Tras la locura de la noche llega el día
durante el transcurso las nubes se ruborizan
al vernos revolotear entre las sábanas.
Nuestros cuerpos son el alimento
de nuestra lujuria
y nuestro deseo se calma a la mañana.
Hay días que te brindan una sonrisa
amaneceres que te levitan.
Nuestro deseo se ha saciado
y la soledad se queda dormida.
Texto agregado el 31-07-2014, y leído por 79
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Lectores Opinan
31-07-2014
a menudo cuando el día termina las nubes se ruborizan por que sabe lo que se viene... me ha gustado :D
mineth