuesto eso uno lo ve desde una frecuencia desde la cual no se ve lo que hay en una frecuencia más alta, ésta es invisible en la frecuencia más baja, pero se ve que hay algo capaz de hacer aparecer “de la nada” energía en la frecuencia más baja.
Si un individuo, volvamos a este plano, si un individuo “se conecta” con la frecuencia inmediata a esta, frecuencia más alta e invisible en esta, y estando aquí vibra en esa frecuencia más alta en diálogo-energía con los seres de esa frecuencia ese diálogo se transfiere a esta frecuencia en la forma de sincronicidad, algunos llaman a esa habilidad “poder”… debido a que bien visto todo lo que hay es espacio y movimientos sobre el mismo ejecutado por cuerpos tales movimientos en el espacio se hacen legibles durante la conexión.
Cuando comienza a ocurrir – mediante el silencio – un cambio en la vibración es posible por ejemplo buscar con qué conectarse, es decir, proponerse visitar una frecuencia específica. Si se conoce Los Colores, si se conoce la energía y el sentir de cada uno de Los Colores es posible vibrar en esa frecuencia, cada color es una dimensión completamente distinta una de otra, cada una posee seres y también un campo, acostumbrarse a un Color es ir permitiendo que la energía de uno aprenda a vibrar de tal manera que se conforme como un cuerpo allí (para salir basta con vibrar de otra manera distinta). Con el tiempo y la visita a Los Colores la esfera de energía que se es se va enriqueciendo y completando… no es la única oferta que existe al alcance, pero realmente vale la pena (como efecto “colateral” se activan Colores aquí).
En La Selva – y La Selva no se halla en un Color – todo lo que hay en ella – y La Selva es paisaje vivo – posee colores, la propiedad de tales colores es la de Los Colores, es lo mismo, los colores de La Selva son Los Colores… si cada Color es una frecuencia habitable para un cuerpo de energía capaz de conformar su vibración para allí… La Selva se vuelve entonces una dimensión impresionante. El nivel de vibración que se debe tener, adquirir, para pasearse por La Selva debe ser tal que la sumatoria de la vibración que se puede tener en cada uno de los Colores ya debe estar completa en uno… es necesario tener tal nivel de vibración que no se pueda ser succionado por cualquiera de Los Colores.
En La Selva hay habitantes, animales, animales con inteligencia superior a la humana.

XLIV

Iré a La Selva después, antes una reflexión y un dato:

La mayor alegría que puede vivir gente móvil es estar con gente móvil, es decir: moverse libre y fructíferamente, sumar las propias facultades junto con otros y que toda esa energía de origen al conocimiento de otras coordenadas. Lo que todos conocemos como “la realidad”, “el todo” no es más que una coordenada, una coordenada fija, una coordenada fija en una frecuencia específica, eso es todo y eso es todo sobre lo que se puede pensar y todo lo que la mente puede abarcar. Ser móvil no significa más que tener la energía suficiente como para moverse a otras coordenadas alterando la propia vibración hasta hacerla capaz de visitar otras frecuencias. En otras frecuencias existen mundos tan sólidos como este y existen seres que los habitan, pero las reglas, las leyes sobre cómo funcionan las cosas son totalmente distintas. Aún sin que nos demos cuenta en este mundo en el que existe esto que llamamos “esta realidad” todo funciona mediante energía, se halla en una frecuencia de energía, nosotros construimos la realidad, mentalmente, sin tomar ello en cuenta. Sin embargo en este mundo existen seres que, debido a que poseen cuerpos orgánicos, toman todo lo existente sólido como referencia primaria en cuanto a lo que constituye el mundo y poco a poco durante su proceso de educación dejan atrás la percepción de energía – Estoy parafraseando mucho a Don Juan de Castaneda, pero sigo, la idea a la que quiero llegar es otra – Ahora bien, a las personas que perciben y trabajan con energía usándose a ellos mismos como instrumento para ello se les suele llamar “Brujos”, “Chamanes”, “Lamas”, “Yoguis” etc. por supuesto: se hallan fuera de la construcción mental conocida en este mundo como “realidad”. La “realidad” es producto de un atascamiento y la educación preparativa en cuanto a vivir en la realidad genera individuos cuyas energías se consumen, pues, en “la realidad”. “La realidad” también se caracteriza por el uso de un lenguaje cuyo fin no es otro más que el de mantener, pues “la realidad”… al utilizar constantemente ese lenguaje, al alimentarnos de él y ofrecerlo también como alimento para otros, no hacemos más que reafirmarnos, pues, en “la realidad” como individuos que consumimos todas nuestras energías en ella.
Ahora bien, el individuo móvil percibe es energía y para ello utiliza su facultad de poder vibrar de maneras distintas como instrumento de cognición y de participación junto con la energía que percibe. A eso nos referimos cuando hablamos de “Utilidad” (de ser útil). Si deseamos simplificar las cosas y no confundirnos con palabras tales como “Brujos”, “Yoguis”, etc. baste con decir que hay individuos móviles e individuos atascados, éstos últimos se consumen en la realidad y los primeros habitan un universo de energía en donde ellos son energía también… es demasiado simple, lo difícil es desatascarse… debido a que la realidad es tautológica y meta-referencial. Ahora bien, los individuos atascados vibran de una única manera con variaciones mínimas a las que denominan “fuertes emociones” (pasión desenfrenada, mal humor, depresión, exaltaciones, etc.) y cuando logran hacer eso sienten que se les altera levemente la percepción de la realidad. No se dan cuenta que cuando están enamorados se fijan en otras cosas distintas de cuando están deprimidos, no se dan cuenta que la atención corre, se desliza, se desplaza a lugares diferentes dependiendo de lo que ocurre por dentro… luego cuando el desencanto o las pastillas los lleva de nuevo al lugar común creen haber vivido una ilusión. Y sin embargo no se dan cuenta de lo energizante o estimulante o interesante que les resultó ese breve acercamiento a las fronteras de esta construcción mental llamada “la realidad”… su vibración los sacó momentáneamente (que pueden ser meses) del lugar atascado en donde se construyó la personalidad… de esta manera cesa “la ilusión” y se retorna a “la realidad”, es decir al atasco en el cual se ha ido formando la propia identidad.
Pero cuando se comienza a percibir energía, es decir, cuando se comienza a ser móvil cualquiera se da cuenta que el mundo no-mental funciona de otra manera y que posee otras reglas y leyes. Sí, ciertamente cada cual construye su realidad pero la realidad que cada cual se construye no es ilusoria, ni siquiera la realdad producto del atasco es ilusoria, es producto de una vibración específica en una frecuencia específica y por tanto todo alrededor obedece o responde de una manera específica, la especificidad es lo que llamamos realidad. La realidad del que vibra como eternamente enamorado no es más que una respuesta distinta del exterior a la realidad del que vibra como el eterno decepcionado, para el caso ambos no hacen más que constatar la Realidad de su realidad… su realidad, en ambos casos, está constituida por las respuestas coherentes, correspondientes a su vibración: Viven en mundos distintos y sin embargo ambos mundos constatables su realidad por la experiencia.
Ahora bien, la persona móvil no vive ni como el eterno enamorado ni como el eterno decepcionado, se mueve entre espectros de vibración que van más allá de todo eso, y lo que busca no es la paz ni el amor ni ningún otro sitio cómodo y amable en donde habitar permanentemente… la persona móvil busca moverse entre todas las posibilidades a su alcance. Puede vibrar como el más decepcionado de los suicidas con el fin de asomarse y conocer y conocerse y resistir y encontrar los encantos que habitan en un mundo oscuro, así como al día siguiente puede vivir y vibrar en el amor más profundo y sincero hacia todos los seres… ese es uno de sus placeres, pero su verdadero placer se encuentra en la energía que otorga los movimientos en todo cambio… su placer se encuentra en el deslizamiento de un sitio a otro… ese deslizamiento vuelve a la energía del móvil una suerte de cabellos largos, algo que existe y vibra con energía inusitada, un estado entre-formas, pura libertad…
… y así son los habitantes de Marte y, mantenerlos en ese estado es una de las facultades más interesantes del planeta Marte. En Marte es posible mantenerse así durante meses enteros e incluso años, quizás hasta mucho más… corriendo y deslizándose entre-mórfico por entre acantilados, montes y rocas, esculpiéndolas accidentalmente y lentamente, porque no se trata de vientos físicos como los conocidos en la Tierra, sino de corrientes de energía… fortalecimiento del ser en la más divina de las libertades.
Cuando las hadas – y llamo hadas a cada uno de los seres que la Tierra ha hecho a partir de cada una de las estrellas cuya luz le alcanza (y de quienes cada una de nuestras encarnaciones proviene) – cuando las hadas se comienzan a descubrir a sí mismas como esferas que son una de las cosas que más les da por hacer es disolver su forma de hadas y deslizarse vueltas cabellos largos de energía y pasar a otro sitio y adquirir otra forma, ese período entre formas les causa un placer gigantesco y, cuando los genios, los seres de grandes ojos negros almendrados, les señalan a las hadas que en Marte hay cupo y capacidad para resistir tales tipos de intensidades energéticas (que se producen en el estado entremórfico) las hadas entonces se entrenan a sí mismas para completarse como esferas, pasando una y otra vez del color blanco al negro y del negro al blanco de sus esferas y se lanzan inmediatamente a Marte. Si hay un ser humano, móvil o con deseo genuino de volverse móvil, esta facultad en la que se entrenan las hadas de pasar del negro al blanco y del blanco al negro se vuelve tanto para ellas como para el humano en cosa muy útil. El hada no te mostrará solamente lo lindo que eres, sino también lo feo que eres, en su forma negra atraerá para sí todas tus culpas o sentimientos represados de culpa, será capaz de convertirse de vampiro a verdadero demonio juez, tocándote tus zonas más oscuras por dentro hasta que vibres miedo y culpa y pesadez, absorberá eso de ti hasta que estés dispuesto a aceptarte y no soltará la forma que produce así su energía, que absorbe llevándote a lo que de ti mismo no quieres ver, hasta que no lo aceptes y te sientas en paz. Una vez aceptado eso de ti y en paz el hada se puede convertir frente a ti en el demonio más horrendo del mundo y tú vibrarle con cariño el miedo que de ti requiere… hecho esto te sonríe y se pone verdaderamente linda. Poniéndose linda atrae hacia ti todo tipo de buena suerte y después se va a Marte.
Marte posee otra extraña cualidad: posee una suerte de elevador. Verás: si vas como forma específica, con una de las formas de tu cuerpo energético en lugar de cómo cabellos largos de energía (no muy fácil para los humanos) es posible que caminando sobre su superficie veas de pronto una luz intensa, como un bombillo que de pronto se enciende, hecho esto todo en Marte se transforma en otro mundo, si la luz se intensifica aún más entonces es aún otro mundo diferente, otro más… esto se debe a la actividad energética en su superficie, debido a que en su superficie habitan y corren y recorren placenteros cabellos largos de energía con una intensidad superior a la de un millón de orgasmos de los buenos, de toda esa energía emanada se desprenden formas posibles, según como vibre la energía interna del visitante en forma a Marte se le forma un mundo diferente – es imperativo tomar esto en cuenta porque:

Porque anteriormente he hablado de Los Colores y he dicho que cada uno de Los Colores - que son los constituyentes de la energía del Sol que percibimos como luz solar, los mismos del arcoíris – es una dimensión. Y cada Color-dimensión no solo conforma una sensación, una dimensión, un paisaje, un sentir fuerte y amoroso sino que también en cada uno hay esferas de energía que lo habitan, formas de cuerpos conformados por esa dimensión-energía-Color. Ahora bien, para hacerse capaz de percibir la dimensión de un Color y lograr hacer que la energía propia adquiera una forma en esa dimensión se hace imperativo saber cómo percibir esa dimensión, es decir, vibrar en frecuencia. La luz solar, la energía del sol posee todos Los Colores en sí pero cada Color posee una frecuencia distinta. Sabiendo que cada Color es una frecuencia distinta se hace necesario decantar vibracionalmente el Color específico en el cual se desea vibrar, se hace necesario ajustar la vibración interna a la frecuencia específica del Color al que se desea visitar. Ahora bien: para los habitantes del la frecuencia verde el sol es verde. Los habitantes de la frecuencia verde habitan la luz verde que emana del sol. Y ésta luz verde que emana del Sol conforma una de las varias dimensiones de la Tierra, posee un sentir específico. Una de las maneras más fáciles de poder hacer uso de esa coordenada consiste en darse cuenta que no solo el Sol posee la frecuencia verde sino también las estrellas. Una vez que un individuo móvil ha cambiado su vibración nada más fácil que el conectarse con las estrellas verdes del cielo, que hacer que la Tierra se vuelva negra, que aspire vibración espacial, vibración espacial verde de las estrellas verdes y luego esperar a que las esferas de energía que habitan esa dimensión se manifiesten. La mejor manera de hacer que entidades inorgánicas, hadas, se manifiesten consiste en mirar alrededor y ubicar un sitio desde el cual el ser móvil se siente observado, buscar la mirada negra que lo observa, hallarla y quedarse viendo lleno de amor, cariño y ternura hacia esa mirada negra que está absorbiendo sutilmente su energía, esa mirada negra y sutilmente absorbente se suele sentir como una mirada de una calavera negra y suele hallarse en espacios negros entre objetos, ya sea entre unas ramas, etc. a medida que el ser humano móvil va aportando su energía a esa mirada negra y vacía como de agujeros en calavera verá ir surgiendo un brillo en ella, cada vez más, como luces titilantes y verá cómo la mirada cobra vida y luego aparece un duende, un hada (la palabra hada, en la manera que la uso no hace referencia a género) vivo y brillante y éste posee el poder de activar para la percepción del ser móvil la dimensión verde del cielo nocturno y transportarnos a ella, de manera tal que el individuo móvil vibra de la misma manera en que los seres que habitan la dimensión verde vibran… y descubrirá algo insólito: el ser verde dentro de él despierta en él y el ser móvil se da cuenta que éste, su ser vibracional verde posee miles y miles de años de edad… en realidad no se forma, sino que recuerda.
Ahora bien, tomemos a una esfera de energía verde de la dimensión verde y fijémonos en ella – y es en esto en donde las condiciones en Marte se asemejan un poco a las de la Tierra -, nos daremos cuenta que posee una forma específica o más bien característica de los seres que habitan la dimensión verde, así como asimismo unas facultades similares. Pero si esa esfera de energía verde característica de la dimensión verde modifica su vibración y pasa a vibrar de la manera de la frecuencia azul o naranja o roja o morada se convertirá en una esfera de energía de la dimensión azul o naranja o roja o morada con las características, facultades y formas comunes de cada una de tales dimensiones, es decir: son pisos a los que una misma energía accede modificando su vibración, cada piso le otorga una facultad distinta y particular… la diferencia entre una dimensión-Color no es más que un asunto de frecuencia pero un mismo ser puede pasar de una a otra modificando su vibración vibrando según las características de la frecuencia. Algo muy similar sucede en Marte.
… se me hace necesario hablar de cada una de las propiedades de los distintos planetas (de los que conozco) porque sin ello es imposible hablar con propiedad de La Selva.
Por tanto debo hablar de Venus, de Júpiter y de Saturno… cada uno un conjunto específico y particular de propiedades.
Ahora bien, en cada uno de los planetas del sistema solar que he visitado no me he encontrado nunca con La Muerte – excepción hecha de La Tierra -… sólo en los Planetas – y sí que los hay – de cuya tierra se van formando seres que viven y mueren manteniendo una forma medianamente constante es que es posible encontrarse con La Muerte. La Muerte solo habita de manera impercibida, como entidad, en los planetas que fungen como semilleros… para el completo desarrollo de la energía contenida en los recipientes a los que llamamos “semillas” está no solamente el planeta de cuya tierra se forman sino también todo el resto de los de la misma estrella.
La energía de Universo es tan increíblemente intensa que si bien del Todo se puede realizar una construcción mental (falsa e incompleta, por supuesto) del mismo, para vivenciarlo, para completarse, para hacerse en él, solo es posible vivirlo por partes, de a pedacitos, y si no fuese así nos reventaría a cada uno completicos, por tanto el ir de escaloncito en escaloncito nos otorga, lentamente, la facultad, la capacidad de ser capaces de ir resistiendo cada vez energías más intensas… aquí nos estamos limitando a realizar un breve resumen, un modesto estudio, de lo que nos tiene por ofrecer una sola de las estrellas de entre las miles de millones de esta galaxia. Y, si consideramos que hay más galaxias en el Universo que estrellas en esta galaxia hemos de considerar este estudio como un estudio realmente modesto. Lo que la gente no toma en cuenta es que sólo es posible ser abriéndose a la posibilidad de transformarse… y que lo que la misma gente llama “Entendimiento” no es más que el intento vano, infructuoso e inútil de hacerse una imagen únicamente mental (y por tanto tan falsa como estéril) de todo.

XLV
El Sistema Solar es realmente eso: un sistema, el sistema de una estrella ¿Cómo funciona el sistema? ¿Qué genera el sistema? ¿Funciona realmente el sistema como un sistema? Pues déjame decirte que si tú alguna vez llegas a viajar a alguno de los otros planetas del sistema solar te darás cuenta que cada planeta origina alteraciones muy particulares sobre los seres que por el planeta pasan – no me refiero a viajar físicamente con el cascarón de la semilla encima, lo que viaja es el germen cuando ya está pronto para realizar tales viajes. Es parte de un proceso. Y lo que quiero decir en cuanto al Sistema Solar como sistema de verdad que funciona con una finalidad es que efectivamente el proceso continúa más allá de la Tierra. Es más me atrevo a decir que ni siquiera “más allá de la Tierra” existe un ir y venir constante. Todo el sistema solar es un campo y, cuando los gérmenes dentro de la semilla comienzan a estar listos para salir de ésta los viajes a otras partes son la cosa más común del mundo y cada parte, cada planeta tiene alguna función nueva que enseñar, mediante la cual proseguir con el proceso… no la tiene por enseñar ni a la mente ni a la comprensión ni al intelecto y mucho menos a los cuerpos físicos… los cuerpos físicos lo son porque vibran en una frecuencia específica en la cual los cuerpos se encuentran… dos cuerpos no físicos de en esta frecuencia se sienten unos a otros físicos en otra frecuencia… existe una frase muy conocida de Johann Graves – dada por él en uno de esos momentos en que se iba no se sabe a dónde – que da claves para comprender todos estos asuntos de lo material y de lo inmaterial: “Para el fantasma que atraviesa la puerta la puerta es fantasma… y si el fantasma que atraviesa la puerta se consigue alguna vez con una puerta fantasma no tendrá más remedio que abrirla y entrar en su merecida morada”
Ahora mosca: si yo digo, por ejemplo, que en Marte hay vida en otras frecuencias fuera del alcance de la percepción de la frecuencia habitual humana (de la vibración habitual humana) y cuento cómo es la vida en Marte y cuáles son las características de Marte, cualquier persona me puede decir que eso de “otras frecuencias invisibles, inexistentes, y fuera del alcance de la vibración habitual del ser humano” da para inventar cualquier cosa, para engañar y tomarle el pelo a cualquiera… y es verdad, eso de “Existe pero es invisible” no muestra nada… a menos que se alcance esa vibración y se corrobora mediante experiencia propia – por eso digo que estas cosas no son para el intelecto. Hay que tomar en cuenta que las frecuencias son Energías y que éstas sólo se alcanzan sintonizándose a ellas mediante el vibrar. Lo que es Energía no es imaginación, la imaginación sirve para entretener, para entretenerse, para crear obras de belleza, para materializar alguna posibilidad Y también sirve de volante para alterar la vibración una vez que se suelta el freno, la imaginación puede inspirar, pero no sirve de mucho si esa inspiración no viene acompañada de una modificación de la vibración… cuando se aprende a vibrar la imaginación se convierte en una suerte de volante y de inspiración… pero las realidades que se presentan no son las imaginadas, sino las que están realmente allí afuera, afuera-dentro y éstas son reales y compartibles entre seres móviles… son terrenos, territorios, campos, alcanzables únicamente mediante la alteración de la vibración.
Una vez que hay una alteración de la vibración es posible estar en condición de igualdad, sólida, con seres que, para la vibración común son inmateriales. También es posible hallar seres físicos, personas vivas con cuerpos orgánicos que vibran en otras frecuencias – estando aquí presentes en cuerpo orgánico - y que pueden otorgar una coordenada en otra frecuencia de maneras tan simples como su sola presencia física o aun más simples: simplemente tocándole a alguien en el hombro. A esos individuos yo los llamo “Móviles” y si tocan a alguien es porque lo ven blando (un ser móvil que sabe que otro ser móvil le va a regalar un regalo).
La primera vez que tuve contacto con Venus fue de manera muy extraña: iba yo caminando por la calle saliendo del mercado de Quinta Crespo en el Centro de Caracas y cargaba dos bolsas, iba yo caminando por la acera y no me hallaba yo en una etapa muy agradable de mi vida, tenía yo la consciencia limpia pero cumplía una responsabilidad que me resultaba un tanto pesada, una situación como de no-vida, por la cual decidí pasar, peor de esas situaciones que sacan arrugas. Iba caminando y en la acera de en frente pero no justo enfrente sino más adelante vi a una muchacha que podía tener cualquier edad, llena de energía, se notaba por sus harapos que vivía en la calle, pero estaba realmente llena de energía, de pronto me ve y yo hice algo que suelo hacer cuando me encuentro con gente móvil que no conozco: le coqueteé; de pronto produje un cuerpo de energía en mí – entre la gente móvil uno puede activar inmediatamente el cuerpo energético, simplemente se activa y este aparece como una explosión de energía y toma una forma que uno puede aprender a manipular – me le mostré – mi cuerpo energético – como un cristo llevando una cruz, un cristo de energía blanca llevando una cruz… era también una manera de decirle “Me encantaría de verdad ser tu amigo, pero estoy cumpliendo”; cuando logré hacer aparecer ese cuerpo de energía en mí la muchacha se volvió toda roja con unos ojos inteligentísimos brillando como estrellas, un ser preciosísimo, y lo leyó pero súper requeté bien, y se dio cuenta de todo, se dio cuenta que yo era amigo, que no era hostil. Luego no la vi, miré hacia otro lado y no la vi. Después crucé la calle, todavía cargaba yo con ese cuerpo de energía blanca cargando una cruz y yo estaba logrando llevarlo hasta un punto realmente patético. De pronto sentí que alguien me toca el hombro y me detuve y me quedé completamente quieto blando y la muchacha – repito: imposible saber su edad – me dijo algo en el oído con voz suave y un tanto cavernosa, no recuerdo lo que me dijo pero fue algo completamente coherente, al caso, inteligente y profundo, un gesto de amistad también. Le dejé algo de mi energía, le doné una burbuja, pues y me fui.
Pasaron varios días, estoy en casa de noche, de madrugada, y de pronto siento un incremento inusitado de mi energía, algo no provocado por mí pero a lo que respondo y la cosa no cesa y se vuelve intensa y placentera, una energía roja, intensa, amistosa, agradable y súper inteligente, una de las cosas más geniales que he experimentado en mi vida y de pronto ya no estuve aquí en la Tierra. Estaba en una sitio árido y rojo lleno de mucha energía y había alguien enseñándome la técnica de construir una suerte de rampa mediante la construcción de un muro – en ese momento estoy aquí y allá, espacio-tiempos que se doblan y tocan yuxtaponiéndose uno con el otro e intercambiando energías, trayendo energías… bueno, en Venus existen corrientes fuertes de energía, sus habitantes son rojos y asemejan o dan la impresión de ser como cangrejos, pero son muy inteligentes, mucho más que los humanos, ellos construyen rampas que toman ventaja de las corrientes eléctricas, de los vientos eléctricos y los construyen de manera tal que se acelera e incrementa las corrientes de energía. Son expertos en hacer uso de las energías del planeta – para el caso de cualquier planeta – luego ellos se lanzan por tales corrientes en rampa y viajan por el sistema solar como si fuesen semillas voladoras de dientes de león. Todo se sentía tan claro, tan lógico, tan normal y tan matemático – recuerdo que traté de retener una suerte de fórmula pero no pude – me pareció que sería posible realizar alguna rampa similar aquí en la Tierra. En frente de donde vivo aquí en Caracas hay un paseo con árboles, justo en la acera de enfrente y, como nadie lo limpia se suele llenar de hojas secas. En ningún momento dormí durante esa noche y cuando amaneció y me asomé por el balcón todo en frente, todo ese espacio que suele estar cubierto de manera homogénea por las hojas secas caídas se hallaba lleno de dibujos, como si se tratase de relieves antiguos, una cosa realmente hermosa. Todo esa noche alrededor se llenó de vientos, toda esa noche circuló a través de mí toda esa corriente eléctrica hallándome al mismo tiempo en dos planetas diferentes junto con alguien – con la chica móvil y despierta que me tocó en el hombro enviándome a otra coordenada -. Al ver eso, las hojas secas apiladas de manera tal que formasen dibujos – había de todo era como una pintura, un relieve antiguo – quedé tan profundamente emocionado que bajé descalzo a la calle y caminé por un buen rato entre todo eso. A dos personas quise mostrárselo, sin decir qué era, pero ninguna quiso fijar su atención en eso.
Esa fue la primera vez que fui a Venus.
(En Venus hay mucha energía, lo que nuestras cáscaras sienten como calor el germen lo siente como mucha energía… y en Venus hay poca variedad de especies, una o dos distintas especies, creo haber visto dos. Cuando llegan a la Tierra y encarnan como humanos les sorprende toda la variedad que existe en la Tierra, les maravilla, les asombra realmente la variedad de todo tipo de cosas que hay aquí en la Tierra, pero les cuesta adaptarse a la baja intensidad de energía que comparativamente existe en la Tierra. Son gente que necesita de mucha intensidad, adrenalina, sexo fuerte, calor constante, de todo, sino sufren y al comienzo suelen morir jóvenes, luego poco a poco se adaptan o adaptan su energía para aquí, sin dejar de ser intensos y geniales).

XLVI

Saturno y Júpiter son tan distintos uno del otro y sin embargo se me hace imposible escoger cuál de ellos prefiero. A Urano lo desconozco pero sé que Neptuno es un mirador, desde él se puede observarlo todo, todo lo que ocurre en el Sistema Solar y se sonríe al ver al Sol tan pequeño y a la vez tan poderoso. En Neptuno se descansa y se sonríe habiendo ya pasado por todo. En Neptuno a veces alguien de pronto se sienta a tu lado, son dos espíritus recordando y sonriendo mirando siempre hacia adentro, mirando hacia la lejanía y sin embargo sintiéndose uno al otro… no hay humano que pueda soportar tantas poéticas soledades acompañado… mirando siempre hacia dentro.
Cuando se va a cualquiera de esos tres Planetas, pero sobre todo cuando uno se sienta en Neptuno, se sabe que en el Sistema Solar no existe la muerte, eso es algo que solo le sucede al fenómeno extraño de los que surgen de la Tierra. Y desde allí, desde Neptuno, cuando se habla de quienes habitan la Tierra no se habla de los humanos…
… sino de esos seres que una y otra vez se vuelven orgánicos y nacen y viven y mueren una y otra vez en un intento repetido por hacerse de consciencia. Esos seres que en principio dan la impresión de alimentarse de los humanos pero que mejor observados son ellos mismos que se envían a sí mismos con el fin de alimentarse de experiencia. Necesitan completarse, se obligan a ellos mismos a nacer carne, a vivir carne y a morir carne y luego se alimentan de su propia experiencia llenándose poco a poco de más colores y de menos sombra. Esos seres que se envían a sí mismos de manera fraccionada, prohibida la memoria con el fin de mejorar el producto, hasta que finalmente son capaces de enviarse a sí mismos con continuidad de memoria, con finalidad y propósito… con recuerdo e intención.
Sólo en la Tierra habita la muerte – y eso es bueno – pero lo que importa no es lo que está por debajo de la muerte, eso a lo que llaman vida, sino a lo que lentamente se va formando por encima de ella… al ser que se va formando por encima de ella, tomando sustento para sí mismo e irradiando. Uniéndose en los dos planos que existen en la Tierra. Y Saturno es una escuela para ellos.
Saturno es casi indescriptible. Saturno te comprueba. Está hecho de esa masa de sueños que podría ser cualquier cosa… pero sólo cualquier cosa que tú deseas. En él tus temores se vuelven ciertos, si es que temor es lo que irradias; en él el misterio se vuelve cierto, si es el misterio lo que amas… en él las calles son oscuras y húmedas si eso es lo que deseas… y el deseo se convierte en una historia, en una historia que te sucede, la escenografía que tú montas ella misma te responde apareciendo sobre ella seres que se encuentran sintonizados en la misma tónica.
Saturno es completamente misterioso, es posible que cuando vayas se te presente una caja, si la tocas te darás cuenta que tu toque le confiere la solidez que en ella sientes, si no solo la tocas sino que también le imprimes tu energía aparece la escenografía que responde a los colores de tu energía, si identificas la escenografía mediante alguna referencia sacada de un recuerdo, un capricho, un deseo o una nostalgia te encontrarás en el lugar recreado por tu mente pero con la energía de Saturno… allí las sombras de los recuerdos más ocultos cobran vida y se alzan y lentamente se te acercan. Saturno es así, gigantesco y misterioso: gaseoso. En él, más que en ninguna otra parte, estás consciente del espejo, pero el reflejo tiene vida propia, autonomía que no desaparece si así quieres… autonomía que debes aprender a tratar con ella… a abrazarla o a hacer que de ti en paz se aleje.
En Saturno pueden acechar monstruos en cada esquina, pero también, si te gusta dar vida y cargar de energía, puedes estar echado como un niño con un aro jabonoso y lanzar burbujas a los cielos… Saturno da también para hallarte a ti mismo en esas, dando lunas, dando vida, dando flores. En Saturno todo de ti depende… un Planeta plastilina, pero es de debajo de tus pies que todo lo conformas. El Planeta del intento, pero en él sólo puedes intentar lo que verdaderamente llevas por dentro… Y reensayarlo una y otra vez, reaprenderte…
Una vez que sales de Saturno sales verdaderamente poderoso, verdaderamente fuerte, un poco como esos maestros de las artes marciales que evitan a toda costa hacer uso de su maestría, pero que, en caso de absoluta necesidad pueden.
En fin: en Saturno tu ser se expande, el gas crea materia a partir de tu forma. Gas-sueño, gas-deseo, más allá de tus sueños y de tus deseos, porque aun ignorándolo en éstos muchas veces habitan sombras y las miras y las reconoces… y de ti depende.
Pero si en Saturno tu ser se expande, gas-sueño, gas-deseo; en Júpiter la historia es otra: Júpiter es tan denso que aun la luz del ser más luminoso no afecta hasta más allá de unos cuantos centímetros de su radio. En Júpiter los seres que en otros planetas del Sistema Solar son creadores de realidades no son nada, su fuerza, su intención, su ingenio y su acción sólo les sirve para sostenerse. Su gas posee una propiedad opuesta que la del gas de Saturno, aún el ser que en la Tierra con su solo intento bien puede causar un terremoto en Júpiter no haría caer una piedrita apostada sobre otra por más que aunque fúrico se esfuerce. Y sin embargo las nubes son hermosas, tintes rosa y naranja y rojo y verde y violeta y azul cada uno de esos colores haciendo sombra sobre los otros en nubes que copulan unas con otras en suntuosos remolinos. Y es sobre la superficie sólida que el molde humano – ese mismo que va a Saturno - habita, en cuevas y madrigueras, intentando construir casas que no tardan en deshacerse… y es que allí el aire es denso, casi tan denso como el agua, un aire denso como el agua que se mueve. Y los seres que bien pudiéramos decir que son los verdaderos habitantes de Júpiter no es el del molde humano que habita sobre su superficie más sólida, sino unos seres que asemejan ballenas, que nadan a cientos o quizás miles de kilómetros de altura, seres cuyo cuerpo asemejan esqueletos de animales con aletas-alas, seres de inmensos ojos negros cuya profundidad refleja la pasividad de la muerte de animales, seres que nadan entre las nubes, gigantescos, hermosos en su silenciosa belleza macabra, solitaria, retumbante… y cuyo único alimento se encuentra sobre la superficie más sólida de Júpiter
Y después el silencio…
… y el volver a intentar construir casas. Hasta que finalmente uno de entre todos, de entre todos esos todos que se hicieron en la Tierra, que obtuvieron su fortaleza en Saturno, que quizás hasta provinieron de Venus, que saben utilizar perfectamente los planetas para su propósito y a libre gusto por el bien de su propio crecimiento…, hasta que finalmente uno de entre todos se atreve finalmente a no temer a la muerte en fauces de fantasmas sólidos de animales muertos… y entrega su vida, su fuerza y su poder sin nada que temer perder… y, si lo hace sonriendo…
… su sonrisa amanece a tu lado, sentado en Neptuno, viendo un sol adentro.

XLVII

Volver no siempre duele, aunque a veces hay una sensación de incomodidad, de falta de oxígeno, de no poder respirar ni saber cómo, de demasiada nostalgia de algo y sin saber lo que es algo… mientras se crece rodeado de la lengua-encierro, de la lengua que encierra. Clic, suena el candado, y sin darte cuenta ya te has vuelto el hombre de la máscara de hierro, el que pregunta la hora, el que no deja, y el que no deja dejarse dejar cuando todo fluye constantemente de manera tan cambiante – y esto último no es una idea ni es porque lo dijo Eratóstenes - “¿De qué siglo era?” – ni es porque la sonrisa por la equivocación muestra algo, ni por las manzanas rojas del árbol ni porque a los bordes del río crece una hierba seca, verde o roja tan solicitada cuando de todos salen candados por la boca y chinchetas y cuerdas y a veces hasta se me olvida ponerme las medias y a media voz se les contesta que no, no era Eratóstenes el del fluir, Eratóstenes nació en Cyrene, Libia, en el año 276 a.C. y fue astrónomo, historiador, geógrafo, filósofo… y fue el que con un palo midió la circunferencia de la Tierra, el otro el del fluir, fue Heracles. Y es que Heracles y yo éramos amigos, él era todo rojo y redondo y yo era morado y como de gas, y nos conocíamos de antes, de antes antes, antes incluso que del tiempo de las Fiestas, antes aun que de los cuerpos orgánicos, en aquella época en la cual los simios aún eran sencillos y pequeños y no habíamos creado aún las huellas humanas, simplemente curioseábamos sobre la superficie de este planeta bajo la forma redonda y la gaseosa o viceversa si era necesario, éramos energía vibrando. Oh sí, había muchos otros. Fue la época del comienzo de la tercera primavera, aquella que en verano dio origen a los seres humanos, había que hacerlo todo en esa época, y yo provenía de las altas montañas negras por los lados de lo que ahora se conoce como Irán – nunca le pregunté a Heracles su procedencia – Montañas líquidas, montañas-puertas desde donde yo iba y venía como quería traspasando solideces que no eran tales para mí, era tan fácil hacerlo, el cambio de vibración se realiza desde adentro y la forma desaparecía dando la impresión de que yo era tragado por la roca. Pero desde la roca con mis ojos yo veía, me volvía un inmenso rostro en la roca iluminados los contornos por la ilusoria luz de la luna – ilusiones que te muestran – ilusiones que también son puertas, no te asustes si lo que te parece comenzar a ver no es lo que había antes -. Un poco más allá por la cima nevada de otras montañas aparecieron de la noche a la mañana unos curiosos habitantes y a cada uno lo llamé por su nombre, eran cada uno lo que la Tierra, e demiurgo de la misma, había hecho con la luz que le llegaba de unas cuantas galaxias… y los tipos eran como ovejas, peludos y barbudos, casi ni se les veía los ojos, altos, caminaban encorvados y vibraban Colores… y después llovieron hacia arriba en una lluvia de colores… y luego de eso llovió agua hacia abajo y se formaron los pantanos… durante esos años titilaron con fuerza las Pléyades – desde aquí no parecen más que un grupito de hermanas – y titilaban atraídas, titilaban cariñosas y llovía y llovía y se volvía cada vez más grande el pantano a los pies de la montaña negra… hasta que en el pantano comenzó a surgir el vaho y surgía misterioso elevándose por entre ramas secas. Mientras yo dormía me arrancaban de la montaña y no recuerdo lo que conmigo hacían; el poder de las Pléyades en el pantano recuerdo como entre un parpadeo en un extraño sueño que alargó los ojos y las orejas de Heracles volviéndolo así telúrico, generador terráqueo de vibraciones otorgadoras de formas… y ellas que eran gases se volvieron hermosas hadas de ojos negros que durante milenios habitaron el pantano y los sapos y las tortugas y los gatos y grillos y los gritos y lamentos del viento y así iban y venían como rayos blancos y esferas veloces de las nubes al pantano… vibrando, siempre vibrando, como queriendo hacer del barro su materia; pero vibrando de una manera tan macabra que la verdad es que a mí me daba miedo y entonces me enojé y les regalé una pradera toda llena de verde y de flores y de sol y de sombras a los lados de las rocas y bajo la frondosidad de olvidados árboles frutales y allí fueron pulgarcito y blanca nieves y todas esas historias de lugares mágicos y allí fue donde cayó por primera vez el rayo naranja que trajo por primera vez los hongos y allí fue donde las Pléyades residieron durante el día… pero se escapaban al pantano durante la noche, al sonido de la lechuza y al chillido del ratón que muere y al relámpago entre nubes verdes. Luego comenzaron a aparecer los primero simios con apenas un poco más de dos dedos de frente, cansados se apostaban bajo un árbol a pasar la noche y al cerrar los ojos con la piedra afilada entre las manos de pronto al abrir los ojos se hallaba una de ellas de frente con sonrisa carmesí de deseo de broma pícara contenida. De vez en cuando alguno de los monos no chillaba ni huía espantado sino que con los ojos muy abiertos guardaba reverente silencio observándola y ella lo tocaba en la frente y lo callaba aún más profundamente y entonces ella le daba intensidad de energía explicándole de esta manera algo de lo que podía dar a entender de las maravillas del Universo, de su propio origen de las Pléyades - “desde allá me sueño” – y el mono dormido la veía señalar con un dedo al grupo de estrellas… luego el mono despertaba a la mañana y se iba de allí con la libido a millón y cuando nacían los hijos nacían un poco más inteligentes bajo una luna silenciosa sonriendo en cuarto creciente.
Posteriormente vinieron otros, otros también de las estrellas y se celebraron fiestas. Las Pléyades eran quizás un poco tímidas o quizás solamente un poco modestas, pero aprendieron de todo un poco durante esas Fiestas… y aprendieron primeramente a solidificar sus formas. Podían venir en vaho, y luego solidificarse completamente y luego desaparecerse vueltas viento. Ellas inventaron el Escondite y la Ere Paralizada… imposible atraparlas pero también no caer bajo el influjo de ellas, desde la distancia más lejana te susurran al oído, en la cercanía desaparecen, si deseas su presencia no te acerques, ni te pongas a inventar frases ciertas… se encuentran solamente donde no pueden ser vistas y eso es casi siempre en todas partes… inventaron el olvido y el olvido de ellas mismas.

XLVIII

La frecuencia con que se frecuentan las frecuencias te hace recordar de pronto que ya se ha estado ahí.
“¿Es recuerdo de un pasado o es ahora en otra parte?”
Hice en una oportunidad esa pregunta a The Wizard. Hay que comprender que su presencia cargaba de energía lo cual no significa solamente sentirse bien, despierto, alerta y observando-aprendiendo, significa también que su totalidad no solamente estimula el consciente de uno sino también el inconsciente el cual poco a poco otorga imágenes cargadas de contenido y significados o hace que sucedan cosas extrañas, sincronicidades cargadas de contenido y significado o sensaciones-“recuerdos” muy reales que, por estar cargadas de mayor cantidad de energía que la lucidez normal de la vigilia, se toman en serio. Al hacer esa pregunta recuerdo que calló, se limitaba a mirar hacia el frente, mirarme de reojo y luego sonreír apenas perceptiblemente. Y es que en la pregunta no estaba la respuesta.
Solía obtener la respuesta sentado en un parque, y la respuesta estaba allí, caminando bajo la forma de un tipo grande, un tipo que vivía en la calle. Yo sabía que éste era también móvil y de vez en cuando me gustaba observarle, al saberse observado enseñaba cosas sin dárselas de simpático. Fue uno de los que me enseñó sobre la dimensión verde, este tipo tenía el poder de darle un brillo especial a los árboles. Recuerdo que en una ocasión miró hacia un árbol, hizo como que le hablaba y a los segundos del árbol cayeron ramas secas, luego hizo lo mismo con otro árbol y volvió a suceder lo mismo, lo cual no me hizo levantarme de mi asiento en Tompkins Square Park para ver si había alguien escondido sobre el árbol con el fin de engañarme o echarme una broma, lo que el tipo hizo realmente sobre mí fue atrapar mi atención con aún más fuerza. Nunca le hablé, pero no lo olvido, y aún siento un profundo respeto hacia él. Pero él ese día tenía la respuesta a mi pregunta y solo ahora me doy cuenta – volveré hacia él en unos párrafos más tarde.
Quien realmente me enseñó sobre la dimensión verde fue un tipo que me dijo que se llamaba Uncle Mike, el tío Mike, era un negro bajito; un día caminando por la calle es como que los dos resplandecimos al mismo tiempo y yo fui directamente a hablar con él, me preguntó si yo estaba drogado y le respondí que no y entonces él me dijo que si él tenía algo que decirme me lo diría al día siguiente a las nueve de la mañana en un sitio específico en el Bowery. Al día siguiente a las nueve de la mañana fui hasta allí, toqué una puerta y me abrió un tipo que parecía ser de los Panteras Negras, le pregunté por el tío Mike y al rato éste salió, se sorprendió mucho de que fui y se alegró, me dijo “Ah, entonces no estabas drogado”, yo me quedé esperando y él sacó varios bolígrafos de un bolsillo, bolígrafos de varios colores y uno verde cayó al piso y el tío Mike lo recogió, y me lo dio con mucha solemnidad de regalo y luego me dijo “Nunca tendrás problemas con mi gente” y nos despedimos. Al llegar al sitio donde yo vivía ese bolígrafo escribía solo, me bastaba tomarlo para sentir su energía especial y su energía especial era verde, pasé horas escribiendo mundos verdes.
Y es así como enseñan los brujos, se sintonizan en una frecuencia, cargan un objeto, una prenda, lo que sea y esa energía queda en el objeto y luego lo regalan a quien sienta que puede aprovecharlo. The Wizard hizo lo mismo conmigo varias veces y uno de sus amigos, de pronto me decían “Ven, ponte esto” podía ser un sweter roto, no importaba, pero la energía que estaba impregnada en la prenda me impregnaba.
Luego surgían imágenes completas, escenas completas cargadas de significado y contenidos emocionales (más que nada la nostalgia) ¿Es un recuerdo de un pasado o es ahora en otro mundo?... al decir “significado” me refiero a situaciones en donde se requería de un conocimiento complejo, acciones matemáticas de intento, si es que la metáfora sirve para algo…
Ese tipo de Tompkins que parecía hallarse en perfecto concierto con seres invisibles para mí que vivían en los árboles… yo no lo sabía, pero era uno de ellos (de esos seres invisibles que viven en los árboles) y sin embargo el tipo tenía un cuerpo y un cuerpo macizo, era un tipo grande, pero su ser se hallaba en la bola verde que lograba hacer vibrar desde sus entrañas… pero y si uno se pone a ver bien, esa bola verde que vibra y que hace caer las ramas secas en sintonía con “sus amigos” mediante el uso de su deseo, esa bola verde, repito, n él, pertenece a otro tiempo y espacio, y si pudiera contarle su edad tiene mucha más historia que la forma que la carga y hace uso de ella. Y luego me di cuenta que el tipo era Arturiano
Si buscas por internet no conseguirás ninguna constelación de Arturo, ni un planeta llamado Arturo, bueno, sí, hay un estrella llamada Arturo, pero no se trata de ella. Los arturianos son otra cosa y esto lo supe solo… y es lo bueno de conversar en paz con uno mismo: uno mismo se enseña y se contesta las preguntas – si es que acaso realmente algo inquieta -, la intuición habla, es la voz que sabe porque es más vieja que este cuerpo que se carga, y entonces uno calla, la escucha y observa.
Los arturianos no provienen de la constelación de Arturo, porque la constelación de Arturo está en todas partes, y, si la cosa es así ¿Qué significa entonces ser Arturiano? Ser Arturiano no es más que en un modo de viajar por el Universo, es como si cada escama de un Dragón o de una sirena fuese una estrella y ellos la sangre que le da vida y fortaleza y que toma para sí vida y fortaleza. Los Arturianos van a un sitio en el Universo, aprenden algo y luego toman vuelo hacia otro sitio en el Universo y continúan de esta manera su escuela, van saltando por todo el universo controlando a la perfección su propia carga kármica la cual usan como fuerza propulsora. UN Arturiano puede estar fascinado, por ejemplo, por todos los seres de la naturaleza – lo que conocemos como Naturaleza, es como un adn compartida por multitud de estrellas, debemos pensar que la Naturaleza proviene de una fuerza proveniente del sol, y que el sol no es la única estrella que posee esa carga “cromosomática-mórfica”, por decirlo de alguna manera” y que los Arturianos se enteran, por ejemplo, mediante sus observaciones en muchos planetas, que los períodos de los planetas se distinguen unos de otros debido a la fuerza de la naturaleza que rige en un momento. Un arturiano puede venir a la Tierra y nacer con el único fin de satisfacer su curiosidad en cuanto a cómo, por ejemplo, es un planeta cuyo período se caracteriza por la rectoría de la fuerza insecto. Y los Arturianos no suelen estar más de cinco vidas seguidas en un mismo planeta, luego siguen su curso, lo curioso en ellos es que tienen un curso, una suerte de mapa turísticos de sitios de visitas que se modifica según la curiosidad nueve por satisfacer que la experiencia adquirida les indica.
Creo que no ha quedado respondida la pregunta de si se trata de un recuerdo de un pasado o de un ahora en otro sitio… pero, como indiqué anteriormente: la respuesta no está en la pregunta. “Frecuencia” es eso, y se hace necesario hablar un poco de ello: no es uno mismo que va a otra frecuencia – en el fondo sí lo es -, no es uno, es algo que está en uno y que le sobrepasa a “uno”, es algo que comienza a ir activándose, a ir naciendo recordando y nutriéndose, es solamente asunto de recuerdo en un comienzo. En una frecuencia el ser que vibra en uno – que es realmente uno – puede tener en comparación con el tiempo normal mil años, y percibe desde una vibración de mil años en un momento, el mundo que ve es un mundo de mil años encerrados en momentos, lo que quiero decir es que se trata de intensidad. Esa esfera verde en el estómago del arturiano es realmente el arturiano y el tipo grandote es esa esfera verde que vibra en su estómago, cada vez que lo recuerda el tipo se activa en una frecuencia de mil años en este mundo, una frecuencia de mil años en este mundo que no sólo él puede percibir, pero no muchos. El cuerpo grandote es en él lo pasajero – y tú no sabes lo que es que en el momento en que te das cuenta, en que tu intuición te lo dice, el tipo se voltee y te sonría con ojos brillantes de historias pasadas en cientos de estrellas y haga caer a tus pies con su sola mirada unas ramas secas y luego le ves a él ese aura enorme verde y alguna dimensión extraña en los árboles que le contesta.
Es un aquí y ahora que se recuerda, que se activa, que se conecta… es un presente que se infla.

XLIX

Si tomamos una foto de un presente que se infla veremos dos tipos de energía que aparecen: una blanca y una negra y cada una equilibra a la otra, le sucede como respuesta. Si uno infla el presente desde un centro blanco los bordes en la foto aparecen negros y si uno lo infla desde un centro negro los bordes aparecen blancos. Es exactamente al estilo yin y yang.
Pero cada quien tiene una tendencia hacia desde qué energía inflar el presente. Lamentablemente en la historia cada tendencia fue encerrada en una categoría distinta y se trataron de crear grupos distintos, y de hecho se fueron formaron grupos distintos. Cuando la vida en la Tierra se fue haciendo cada vez más difícil, cuando comenzó la crisis de energía, la pérdida del “sentido”, cuando se “politizó” la magia y se dividió en una magia negra inefectiva y en una magia blanca inefectiva, algunos magos decidieron marcharse del planeta mediante la construcción de barcos… Barcos por el estilo del arca de Noé en los cuales metían a todos los distintos tipos de gérmenes galácticos que existen en la Tierra y pretendían marcharse, colocando a los gérmenes a funcionar como motores y dejando atrás en la Tierra a los verdaderos terrícolas, a los aborígenes humanos.
Ahora bien, a pesar de las tendencias o los gustos particulares lo cierto es que ambas energías, la negra y la blanca, pueden ser usadas por cualquier individuo y no hay individuo completo que no haga uso de ambas, es más: no hay posibilidad de completación sin el uso de ambas; pero es posible entrenar a individuos a hacer uso de solo una de ellas censurándoles el uso de la otra. Lo cierto es que si tomamos una hoja de papel y pintamos una mitad negra y la otra mitad blanca y lo convertimos en un cuadrante con grados sabemos que si, por ejemplo, activamos el blanco en + 50 no cambiaremos absolutamente nada porque de manera automática se activará el – 50. Nosotros sabemos que todo se mantiene en constante balance. Y, si hay placer en activar energía es con el fin de hacerla correr no de controlar mediante poder… El poder de control igualmente es una tendencia humana, pero usar magia con el fin de controlar nunca cumple su objetivo. En realidad lo que lleva el control de la magia no es dominio humano ni responde a deseos humanos, responde es a la Tierra; digamos que el centro de la balanza se halla en el centro de la Tierra. Un individuo, por ejemplo, puede tener muchas nostalgias de la Primavera e irradiar la energía que hace surgir flores, pero si el centro de la balanza se halla en Otoño, esa energía blanca creadora de flores será absorbida por una energía negra que, o enviará esa energía blanca a planetas primavera, o la transformará en energía que vuelva las hojas verdes en rojas. Si dos individuos por nostalgia de Primavera se ponen de acuerdo y vibran en Otoño energía creadora de flores, pues vendrán todos a asomarse desde las nubes y a utilizar esa energía como más les plazca – como más a tono sea -. Lo importante siempre es no dejar de intentarlo, lo importante es intentarlo si es a esas cosas a lo que más se tiene tendencia, pero a intentarlo sin que la falta del resultado esperado desaliente… más bien, el intentarlo da por resultado conocimiento, el intentarlo trae como consecuencias resultados que responden a lo que Es. Y lo que Es lo que pide es seguir intentándolo, porque al intentarlo se activan corrientes de energía. El placer extremo consiste en seguir intentándolo sin esperar resultados previstos, sino lo imprevisto… y lo imprevisto hace que uno abra los ojos de sorpresa.
Debido a que el centro de la balanza se halla en el centro de la Tierra – y no en la voluntad de ningún individuo – de todo acto se aprende. Se trata de eso: de aprender de un planeta. “Conócete a ti mismo y conoce al planeta en el que te encuentras” y yo añadiría “… y conoce el tiempo en que se encuentra el planeta en el que te encuentras”. Si verdaderamente queremos conocer una estrella – aquí, hay que decirlo, en este caso se trata del Sol – no solo el planeta en el que te encuentras sino el tiempo del planeta – y el tiempo del planeta se calcula debido a los resultados producidos por cada intento – el tiempo del planeta te ayuda te ayuda a concebir el Sistema Solar como sistema – los planetas no se tratan de rocas ahí flotando en el espacio, son vivientes y por tanto cambiantes sus condiciones y sus cambios se encuentran armonizados con cambios en otros planetas en el sistema (un planeta del sistema puede estar creciendo, por ejemplo, mientras otro envejeciendo). Y una vez que se concibe el Sistema Solar como sistema se vuelve más fácil entonarse vibratoriamente con las frecuencias de otros planetas. Aceptando que no hay “Mal” ni “Fracaso” se vuelve facilito ejecutar viajes… porque hay mucho que dar y poco por corregir (y, si acaso hay algo que corregir el solo emanar energía activa las fuerzas de la corrección, es decir, del balance).
Ahora bien, hablemos de pares: Cada Era produce un resultado distinto a una actividad energética, Manuela y Pedro pudieron en Primavera actuar o ser polos positivos de distintos colores (llamo colores a los colores del arcoíris y a la energía positiva blanca y a la negativa negra) y su actividad cargar el aire en tiempo-antes de vida, colorido y energía… y después se fueron. Antes de eso José y Anacleta pudieron al final del invierno actuar o ser polos negativos y su actividad energética traer a Manuela y a Pedro desde otros planetas o desde su esencia-estrella para que activen Primavera en este planeta… y después se fueron. Puede darse que en otra Era Manuela, Pedro, José y Anacleta deban cada uno aprender a completarse en la función opuesta a lo que es su gusto o tendencia. Si tomamos a un negro y un blanco y los juntamos como pares tendremos el siguiente resultado: cuanto más blanco se vuelve uno más negro se vuelve el otro, si Pedro se vuelve + 50 Anacleta se vuelve – 50, si Pedro + 100 Anacleta se vuelve – 100… pero hay un circuito interesante que ahí se enciende: el que ensaya energía negra sirve como ducto para llevar o traer energía desde el vacío, en cambio la energía del positivo proviene del vacío. La Era los ata mediante la trampa del Amor y el Amor da una facultad que nada más da: y es el permitir que se descubra la posibilidad de intercambiar los roles. De esta manera Anacleta con una sonrisa ensaya vibrar toda blanca y Pedro todo negro. Cuando cualquier ser logra hacerse del manejo de ambas energías se consolida como esfera y se pasa a una instancia distinta, se convierte en un ser distinto: se convierte en cualquier cosa… aprende la posibilidad de convertirse en cualquier cosa.
Y esta Era de tales combinaciones es en la que ahora nos hallamos.
Los barcos con sus intenciones de retirada, puedo decirlo, se hundieron, fallaron, se quebraron… cuando la división entre los “blancos” y los “negros” se extremó se dio un quiebre, explotó un conflicto y estalló la Guerra, y los prisioneros salieron libres. Cada una de esas fuerzas, a través de humanos que las practicaba y activaban se fueron separando por el diámetro una de la otra y tocaron al mismo tiempo la periferia y se encendió todo el círculo, haciendo que todos los elementos de distintos polos se dispersasen y chocasen unos con otros, encendiendo así los Colores y no hay marcha atrás, y esto fue muy recientemente y dio curso al cambio de Era. Si acaso algunos desean continuar con la vieja tradición de la división, pues, ya no tienen ningún efecto energético ni nada bueno que ofrecer y están completamente desactualizados (me refiero a eso de “magia blanca” y “magia negra”). Ahora se trata del manejo de ambas energías, de ambas polaridades, y de entenderlas profundamente. Ese manejo y ese entendimiento atrae a entidades que son los verdaderos maestros que pueden enseñar sobre todo lo realizable a partir de la complementación de ambas energías en uno mismo… en el intento de complementarlas en uno mismo aparecen y al aparecer se va al tiempo-antes (una frecuencia creadora de futuro en presente – lo que se siembra de en tal frecuencia energéticamente redunda posteriormente).

L

“Soltar el freno”… ¿Qué significa realmente “Soltar el freno”? No me refiero a cómo se hace, sino a por qué ocurre lo que ocurre, un cambio súbito de energía y de vibración y la percepción de energías que anteriormente no estaban al alcance de la percepción. Y no solo eso, sino también el entablar relación con seres de energía que se hallan en esas frecuencias, y se entabla progresivamente, es toda una historia, toda una enseñanza, toda una escuela… y todo un recuerdo. Y sin embargo sí, se logra pasando un switch. En el segundo que vuelves al estado normal de percepción lo recién vivido se recuerda como si se tratase de un sueño y vuelves a ser una persona total y absolutamente normal… pero resulta que tantas cosas que hacen parte de lo considerado como fábula, mito y leyendas están constantemente a tu alcance, ahí mismo. Hace un rato estabas intercambiando energía con un ser absolutamente maravilloso, la noche anterior estuviste en un planeta inexplicable en donde incluso las estrellas en él son como luciérnagas que se mueven brillando en le bosque con voluntad propia, y luego estás comprando pan en la panadería o en una cena familiar o sales y disfrutas con amigos y eres el tipo más normal del mundo. Pero también sucede que reconoces a quienes poseen la misma facultad, así que siempre muy discretamente puedes apartarte un poco de quienes conoces, sentarte al lado de un vieja buhonera, darle la contraseña – siempre algo completamente irracional que la activa de un solo golpe – y estar los dos lado a lado intercambiando energía de manera muy poderosa, leyendo las señales alrededor que de pronto se activan, ella llenándose y vibrando, tú presentándoles alguno de los seres que conoces y luego antes de separarte de su lado diciéndole “esta noche lloverá” coges un refresco de su cava de refrescos y te alejas de ahí sin pagárselo y luego retornas como si nada a la gente que conoces “¿Qué hacías?”, “Nada, comprándome un refresco” y miras atrás a la vieja y ella lanza una chapa a un pipote de basura lejano y la chapa cae dentro (Y tú sabes que ella lanzará un relámpago a cien metros de la puerta de tu casa… y que será una noche intensa, porque las viejas se arrechan).
De tanto hacerse el pendejo y de tanto provocar a los grandes siempre con la misma táctica de mezcla de simpatía, seducción, grosería y desparpajo y siempre de manera directa, siempre cazándolos siempre en el momento justo en que se dicen “No, este no es” (y es entonces justo en ese instante en que te sientas al lado o justo enfrente) y – lo más importante – siempre y cada vez retirándose sin haber mediado otra palabra más que la contraseña y sin dejar ni teléfono ni dirección ni nombre, entonces no es de extrañarse que tarde o temprano se tenga la energía suficiente como para que en las prácticas perceptuales se tenga un atisbo de La Selva.
La Selva, en un comienzo – y yo aún me hallo en ese comienzo – se da por señales. Hay algo que se aprende con las entidades: al comienzo uno ve una, una sola entidad. En un comienzo, en la medida que se practica, de pronto a uno le pareció ver algo raro, como una esfera surcando el cielo, luego a uno le pareció ver algo raro en un habitación, como una esfera atravesando la pared; de pronto uno está muy concentrado leyendo algo, algo que a uno le gusto, algo que a uno le lleva hondo y de pronto se siente observado, trata de buscar de donde proviene la mirada e identifica el brillo de unos ojos en donde no hay carne y huesos. Y de pronto una noche la esfera se aparece, baja, se posa en un sitio y surge de ella una forma muy similar a la humana que mira alrededor, luego te mira a ti, le brillan los ojos, dejas el libro, la observas y pasas horas frente a frente al ser más maravilloso que has visto en tu vida. Semanas enteras en donde siempre viene y, cuando no viene la buscas y se aparece o ella viene y te busca jalándote energéticamente para que vayas al sitio de encuentro usual. Y luego de semanas o de meses aparece otro ser más, similar, y aparecen ambos juntos y luego otros y otros y luego aparece el paisaje. Para entonces ya te han mostrado más que bien qué es lo que son. Y cuando ves el paisaje viene un ser de otra especia. Y cuando te acostumbras a ver todo eso ves los distintos paisajes todos y cada uno de ellos acompañado con un cambio en tu vibración. Y cuando ves todo eso te das cuenta que entraste de lleno y de un solo golpe en la mejor escuela del mundo. Y luego recuerdas que el primero apareció meses después de haber estado meses practicando ver el espíritu de la gente – la cosa más fácil del mundo: ves hacia un lado de una persona colocando toda tu atención en la persona; después de minutos comienza a aparecer las formas de todo lo que ha sido y es y, si te maravillas, las formas se embellecen.
La Selva es similar, la diferencia radica en que sus habitantes no son ni siquiera parecidos a los seres humanos y sin embargo poseen una inteligencia superior a los seres humanos y funciones que no son humanas pero que sí son absolutamente serias. Algunos son seres con garras y alas, otros son como serpientes, pero lo importante de ellos es que su actividad es completamente directa con la energía de la esfera que se es y no hacia un progresivo entendimiento ni mejoramiento de funciones como lo suelen hacer las formas parecidas a la humana –que intercambian energía modificando la suya frente a ti y logrando hacer que les sigas el paso – No, los de La Selva te agarran directamente la esfera de energía que eres, uno se siente como esos huevos en boca de caimanes, y son absolutamente directos, serios, prácticos y animales. Algunos de sus habitantes son como manta rayas voladoras y todos poseen la capacidad de afectar directamente sin que les importe lo que “pienses” al respecto. De pronto una noche te vas a acostar sintiéndote de maravillas y a mitad de la noche comienzas a despertar sudando, perdiendo cantidades enormes de energía y sientes las garras de un ser jurungándote la esfera de energía que eres y sales del sueño luchando por sacártelo de encima y cuesta hacerlo y cuando despiertas todo tu cuerpo siente la realidad de lo que fue, a la tercera vez que sucede algo así uno se intriga… y lo que se siente es profunda intriga pero también tranquilidad. He estado con brujos rudos y comprendo perfectamente bien lo que sucede y sé lo que es La Selva, comienzo por lo primero:

Cuando hay algo sobre lo cual no se tiene referencias y que es demasiado distinto de lo acostumbrado pero estás preparado para conocerlo, esas cosas no se vienen con medias tintas ni permisos. Hacen igual que los brujos rudos, un brujo rudo no te explica las cosas de a poquito a poquito para ver si es que alguna vez lo entiendes…. Un brujo rudo lo primero que hace es matarte de un solo coñazo y enviarte a otro mundo, a partir de ahí tú lo que quieres es entender lo que te pasó no lo que nadie más te tenga que decir. La Selva hace algo muy parecido, cero permisos ni explicaciones, La Selva viene y te roba, pero no son vampiros (pero sí pueden hacerse de formas realmente espantosas), vienen y te roban y es su manera de decir “Te queremos”. Y no son vampiros por lo siguiente: tienen mucha más energía que uno, pero lo que sacan de uno se halla en todo el medio del cuerpo, por la altura del ombligo y uno los puede sentir entre sueños hurgando allá adentro, pero el cuerpo comienza a sudar demasiado y a veces uno despierta sintiendo esa presencia fuerte hurgando.
Habiéndolos sentido ya tres veces y sabiéndolos animales con inteligencia superior a la humana me propuse ver de dónde vienen y después de horas de amoldarme para verla logré ver durante segundos a La Selva y la excitación de mi parte fue demasiado grande: ¡Claro que quiero! En algún nido me están colocando allí como huevo de vaya a saberse que espanto. Pero también tengo que decírtelo: ¡Qué maravilla ser un espanto en lugar tan maravilloso!
Suma en ti todas las habilidades de lo que has experimentado siendo humano, humana, suma en ti todas las habilidades de distintas especies, visión nocturna, vuelo, respirar bajo el agua… suma todas esas experiencias y añádele la inteligencia del manejo de todas esas habilidades y añádeles una consciencia seria y directa y un propósito y allí tienes un espanto. Créeme en algo: el sitio más maravilloso que puedas imaginar, energéticamente hablando, es la Selva, pero seguramente hay otros tipos de paisajes – yo vi apenas un poquito de algo a lo que llamo Selva -. Siendo humano ningún paisaje es muy disfrutable, nuestras pieles son frágiles, nos duelen los pies si subimos montañas, pasamos frío, nos ahogamos, no volamos, etc. Pero cierra bien los ojos y te darás cuenta que en La Selva lo único que se quiere ser es un verdadero espanto.
Así que si de noche de pronto sudas y te sientes atacada, atacado, por algo, quizás sólo sea debido a que por tus dones huevos en tu adentro estés germinando; quizás hasta lo sabes y no lo sabes, deja que se los lleven y los coloquen en un nido, y no te espantes, nada pierdes, más allá del pequeño susto y de la intriga, y de la necesidad de resolver la incógnita, nada pierdes. Luego como todo el mundo moriremos ¿Cargas remo?... pero juro por lo más sagrado que me cuesta un poco reprimirme las ganas de volverme de una vez un Espanto…
… y aquí en secreto lo digo: Sí, sé verdadera y extraliterariamente lo que eso significa: Hay espantos que ponen huevos… se es Espanto de antemano.

LI
LA Selva a través de ti.
Cuando se va, se descubre un sitio, una frecuencia en la cual hay vida y por tanto paisaje, ¿significa eso que es el lugar al cual iré si logro mantener mi consciencia en el momento de morir? Pudiera ser, pero no, he visto demasiadas cosas ¿Pudiera ser un sitio en el cual he estado? ¿Pudiera ser parte de una estrategia? No creo que yo haya sido tan bueno como para ganarme ningún Cielo, y sin embargo verdaderamente he visto mucho, creo que más bien mi función es de ducto. Y, lo juro, cuando alguien me habla de la posibilidad de traspasarme completo a algunas de tales frecuencias mi reacción automática, cada vez, siempre ha sido un bostezo y palabras que salen de mi boca que dicen “Yo vengo de allí”. Pocos saben el trabajo que cuesta esto de ir hacia abajo, y al mismo tiempo resulta algo excepcional porque todas las escuelas hablan es de ascender. Los juegos que he tenido con personas de las cuales he hablado, como The Wizard, John, Brian, Emma, McCarthy, Ian, han sido juegos entre individuos que fueron hacia abajo. Cuántas Traducciones para llegar hasta aquí. Y, si algo parece fantástico (como lo que más adelante enseñaré como truco) no es precisamente porque lo merecemos. No hemos hecho nada por ganar nada. Ni hay deseos de ganar ni de merecer nada, simplemente estamos aquí.
Ser ducto significa que, si logras pasar a otra frecuencia en la cual existe vida (seres de consciencia-energía), simplemente puedes hacer que a través de ti se den fuera de ti, allí enfrente, esa esfera que te observa y que te siente y que invita a un baile de ajuste y de variaciones. Otras veces se trata de sumergirte como un pelícano hasta el centro de la Tierra – allí donde es hueco negro como el espacio y titilan como espejo más veloz las estrellas – enamorarte, subir, permitir que desde abajo te aten una cuerda y activarlo todo aquí. Cada estrella, ya sea daimon-diamante (encontrada en el centro de la Tierra) o el reflejo más lento y más potente que arriba espera tiene la capacidad de teñirlo todo a su manera muy especial, y cada activación trae como consecuencia otras activaciones a veces incluso se manifiesta todo un paisaje. Ahora bien, existen ciertas correspondencias entre daimones-diamantes y algunos seres humanos, cuando activas un diamante te das cuenta que ciertos tipos de seres humanos se sienten bien… el teñido se corresponde más con su psique. Los paisajes activados se tratan de otra cosa, más profunda aún: surgen toda una serie de individuos distintos de una misma frecuencia, la energía de ellos es tanta que ahora son ellos quienes te activan a ti y, hay un momento en el cual la vibración aumenta hasta tal punto que se siente un brillo intenso blanco en el cielo, si uno lo observa bien se da cuenta que no es un efecto visual, es un brillo qu ese enciende en otra frecuencia, luego desde ese brillo en el cielo caen rayos blancos, uno los puede ver, vibrando así, cayendo en el horizonte… y de pronto ve a todos esos seres de esa otra frecuencia frente a ti contentos, excitados, felices, suele venir un viento que es energía pero viento real también que carga a todos esos seres de esa otra frecuencia y luego baja de verdad la temperatura… eso es un cargar desde allí hasta aquí. Es ser Ducto. Ser ducto es ser también Catalizador. No se trata de ser una suerte de Dios que impone su voluntad, se trata únicamente de ser catalizador, acelerador de procesos y los procesos se aceleran otorgando y/o trayendo energía: es un poco como ser una suerte de fertilizante, un fertilizante robustece la planta y acelera su crecimiento, pero no le dice qué frutos dar.
Otra de las maneras de colaborar sucede de manera accidental, se trata que de pronto te das cuenta que uno de los seres de conciencia-energía de otra frecuencia entabla profunda amistad contigo. Intercambian energía, se cuentan los orígenes, se muestran tantas cosas. Luego un buen día te das cuenta que ese ser quiere nacer aquí, y entonces uno le ayuda en las Traducciones, uno le permite ponerse en la piel de uno y ayudarlo a sentir cómo es estar aquí en cuerpo orgánico… y uno le permite que lo “use” (no hay uso, es un placer absoluto) a uno con el fin de adaptarse aquí. Ahora bien, la diferencia entre un ser de esos de otra frecuencia o dimensión y la gran mayoría de los seres humanos consiste en que éstos últimos debido a que son germen en desarrollo necesitan de energía y suelen no poder ver más allá de sus narices y terminan considerando que la única fuente de energía disponible son otros seres humanos. No les importa más nada a los seres humanos que el hecho de que hayan fuentes de energía humana disponible. Recuerdo una vez en Roma escuchar a un Ministro decirle a otro “Puedes subirles los impuestos tranquilamente pero no se te ocurra cerrarles el Coliseo”, y es un excelente consejo y hoy en día aún muy vigente… y si no hay a quienes masacrar, pues, basta con colocar unas bombas, hacer estrellar un avión, e inventarlos… al ser humano no le importa si las cosas son verdad o mentira, lo que quieren es tener un suministro humano de energía… de ello se alimentan y uno de los cultos más populares de entre todos aún sigue siendo un culto en donde se suministra la energía, de manera “simbólica”, mediante el consumo de la carne y de la sangre de un tipo torturado. ¿Importancia tiene el que seres de otras frecuencias de pronto comiencen a nacer aquí en la Tierra en esta frecuencia? Toda la del mundo… se necesita urgentemente fuentes que no puedan ser reconocidas y por tanto que no puedan ser víctimas. Se necesita una ola de carga, de aceleración kármica, de una red interconectada que produzca multidimensionalmente. Porque el día que se le quite a los humanos ese espectáculo de la sangre salpicada televisada por más que hayan utilizado sus recursos en mantener las apariencias saldrán de un momento a otro de sus casas con tenedor y cuchillo a beberse la sangre del vecino… y no queremos que eso suceda ¿Verdad? Porque estarán muchos de acuerdo en que invertir en la apariencia cuesta caro y no queremos que la máscara caiga por una irresistible emergencia ¿Verdad? Además que sabemos que una vez caída la máscara fácilmente se convierte en la próxima víctima… el espectáculo de la sangre siempre ha sido para los más decentes.
El punto anterior es importante en este estudio, esta nueva ola de seres humanos que existen actualmente sobre el mundo aún está en proceso de crecimiento y no poseen suministro interno de energía. La cosa llega a ser tan grave que se comprueba que son capaces de lamer la mano de quien les arroja la sangre ajena encima aun si éste les cercena sus derechos.
Ahora bien, si una activación y actividad fuerte y multidimensional, todavía con más participantes incorpóreos que corpóreos, está comenzando a cerrar lentamente las posibilidades de más derramamiento de sangre, está saboteando sus juegos de guerra, poniéndoselos bien caro, dificultándoles la cosa, etc. ¿Cómo hacer que los humanos adictos al alimento energético humano mediante sangre no enloquezcan como enmonados? En eso consisten los Trucos, los Trucos no son más que distintos métodos de activación energética, de catálisis… y es por esta razón que se hace necesario en primer lugar ayudar a nacer a la entidad que nos pida ayuda para ello – eso no lo pueden hacer quienes aspiran a ascender, eso sólo podemos hacerlo nosotros que no tememos ninguna pérdida; y en segundo lugar aprender a activar zonas cada vez más fuertes, traer de frecuencias fuertes, en donde habitan seres directos, no comprensivos ni comprensibles, realizarlo de manera tal que si durante la activación de la facultad ductal queda una vértebra viva todavía haya que encargarse de ello… y yo me voy adonde están los animales y los pondré a activar aquí… por supuesto, este me lo escribo a mí mismo.
Más adelante seguiremos con La Selva y Los Trucos.

LII

La Selva es una frecuencia muy intensa porque los seres que en ella habitan son, y así lo podemos decir desde aquí, la fusión entre distintos moldes terrestres (considérese cada especie como un molde); pero se hace necesario decir un “es decir”: de los seres que habitan La Selva surgieron los distintos moldes terrestres. Imagínese a esos seres como plantas, girasoles, por ejemplo, o dientes de león, de los cuales las especies que existen aquí en la Tierra son las semillas que de ellos cayeron; esas primeras semillas son energía vibrante a la cual lentamente la materia biológica obedece. En ellos el molde humano es nada más una partecita. Recuérdese también que los colores en la Selva, de las plantas, de los cielos, de la tierra son los Colores, sobre los cuales hemos hablado antes… y cuando hablamos de los Colores dijimos que éstos son energía, la misma que los prismas muestran, y dimensiones. También hemos dicho que todos esos seres, los mismos que aquí se perciben como “entidades” son una suerte de inteligencia capaz de generar “de la nada” (lo explicaremos) energía capaz de vibrar de una determinada manera, determinada manera que le confiere una forma y un carácter (y los hemos diferenciado de los seres humanos y de los habitantes terrícolas en que éstos son como cáscaras de semilla que contienen energía en proceso de hacerse consciente de su propia existencia como energía… por tanto, se trata solamente de una diferencia de grado, como la que hay entre la semilla y la planta). ¿De qué manera se manifiestan aquí los habitantes de La Selva? Sólo es posible responderlo realizando una analogía aproximada: Un lago es un Universo, me refiero a lo que se encuentra balo la superficie del lago, sólo que quienes viven bajo la superficie del lago ignoran que la superficie del lago es el límite de su Universo – exactamente igual ocurre con el nuestro, sólo que en lugar de ser nuestro límite la superficie del lago lo es la frecuencia en la cual se encuentra nuestro Universo – si un individuo desde la superficie del lago (desde la inexistencia, para el caso, para ese Universo) mete un pie en el agua, esa cosa extraña que apareció de pronto apareció “de la nada” En el caso de nuestro Universo – no usando ya la analogía del lago – ese aparecer desde la nada puede ocurrir en desde cualquier punto del vacío del aire, en fin, del vacío; ya que el límite de nuestro Universo no es más que una frecuencia. Las manifestaciones de los seres de La Selva provienen del vacío, “de la nada”, ellos simplemente modifican su vibración, atravesando de una frecuencia a otra (casi como quien se zambulle en el agua) para nosotros son apariciones desde la nada… y sin embargo al pasar de su frecuencia a esta, a este Universo, se Traducen… su poder y energía aquí sería demasiado alto… en la Traducción se reducen conservando su esencia. Nunca se traspasan completos, quizás hasta tengan más poder que las estrellas, lo que se manifiesta aquí de ellos es lo que ellos desean, saben reducir su energía, “equalizarse”, si se quiere, y pueden actuar aquí, vibrando su energía (la cual regulan y son hasta capaces de volverla nada o muy intensa a voluntad) y dando, regulando, llevando. Son los Grandes Reguladores. Para ellos toda situación es ecuacionable en frecuencia, responden a esa frecuencia y pueden evitar que un conflicto nazca o que cese debido a “fallas” uno. Les interesa una suerte de equilibrio dinámico, les interesan las próximas semillas. Verlos no es realmente lo importante, en realidad nada en cuanto a ellos aquí es importante… ni siquiera el saberse por ellos afectado. Sin embargo una cosa es verlos a ellos y otra cosa es ver La Selva. Y para ello hay Trucos:
Imagina una Rayuela que comienza en donde tú estás ahora y acaba en la percepción de La Selva, y está el 1 y por encima del 1 está el 2 y el 3 y por encima de éstos está el 4 solo y por encima de éste el 5 acompañado en el mismo nivel por el 6… es algo así.
El paso 1 es sencillo: consiste en ver el espíritu de la gente - bastante he hablado de ello pero repito – basta con que mires hacia un lado de una persona colocando toda tu atención en ella hasta que comiences a ver algo similar a otro ser en ella que comienza a modificar su forma en la medida en que tu impresión le trasmite energía. Tendrías que experimentarlo, imposible aportar más datos porque cada experiencia depende de ti y de a quien miras, pero hay ciertos patrones, ciertas reglas de juego, que te alegrarás de descubrir por tu propia cuenta y que se relacionan con las formas que se presentan y con tu manera de aportar energía, en fin: con la manera en que vibras. Es el ejercicio más fácil y simple para darse cuenta que se vibra y que los humanos son semillas de algo absolutamente genial y antiguo.
El paso 2 es más difícil de obtener, porque ya no depende de tu voluntad sino de cuán bien hayas dado el paso 1. Si posees utilidad esas formas que vista formándose en los seres humanos se te presentarán a ti de manera autónoma, incorpórea, mucho más consciente que el promedio humano que hayas visto (están formadas, no formándose)… y quédate un buen rato ahí, si es que se te presentan, porque es mucho lo que tienen que enseñarte y, a partir de ahí pueden enseñarte a mejorar tus pasos. Son formas prototípicas de las formas humanas. El paso 3 es compañero del 2; un término simple para hablar del 2 es “Hadas”… el 3 es la cosa más fabulosa del mundo, una coordenada inimaginablemente fértil y una de las puerta para visitar otros planetas del sistema solar: el paso 3 consiste en aprovechar la coordenada 2 para conectarte con la coordenada (3) en donde están las hadas de animales. A ese nivel, el del 2 y del 3, se le conoce como nivel feérico, el nivel feérico es previo en la existencia al nivel carnal, ya que la materia orgánica se organiza según la vibración de los distintos seres que irradian tal energía. Cuando en el paso 3 logras co-ordenarte con la energía feérica causante de la existencia de los otros moldes terrícolas… coño, pana !
El paso 4 es simplemente hermoso y se sustenta sobre el 2 y el 3, más bien, “es decir”: éstos derivan del 4. El paso 4 te lo señalarán el 2 y el 3, te lo mostrarán de mil maneras, se “desagañitarán” en ver cómo te lo muestran: los seres feéricos y la energía feérica en general es consciencia directa de las estrellas aquí en la Tierra – Si logras llegar hasta aquí habrás conseguido por cuenta propia vibratoria llegar hasta el Timeo de Platón – y, cuando las estrellas se te muestren como consciencia viva, y lo harán si has dado el paso 2 y el 3 bien, entonces de un solo golpe te llevarán y habrás traspasado los límites de este Universo, los límites de esta frecuencia, y verás la otra frecuencia durante segundos increíblemente intensos (porque es como comparar la sombra con el cuerpo) y al retornar estarás vuelto ducto.
Un Truco excelente para poseer más energía consiste igualmente en algo súper sencillo: siéntate en una calle transitada, mejor en la acera de manera que no llames la atención pero es necesario que el tránsito de personas a pie y de vehículos sea no solo intenso sino que también esté cerca. Es importante que sea intenso por lo siguiente: una vez que entres en un estado de silencio dentro de ti será importante que esperes hasta que tu cuerpo se active en vibración y se conecte con cualquier cosa de otra esfera. Cuando sientas la vibración activada y la conexión es importante que pasen frente a ti por lo menos unas 20 camisas por minuto y varios coches… te darás cuenta, si lo haces, la facilidad con la que todo eso se transforma en un lenguaje legible, hay estampados de corazones, de demonios, de ángeles, de labios besándote, de cuernos, de muertos… una vez que el trascurso se vuelva texto date cuenta que no solo lo lees, sino que también lo escribes, que, si te comienza a conmover vibracionalmente el texto este te responde, dialogas con él, lo mejoras o lo oscureces según lo que sientes – Esta es la técnica que compartí con The Wizard, aquella mediante la cual me despertó, le bastó un empujoncito para activarla y me dejó a mí, a solas, pero con él a mi lado, hacer todo el resto. Es posible hacerla a solas (fue la muestra mínima por la cual yo había estado años antes mendigando, fue el humano que me escuchó y que tuvo imaginación para mediante una ayudadita mínima darme lo que yo necesitaba) -. Si unes este ejercicio con el de ver el espíritu o la consciencia o el espíritu de la consciencia de la gente podrás estar horas y horas y más horas sentado a solas en la calle y regresar a casa hiper cargado para que con el tiempo puedas realizar los pasos necesarios para poder visitar La Selva… y antes de eso ver Los Colores.
(A parte de la técnica sincronística-corazonal compartida con The Wizard, que utilizó para activarme, todas las otras las fui haciendo solo, de mi propia intuición, imaginación, voz interior o ajena invisible, al oído del sueño, etc. Cada quien tiene su estilo, su modo de ser, su cantidad y cualidad y gusto y todo se enriquece más si cada cual escuchándose a sí mismo se inventa su modo (algo que agradeceré por siempre a estos individuos que vivían en la calle por no habérmelo quitado). Me limito aquí a hablar de los Trucos que me enseñé – y hay otros -. Me gustan – (mi gusto) – me enseñan – (mi interés) – y me alegran – (mi alegría) - porque fueron pasos que me permitieron entrar en contacto con quienes son para mí (mi gusto, mi interés y mi alegría) los mejores maestros que puedo tener: seres conscientes incorpóreos transformantes multivribrantes polifrecuenciales de entre los cuales soy carne… y no el único.

LIII
Hay muchas frecuencias distintas a las de la percepción normal. Y se percibe vibrando de manera tal que se está en una frecuencia. La percepción normal, ésta que hace al mundo tal y como lo percibimos, no suele ser sentida como producto de una vibración cuando es lo único que se conoce. Un estado relativo se vivencia como el Todo cuando no se conocen otros estados. El Silencio interno ayuda a liberarse de ese estado relativo porque el lenguaje usual suele usarse de manera tal que trata lo relativo como el Todo. El silencio interno permite la salida de un estado a otro, facilita un cambio en la vibración del ser y permite la percepción en otras frecuencias. El lenguaje, tal y como se suele usar queda atrás, lo por él descrito queda atrás, se vuelve inútil, inaplicable; otras frecuencias poseen reglas y funcionamientos muy distintos a aquellas de la percepción normal: se trata de energía y ésta posee conductas muy distintas a las que se perciben cuando nuestra atención permanece fijada únicamente en objetos.
Hay muchas frecuencias distintas, como dije, y seres de consciencia y energía en ellas (de energía consciente de sí misma). Todo cambio de frecuencia no se produce debido a un esfuerzo, es más bien lo contrario, es un soltar el freno, es un relajarse, es un no-esfuerzo per es más que nada un no asustarse. El intelecto suele tratar de frenar cuando algo escapa a su control, entonces no se trata sobre controlar lo que se ve sino sobre no permitir que el intelecto frene tratando de hacer uso del control, se trata de ser blando, completamente blando, y dejar que las cosas sucedan solas, sin buscarlas ni apurarlas ni frenarlas, simplemente permitiéndoles ser, como si se tratase de un desfile que no se busca controlar. Como se trata de energía y como se trata es de soltar el freno las vibraciones en uno no se mantienen estáticas, sino que cada vibración y lo que se percibe en la nueva frecuencia tiende a llevar a un estado aún más profundo, es decir, a una vibración más alta… cuanto más relajado se está, cuánto más se permite que las cosas fluyan y aparezcan y se manifiesten sin necesidad de saber qué es sino simplemente dejándoles ser y actuar, con más intensidad se vibra. La intensidad aumenta en la medida en que disminuye todo esfuerzo.
Ahora bien, frecuencias y seres de energía consciente de sí misma: Cuando se sale de la percepción normal es posible hallar “un mundo” con sus propias reglas y funciones, no es “el otro mundo” es simplemente un mundo más, una otra frecuencia habitada, acostumbrándose uno a esa otra frecuencia habitada – yo por ejemplo paso fácilmente a la frecuencia de las Hadas – uno no solo se acostumbra a percibirla como “humano” sino que se pierde la forma humana y uno se hace de la esencia energética de ese otro mundo, uno aprende a vibrar como los seres que en ella habitan, pero en otra frecuencia uno no es el ser humano que nació hace unos cuantos años, sino una energía que vibra y ésta puede ser muy vieja (las fechas de nacimiento no se aplican a la energía, a ésta sólo se le aplican cambios, a los cambio que la energía realiza, vibrando, con el fin de hacerse en formas específicas, bueno, a eso sí se le podría suministrar fecha de nacimiento). Otra frecuencia y el recordar vibrar en ella se vuelve casa, memoria, antigüedad y recuerdo vivo retornado y retornable: es otra frecuencia – ilustro todo esto con el fin de tratar de establecer lo muy distinto que es otra frecuencia y de llenar de más significación y propiedad a esa palabra.
Ahora bien, desde otra frecuencia distinta de la del mundo normal conocido y compartido por todos nosotros mentalmente, desde otra frecuencia, repito, y desde ese otro cuerpo uno puede hacerse de un centro y desde allí intentar percibir otra frecuencia más, y puede aparecer otro mundo distinto, con habitantes distintos, con reglas y funciones distintas… cuando la percepción de esa otra tercera frecuencia se estabiliza y, digamos, que ya hemos pasado a ese tercer mundo - lo de “tercer” es relativo – entonces ya se está vibrando de una “tercera” manera. Puede que el mundo así percibido, la otra vibración más así obtenida o recordada, no sea exactamente más profunda o más intensa que la anterior, puede simplemente ser distinta, paralela. Entonces el pasar a una y luego a la otra (distintas vibraciones de más o menos la misma intensidad, como sonidos distintos en una similar tonalidad) va permitiendo que en uno poco a poco se unan ambas vibraciones y entonces sí se pase a una frecuencia aún más profunda y de vibración más intensa.
Todo aquello aparentemente distinto es complementable.
Ha de entenderse entonces que se puede hablar de “Mundos”, pero en el fondo no se trata más que de un individuo (cualquier individuo móvil) cuya vibración cambia según el recuerdo que recobra su energía al ir haciéndose ésta consciente de sí misma.

LIV

Podemos ver que las personas móviles pueden llegar muy lejos, que practican cambios en su vibración, que pueden ir a mundos sin necesidad de moverse, que pueden entablar relaciones con seres increíbles, que pueden elegir sus propios maestros, que pueden alargar la memoria de su tiempo en la Tierra mediante un cambio de su cuerpo-vibración, que pueden conocer otros planetas del sistema solar y a otros mundos más allá incluso.
¿Qué diferencia hay entre ellos y las personas atascadas, no móviles? En realidad no hay prácticamente ninguna. No podemos olvidar que la vida de un individuo es breve, es un período muy breve entre la fecha de su nacimiento y la de su muerte. Y me atrevo a decir que el individuo en sí no importa en lo absoluto, su existencia aquí no posee la más mínima importancia. Cuando uno ve los seres de los cuales los humanos, como carne, provienen, uno se da cuenta que la importancia del humano, como carne, no es más que la energía con la cual se carga en ese breve período de tiempo al cual llamamos “mi vida”. Y la utilidad de esa su vida, de la energía con la cual carga su vida, no es en función de sí mismo (muere) sino realmente alimento-experiencia para un ser del cual su vida provino.
Ahora bien, esos seres que se envían a sí mismos aquí como carne – sin salir de donde están – y que recogen para sí la carga de energía obtenida de toda una vida, son seres ya formados en relación a los seres humanos los cuales se están formando – el ser humano es un intento por hacerse consciente de que su esencia es energía – pero esos seres a su vez en el plano en donde están se hallan en un proceso también de formación, es un proceso un poco distinto del de los humanos. En el plano en donde están el más grande interés de esos seres consiste en consolidarse como esferas mediante el uso de la energía blanca y de la negra. Hay vidas humanas que parecen, que se viven como totalmente carentes de sentido, vidas que realmente sufren, vidas que se viven como cargas, de sed perenne, de insatisfacción constante, vidas completamente amargadas, vidas tristes… y eso es una carga de energía importantísima y sumamente útil para el ser que se alimentará de esa carga, porque esa carga le suplirá de esa energía negra que necesita y lo ayudará a volverse más versátil con el fin de consolidarse como esfera. Si cada uno pudiera recordar todas sus vidas pasadas verá que a veces se ha llevado cargas blancas y otras veces cargas negras, y que el ser que lo recibe necesita de ambas. Si uno se pone a ver el espíritu de las personas verá que hay de todo, pero que no hay defectos. El no estar consciente de lo que se es como energía, el ignorarlo completamente, no afecta el hecho de que en el momento de morir entregaremos una carga que siempre es bienvenida. Y a veces cuanto más se ignora lo que se es más intensidad posee la carga y por tanto más utilidad para el ser que de ella se alimenta, con la cual se nutre, con la cual se vuelve más diestro en alcanzar la meta de consolidarse como esfera. Ese alimento siempre es energía – aun cuando el individuo al tratar de hacerse consciente de su vida recurra es a la memoria de momentos, la memoria de momentos es de manera inconsciente recuerdo de momentos en los cuales se incrementó o manifestó lo que se es como carga – el ser que se alimenta de esa energía de una vida igualmente es energía, es una forma hecha de energía, cuando necesita de enviarse como carne lo que hace es incrementar su fuerza y su consciencia – al momento de recibir-se - con el fin no de fortalecer esa forma compuesta de energía sino de aprender a activarse en esa esfera que lo rodea la cual es la generadora de todas las posibles formas de la energía de la cual está compuesta… cuanto más versátil se vuelve ese ser en la producción de distintas formas a partir de lo que es como energía más fácilmente se consolida como esfera. Hay que conocer lo que es haber sido mujer, lo que es haber sido hombre, necesidades diferentes, satisfacciones diferentes, distintos sentimientos intensos, desde los más oscuros hasta los más bellos, la alegría, la tristeza… todo. Y todo ello no tiene otro fin que volverse cada vez más automaleable hasta el punto en el que se pierda la necesidad de toda forma, la energía vibre en todas sus posibilidades a la vez, y se active fortalecida como esfera.
Las personas atascadas, con nociones rígidas sobre todas las cosas, se cargan con cargas muy precisas, al ser muy precisas y constantes son cargas específicas que se incrementan bastante ya que no suelen variar casi nada a lo largo de toda una vida y toda una vida no hace más que incrementarla e intensificarla… son cargas súper útiles para el ser que la espera. Parecen a simple vista vidas pobres, pero son cargas muy ricas. Por el contrario las personas móviles poseen realmente vidas sumamente ricas – la misma movilidad genera un placer intenso desde adentro, la necesidad de lo externo como suministro de placeres realmente disminuye notablemente, si añadimos a eso que la movilidad permite en contacto con seres sino ya formados sí y definitivamente en procesos de formación muy interesantes, pues mira… - como todo el mundo las personas móviles mueren pero su energía al hacerse mucho más consciente de sí misma va poseyendo más capacidad de decisión propia. No son vidas que se diluyen como alimento, la muerte en ellos puede ser un simple cambio de planos en y de una misma consciencia, un traspasarse. Pero a fin de cuentas, al final siempre es una vida, que algunos guardan por un tiempo en el recuerdo y luego desaparece de aquí, incluso como recuerdo de una existencia…

LV

Hay un plano que lleva a otro plano que lleva a otro plano que lleva… como una escalera, y vale la pena permanecer por un tiempo en cada escalón, en cada piso, en realidad. Y cada piso es realidad, realidad en la cual es posible permanecer, o realidad a la que es posible visitar una vez que se adquiere facilidad de vibrar de manera tal que uno se coordina con esa frecuencia. En mi caso la permanencia se trata de horas de cada vez, pero a la vez cada vez necesito de menos esfuerzo para pasa a esa frecuencia, a ese piso. Con el esfuerzo que antes necesitaba para pasar a un piso ahora paso a dos. Y se me hace necesario hablar de los pisos para hacer una idea del vínculo entre varios pisos.
Hemos visto que si llamamos Planta Baja al piso este normal en el que se percibe a los humanos en carne y hueso y a los carros, sin saber lo que son, y a los edificios, sin saber lo que son, y a los aviones volando en el cielo, sin saber lo que son pero como siendo cosas normales del paisaje; entonces el primer piso viene a ser este en donde se presentan seres que no son de carne y hueso más sí seres compuestos de energía, muy pálidos pero como de luz difusa de estrellas, con ojos muy negros y bocas muy negras y cuyo habla es un titileo extraño como el de linternas moviéndose dentro de una cueva, con trajes negros con capucha y que observan y que enseñan; seres cuya actividad consiste en el manejo de energía, capaces de aparecer de una esfera que se posa en un sitio y luego tomar esa forma humanoide, establecer una relación curiosa y amable energética con quien lo mira y estirar el brazo y producir en su mano otra esfera que a su vez flota, se posa e n un sitio y luego tomar una forma humanoide. Luego, después de mucho observarlos te muestran no solo que provienen que el plano en donde existen es una suerte de tiempo-antes, que, al ellos estar compuestos total y completamente de energía tienen poder sobre la energía del espacio y pueden provocar sucesos, sino que también te muestran que ellos son la forma humana que la Tierra genera aquí a partir de la energía de las estrellas, que ellos son una génesis anterior a la nuestra. Cuando se los observa por horas el mundo de ellos se vuelve cosa normal, pero es completamente distinto en comportamiento, necesidades y reglas. He dicho igualmente que manejan dos tipos distintos de energías, la negra y la blanca y que éstos no son polos opuestos, para ellos es más bien como aspirar y exhalar, en ellos una sin la otra es como ahogarse para uno. También he dicho que esos son los seres que aquí se envían con el fin de encarnar y que cada vida nuestra constituye su alimento hasta que llega un punto en el cual son capaces de encarnar aquí completos convertidos en humanos que son primeramente energía.
Ahora me interesa es hablar sobre los escalones entre el primer y el segundo piso: Voy a llamar “Hadas” a los del primer piso pero entiéndase que hay seres femeninos y masculinos en él y que quizás llamarlos “Hadas” no sea lo más correcto, ya que hay otros seres que quizás merezcan más ese nombre (mucho más vinculados con la naturaleza) o quizás haya distintas clases y tipos de Hadas… a fin de cuentas todos son formaciones estelares-terrícolas que habitan en un plano compuesto de energía en un tiempo-antes.
Las Hadas quieren algo, no hay duda de que quieren algo, y con el fin de obtenerlo entablan una simbiosis con quien la observa. Las Hadas nunca miran a uno directamente siempre están dirigiéndose hacia algo que está como detrás de uno, uno siente que se dirigen es hacia la totalidad de uno, más qe nada a la parte de uno que no percibe la propia consciencia, pero cuando se dirigen hacia uno, cuando le hablan a uno, cuando sus bocas titilan como linternas de colores jugando en una cueva, uno percibe realmente como una placa detrás de uno que se carga de energía y luego a uno le van sucediendo durante esos días cosas, soluciones de problemas, etc. cosas buenas, información, mensajes, sincronicidades buenas; también pueden verlo a uno directamente a los ojos y lanzarle a uno con sus manos una luz blanca que golpea entre los ojos. También, si uno a pesar de verlos duda de su existencia le pueden apretar en cuello a uno hasta que uno siente que se ahoga, también pueden señalar a un punto en el cielo y a los segundos aparecer una estrella fugaz o a un punto en la calle y ladrar allí un perro o tocar una bocina un carro, te dan a entender “No somos del plano de los vivos, somos, simultáneamente, de un plano antes” Una vez que no hay dudas y que uno lo acepta – y puede llevar semanas o meses el aceptarlo, o pudiera ser inmediato, o nunca, no sé, todo depende de cada quien – se entabla una relación distinta. A veces se aparecen y están como si uno no existiera, se ponen a verlo todo alrededor menos a uno, se comportan como si hubieran aparecido en un sueño distinto y están como si estuvieran solos, ahí, frente a uno… y uno los deja ser, pero si en un momento uno se dice “¿Pero es que no se da cuenta que estoy aquí?”, él o ella se voltea, le titilan dos estrellas en los ojos mientras le mira a uno directamente a los ojos y te da a entender “Claro que sí, bobo, solo estoy viendo cómo te comportas cuando crees que no te veo”… y cosas así. Otras veces es de frente y es puro exhibicionismo, trabajo, si se quiere. Te dan a entender “Mírame intensamente porque usaré el poder de tu atención para hacer algo que necesito hacer y que quiero mostrarte” y allí comienzan las transformaciones, primero despliegan todo tipo de energías, se pueden oscurecer, meterte verdadero miedo, pasar por todas las formas de la supuesta maldad y del infierno – ¡y qué placer tan grande para ellos! – distintas fusiones con animales, producción o reproducción de energía sexual fortísima – y para eso a veces aparecen dos – todo lo que es sensaciones y emociones fuertes humanas lo reproducen agarrando hilos de uno y entonándonos, ambos, en lo que necesitan. Por ello mismo uno da vueltas también alrededor de sí mismo, en todos los matices posibles y en todas las escalas. Luego te enseñan la máscara-muerte - ¡Terrible! – se convierte en calavera, en La Muerte y te susurra “Mírame” y en viéndola uno navega hacia otra orilla y ella se convierte en un rostro de uno de los seres de más allá de las estrellas. Luego comienza con las formas bellas, con las caricias en el corazón con las buenas energías, realmente tiernas que tanto apenan a los humanos (y que tanto necesitan), con sensaciones realmente hermosas dirigidas al ser completo y al corazón y consiguen enseñarle a uno a emitir esa vibra… finalmente, después de esa súper vuelta alrededor del ser, lo que quería mostrarme y necesitaba hacer, se le aparece una esfera más sólida, más completa, más consciencia, más consciente y finalmente todas esas formas, pasadas antes etapa por etapa, dan consciencia a la esfera, esta se inflama y el Hada se convierte en su esfera. De la esfera así nacida aparece otro ser, a ese otro ser yo lo llamo el “Genio”. Y es una clase de ser diferente. Las Hadas buscan convertirse en Genios, completarse y pasar a otra etapa.
Lo Genios sí, no poseen forma humana, son esos seres de hermosos ojos almendrados y profundos como el Universo, súper maleables en el sentido que sea, capaces de reproducir al mismo tiempo una energía y vibra en el que están contenidas al mismo tiempo todas las emociones y energías humanas y luego, así, parados frente a ti pueden mover esa vibra y hacerla vibrar de manera animal, la energía total de otra clase de ser y luego de otro y de otro. Pueden, de la energía total humana, pasar a una energía total reptiloide, y darte a entender “Aprovecha esta vaina porque no te la voy a dar siempre” y, cuando uno aprovecha esa vaina logra hundirse en la Tierra hasta vibraciones de la misma que no están contenidas en la esfera humana, una cosa hermosa y poderosa, antigua, anterior en tiempo y profundidad a todo lo humano sobre la Tierra. Y luego el genio, si lo haces bien, si le vibras también con toda tu fuerza, así te estés muriendo, pasa a la forma insectoide, y si lo hace estarás frente al ser más asombroso que se puede ver sobre la Tierra, y es la vibra más intensa que te puedas imaginar y el Genio te da a entender “Aprovecha esta vaina porque no te la voy a dar cuando quieras” y se pasa a una vibra en donde hasta los vellos del cuerpo son eléctricos y la velocidad del movimiento de las estrellas y de los planetas más acelerados, ni si quiera sabes a dónde se fue el tiempo porque lo que es para ti diez minutos es para el reloj cinco horas… y el Genio, transformado en insectoide lo logra activar todo, inclusive a las plantas y ya no quedan humanos ni queda nada, solo que da la Tierra y las estrellas. Es el Genio el que te puede llevar a otros planetas, simplemente viene y te recoje, si sueñas te lleva en el sueño, si doblas el espacio-tiempo estando despierto te ayuda a doblarlo, sentado en cualquier parte hace que todas las cosas emanen la energía de otras partes hasta que sentado en un sitio estás en otro al mismo tiempo y entonces te unas y veas realmente el paisaje y los seres de otro planeta, las cosas más hermosas, fuera del sistema solar incluso, en zonas más cercanas al centro de la galaxia. Otras veces manipulan la facultad etérica de las nubes y se exhiben en sus formas, si los miras brillan sus ojos en saludos y cargan de energía zonas completas, de tu corazón emana luz blanca hacia ellos… cargando tú y haciendo uso tú de tu instrumento… porque cuando se presenta más de uno al mismo tiempo es precisamente para un concierto.
El piso de ellos es enorme porque pueden llegarte a mostrar que no son de este Universo. Sus movimientos frecuenciales, las escalas de sus vibraciones, sobrepasa todo lo conocido frecuencialmente como “Universo”, van mucho más allá de todo esto. Entre el Universo con todas sus energías visibles e invisibles y la piel de ellos no hay ninguna diferencia. En nuan ocasión viendo a un Hada vi como se encendió como un halo la esfera de ella, y detrás de ella había un Genio, le vi los ojos grandes al Genio, le vi mirándome y mostrándome cómo el proyectaba el Hada, como si fuese un holograma, con su mano y me obligó a volver a ver al Hada y el Hada era un ser completamente vivo y autónomo. El Genio te da a entender lo siguiente “Yo no soy de ese plano, yo soy de un tiempo creador de todo lo que hay en este Universo”.
Y sin embargo tienen mucho cuidado, se muestran como quien da a probar licor a un niño.

LVI

Listo, ahora toca hablar del Juego del Blanco y Negro:
He dicho que está la energía blanca, la energía negra, y los Colores. Y también que los seres del primer piso utilizan la energía negra y la blanca así como nosotros usamos el inhalar y el exhalar en el respirar. Pero nosotros no somos muy buenos sabiendo usar lo que somos como energía y sin embargo constantemente la estamos usando y de maneras muy torpes sin saberlo. En las interacciones entre los seres humanos siempre hay una relación energética, casi siempre ciega y comprendida de manera sumamente distorsionada. Uno de los mejores ejemplos para ilustrar las verdaderas relaciones energéticas y su distorsión es lo que se conoce como el caso Cenicienta. En realidad en el caso de la Cenicienta quien tiene energía ahí es la Cenicienta y a sus hermanastras les gusta la energía de la Cenicienta, necesitan bebérsela, si tomamos una foto podemos ver a la Cenicienta de rodillas pasándole el trapo al piso y a las hermanas riéndose mostrándose sus lujosos vestidos, pero, si vemos bien la foto veremos a una esfera de brillo blanco, un aura fuerte blanco en el piso, y a tres grandes sombras negras absorbiendo como gas la energía blanca. Paremos la foto antes de profundizar más en ella y llevarla hasta el nivel de la buena brujería y hagamos una breve muestra de las distorsiones: Las tres hermanastras de la Cenicienta (las tres sombras negras), en el nivel netamente humano, tratan a la Cenicienta como si ésta fuese la parásita, la necesitad, la ayudada, la que necesita estar agradecida, necesitan convencerla de ello para absorberle más. Sigamos ahora con la foto: si realizamos un zoom en las sombras no veremos en ellas una luz blanca, veremos un vacío, esa negritud es un vacío pero es un vacío su tipo muy especial de energía, en realidad ese vacío es igual al vacío interestelar y ese vacío está absorbiendo energía estelar de la Cenicienta con el fin de traspasar la energía que pueden tomar de ella para llevarla a otro espacio… a espacios que están siendo creados. En la foto lo que estamos viendo es a una estrella brillando y tres puertas negras espaciales abiertas.
Y sin embargo la energía más útil y más poderosa es la negra. Sigo:
Cuando se dan este tipo de relaciones que a primera vista parecen energéticamente parasitarias usualmente quien toma la energía del otro lo siente subconscientemente; de alguna manera todos sus actos buscan la merma del otro y el fortalecimiento de sí mismo (a costa del otro). Pero si el otro es lo suficientemente fuerte y realmente halla su casa en su centro y siempre puede producir esa energía desde su centro sin que su mente le haga tirar la toalla ni dejarse convencer por el otro de que es un bueno para nada veremos cómo esa energía blanca así producida calibra poco a poco al otro y lo hace colapsar en su intento de conseguir esa fuerza ajena para sí mismo (la energía proveniente de otra persona siempre es una fuerza ajena cuyo efecto a mediado plazo siempre regula). Si sirve de algo una analogía es como la relación entre alguien que siempre produce dinero, que sabe producir dinero incluso a partir de la nada y otra persona que solo sabe gastarlo, la persona que solo sabe gastarlo termina empobreciéndose por más que haya obtenido externamente. Entre brujos el gran secreto del uso de la energía negra consiste precisamente en saber alcanzar la pobreza extrema… es precisamente todo lo contrario a lo más recomendado en todas partes y es uno de los más grandes secretos de los magos de la magia negra y su verdadera gloria: se vuelven nada, se vuelven nadie, se vuelven puro vacío, se vuelven completa negritud, negritud del vacío del espacio… y esa negritud tiene una vibración muy especial… es ser nada, es el no-ser absoluto, es lo ilimitado contenido en una forma, es ser un agujero sin fondo, es no ser nadie, y a través de eso pasan todas las fuerzas del Universo, se es espacio, río negro, río negro de la muerte y del olvido, es ser como un tubo, un rollo de cartón de papel toalé alargado comunicando entre un ojo (del que ve al mago negro) y cualquiera de las estrellas o constelaciones hacia el que apunte el otro extremos del tubo, y esa vibración de lo así enfocado por el tubo pasa a vibrar a través del mago negro que adquiere así y vibra y trae desde otras partes energías que no le pertenecen y que no toma para sí… pero su cuerpo energético aprende así a reproducir tales formas… todo el mundo tiene aunque sea una mínima luz por dentro, el mago negro sabe apagársela a sí mismo y convertirse así en la mismísima energía del espacio vacío y traer a través de sí cualquiera de las vibraciones estelares que brilla en el espacio, el mago negro es ducto, demiurgo, traedor de energías; igualmente puede robar energía de seres muy luminosos con el fin de sembrar esas mismas energías que toma en otros espacios… el ser del que toma no se entera todavía que para el mago negro él o ella es como un girasol al que se le toman las semillas…
Normalmente lo que se recomienda es todo lo contrario: si tienes una luz – y todo el mundo la tiene – encuéntrala, nútrela, déjala crecer, ejercítala y luego brilla y vibra, ilumínate, activa campos de energía, sé una estrella activa aquí en la Tierra. Y eso se siente tan bien, uno se convierte en vibración y fuerza. Al lado de un ser así un mago negro no asemeja más que a un pajarraco feo y flacuchento, un pajarraco feo, flacuchento y muerto de hambre… pero un mago negro sólo se ve así cuando ejecuta su obra maestra, al día siguiente reconecta su centro y vuelve a ser un tipo muy guapo, bello, brillante… pero no demasiado. Ojo: pero ese su brillo se ha vuelto tan maleable, ya que a través de su centro negro ha pasado en ida y venida toda clase de distintas vibraciones y Colores, cuando se reactiva su propia luz ha adquirido todos los matices… pero cuando se apaga no es más que un feo pajarraco fuchi.
Entre humanos, sobre todo entre quienes aspiran ascender, el mago negro es como para caerle a palos… es El Lobo de Caperucita, El Vampiro de los cuentos, La Sayona, El Silbón y La Llorona… y, si se te aparece uno similando a Frankenstein date cuenta que las grietas en su rostro y en su cráneo son los ríos de un Planeta y que se trata de un mago negro absorbiendo de tu luz y haciéndola colaboradora en la génesis de un planeta.
He dicho también que entre los seres del segundo piso, esos de hermosos grandes ojos negros almendrados, y el Universo no hay ninguna diferencia que sus pieles son efectivamente las energías del Universo y que ellos son los creadores de este Universo… Cuando uno ve a los seres del primer piso – esos a los que llamo Hadas – uno aprende a ver las funciones entre la energía negra y la energía blanca, uno sabe que la energía blanca es la misma que la de las estrellas y que la negra la del vacío – flor y tierra – esos mismos seres del primer piso actúan entre sí de la misma manera en que actúa creativa y creadoramente el Universo, cuando uno de ellos se pone negro y el otro blanco están creando vida nueva en el espacio, el blanco aporta la semilla el negro la tierra; pero también son capaces de contenerse frente a frente cada uno de ellos haciendo resplandecer su propio brillo, y eso es magnífico, porque ambas energías juntas y activas al mismo tiempo pueden resplandecer completamente sin que se afecte demasiado al espacio circundante, porque cada una neutraliza el efecto sobre el espacio circundante, de la otra – Ilustro: +1 + -1= 0, +1000 + -1000=0, entre ambos se dan la oportunidad de brillar con todo su poder sin que el poder generado altere demasiado el entorno – Luego cuando cada una llega a lo máximo posible de su propio brillo el centro negro de la blanca se activa y resplandece totalmente y el centro blanco de la negra se activa y resplandece totalmente pasando así al movimiento contrario.
… tú no tienes ni idea de cuánto sufrimiento les cuesta a los humanos comprender algo tan fácil… algo que es completamente hermoso y creativo y creador es en ellos una verdadera tortura… porque en ellos la pulsión está ahí pero no saben manejarla, no hay amor en ellos. Y por no haber amor en ellos sufren y se hacen daño.
El Hada Madrina de la Cenicienta era negra y ella se lo explicó todito: “Ahora eres más grande, estás sembrada en todas partes” y, para demostrárselo le agrandó una calabaza… y no hizo falta más palabras – Cenicienta lo sabía, sólo le hacía falta que se lo dijesen.

LVII

Hoy toca hablar sobre el Palpo
(El Palpo es simplemente un ejercicio, uno más, posible de realizar en cualquier momento si se quiere).
Lamentablemente comprendemos todo lo que con los ojos vemos – pero no lo palpamos – y lo comprendemos tanto que hasta olvidamos que lo comprendemos, las cosas simplemente están allí y ya no suscitan ningún interés a menos que sean objetos que deseamos por no poderlos tener… y toda nuestra atención se nos va en eso… en realidad en eso consiste la atención de muchísima gente. Atención es el modo de estar en el mundo.
Pero lamentablemente comprendemos, igualmente, todo lo que vemos – pero no lo palpamos – y lo comprendemos tanto que hasta olvidamos que lo comprendemos, las cosas simplemente están allí. Entre las cosas que vemos y nosotros hay una explicación que hemos olvidado, hay una “Normalidad”, hay una “Simplicidad”… hay una traducción muy extraña también. Muchas veces hablamos de “Sentir”, pero ¿Qué?...
(estoy tratando de ilustrar algo)
Imagina que vas por un bosque, un bosque antiguo, si quieres, muchos árboles y algunos animales. Vas solo o sola. Por ahora tú simplemente estás ahí – imagina también que no provienes de aquí, es decir, que no sabes lo que es la civilización ni la televisión, ni internet ni las revistas – Así que por ahora tú simplemente estás en ese bosque vivo (Árboles, animales, un río, etc.). Estás allí de pie y respiras profundo y comienzas a palpar las cosas con los ojos, tu mirada toca todo lo que ve, sientes arriba esa sensación algodón suave en las nubes, sientes hasta los movimientos más pequeños que ocurren en las nubes, sientes su naturaleza de éter, de cosa que cambia, de cosa que se mueve y adquiere cualquier forma, peor ahora no ves las formas, no te fijas en ellas, sólo sientes la composición de las nubes como si tu mirada tuviese tacto, y realmente llegas a sentir la vibración atómica de las nubes. Más abajo ves los árboles y también los palpas con la mirada hasta que sientes la composición atómica de las hojas y sientes dentro de ti el juego que la brisa realiza con ellas, hojas tocadas por la brisa cosquilleo que sientes dentro de ti. Y vas viendo alrededor y vas sintiendo dentro de ti las distintas densidades de la vibración atómica… los ojotes de los animales que ves están lleno de consciencia y están en complicidad contigo, cada uno de los animales te indica de que su mirada también es una puerta por la cual puedes ir, puedes batir las alas en el bosque si quien te invitó es una lechuza, o puedes sentir la energía corriendo y dando suave brincos y sentir la fuerza muscular y de tu voluntad por tu cuerpo si quien te invitó fue un venado, y descubres así todas las distintas maneras animalísticas de estar en el bosque, dentro de ti. Ahora imagina que anochece y que la noche hipnotiza y que desde la dimensión verde de las hojas comienzan a aparecer pequeños brillos de estrella, ese mismo brillo que titila sobre el bosque, que pasa por la dimensión verde que debido a tu mirada conseguiste allí, en el verde de las hojas como un aura que las crea y as envuelve, e imagina que tocas con tu mirada ese titilar brillando frente a ti bajo las copas… y te quedas dormida despierta y vas a otra dimensión.
Y te vas y te fuiste por completo y ya no estás más allí.
Ahora imagina que estás en ese mismo bosque y que tienes un acompañante, un ser – llamémosle “Cultura” – que de pronto se aparece a tu lado. Caminas a su lado por el bosque y él ta habla del caminito que se puede construir ahí. Luego él te señala un árbol y te dice cómo se llama el árbol, el nombre de esa especie y te dice para lo que sirve, tiene una excelente madera para hacer casas; y te dice cómo se llama otra especie de árbol. Y conoce el nombre de todas las cosas, de cada uno de los animales y de cada una de sus partes y para qué sirven, cuáles son los animales útiles y cuáles los dañinos, cómo encender una fogata, cómo protegerte del peligro y de la noche… y de pronto quedas dormida y te despiertas en tu casa con el televisor en frente encendido, viendo un programa de concurso de tetas grandes y el coche que el ganador se llevará.
Hay un modo para ser móvil y hay un modo para atascarse. Hay un modo para Estar y hay un modo para no estar ¿Ignora quien no conoce el nombre de cada uno de los árboles? ¿Está quien los conoce?
¿Cuando fue que nuestras miradas perdieron la facultad de palpar el entorno?, de sentir-saber aquello que se mira?
Los indios en la selva fluyen móvilmente en su entorno – es más, la cultura indígena es una cultura móvil, en su cultura se enseña la movilidad – sienten el lugar en el que andan, sienten el lugar por donde caminan, se mueven modificando su vibración en la selva y saben a donde dirigirse y poseen una cultura de todos los distintos planos que existen y de cómo acceder. Basta con que uno se detenga aunque solo una vez en un sitio y procure palpar todo lo que le rodea con su mirada y logre realmente sentir la vibración atómica dentro-fuera suyo (algo tan absolutamente fácil) para entender cómo se vive realmente en el mundo, en un mundo, en cualquier mundo, cómo es hallarse vivo en un mundo (no es deseando lo que no se tiene)… y comprender cómo se ha vivido en el mundo. Pero, si tomamos a un ser vivo y lo colocamos a nacer en una suerte de caja de zapatos pintada por dentro, eso es casa y universo y se loe muestra todo lo demás a través de una pantalla llamada “Televisor” – ¡vaya robo! – y se le enseña desde pequeño el nombre de todas las cosas y su utilidad, no te sorprendas de que esa sensación de ahogarse, de no-ser, de no-estar (de no-ser), se sueñe que pueda eliminarse adquiriendo algunas de las ofertas que se publicitan en la televisión.
Y sin embargo el ejercicio es completamente simple: basta con mirar muy fijamente algo hasta sentirlo, tocarlo con los ojos, palparlo con la mirada, sentir cómo vibra (cómo es) sentirlo también por dentro y vibrar juntos, así, lo observado y el observador, la observadora, en un mismo tono, y hablar así, comunicarse así, con aquello que se observa, diálogo que ocurre hasta que de otra dimensión algo se asoma, así sea en la brisa que llega como respuesta cómplice a tu mirada, diálogo que fluye por dentro por fuera con todo lo que te rodea, vibraciones…, para saberse vivo, para reconquistarse, para volver a ser, para saberse vivo.
Este ejercicio también sirve muchísimo para hacerse capaz de percibir Los Colores y las esferas de energía consciente que se mueven entre Los Colores. Un solo contacto con uno de esos seres cambia un mundo.
… cambia un mundo.

LVIII

Y ahora toca hablar es sobre los Equalizadores y sobre el truco de cómo convertirse en un Equalizador.
El ejercicio del Palpo, del palpar las distintas vibraciones atómicas de todo lo que nos rodea con la mirada, es imprescindible para poder convertirse en un Equalizador. Palpar significa sentir realmente la vibración atómica de todo lo que nos rodea, pero es necesario inicialmente hacerlo con una cosa a la vez. Mira una nube hasta que realmente la sientas vibrando dentro de ti, luego mira el verde de los árboles, luego el asfalto, etc. es un ejercicio muy simple para desarrollar los sentidos, la percepción hasta que realmente se adquiere la habilidad de sentir la vibración de las cosas; hay un momento en que un sentido se abre y se lo puede sentir todo. No hace falta volverse ciego realmente para desarrollar este sentido, pero sí, es una suerte de radar, sólo que se practica colocando sobre cada cosa toda la atención del mundo con la mirada hasta que ésta aprende a realmente tocar los objetos y sentir su vibración. Lo puedes practicar también con gente, gente que esté de espaldas ante ti, gente en un andén, en un bus, etc. y mirarla con tanta fijeza que necesiten voltearse al sentir tu mirada. Cuando logres hacer esto tendrás la prueba de que la mirada realmente palpa y afecta aquello sobre lo que se le coloca la atención, el poder, la concentración de la mirada. Pero no se trata sobre imponer tu poder sino de sentir dentro de ti aquello que observas… y se siente mucho más y resulta más interesante la naturaleza que la gente, las nubes sobretodo, sobretodo si en la práctica descubres que tu mirada tiene efecto sobre sus cambios… respira con la mirada, toma y da de vuelta, hasta que tú y lo que observas se vuelvan seres en una misma frecuencia de vibración.
Esto implica una suerte de saber estar vacío o de poder llenarse con cualquier cosa. De entablarse en la frecuencia de cualquier ser. Y este es un excelente ejercicio para pasar a Los Colores… en otras palabras: permítete sentir.
Los Equalizadores desarrollan el arte de, de manera automática, neutralizarse en cualquier entorno de manera tal que se confunden con el entorno. Es una suerte de función camaleónica, en realidad es el desarrollo de un atributo camaleónico: si se pasean entre distintos entornos se fusionan de tal manera con cada entorno por el que pasan que no hay diferencia entre el entorno y ellos, sin embargo si nos fijamos en un Equializador pasando por distintos entornos veremos a un ser que se transforma en lo que sea. Aprovechando los tan variados entornos sociales que existen en las ciudades un verdadero Equalizador se pasea entre ellos modificando sus energías constantemente y fusioandose energéticamente con cada entorno de manera tal que es se vuelve no más que un habitante más de cada zona distinta por la que se pasea. Y esto lo logra teniendo poros… un Equalizador es un ser poroso; no piensa, simplemente – y este es uno de los más grandes y maravillosos de todos los trucos posibles por realizar – permite que su ser energético respire cada entorno y se fabrique una forma. Su capacidad de asimilar y mimetizar todo lo que le rodea (capacidad ejercitada mediante el Palpo) le permite realizarlo son ningún esfuerzo, simplemente se concentra en abrir sus poros y su cuerpo energético realiza la adaptación de manera automática.
Una observación: La energía de un individuo se siente pero no se ve. Y, si uno observa a las personas, si uno se sienta en un sitio en la calle y observa a las personas, y posee la capacidad de percibir energía, uno se da cuenta que las personas que más atraen a otras no necesariamente son personas atractivas físicamente, pero cuando una persona resulta atractiva a otras éstas se fijarán en su físico con el fin de explicarse a sí mismas la atracción, la atracción es energía, lo que realmente atrae de esa persona es su energía, cómo ésta no se ve de pronto sienten o creen sentir que lo que les atrae es su linda naricita o su cuerpo, etc. Sin embargo si esa misma persona que atrae a otras logra reducir su nivel de energía simplemente es una persona más que se confunde con el entorno y que no posee nada de llamativo: Eso es un Equalizador. Los Equalizadores, los que practican el ejercicio de la Equalización, en ningún lugar del mundo tienen nada de atractivo, en todas partes en donde se hallen, por donde vayan, por donde se paseen simplemente son uno más en los cuales nadie se fija por no poseer nada de especial. Llévalo a una cena lujosa al mejor restaurant del mundo y será uno más, llévalo a la barriada más pobre del mundo y será uno más, llévalo a la mejor Universidad del mundo y será uno más, llévalo a una marcha de nazis y será uno más, llévalo a la tumba de Lenin y será uno más… y nadie se dará cuenta del increíble arte que ha desarrollado esa persona, de lo supremo de ese ejercicio, de estar lleno de poros que respiran zonas, transmutándose de manera automática.
Lo que se logra con ello es permitir al cuerpo ser blando, y moverse en la blandura; lo que se logra es permitirse la ejecución de toda una enorme variedad de movimientos distintos por dentro, tomando ventaja de los distintos entornos existentes, ahí mismo, al alcance de la mano, al alcance de las piernas.

Llegar a un sitio, respirar y fusionarse por completo y, cuánto más “anónimo” se logre ser, cuanto menos se logre llamar la atención en cualquier parte, cuanto más se sea uno más… mayor la sonrisa secreta que un buen Equalizador carga por dentro… la traga, traga su propia sonrisa y la lleva hasta su plexo solar. Y allí es que está el truco de un Gran Equalizador: aprende a otorgar a cada entorno y en cada entorno grandes cantidades de energía que parten de sí mismo sin que siquiera se le sienta… a veces es como un ajo desprendiendo capas de sí… finalmente desarrolla el truco de empequeñecerse desde adentro magnificando lo de afuera, lo que le rodea.

LIX

Recordemos que todo esto se trata sobre “Soltar el Freno”, sin duda ya sabemos de qué se trata el Freno. El Freno es una estructura mental, una estructura mental programada – tal y como la llama Lila – una estructura mental programada que nos da una impresión de mundo; mundo que posee sus reglas, sus necesidades por ser o no satisfechas, sus recompensas, su lenguaje y que al final se convierte en “La” Vida, en lugar de en “Un” modo de vida para quienes han sido estructurados en ese modo. Tal estructuración mental no solo consiste en el aprendizaje de todo un set de reglas, de memorizaciones, consiste más que nada en un modo de hacer funcionar el cerebro… al igual que con la Vida, terminamos por considerar que ese modo específico de hacer funcionar el cerebro es el cerebro, que es la mente… y no es más que el modo en que se filtra – por programación - todo lo que es percibible, y en que se procesa ese residuo.
El siguiente ejercicio es sincronístico y sirve tanto como ejercicio como para ilustrar lo dicho en el párrafo anterior – Con “Sincronístico” quiero decir un estado en que el exterior responde con lo interior:
Constantemente tenemos un marco perceptual, el marco perceptual es todo aquello que está al alcance de tu mirada justo en este momento dado, en todo momento dado. Ahora estás viendo estas letras, las estás leyendo, no sé si te das cuenta que las letras son negras y el fondo blanco, no te das cuenta porque estás leyendo las letras y es sobre el sentido que tu mente le da a estas palabras aquello sobre lo que tienes colocada tu atención, tu atención no está colocada en el color de las letras ni del fondo de las letras, por tanto parece irrelevante y de hecho, constantemente irrelevas, filtras, esta clase de información que simplemente no te sirve para nada. Letras negras y fondo blanco, pudiera ser letras blancas y fondo morado. Pero date cuenta que mientras lees esto estás filtrando… ahora colocaste en el color la atención y sin embargo sigue siendo irrelevante ¿Qué sucedería si colocamos nuestra atención únicamente en los colores… que la información que importe sea solamente los colores? Decía ahora algo sobre el marco perceptual: constantemente hay algo frente a nosotros, visible para nuestros ojos, todo lo que vemos cabe como si fuera un cuadro. Vamos a hacer el ejercicio siguiente: Vamos a trabajar sobre el marco perceptual colocando nuestra atención sobre otro tipo de información: en lugar de fijarnos en carros, gente, ropa, edificios, fijémonos únicamente en los colores: no en el carro rojo, sino en el rojo; no en la camisa amarilla de ese muchacho y en el Volkswagen amarillo que acaba de pasar, sino en el amarillo, no en el violeta con el cual está adornada esa tienda, sino en el violeta… se trata únicamente sobre colorar toda nuestra atención sobre los colores que pasan por nuestro marco perceptual tal y como si éstos fuesen las palabras y los objetos en lo que están algo tan irrelevante como el color de la letra o el color del fondo. Se trata sobre conformar un funcionamiento distinto del cerebro, un funcionamiento en el cual no se nos entrenó. Si realmente nos concentramos, en únicamente filtrar de entre todo aquello que pasa por nuestro marco perceptual los colores, habrá un momento en el cual el mismo cerebro, la mente trabajará en ir notando esa subida y bajada de predominancia de algunos colores en el marco perceptual. Si el marco perceptual es, digamos, como una pintura móvil, nuestro cerebro se adaptará por sí solo a saber, a calcular cuánto está siendo utilizado en cada momento de cada color… y ese cálculo comenzará a ser sentido: en un momento predomina más un color, en otro momento otro, de pronto no hay tal color, de pronto aparece en escena, de pronto se vuelve el color predominante. Es un ejercicio sincronístico por lo siguiente: colocando atención en ellos se comienzan a sentir los colores, la particularidad de cada cual, se comienza a agarrar una suerte de “simpatía” para con los colores y, cuando esa simpatía se entabla – son como niños, los vas conociendo, vas viendo cómo se mueven y comportan contigo cuando les prestas atención – cuando esa simpatía se entabla comienzas a responderles, a reconocerlos, y de pronto habrás dado el salto hacia la sincronicidad, y verás que cuando te responden y les respondes podrás mantener a voluntad un predomino, ya no será al azar. El llamado a un color de tu parte será una vibración (como el nombre de un niño) al rato verás cómo aparece y se vuelve predominante. Y te darás cuenta de algo muy importante: no es completamente cierto que estamos en una realidad, ésta puede ser también proyectada, como si fuésemos una filmadora proyectando, esta realidad también puede ser soñada, y de a ratos podemos aprender a ser el soñador, la soñadora, en fin.
Y este ejercicio también sirve para poder sentir un flujo interesante… se trata sobre agarrarse a ese flujo como quien se monta sobre un caballo y luego corre con él.
Por supuesto: se necesita que haya mucho movimiento alrededor, este ejercicio es preferible en lugares en donde haya mucha actividad… excelente y recomendado para quienes gustan de caminar en zonas urbanas.

LX

Continúo entonces con los ejercicios. Los ejercicios lo que hacen es ejercitar, preparan la capacidad de poder percibir otra frecuencia, y en toda otra frecuencia hay seres que son energía consciente. Los ejercicios, sobretodo estos sencillos, ayudan a desatascarse; el atasco de la gente no móvil se debe exclusivamente a una programación que la gente durante su crecimiento compra como total, como todo-abarcadora, y se convencen que esa manera de filtrar y de procesar toda la información es la manera natural en que funciona el cerebro y que ese residuo procesado es realmente el mundo.
La mejor manera de recibir nueva información, otro tipo de información, consiste en callar a esa programación, a ese filtro en uno y a la manera de procesar la información restante. Yo puedo decir algo tan sencillo como esto: “Si uno entra en profundo silencio interior cambia su vibración y pasa a otra frecuencia en donde se vibra al mismo nivel que el de seres incorpóreos que son energía consciente”. Y funciona realmente así. El único problema consiste en que a las personas realmente atascadas les cuesta mucho alcanzar ese silencio interno y, que cuando comienzan a sentir un cambio en su propia vibración se asustan porque les resulta tan incómodo como si se les abriera el piso bajo sus pies. Entonces vamos a hacer algo: en lugar de abogar por el silencio interno ensayemos realizar otro tipo de programación, de experimentar reprogramar nuestra atención. Los ejercicios anteriores son realmente sencillos: mirar las cosas hasta que se sienta que se les toca con la mirada y que se les siente la vibración atómica, su constitución material, con las nubes es perfecto porque éstas fluyen y entonces el fluir se siente también por dentro – es un modo que a nosotros no se nos enseña porque en la programación lo que se nos enseña es el nombre de las cosas y se cree que con conocer el nombre de algo se conoce a ese algo – aplicar la mirada táctil sobe formas orgánicas también resulta interesante, copas de árboles, cosas así, es interesante porque así se siente que hay algo ahí y se hace posible percibir ese algo ahí. Y los otros ejercicios tienen que ver con todo aquello que fluye, no solo los ríos fluyen, si uno se reprograma en fijar la atención únicamente en los colores ahí donde existe mucho movimiento uno se da cuenta que los distintos colores también fluyen y es posible que la vibración del observador aumente un poco y que éste se dé cuenta que el fluir de los colores en el campo de visión no se da al azar, ese es uno de los más interesantes ejercicios sincronísticos, que generan sincronicidad, porque hay un momento en el cual uno se iguala interiormente a ese flujo de los colores y hay un momento en el cual se puede superar, cuando se supera los colores que aparecen dentro del campo de visión, en el marco perceptual son respuesta a la energía y vibración emanada por el observador y éste se convierte en una suerte de reproductor, de proyector, en un ser por encima de esta dimensión… su vibración pasa a estar por encima de la de esta dimensión, por encima de la de esta frecuencia y es el paso necesario para poder pasar a otra frecuencia y entablar relación con los seres que hay ahí.
Entonces continuemos con el ejercicio anterior y añadámosle algo más:
Es igual que el anterior, se necesita de comienzo lo mismo: plantéate colocar toda tu atención únicamente en los colores en tu campo de visión, no te fijes en las formas que cargan a los colores (un carro, una camisa, etc.) fíjate únicamente en los colores como si fueses un pintor y tu campo de visión, tu marco perceptual un canvas y, si lo haces bien, habrá un momento en el cual en el silencio interno, tu cerebro podrá saber más o menos el porcentaje de cada color que hay en lo que ves en cada momento dado y, una vez que esto ocurre podrá sentir las fluctuaciones de los colores, verde se fue, reaparece con más fuerza, etc. No te pido que te imagines haciendo este ejercicio, sino que lo hagas, porque una vez que lo hagas sucederán cosas que no te puedes imaginar… porque una vez que realices este ejercicio te darás cuenta que los colores no aparecen al azar, se comportan como presencias, se comportan como presencias inteligentes que responden a tu sentir, y el ejercicio desarrolla un sentir distinto por cada color, y, cuando desarrollas ese sentir distinto por cada color puedes usar ese sentir distinto por cada color con el fin de atraerlos más dentro de tu campo de visión, dentro de tu marco perceptual y, una vez que lo logras estás vibrando por encima de esta dimensión. Punto. Sigo: los colores entonces establecerán contigo un diálogo mediante formas, en diseños, en estampados, signos que se sienten, más sensibles y sensoriales que legibles intelectualmente, por ejemplo: en desarrollando esta habilidad pasará una mujer con una bolsa de compras en la cual está estampada la imagen del hombre dentro de un círculo de Leonardo Da Vinci, por ejemplo, o dos estrellas pintadas en alguna parte, la sincronicidad alcanzará el nivel de diálogo, de nueva información, de información que es contigo y el “texto” está inserto en todo el flujo de movimientos de todo lo que fluyen dentro de tu campo de visión. Sucede así… estás haciendo uso simplemente de una facultad que no te enseñaron, y por tanto que hasta entonces no existía para ti. Con este ejercicio en el cual tu atención queda completamente absorta en una serie de cosas, de manifestaciones legibles, aprendes a callar aún más internamente ya que no te da tiempo de reflexionar sobre nada simplemente estás en el acto de leer la realidad a tu alrededor manifestándose como lenguaje legible proveniente de no se sabe qué fuerza o poder. Todo lo que ves alrededor deja de ser objetos y pasa a ser vehículos de un flujo legible.
Una vez alcanzado este estado… una vez alcanzado este estado es que viene lo bueno. Una vez en que este estado se vuelve en ti cosa a la que te acostumbraste, fenómeno normal (y para que sea normal o no no tienes por qué pedir opiniones de nadie), una vez que deja de ser algo tan completamente sorpresivo y lo asumes como una condición posible reprograma tu mente para una cosilla más: haz que tu atención continúe en el flujo de los colores (a los cuales sabes inteligentes) y, por ejemplo, a las orejas de las personas. Estarás creando una cosa asombrosa: estarás programando a tu mente, a tu cerebro, a filtrar solamente aquello que tú deseas – y estás librado definitivamente de la programación -. Si logras hacer que tu cerebro solamente se fije en el flujo de los colores, estarás haciendo también que tu cuerpo, que tu ser vibre respuestas sensoriales a los mismos y ellos (los colores) te darán más información a través de formas, diseños, dibujos, palabras escritas o que parten de la gente como si fuesen mensajeros inconscientes de una fuerza con la cual estás conectado. Si en haciendo esto además te reprogramas con el fin que tu visión se fije en las orejas de las personas te estarás dando impulso para otra cosa más: verás y sentirás cómo los seres humanos se convierten en distintas especies y podrás sentir y ver aspectos animales en ellos, diversidad de especies que se dan a través de los seres humanos. Sólo hazlo y entenderás lo que digo, el fijarse solamente en un aspecto del ser humano transforma tu visión total del mismo. Viendo, colocando la atención solamente en las orejas se ven distintas especies, podrás contar cinco, seis, diez especies… pero lo importante es que una vez que sientes la totalidad de cada ser humano de una manera tan distinta de aquella que presenta la otra programación estarás realmente acercándote a pasar a otra frecuencia, el aura se hace percibible… verás zorros, murciélagos, aves, diversidad d especies, todos a través del ser humano, y si tu nivel de silencio interior es profundo en un momento estarás percepctualmente viendo un mundo completamente distinto, viéndolo y comprendiéndolo – y para esto no se necesitan drogas, se necesita solamente desprogramarte y reprogramarte en otros aspectos distintos… y te darás cuenta de manera definitiva que es la programación la que genera un mundo y la manera en que vibras en él, una reprogramación modifica radicalmente la percepción del mundo y la manera que vibras en él. Si dos o más personas se reprograman de una misma manera esas dos o tres personas estarán vibrando de manera similar… por supuesto, repito: estos son ejercicios, pero funcionan… cambiar la percepción de lo que es el mundo no solamente es una cosa asombrosa sino que también te permite volverte maleable, versátil en modificar tu vibración.
También en lugar de reprogramarte – mientras fluyen los colores – en ver orejas – lo que pasa es que el de las orejas termina por conformar un mundo absolutamente rico y sorprendente (no es que te vas a quedar viendo fijamente las orejas de la gente, pero es de éstas lo único que importa, te reprogramas a que de las personas es la única información que tu cerebro sentirá, leerá)… bueno, también en lugar de reprogramarte en cuanto a filtrar y procesar sensorialmente orejas puedes hacerlo en cuanto a los ojos… y el resultado es una cosa completamente distinta y no menos sorprendente: verás una sola mirada pasearse entre distintas personas, verás un mismo par de ojos viéndote desde distintas personas, a veces verás una sola mirada, a veces dos, de entre mil o doscientas personas que estarán pasando frente y cerca de ti mientras estás sentado, sentada, en una plaza o en la acera habrá solamente dos que Realmente están allí, y esas dos, incorpóreas se manifestarán con esa misma mirada particular a través de muchas o varias distintas personas… cuando logres identificarla, identificar esa sola mirada personal (aún a través de distintas personas) y logres vibrarle respuesta, tratándose de un solo ser que está fluyendo y manifestándose a través de cien o de mil, entonces la sincronicidad, el lenguaje que se da mediante el flujo de diseños, palabras, etc. será entre ese ser y tu. Y es una de las cosas más maravillosas que a alguien le puede suceder… que alguien puede provocar. Todo lo que está a tu alrededor cobra la característica de traslucidez, la realidad se vuelve delgada, materia fina, casi transparente y tú estás vibrando, comunicándote con quienes se esconden en el fondo. La realidad podrá desaparecer y tú estarás frente a frente con ese ser o con esos dos seres. Hay brujos que llaman a este ejercicio “La cacería arquetípica” yo lo llamo “La búsqueda del original”… porque puedes estar días recibiendo una misma mirada intensa a través de distintas personas y la llegas a sentir y a reconocer, y también te llegan mensajes, palabras, a través de lo que se mueve en el flujo, papeles llenos de contenido para ti. Y, si te enamoras, no la vas a encontrar, no lo vas a encontrar, sólo puedes vibrarle afecto a través de la fina capa de la realidad y recibir el afecto que te envía a ti. Pero habrás dado con la más importante información de todas: Ahí están… ciertamente, si están aquí o no es otro asunto, inicialmente la sensación de necesidad de encuentro puede hacer que se comentan torpezas, que se sienta una suerte de prisa. Yo no podría decir si están aquí o no, pero sé que muy buenos brujos son capaces de utilizar la realidad como una fina capa a través de la cual comunicarse, la “realidad” como vehículo de comunicación. Pero sí se algo a ciencia cierta: no todos los que están allá están aquí ni todos los que están aquí están allá… se trata de algo con lo cual es recomendable no tener prisa en llegar a conclusiones… lo cierto es que hay “gente” del otro lado y que esa gente puede manifestarse claramente a través de los de aquí. El vehículo de comunicación es la “realidad”, la cual se vuelve finísima, pero el vehículo de conexión es la vibración, pasas a vibrar igual, misma frecuencia y capacidad de intensidad y similitud de tono, con quienes están ahí… y toda la realidad gira, baila, se mueve alrededor de ambos.

Como hemos visto, es facilito reprogramarse de mil maneras diferentes, cada una con resultados más fascinantes que la otra. Yo puedo aportar aquí una o dos o tres ideas, no es para que esas ideas se sigan, es simplemente para darse cuenta que es posible reprogramarse de la manera que se desee, más que ideas lo que aporto son ejemplos, no son reglas, cada quien posee su propia inventiva y desprogramándose es la mejor manera de recontactarla. Pero lo realmente importante es darse cuenta que “El Mundo” no es más que una programación, tan incrustada que se vuelve difícil no darse cuenta que la hemos adherido y aceptado como única y total de manera inconsciente o subconsciente y sobre la cual hemos perdido control hasta el punto de que es esa programación la que nos controla, anímica, emociona, intelectualmente, en todos los sentidos, nos con-forma. Realizando ejercicios reprogramativos nos damos cuenta de que esa programación, de que esa realidad producto de una programación es Relativa, y no solamente, relativa, es también chimba y aburrida y me atrevo a decir que también es peligrosa: la falta de movilidad – y la falta de movilidad no es inherente al ser humano – genera una suerte de sed en los individuos atascados que hace que se conviertan casi en vampiros, su energía suele ser “Soy la energía del deseo hacia lo que no tengo” y es una energía de sed, de carencia, energía que no propicia ningún cambio, energía carente de todo, no creativa, no productiva, energía de un conformismo soso, de una suerte de resignación aburrida en donde se hace las cosas porque me dijeron que sí, en donde si a un loco sediento se le ocurre iniciar una guerra eso no pasa de ser simplemente noticia, y emociona pasajeramente como noticia, como novedad sobre la qué hablar… y ni emociona ni no emociona… y luego habrá otra novedad, ya, listo.
Ten la libertad para inventar tus propias reprogramaciones… todo eso repercute en versatilidad en el vibrar (la realidad es una vibración fija, fijada, de manera cultural) y el vibrar repercute en un ámbito existente fuera de todo lo imaginable por la realidad… y ese ámbito existente es activo.
Continuaré con uno o dos ejercicios más, más intensos, mucho más intensos.

LXI

Del Tapiz he hablado pero lo vuelvo a repetir:
Conocer no es saber los nombres de las cosas. Conociendo el nombre de las cosas no entablas ninguna relación entre las cosas y tú, sino entre tú y otras personas que no hacen más que hablar sobre las cosas que desconocen. Para conocer las cosas primero quítales el nombre, quítate la cultura que te los enseñó y comienza desde cero. Comienza observando sin saber nada, sin tener ideas, eso te obligará a observar intensamente, sintiendo… y a ese sentir que la cosa que observas te dará respuesta.
Luego observa muchas cosas, muchas al mismo tiempo, observa muchas cosas sin saber nada, sin tener ideas; una de las mejores maneras para hacer esto es observando un lugar determinado sin ponerle demasiada atención pero poniendo toda tu atención en todo lo demás que cabe dentro de tu campo de visión, si miras hacia el frente coloca tu atención hacia todo lo que está a los lados, hasta que tu atención abarque todo el campo de visión, lo que está dentro y fuera del foco… esto no tiene otro objetivo más que el de aprender a jugar con los enfoques de la mirada, es posible estar atento a todo lo que se halla dentro del campo de visión y poner en movimiento el marco perceptual. En algún momento lograrás tocar todo lo que se encuentra dentro del campo de visión con la mirada, es decir, sentirlo realmente todo y, como le has quitado el nombre a todas las cosas todo el campo de visión se vuelve un tapiz de formas y de colores y nada más aparte de eso. Permanece así, sin saber nada, simplemente entonándote con todo lo que se halla dentro de tu campo de visión como si todo el campo de visión fuese una sola vibración, un tapiz bidimensional, no tridimensional sino bidimensional.
Pasea los ojos por el tapiz y, cuando encuentres una mirada, permanece fijo en la mirada… y entonces ablándate por completo porque “ella” o “él” (si tienes necesidad de que sea ella o él) hará todo el resto, y lo primero que logrará, si eres lo suficientemente blando, será hundirte aún más con el fin de mostrarse mejor.
Esto es imprescindible para poder pasar a otra frecuencia.
Lo expongo de otra manera. Entrénate a percibir de manera tal que no percibas objetos sino la vibración de las cosas, que tus sentidos estén atentos es a la vibración de las cosas. En la vibración de las cosas, o quizás deba decir “por entre la vibración de las cosas” hay cosas que se mueven, pero al no ser objetos las cosas que se mueven por entre la vibración de las cosas son una otra cosa a la cual algunos han llamado “Numen” , es como otra vibración que se pasea por entre la vibración de las cosas. Como lo que tú estás haciendo es percibiendo la vibración general de las cosas y no las cosas se te es más fácil percibir otra vibración que se mueve por entre la vibración de las cosas (porque la vibración general de las cosas es el tapiz), se vuelve fácil por tanto percibir cualquier extraño movimiento que se mueve en el tapiz.
La forma que adopte el Numen depende de lo que permita una mejor comunicación o conexión entre los dos, pero son muchas las distintas formas que puede adoptar, puede ser una luz, una onda, chispas, una esfera, o puede darle brillo de conciencia a cualquier espacio en el tapiz que posea figura similar a ojos… como somos humanos y no esferas (o no estamos conscientes de también serlas) cuando ese ser que cruza un plano y se asoma a este desea un contacto más directo con una ser de este plano y no solamente ver desde una posición medio escondida, cuando tú lo buscas y se aparece suele preferir adoptar la forma de ojos, de una mirada en cualquier espacio en el tapiz que asemeje a la forma de ojos… quédatela viendo, respondiéndole y esa mirada cobrará una intensidad que te hará hundirte aún más hasta que el tapiz se te asemeje al fondo de una película y ese ser el o la protagonista… podrás ver cómo desde un tapiz en donde es mirada, sale como chispas y se posa aún como mirada en otro espacio del tapiz y luego sale como una esfera y se te acerca y posa cerca de ti y, siendo una inteligencia cuya composición es energía, se comunica contigo como esfera, de inteligencia a inteligencia, o cobra una forma muy similar a la humana.
El Numen es interfrecuencial, es la manera en que seres de un plano más intenso se manifiestan casi sin ser notados en este plano de energía más bajo; hay manera de notarlos, y una de ellas es el Tapiz; pero después de notarlos hay que permitirse ser observado por ellos hasta que deciden si vale la pena entablar un contacto – esa observación, por parte de tales seres, no es una observación de forma o de conducta de uno, sino una lectura total, luego saben a qué atenerse contigo y se te manifiestan según eso… y poco a poco modifican la manifestación de sus presencias según el potencial que en ti (que ya te lo leyeron completico) ya se haya abierto… siempre se manifiestan como información, forma-información, información que forma, nutre, aviva, un potencial, potencial en ti activado cambio de información… potencial en ti activado es igual a mayor capacidad de asimilación, mayor capacidad de asimilación de in-formación es igual a intensificación de la información mediante un cambio en la forma del ser de otro plano que te la trasmite… habrá un momento en que te sentirás más cómoda, cómodo intercambiando energía y recibiendo in-formación de una esfera que de una forma humanoide, porque ya no necesitarás el gesto sino la transmisión directa, y entonces la esfera te será más efectiva y comprenderás más directamente la información que hay, que se activa, en los juegos entre los distintos tipos de energía.
Otra de las maneras que puede ser usada para acceder a otras frecuencias consiste en simplemente palpar con la mirada el vacío, pero palparlo de verdad, de verdad tocarlo con la mirada… y escribiré sobre eso después.
Cuando atraes hacia ti a un ser de esos (y al decir “esos” es como una manera en que una semilla habla de las plantas) y se entabla una conexión se está en ese momento en una zona intermedia y en esa zona intermedia se hace increíblemente útil tener aunque sea un poquito de músculos en cuanto a las sincronicidades y el sentir sensorial de los colores… porque no es como tomar un café sino una suerte de trabajo de felices esclavos.
Y sobre eso también escribiré después .

LXII

Cuando se palpa el vacío con la mirada se está tocando una puerta – ¡ojo! – o se está usando una llave. El vacío posee más energía que todas las cosas materiales juntas que podamos ver, palpar el vacío es tocar su energía, y basta con que un solo brillito se asome y que uno se hunda mecánicamente a mayor profundidad y se vibre más intensamente para que la puerta se abra.
Ahora bien, necesito aclarar algo aquí: no estoy dando las llaves del cielo, no le estoy dando ningún tip ni regalo a quienes desean ascender, no estoy mostrando ni pretendiendo – ¡Válgame Dios! – mostrar a nadie cómo ascender las escaleras del Cielo ni a reunirse con los Bienaventurados en El Paraíso Celestial, No. Si hay una cosa que uno aprende con todas estas cosas es que la cosa es pa bajo, es para que la energía venga, active y modifique un estado de cosas realmente despreciable. La Cosa es hacia abajo, la Cosa es para aquí.
Sigo: La puerta se abre. El usar la llave sirve únicamente para sintonizarse y hacerse útil en el proceso de activación… en realidad uno ni siquiera sabe para qué sirve, simplemente sabe que sirve, el momento de servir uno simplemente se expande y vibra y pasa a otra frecuencia, uno sabe también que en vibrando está dando, está nutriendo y está siendo a la vez nutrido, es como un Concierto en donde cada cual carga y toca un instrumento. En mi caso sé que algunos de esos seres de esa otra frecuencia quieren nacer aquí y los ayudo y también sé que su número va en fuerte aumento… también sé que es una suerte de proceso lento de sustitución: Ve colocando poco a poco pilas, baterías, bien cargadas en un desierto de baterías menos cero que descargan un mundo completo. Punto. Y no se debe a un error o a algo malo, es mucho, pero mucho más complejo. Al comienzo de este Estudio mencioné que los seres del plano de inmediatamente arriba, esos de los cuales provienen cada una de nuestras reencarnaciones personales, esos a los que alimentamos con nuestra vida en el momento de nuestra muerte llevándoles una suerte de carga energética de experiencias, esos mismos que dado un punto bajan sino completos casi completos, esos mismos que son la forma que da el planeta a cada estrella particular, bueno, en un comienzo dije que esos y cada uno de esos seres es una estrella particular y dije que las estrellas son muy distintas entre sí, no solamente poseen cualidad distinta sino además distinto tamaño entre sí pero además de eso poseen etapas distintas por las que pasan: las hay que no han tenido aún planetas (las más jóvenes y sedientas), las hay que poseen planetas (aun vienen a tomar alimento de aquí), las hay que poseyeron planetas (simpáticas), las hay que poseyeron planetas y luego parieron otra estrella (mi caso) y las hay que, en una línea de parto de estrellas llegaron a ser hasta tatarabuelas y otras que parieron constelaciones enteras. De pronto en una Era de la Tierra vienen las de un tipo, en otra las de otro tipo, en otra las de varios tipos en distintos porcentajes… digo “Vienen” pero igualmente se puede decir que salen del centro de la Tierra (una cosa daimónica), algunos quedan más tiempo abajo y en otras Eras se las pasan reencarnando las de un tipo todo el tiempo. Ahora son las más pequeñas las que han estado últimamente aquí más, se han llenado energéticamente que jode, precisamente no se pueden llenar sin joder a algo, sin maltrechar, y ahora está comenzando una lenta etapa de sustitución, así que las que vienen son las que menos joden, las que irradian, las que dan (por cierto: las que han sido sacrificadas de mil maneras ritualísticas o “accidentales” durante los últimos pocos miles de años, ese sacrificio ritualístico, esa pulsión irrefrenable por parte de las estrellas más jóvenes de alimentarse de las más plenas no ha poseído otra intención que el obtener alimento energético de manera directa). Entonces tenemos lo siguiente: en ese desierto de pilas “descargadoras” comienzan lentamente a aparecer, a nacer, pilas más cargadas – en incremento vertiginoso – y de alguna manera se frena el hábito “descargador” (llámese como se le llame) y el aire comienza a cargarse, ese aire cargado así, de esa manera, facilita aún más el nacimiento de más cargadoras, las descargadoras comienzan a ir naciendo en menor cantidad. Y el colaborar en este proceso es el trabajo de esclavo feliz del que en el escrito anterior hablé. En fin: se activa energía con el fin de facilitar nacimientos de seres que nos están pidiendo esta ayuda, vamos, ni siquiera que “nos están pidiendo esta ayuda” sino más bien con los cuales concertamos esto.
Sin embargo todos estos tips también sirven para quienes desean ascender, pero les advierto algo: toca la puerta y lo que se te aparezca depende de ti, puedes creer en Dios o en cualquier Deidad salvadora, pero si te has negado de ver tu propia sombre en pro de tu propia salvación y no has hecho más que fijarte en la de los demás creyéndote tener las llaves de San Pedro en las manos, juzgando a medio mundo y creyéndote en el poder de enviarlo al infierno, pués, no sé, toca la puerta igual. Sea lo que sea te va a hacer bien puesto que te va a calibrar, pero es posible que no sea ni lo que esperabas ni lo que deseabas.
Seguimos con los ejercicios: Palpar el vacío hasta que de la nada se aparezca una esfera también puede ser realizado con los ojos cerrados. Después de mucho contacto con las esferas se te da que hay un momento en el que al cerrar los ojos ves una profundidad negra, en la cual puedes palpar la sensación de espacio profundo. A esa negritud profunda la puedes palpar y allí también se aparecerá una esfera, y juntos, tú y la esfera, como el poder entre dos estrellas pueden crear una escenografía real, constituída de una materia que es energía, energía que es materia, puedes respirar profundamente y hallarte ahí, con los ojos cerrados se siente que esa escenografía así montada entre tú y una de esas esferas se encuentra todo a tu alrededor y, según cómo sea esa escenografía tu energía cambia. Al cambiar debido a la escenografía (paisaje, escenario, etc.) tu energía cambia según la escenografía, pero tú estás aquí en cuerpo y a través de tu cuerpo vibras una vibración que no es de aquí ni obtenible aquí ya que este es otro espacio. Si en la escenografía existe la facilidad de la transformación en distintas formas, la energía de la transformación en distintas formas la transmite desde ese espacio, desde ese escenario en donde es posible, tu cuerpo para aquí.
Se trata sobre abrir campos.

LXIII

Se regresa al silencio y al anonimato, se retorna a aquello sobre lo que se habla y permanece uno con los suyos, vibrando. El mundo, en fin, no es normal y, si se puede permitir que no lo sea, pues, se permite que no lo sea. Se puede arrojar claves para que deje de serlo, de mil puede que uno solo las agarre, sospechando internamente de qué se habla. De alguna manera todos quienes guardan en su fuero interno alguna sospecha saben utilizar las informaciones como si fueran tiendas, se toma esto de aquí, aquello de allá, se prueban las combinaciones, se imagina, se trata, se intenta, se logra, se sonríe, se arroja… y no se ve dónde cayó.
El problema de señalar es que se tiene dedo, pero éste se repliega… lo mostrado se vio o no se vio. Pero si de mil uno lo sospecha eso ya no importa tanto, se ha dado para entonces la media vuelta. Y, si como se ha dicho, el paisaje mostrado es activo y no imaginario… éste mismo por sí solo hará.
Y nosotros lo que hacemos es jugar en él, sin preocupaciones ni cosas serias.

LXIV

Sé que hay pintores para quienes la realidad es el único canvas con el que vale la pena trabajar; lectores y escritores para quienes el único texto que vale la pena de leer es la realidad y en viendo la lectura le arrojan letras. Todos ellos realizan todas estas cosas desde una coordenada en donde es posible debido a su facultad de movilidad. Cuando te das cuenta que la energía del vacío es negra y puedes hacerla aflorar todo lo que se considera que es el mundo cambia, todas las leyes cambian, el mismo espacio-tiempo cambia. Puedes estar allí, en medio de un desierto con un pintor a tu lado logrando bajar una estrella. Puede quien lee en tales estados la realidad como texto ver al resto de los seres humanos y fijarse en las diferencias entre tamaños y cualidades, los ve y se susurra “Todos son tan distintos”, pero la gran mayoría no lo sabe y usualmente no se dejan mutuamente ser. Si cada uno se preocupase por sí mismo y se ocupase de sí mismo le daría tanta libertad a los demás… En tales momentos, en tales estados, se ve tan claramente la similitud y el reflejo entre lo que hay en el cielo y en la Tierra, y la correspondencia, que al tener a Brian a mi lado bajando una estrella no puedo dejar de sonreír. Y Brian se voltea y me mira con su ojo de pájaro, ese con una membrana que bajo el parpado parpadea oblicuamente y me dice “Ella será una de las iniciadoras del Contagio”
Y es que el mundo resulta ordinario precisamente porque lo hacen ordinario, no solo lo hacen ordinario sino que lo mantienen ordinario. Y es ordinario porque todo está institucionalizado. De pronto una chica bella se desarrolla físicamente y resulta atractiva – no es culpa de ella – y toda su familia quiere que sea Miss, sus amigos quieren que sea Miss, los desconocidos y amigos y maestros le aconsejan que participe en un concurso de Misses… y la pobre diabla no tiene más remedio que resistirse o ceder. A menos que conozca a unas locas de la calle, una noche que salía de un bar borracha y drogada, y la ven y le hablan es a ella y por fin ella suspira y les pregunta “¿Me puedo quedar aquí?… quienes dicen tenerme cariño sólo me quieren vender” y se queda allí, se hace un corte súper punk y se coloca unas botas de puntas de metal y aprende a dar patadas. En sus sueños ella es un ser humano más que hace lo que le gusta porque le gusta hacerlo y que puede sonreír alegremente porque le gusta sonreír, no porque esté esperando que le hagan un comentario sobre lo hermosa que es.
Pero de hecho, para todo hay instituciones. Y es solo por eso que el mundo es ordinario… porque no hace más que quitarle a los demás el gusto por vivir, por ser, por hacer… deseando que todo se mantenga en el orden de lo ordinario… institucionalizando… encerrando todo lo que es energía creativa en latas, en cajas, para vender.
A menos que se haya aprendido a esconderse por dentro desde pequeño, desde muy temprana edad… y, cuando llega el momento en que uno o dos pétalos comienzan a aparecer saber, sin ninguna vergüenza, pulirse la punta de metal de las botas.
El Contagio se basa en lo siguiente: todo aquello que causa placer sube el nivel de vibración del individuo. Por alguna razón es el absurdo el contexto en el cual toda acción causa mayor placer – absurdo es todo aquello que se sale de las normas de la institución – “Esa mujer es hermosa, mírala ahí toda sucia y punketa con esas cinco viejas locas… no sabe lo que se podría ganar si le hiciera caso a los demás” (pero sabe perfectamente todo lo que va a perder y simplemente no le interesa ser esa vaina horrenda que quieren, por su bien, hacer con ella); llega otro tipo y hace una hermosa escultura en un árbol, de noche, cuando nadie puede verlo. Al día siguiente algunas personas se fijan en la escultura y se preguntan “¿Por qué?”
Y la respuesta es simple: Porque Ustedes son feos y ordinarios y dan lástima… y porque me da energía luchar contra vuestra forma de ser; de la cual no me contagio y contagiaré de otra forma.
Por otra parte, en otro sitio y lugar, alguien más hace algo salido del forro de sus bolas, y lo hace bello y bien. Sin darse cuenta aumenta su nivel vibratorio y contagia a alguien más… a otro chico que sonríe al ver lo que el otro hizo y se dice “El coño de la madre que sí, esta es la mejor manera de luchar contra la ordinariez” y hace unos murales espectaculares. Y se dice “Si necesito dinero venderé zapatos, pero hacer esto es mío y me pertenecerá únicamente a mí”… y solo por eso, solo por no hacerse partícipe de lo ordinario, aumenta su nivel de vibración.
De noche, agazapado y escondido entre la hierba alta de la Montaña, viendo desde una coordenada en la que se ven los hilos de luminosidad cobriza de energías invisibles que conectan y unen a personas que se encuentran en una misma frecuencia mental en un pensamiento que viene y va como información que se acumula e inspira ideas, un tipo podía ver cómo tales hilos de energía cobriza iban lentamente formando una suerte de red de vibración más alta que la de todo el resto de los demás para quienes sus únicas posibilidades de vida consisten – porque así lo creen – en resistirse o en ceder a lo ordinario “Sí, pero es que yo no quiero” y, la respuesta siempre la misma: “Es por tu bien”… y en ese segundo, agazapado y escondido entre la hierba alta de la Montaña pudo ver un flechazo y a la chica respondiendo a ese “Hazlo, es por tu bien” con un “NO JODA, voy a vender perrocalientes y después voy a hacer lo que a mí me de la perra gana”… y así lo hizo, se puso a vender perrocalientes y ganaba por día diez veces más que un asalariado, se fue a vivir sola, logró desarrollar su talento sin que vampiros la jodieran por tenerlo hasta un punto en que se volvió admirable y después montó diez puestos de perro y dejó sus marcas en diez lugares distintos del mundo. En dejando sus marcas se volvió móvil, en volviéndose móvil descubrió una coordenada en la cual podía proyectar toda esa misma energía que solía usar para plasmar su arte en un sitio sin mover un solo dedo y descubrió que días posteriores a esa proyección de energía el sitio era alterado de manera tal que se embellecía… tuvo tiempo para escucharse a sí misma y enseñarse así misma mayéuticamente libre de todos esos chupasangre “Por tu bien”… y sonreír preguntándose a sí misma “¿Qué más puedo descubrir que puedo hacer?”
Y ese es el inicio del Contagio.

LXV

Palpar el vacío con la mirada es palpar con la mirada el lugar en donde reside mayor cantidad de energía, el vacío está compuesto de escalas fractales, al palpar existe una conexión entre la coordenada interna y la coordenada con la cual el o la móvil desea conectarse, se halla la coordenada interna y externamente, palpando surge la esfera que luego cobra la forma ameritada – no siempre lo que se amerita es lo que se desea, y todo ser móvil lo sabe y está preparado para lo que se amerita -.
Luego de muchas veces de realizar esta práctica se descubre que cerrando los ojos surge de pronto un espacio negro muy profundo, se le palpa exactamente como se palpa con la mirada el vacío en el aire e igualmente de allí surge una esfera, una tenue esfera chisporroteante… se está, con los ojos cerrados, con los ojos bien abiertos en la más oscura de todas las noches… y no es precisamente la noche de adentro.
Junto con la esfera se construye en ese espacio profundo y negro un paisaje. Un bosque de árboles negros, por ejemplo con un horizonte muy blanco producto de un muy lento amanecer de otra estrella. Se está ahí largo tiempo permitiendo que todo el resto del paisaje se aparezca lentamente, sin prisas. Un paisaje de energía con formas que se comunican y transforma a quien ahí está y lo visita… luego, si se tiene un cuerpo puro, es decir, alcalino y ligero, te levantas de tu sitio y ni siquiera te das cuenta que te has desprendido de tu cuerpo, das unos pasos y ahí estás…
… continúo caminando y a unos cuantos metros de distancia, desde la cima de una baja colina, se vislumbra un lago de aguas muy negras; presiento la cercanía de un viejo amigo, bajo, allí está John como el Lúcifer pintado por Doré, observando ensimismado sentado sobre una roca un no se sabe qué y juntos queremos saber la naturaleza del lago negro porque por algo nos ha llamado. No me extraña para nada encontrarme a John por tales mundos, es uno de los pocos seres con quien puedes ir e investigar cualquier parte, sin desprenderse de nadie posee el extraño arte de ser y de dejar ser, de hacer y de dejar hacer, de alimentarse junto con la presencia del otro sin intentar controlarla y sabe también estar solo sin preocuparse, y de perderse sin preocuparse y de dejar al otro perderse sin preocuparse… cada uno investigando en silencio por su lado, cada uno descubriendo por su lado y, para colmo: sin necesidad siquiera de reportarnos mutuamente los descubrimientos. Así que John se coloca unos patines de los que son para patinar sobre hielo y se lanza a patinar sobre el lago y yo me subo a una roca alta y me lanzo de clavado y me hundo en lo profundo del lago. Ignoro en qué me transformo pero puedo respirar allí; la energía negra es como un Cero, una nada y pura potencia para cualquier cosa, el caldo pre-mórfico por excelencia. La energía negra te dice “Soy lo que tú quieras, todo menos tu fantasía” y eso es fuerte porque sólo responde al intento convencido… si crees que va a comportarse según tu fantasía estás muy equivocado, sólo se comporta según tus convencimientos, por tanto, antes de cualquier intento debes convencerte, y al convencerte te transformas.
Salgo del lago negro, creo que salgo como un monstruo con agallas en el cuello, llego hasta la orilla goteando lo que pareciera ser petróleo y de cada gota surge una pequeña florcilla blanca al tocar el sueño. Lejos bajo un árbol está The Wizard trabajando con sus cartas, súper rojo y concentrado y John me dice: “Cuidado, está creativo, si te le acercas te quema” y yo, que comprendo de esas cosas, me puse a patinar sobre el lago. John se colocó una escafandra y se sumergió, yo di una pirueta de tres vueltas y me sumergí en picado casi como un pez espada.
Abajo en el fondo estaba la pirámide de Chichen Itza y la época que quisiéramos, todas distanciadas unas de otras por profusión de relámpagos. Y de pronto nos quedamos allí atorados.
Sucedía que era un rito, sobre todo el planeta Tierra comenzarían a encarnar las estrellas más recientemente nacidas, se trataba de un cambio de Era… y la cosa nos preocupaba a todos, algunos decían que era una irresponsabilidad, que se irían para sus respectivas casas y no volverían, que los novatos irían a destruirlo todo, que la Tierra no era teta para darle de mamar a tanta gente nueva, que la Tierra no era cueva de vampiros; y los que no estaban preocupados estaban furiosos. Y algunos dijeron que se iban, y de hecho se fueron, pero no eran gente mala e hicieron el trato de que de vez en cuando alguno de ellos descendería… y de hecho, incluso en las peores épocas caracterizadas por la vanidad en la falta de vida, de pronto desde el vacío se enciende una luminosidad pequeñita sobre el techo de Chichen Itza y vibra y vibra adaptándose a la vibra esa horrible de las peores épocas, luego baja por la escalera y como onda se interna en el bosque, permanece allí así uno o dos años y luego busca a unos padres (es “Serpiente” porque solamente esos que se fueron y de vez en cuando alguno vuelve poseen la facultad de onda). Nadie puede decidir sobre un cambio de Era pero se sabe que ninguna es eterna. Habían quedado en que si veinte de ellas sobrevivía sin ser asesinadas por los nuevos crearían nuevamente las condiciones energéticas – vibrando y expandiendo ondas – para que más de ellas volviesen… lo cual sería producto del comienzo del fin de esa Era y no cosa voluntaria.
Yo le dije a John en el momento en que vimos todas esas cosas y nos libramos del atore “Coño, pana, yo voy a hacer mi Chichen Itza donde me dé la gana, hasta sobre el techo de un rancho si me sale del forro” - por supuesto, no es necesario decir que no se trata sobre replicar estructuras sino simplemente ayudar a que desde el vacío surja algo, alguien, prestarle la ayuda necesaria para que se convierta en onda y merodee buscando padres. Lo ensayamos varias veces y resulta que da resultado.
Luego se levanta una compuerta, surgen rayos, se penetra en la compuerta y se despierta uno en su cama.

LXVI

Bañarse en las aguas del lago negro trae como consecuencia pasar al período premórfico de tu propia historia y posteriormente adquirir la capacidad de hacerlo bastándote proponértelo.
Debido a que cada lugar del Universo se caracteriza por una frecuencia dada en cada dado momento, ningún lugar específico que se encuentre más allá de la mitad exterior de una Galaxia posee la capacidad de albergar en sí cualquier cambio de forma, hay sitios que no pueden soportar en sí cualquier tipo de vibración debido a la rigidez y relativamente baja energía que las caracteriza - recordemos que un planeta, así igual ocurre con muchas de las estrellas que se encuentran en esta región de la Galaxia, se encuentran también en parte de un proceso, más allá de cierto punto no pueden albergar algo. Debido a esto el uso de la capacidad de pasar al propio período premórfico acarrea como consecuencia un traslado: el individuo que se activa hacia su premorfo, puf, desaparece, y a continuación en bastándole con vibrar un poco de cualquier manera hasta obtener una forma cualquiera puede aparecer en cualquier otro sector del Universo con capacidad de recepción para tales X formas.
A los individuos con tal capacidad se les conoce con el nombre de “Proteicos”.
Ahora bien, lo de viajar por todo el universo hallando las coordenadas deseadas luego de recurrir de cada vez al estado premórfico, no es nada más que un placentero entretenimiento, en realidad cualquiera puede realizarlo y no implica mayor ciencia, porque no implica mayor responsabilidad el poder ir y venir de un sitio a otro como a uno le plazca. Y hay seres que se enfurecen por eso, y se les conoce bajo el nombre de Genius Loci (“Genios Locales”). No en todas partes por donde pasas puedes ser cualquier cosa todo el tiempo. Hay sitios con sus propias características y por tanto con sus propias necesidades energéticas, con sus propios requerimientos energéticos, y el Genius Loci regula todo lo que se encuentra dentro de su jurisdicción espacial. No solo eso: el Genius Loci posee dominio en cuanto a la selva y es capaz de enviar órdenes a esta: “Alarma, aquí hay uno que está vibrando como un pescado jupiterino, envíen a un murciélago pa que se lo chupe completo”, “Epa, aquí hay uno que vibra como un cangrejo venusino, envíen a una babosa gigante pa que lo ataque de noche” Confundida la víctima se retira, y confundida no sabe qué hacer ni qué o quién le envía tantas maldiciones y saboteos, sabe que no se trata de ningún ser humano porque la energía liberada durante el ataque fue demasiado grande y el poder del ser también…, sentado en la acera espera por una respuesta y de pronto del otro lado de la calle ve salir por entre las grietas de la acera quebrada por las raíces de viejos árboles, algo que se asemeja a un globo marrón, con ojos como pintados por marcadores negros, una boca terrible y manos con unos dedos parecidos a los de los extraterrestres en la película “La Guerra de los Mundos”, por un instante nos miramos a través de la calle y le susurro “Ok, te tengo. Tú eres el que manda en esta zona” y el genio local se retira nuevamente hacia debajo de la tierra por la acera agrietada tranquilo y contento… y yo aprieto suavemente mis puños recitando una suerte de mantra “Sin excesos, sin excesos…” como para recordármelo a mí mismo para todo momento. Busco una estructura energética que vaya acorde con lo que se amerita, con lo que el Genius Loci amerita, con el fin de suplir de una vez por todas energéticamente este maldito lugar con aquello que se necesita – porque aquí las zonas, todas las zonas, se encuentran en menos cero – y éste me dice que lo que se necesita aquí son espectros negros. Me pregunto si yo mismo podría producir esa energía de espectros negros mediante mis propios desgajes pero el Genius Loci me dice que no, que él mismo los producirá, que lo único que él necesita de mí es que yo me cague del miedo.
Y yo pienso “¿Miedo?!”, es verdad, este lugar lo que necesita es miedo.
El miedo, así como cualquier otra emoción fuerte, es una cuota. Si la cuota ameritada no se suple mediante vibración dirigida por el Genius Loci éste facilitará una condición mediante la cual la cuota será pagada a la fuerza: facilitará la formación de una causa fáctica que cobre la energía ameritada. Pero, si en obedeciendo al Genius Loci se paga lo que él requiere – lo que la zona, por muy grande o pequeña que sea requiere - la causa real que procure el cobro se vuelve innecesaria y por tanto no se desarrolla.

LXVII

Cada persona en este planeta posee un lugar distinto de origen en el cosmos. De hecho, en cada planeta del cosmos cada ser que en él habita posee un lugar distinto de origen. No son los planetas los lugares de origen de los seres que habitan en el Universo, sino esas semillas regadas a su alrededor llamadas por nosotros estrellas. Tampoco es que los seres se originan en las estrellas, aún cuando los planetas sí se originan en ellas, es que los seres que habitan en los planetas son de hecho las estrellas. Los planetas absorben energía de las mismas y crea a partir de cada una una forma, una energía, una vibración, moldeada por el modo de ser del planeta. Esto es más vívido cuando nos hallamos en planetas de manera directa, es decir, poseyendo la consciencia de lo que somos y de que estamos siendo según las leyes del planeta, aprendiendo. Y es menos vívido – y sin embargo es – en aquellos planetas en los cuales rige una entidad muy necesaria conocida como “La Muerte”. Un viajero estelar cuando toca pie en un planeta por él o ella desconocido siempre mira a su alrededor con curiosidad, sabe que en cada uno se manifiesta de maneras siempre originales la energía de las estrellas, en algunos planetas ni siquiera posee forma sino son simplemente vientos energéticos, en cada uno hay una manifestación diferente, cada planeta es para las estrellas una suerte de gimnasio con filosofía propia…, pero cuando un viajero estelar se topa con La Muerte en un planeta, cuando la ve frente a frente o de lejos sabe que allí habrá vida formada a partir de la materia del planeta, sabe que la forma que el planeta da a cada estrella por él albergada irá ayudando a que la materia misma del planeta se vaya a sí misma reconociendo, esa materia misma del planeta irá lentamente formándose, naciendo y muriendo una y otra vez hasta que poco a poco ser viviente de un planeta y forma estelar creada por el planeta se vayan reconociendo, juntándose, volviéndose la misma cosa: energía estelar formada por un planeta en estado de materia. Y suelen ser los planetas que aportan mayor cantidad de energía a las estrellas, la materia se convierte en un fuerte extra. Vibrar en la materia carga a la estrella y carga igualmente al planeta – sin embargo junto con La Muerte hay seres que procuran que esa conjunción entre energía estelar y materia planetaria se de de manera más o menos armónica.
Ahora bien, retorno a alguna de las ideas ya anteriormente expuestas: Una buena cantidad de las estrellas que se encuentran en un planeta se encuentran en una etapa pre-planetaria (aun no han dado ellas mismas origen a sus propios planetas) y es mucha la energía que necesitan obtener encarnando en planetas con el fin de poder dar origen a sus propios planetas. Otras estrellas se encuentran en la etapa planetaria, ameritan más experiencia que energía (más fuerza enriquecedora que energía para ellas mismas), a partir de esas dos etapas iniciales ya no ameritan tomar energía, y sus modos – a partir de esas dos etapas - de ser en los planetas en los cuales encarnan es algo casi inimaginable desde aquí en la Tierra, es más, suelen encarnar en planetas con condiciones completamente distintas a las conocidas aquí en la Tierra… se convierten en otro asunto. Ninguno de tales seres, de las estrellas que ya han dado origen a planetas y ya no los tienen porque pasaron esa etapa y se convirtieron en estrellas de otra cualidad, que están o han estado en la Tierra es la primera vez que encarnan en un planeta. Todas ellas han estado en otros planetas anteriormente, algunas de ellas lo están simultáneamente. Para todas ellas encarnar aquí en la Tierra implica un conocimiento previo de la situación… saben que la gran mayoría de los habitantes del planeta (un 95% más o menos) son seres en gestación, son estrellas pre-gestantes y saben que se alimentan de energía y que la necesitan. Si bien en las etapas iniciales esa energía la toman unos de los otros – tratándose unos a otros como si fuesen baterías medio vacías, tratando de suplirse cada una de la energía de cuántos más mejor – en etapas posteriores nosotros lo que hacemos es activar el Éter… Y es aquí cuando las estrellas encarnadas que no ameritan de suplirse de energía comienzan a cumplir con su función: activan el Éter.
En todos los planetas existe el Éter, incluso en aquellos en los cuales no rige La Muerte y no hay vida material. El Éter es una propiedad de la misma existencia, el Éter es una suerte de respuesta al deseo honesto transmitido, es una suerte de reflejo, es una suerte de neutrón con la capacidad de adquirir cualquier carga, es como un gas que se carga, que puede ser cargado de una energía muy particular, es también resonancia, es un aire con sentido, es un aire con propósito.
En la Tierra hay Éter, el Éter no responde a máquinas ni a aparatos por muy complejos que éstos sean. Pero en la Tierra no se suele usar el Éter porque éste sólo puede ser activado mediante un dar energético, mediante una suerte de propulsión, mediante un propagarse desde el centro y, esa gran mayoría necesitada de energía no posee en sí el movimiento opuesto a aquel que cumple su necesidad. El Éter es respirable, es decir, ahí donde unos lo cargan otros lo toman, ahí donde unos lo siguen cargando otros lo siguen tomando… y esto calma poco a poco el impulso por abastecerse tomando de otros a quienes se les tiene por baterías. Llega un momento en donde la gente siente calmados sus impulsos energético-depredadores entre unos y otros y no saben a qué se debe y van comenzando a sentirse más suplidos (Esto se debe a lo que Lila llama “Actividad Cristalizadora”).
Al mismo tiempo tal actividad permite el nacimiento de cada vez más estrellas en etapas o situación de menor necesidad y por tanto un lento cambio progresivo de situación en el mundo.
Ha de saberse también que cada estrella por muy en etapa inicial que se encuentre posee una cualidad única y por tanto cada una responde y reacciona ante las mismas condiciones de manera única.
Luego hablaré de distintos tipos de orígenes y de condiciones de vida muy variadas entre sí en el Universo.
(Ha de entenderse que la Tierra es una suerte de semillero)

LXVIII


¿Cómo hablar sobre distintos tipos de orígen y de condiciones de vida muy variadas entre sí en el Universo?
¿Cómo hablar de Eso?
Pues en primer lugar no se habla, se siente; en segundo lugar uno debe permitirse caer en otras gravedades hasta hallar una suerte de nostalgia; en tercer lugar…
A veces, cuando la seguridad es total, se lanzan pequeños indicios verbales y éstos son avalados por ocurrencias, sucesos posteriores que son ecoaciones (de “eco”) en fractal mayor de lo verbalizado en los indicios “Cada vez que te extraño soy una lloviznita”… y entonces cada vez que tú la extrañas cae una lloviznita… y algo se hunde en el estómago. Demasiada casualidad.
A esto último también se le conoce como el Arte de atrapar en la propia gravedad.
Muchas, veces, cuando nos topamos con un ser que no es de aquí – y “no ser de aquí” es a la vez un decir y un mucho más que un decir – éste busca atraparnos en su gravedad, convertirnos en una suerte de su pasajero satélite que ha perdido el freno y que se encuentra a punto de caer sobre la superficie, de ser modificado en su forma, de convertirlo en un ser de otro planeta, de modificarlo por completo. Caer en la gravedad de otro ser siempre resulta una experiencia mareadora. Es en la mayoría de los casos como después de haber hecho el amor por primera vez con alguien de quien se ha estado muchos años enamorado, no, no es alegría ni euforia, es más bien el silencio más profundo sentado en el asiento vacío del metro “¿En qué me he metido?” y a partir de esa noche los sueños son con flores gigantescas de mil perfumes en otro mundo, algunas grandes y voraces como flores de pantano, lianas, gorgoteos bajo la tierra… y la adaptación, si se desea, y se desea, cuesta. A partir de entonces todo lo que se encontraba sacudiéndose y removiéndose solo en torbellino y barullo dentro de lo que se es como envase es cambiado, transformado en otra cosa.
A mí en lo personal una entidad un buen día me dijo “Deja de andar cayendo como bobo en gravedades y míralos a todos como granos de arena” y solo entonces supe el significado de la palabra Libertad. Porque es que realmente se cae en gravedades. Después de dos o tres veces que en la vida se ha caído en gravedades es posible llegar a la conclusión de que realmente cada individuo posee una gravedad distinta. Si comparas dos gravedades te darás cuenta que no son iguales. Todo el set de sensaciones de cada persona que se abre en el amor es completamente único e irrepetible. Puedes estar con una persona y hallarte feliz con ella luego de haber estado años atrás con otra con quien no fuiste feliz pero fue intenso (y te gustaba su planeta, pero en él eras sólo pasajero) y cuando miras hacia atrás y sientes un poco de nostalgia te darás cuenta que cada individuo se trata enteramente de otra cosa y tomas fuerza para no volver a caer en aquella gravedad que te gustaba más incluso que el individuo del cual – de manera inconsciente – provenía.
Por supuesto: muchas personas no desean caer a lo largo de su vida en más de dos o de tres gravedades… porque es que agota. El aterrizar en planeta ajeno y luego marcharse consume más combustible que cualquiera de nuestras naves.
A mí, te lo juro, me pone los pelos de punta. He estado en mundos distintos, planetas completamente diferentes en todos los sentidos unos de otros, y he estado de lleno, a veces hasta el punto del esqueleto dejado en esas tierras, morir en alguien más hasta que la mala suerte es la que salva. Pero ha sido suficiente como para haber alcanzado el punto en que una entidad completamente extraterrestre y desencarnada, incorpórea, se apiadase y me dijera “Míralos de verdad como si cada uno de esos mundos fuese un grano de arena sin dejarte caer en la gravedad de ninguno”. Cuando se logra hacer eso, no, ya no es el término “Amor” o “Flechazo” lo que hace que uno los vea como lo que verdaderamente son. Es que uno sabe que son, que todos y cada uno es… pero el es de cada uno es uan vaina única e irrepetible. Cuando uno sabe eso, repito, a uno le nace una suerte de olfato perruno: te basta aproximarte a una persona, físicamente, puede ser en un parque, o en el metro, o solamente fijarte profundamente en ella, palparla con los ojos, luego cerrarlos y dejarte ir a su mundo… lo mismo que todo lo anterior y ni siquiera necesitas decirle “Hola”.
Comenzar a hacerlo mucho es bueno y con cuántos más mejor: te acostumbras a intensidades diferentes. Términos como “Oh, estoy enamorado” se vuelven completamente ridículos, o “Conocí a la que es” se vuelven completamente ridículos… conociste a la que es, conociste al que es, en una playa. Millones de granitos de arena… todos y cada uno volando frente a tus narices como las tormentas del Sahara.

LXIX

Mi objetivo ahora es hablar de Planetas, planetas fuera de la Tierra… pero es que no es fácil y, además ¿De qué sirve dejar experiencias así solamente en palabras? ¿No es acaso mejor y más adecuado simplemente dejar indicios regados, historias inconexas para que sea luego el inconsciente lo que haga el resto, dejar claves, pistas, huellas, flechas señaladoras, inspiración de coordenadas… en lugar de simplemente echar así a lo libre y a lo loco el cuento? ¿No?
Si sacamos fuera de nosotros el tiempo, si lo sacamos durante un rato largo de nuestra mente, veremos – vuelvo con la idea – solamente espacio y movimiento, movimientos sobre el espacio y también veremos objetos que no están en movimiento. Si realmente logramos sacar el tiempo de nuestras mentes entrando en profundo silencio interno iremos notando que los cuerpor orgánicos (árboles, animales, gente, etc), cada uno de ellos, posee intensidad, intensidad particular (ver el escrito LXVIII), cada uno de ellos posee gravedad. Fijándonos en la gravedad sentimos el jalón… sentimos lo que hay del otro lado, más allá, del agujero negro que se encuentra en el centro de ese campo electromagnético… y ese es un excelente truco para comenzar a ir siendo jalonados hacia otros Planetas fuera de La Tierra… es como tocar la puerta, suavecito, de otros planetas de otras estrellas.
No debemos olvidar que todos y cada uno aquí somos estrellas y que los hay en diversas etapas, las repito: estrellas aún sin planetas, estrellas con por fin planetas, estrellas que ya tuvieron planetas y se volvieron autoabastecibles – importante -, estrellas que dieron origen a una o más estrellas, y estrellas que desaparecieron de este Universo, pero que pueden regresar cmo seres que ya no se hayan sujetos a las leyes de la evolución de este Universo (pueden aparecer desde la nada, desde el vacío y retornar a él)… por tanto, modificando la percepción, modificando la propia vibración en el silencio – o, como dice Don Juan de Castaneda “Moviendo el Punto de Encaje” – es posible hallar la coordenada en la cual los seres vivos que pasan frente a ti o que se hallan dentro de tu campo de visión son lectura visible, energética, del Universo. Si en esos estados se te aparecen en tu campo de visión tres individuos con características energéticas muy similares juntos con las formas que sólo son perceptibles en tales estados créeme que es posible que estés siendo invitado por un Planeta; si miras a tu alrededor, en los dibujos que ocurren, puede ser incluso en dibujos en franelas, mientras te hallas en tal estado es posible que se te reafirme que estás siendo invitado. Si ello ocurre puede que visites ese Planeta tanto en sueños como mediante un hundimiento aún más profundo de la percepción durante la vigilia: De pronto comienzas a sentir un tipo de forma energética, seres humanos más parecidos a Frankenstein que a otra cosa, los intuyes completamente, y si te hundes en ese instante los ves – siendo barrida brevemente “la realidad” de tu campo de visión – y entonces durante unos momentos te hallas entre seres llenos de grietas en sus cráneos, marcas extrañas en sus pieles, y mirando de cerca y con más atención ves que sus cuerpos son geografías planetarias. Si te quedas allí un rato te das cuenta que te encuentras en un Planeta (no la Tierra) cuyos habitantes son planetas en formación, habitantes humanoides que son planetas en formación… y entonces fíjate en el tipo de intensidad precisa que allí se siente, grábala en ti.
También puede ser que una noche te visiten seres extraños, compuestos de energía negra y hermosísimos, con alas, fuertes, sólidos y de muy largas pestañas y que se te queden tres de ellos mirando y que tú sientas el nivel de intensidad inverosimil que proviene de ellos, un estado de completa alegría y libertad… pero que te fijes ue cuantomás te fijas en ellos más aguda nace en ti una sensación irracional de tristeza… y es que ellos te lo dicen con la mirada “Hagamos un trato, tu vida a cambio de irte con nosotros”… y tú le respondas a cambio “No, mi trato es otro: resisto todo lo que deba resitir y luego sé que iré con ustedes” y entonces esa noche resulta toda silenciosa, con apenas unos cuantos vientos moviendo la cortina, silenciosa pero oscura y negra con aves gigantes volando por sobre los techos, luego, a los pocos días te enteras que alguien se suicidó a pocas calles de tu casa… y sabes que fueron esos seres a quienes entonces apodas “los ángeles del suicidio”… los de largas pestañas… y te vuelves loco de ganas de visitar sus Planetas, y sonríes sintiéndolos como cosquilleos en el estómago… cada vez que los recuerdas te dicen cocn sonrisas “Oye, y todavía nos recuerdas” y sólo les puedes responder “Nunca vi seres más bellos en toda mi vida” (sacan todo el dolor de un solo cuajo).
Por tanto: sí, hay Planetas y bien llenos de vida, no muy llenos de vida pero sí bien llenos de vida. A veces puedes ir a esos planetas, otras veces simplemente te encuentras con quienes los habitan.

LXX

Viajar a otros planetas es fácil, si se es móvil; lo difícil es desatascarse.
Hemos dicho que hay dos tipos distintos de planetas en donde hay vida: aquellos en los que existe la muerte y que la vida está compuesta de la misma materia del planeta (como nuestro caso en la Tierra) y aquellos en donde no existe la muerte como ente, en tales casos el planeta produce una forma específica planetaria a partir del brillo que le llega de cada estrella individual: el planeta, como un óvulo recoge energía de las estrellas y de cada estrella produce una forma según el modo de ser del planeta.
En los casos en los cuales se da vida en segundo grado (como el nuestro, en primer grado está la forma que el planeta hizo a partir de cada estrella y esa forma se mantiene como un mismo ser según su posibilidad como estrella a lo largo de la vida del planeta) se dan dos etapas distintas: aquella en la cual un molde (como el molde humano) está activo y por tanto en pleno desarrollo de las potencialidades de su ser sobre la superficie del planeta – etapa a la que llamaremos “Natural” – y aquella etapa en donde un molde se encuentra pasivo debido al predomino activo de otro molde – Etapa a la que llamaremos “Artificial” -. Punto. En realidad no es artificial, sino Natural también pero no para un molde que se halla en estado pasivo. En realidad el predomino activo de cada uno de los moldes sobre un planeta siempre es Natural porque cada uno de los moldes es formación del planeta. Seamos un poco más claros: En la época actual sobre la Tierra el molde humano vive una etapa artificial porque su molde no se encuentra activo ni en desarrollo pleno de su esencia sobre la superficie de la Tierra, pero el molde humano sí tuvo un período Natural sobre la Tierra en el cual sus potencias se dieron al máximo, todavía hay vestigios sobre la Tierra que marcan el final de esa Era y el comienzo de la activación de otro molde. En la actualidad el molde que se encuentra en estado Natural sobre la Tierra es el molde del insecto, el molde humano se encuentra pasivo, no puede hacer nada al respecto y por lo tanto le obedece ciegamente; le molde humano se encuentra por tanto en una etapa Artificial: es decir: no tiene ni la más remota idea de su razón de ser sobre la superficie de un planeta, simplemente es un ser obediente que responde ante la vibración de otro molde y en la buena obediencia se encuentra el secreto de su sentido de la vida. Esa vibración la vemos en la construcción de edificios, en la necesidad de estructuras jerárquicas, en el eidos del ser de quien se tomó la tecnología, en el uso de antenas, en la producción de sustancias químicas, en las formas de tractores, de coches, de motos, de trenes, del metro o subterráneo, etc., en todo lo que constituye nuestro ambiente, nuestra relación con nuestro ambiente y en la construcción de objetos con los cuales nos adornamos y que constituyen nuestra necesidad. En todo eso se encuentra esa vibración producida por el molde actualmente en estado Natural activo sobre la superficie del planeta. Antes de este hubo otro cuya vibración se manifestaba en la construcción de muros, en la repartición y división de tierras mediante el uso de los mismos, en la invención de la moneda, en la invención de los signos, etc. Y poco a poco nuestra razón de ser pasó a recubrir el medio ambiente con esa piel. Antes de eso el molde humano era el molde activo, es decir que se hallaba en estado Natural. En esa Era en la cual el molde humano era el molde que se hallaba en estado Natural hasta donde recuerdo ni siquiera construimos pero todos los poderes del molde se desarrollaron hasta el punto que de aquí se fue y cogió vuelo hacia otros lares quien quiso y las posibilidades eran realmente sorprendentes. Era una cosa tan distinta de la actual que los remanentes que quedan como vestigios y evidencias son considerados por el humano artificial como pruebas de existencia de seres extraterrestres… y resulta que tales vestigios, obras ciclópeas y gigantescas fueron construidas cuando supimos que se acercaba para nosotros una Era artificial. Antes de eso ni cortar un árbol se nos habría ocurrido, y, de haberlo hecho nos hubiéramos hecho daño a nosotros mismos, lo habríamos sentido como tal. En esa Era podíamos estar fácilmente con o sin cuerpo, el mismo aire que entonces poseía las mismas propiedades del Éter activado, facilitaba que así fuese. Algunos se fueron tranquilamente a otros mundos dentro o fuera de la Tierra, otros quisieron resistirse ante la pérdida del estado Natural y se los barrió de un solo escobazo, otros se enterraron y de vez en cuando sueltan una burbujita, algo así como un peito y nace un ser con algunas de esas propiedades y constitución, y otros se fueron un poco enojados pero lo observan todo desde otro mundo aquí en la Tierra. Y luego están los Nuevos, que son aquellos seres nacidos por vez primera en estado Artificial (son como semillas apenas germinando, ni siquiera llegan a brotes).

Ahora bien: en todos los planetas en donde existe La Muerte como entidad que regula la frontera entre el segundo grado de existencia sobre la superficie de ese planeta y el primer grado (el segundo consiste en poseer un cuerpo orgánico, es decir, constituido de la misma materia que el planeta) se dan ambas etapas para los moldes fuertes: la etapa Natural y la etapa Artificial.
La Etapa Natural consiste en desarrollar la esencia del molde a su máximo, hasta su apogeo. La Etapa Artificial consiste en la adquisición de facultades mediante el aprendizaje de otros Maestros: consiste en la adquisición de una cosa extra, que no se poseía en esencia, sino que es forzosamente aprendida a adquirir desde fuera mediante la obediencia ciega a moldes distintos del humano.
Todo planeta es en todo momento dado absoluta y completamente Natural… condición que no se da para los moldes producidos por el mismo planeta.
Sabiendo esto se adquiere la facultad de saber ubicar la situación de un planeta para cada uno de los moldes por éste producido. En caso de necesitar escribir informes este es uno de los factores que más se debe aprender a tomar en cuenta: ¿Para qué molde el planeta es Natural? ¿Para qué molde el planeta es Artificial? ¿Cuáles son las características actuales por las que está pasando el planeta, se trata de un molde mantenedor, armonizador el que se encuentra en estado Natural o se trata de un molde transformador de la materia? A partir de informaciones de esta índole es posible calcular la edad del planeta, es decir, su juventud o madurez o vejez. Luego se recomienda observar la actividad de otros planetas alrededor ¿Se está preparando la tierra, las aves salieron de sus nidos, hay fuertes tormentas generando modificaciones moleculares? Etc. A continuación se hace recomendable observar el sol del sistema, la estrella. Si cada uno de los planetas pose la capacidad de dar un estado de vida total a los moldes que sobre él se encuentran, es decir, que cada uno de los moldes puede completarse enteramente en un solo de esos planetas, se está hablando de un sistema solar de tipo X. Pero si sentimos que es el paso por todos los planetas del sistema lo que completa a cada uno de los moldes entonces estamos hablando de un sistema de índole inferior y podemos llamar a ese sol “Planeta” debido a una razón sencilla: esa estrella, ese sol posee la misma capacidad de producir y desarrollar vida que un solo planeta de un sistema de tipo X.
En un informe cabe decir que el Sol, nuestro Sol es un planeta (Terminología únicamente comprensible por quienes habitan y provienen de planetas de producción total). La producción total en el sistema solar se da únicamente en la totalidad del sistema solar, en el cual cada planeta no es productor de totalidad sino parte del sistema de producción de totalidad.
No así son otros sistemas.
(Esto es solamente como una guía para el caso de los que necesitan escribir informes).


Texto agregado el 11-08-2014, y leído por 288 visitantes. (0 votos)


Lectores Opinan
11-08-2014 Creo que todos soltamos el freno a cada momento. Pues no hay momento en el día que no actuemos por instinto legendario
 
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