El día de ayer tuve la oportunidad de ver un documental que me impactó mucho. ¿Qué tan real es lo que percibimos a nuestro alrededor?
Tan solo por dar un par de ejemplos: ¿Qué tanto nos dicen las noticias que vemos por televisión la verdad o es ésta una verdad a medias o tendenciosa? Si actualmente ya hay androides trabajando en Japón en diversos lugares como museos, hospitales o hasta en la farándula, existen drones sobrevolando ciudades de Europa y Estados Unidos en misiones experimentales, se pueden corregir algunas malformaciones congénitas en un feto antes de nacer (obviamente para quien tiene los recursos económicos para pagarlo) ¿Porqué todavía no se descubre la cura para el cáncer?
¿Qué tanto promueven todos los aditivos que tiene la
comida que ingerimos o hasta simplemente el agua en la
creación y mantenimiento de ciertas enfermedades?
Vivimos en un mundo lleno de paradojas extrañas, en
donde pienso y tan sólo es una opinión personal, somos
distraídos continuamente de lo verdaderamente
trascendente a través de programas televisivos con
contenido superficial y que promueve cierto tipo de
estereotipos y metas en la sociedad o gestas deportivas
utilizadas como distractor.
¿Dónde ha quedado lo verdaderamente importante? Lamentablemente la auto destrucción de nuestra propia raza, es una simiente que vive en nuestro interior y se refleja en cosas tan sencillas como la transmisión de veneno emocional en diversos ámbitos debido a que se han perpetuado patrones educacionales y esto no es actual, ya que la maldad existe desde que el hombre es hombre aunque yo creo que esto se debe a su propia confusión y que es manipulado a través de métodos subrepticios para lograr los fines de quienes tienen el poder.
Tengo la idea de que vivimos "una ilusión" como dicen los budistas de lo que el mundo es realmente, aunque es muy difícil salir de círculos ideológicos transmitidos generacionalmente y perpetuados por la sociedad...