El corazón de Rupert seguía frágil y tambaleante ante la clara ocasión que desde hace días había planeado. Lynda la muchacha del Burdel giraba en el tubo con maestría excepcional. Al final del giro su mirada encontró a la de Rupert, quien ya, hace tiempo frecuentaba este Burdel.

Las miradas se fijaron el uno con el otro, respondiendo en sus frágiles mentes un encuentro. Una parte quería dinero y la otra parte buscaba amor.

El encuentro se dio en una habitación 2 x 2 metros y cama de una plaza, con el espacio reducido ella se quitó los vestidos y el observó con paciencia infernal todo el espectáculo. La dosis de adrenalina encendió su corazón, la vida no pudo ser más cruel aquel día con Rupert. El amor que jamás había tenido lo encontró en una puta mientras que ella buscaba solo los dólares para la crianza de sus dos niñas una de 6 años y otra de 2 años. Rupert amordazo su corazón al abismo y este lo exprimió acumulando la sangre en las pequeñas arteriolas que no soportaron semejante presión. El cerebro le advirtió varias veces del esfuerzo, y los efectos colaterales de 6 pastillas de Sildenafil fueron calando hondo hasta ya no poder más. Pronto Rupert se encontró en un abismo oscuro y su último suspiro resonó en el cosmos.
Universo cruel, al que no afectaría en lo más mínimo su partida ya que la energía nunca se pierde solo se transforma y así Rupert formo parte del infinito.

-¡Rupert levántate!..... ¡Despierta!.. a pesar que nos divorciamos, aun, te amo …..¡Despierta!!!! FIN